Partida Rol por web

El Ascenso

Primer desafío. Caballos

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16/07/2018, 11:48
Director

 

Primer desafío

 

El silencio y la tranquilidad del bosque son remansos para las mentes agitadas. Son muchos los que llegan a sentirse un poco extraños cuando abandonan la ciudad. Ni coches, ni sirenas, ni discusiones de los vecinos. En ese vacío en el que los problemas de la masificación se retira, hay espacio para devolver la vista a uno mismo y permitirse sencillamente... estar a gusto.

Algunos puede que lo hayan conseguido, mientras que otros han seguido trabajando hasta altas horas, preparándose para lo que podría traer el día siguiente o investigando en los perfiles públicos de sus rivales. Una cosa está clara: Todo lo que pase en la prueba estará monitorizado.

Finalmente amanece, y tras un desayuno frugal los monitores y carteles dispuestos en las instalaciones les orientan a dónde deben dirigirse.

Detrás de los edificios más grandes hay un descampado abierto en el que dan ganas de correr.

Allí, alrededor de una docena de caballos sin bozal ni sillín pastan tranquilos entre un número igualmente nutrido de monitores.

La muchacha que les ha estado hablando estos días se acerca con otro chico.

- Buenos días. Espero que hayan descansado bien,  puesto que ya tenemos preparado el primer juego. Pero no se los presentaré yo, sino que les hablará Richard Simons, encargado de la hípica Simons, a unos kilómetros de aquí. Lleva toda la vida trabajando con estos animales, que a menudo utiliza en colaboración con otras instituciones como terapia o en clases de equitación para principiantes. Les dejo con él.

- Gracias, Mary - Agradece el contrario, antes de dar un paso adelante - En el trabajo con caballos hay muchas cualidades que una persona puede desarrollar. No son máquinas que respondan siempre de la misma manera a un mismo estímulo, sino que cada uno tiene su personalidad, reacciones y sensibilidad. Es importante demostrar tranquilidad y seguridad en uno mismo para que el caballo esté tranquilo y se deje montar.

No tendrán que preocuparse por nada, puesto que todos los animales que he traído hoy son dóciles y están acostumbrados a ser pacientes con los jinetes inexpertos.

Como pueden ver, ninguno de ellos tiene arneses, lo que significa que van a tener que negociar el espacio con el animal que escojan, sin poder dar órdenes directas.

Lo que queremos es que traten de montarlos. Si tras uno o dos intentos no son capaces de hacerlo por ustedes mismos, les acercaremos unos escalones para que puedan alcanzar.

El objetivo es desarrollar la seguridad en uno mismo y en otro miembro del equipo, en este caso, un animal que no entenderá las palabras, pero sí el lenguaje corporal y gestual de cada uno de ustedes.

Los que se atrevan, les invito a intentar poner a sus caballos al paso durante unos minutos. Sin estribos está prohibido intentar trotar o galopar. Los más valientes pueden hasta intentarlo soltándose las manos y dando indicaciones solo con los pies. Un monitor estará a su lado en todo momento.

Ahora, los primeros que quieran probar pueden acercarse por aquí para ponerse el equipo de protección... - Señala una mesa con casco (obligatorio), además de guantes, rodilleras y coderas para los más inseguros.

Notas de juego

Prueba Física (Coordinación, valor, seguridad)

Recordatorio de sistema:

En el primer mensaje de este hilo deberán hacer una tirada de 1D6, mas la habilidad asociada y describir en su post la forma en la que tu Pj resuelve el reto (Bien o mal) de forma que sea coherente.
Ejemplo: Me puedo imaginar a una persona de cierta edad compensando con eficacia lo que le falta en velocidad, pero no haciendo piruetas.

Las primeras personas que se enfrenten al reto tendrán un pequeño bono de salida (+2 al primero, +1 a los dos siguientes)

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16/07/2018, 13:28
Erik Akter

En cuanto vi a aquellas bestias me recorrió un escalofrío, y cuando vino el monitor, mis peores temores se hicieron realidad. La primera prueba consistía en montarlas. Al menos hoy no me he puesto el traje, aunque la camisa y estos pantalones tampoco hubiera sido la mejor opción. Miré a mi alrededor, intentando encontrar miradas de desaprobación como la mía, y pude encontrar alguna. No le veía mucho sentido a la prueba, pero si había que hacerla, me lanzaría el primero. Estaba seguro de que sería un desastre, pero nadie podría dudar al menos de mi iniciativa.

Me acerqué con seguridad a uno de los caballos más bajitos, y aun así me llegaba el lomo casi al hombro. Miré al monitor, con el ceño fruncido, y me hizo señas, animándome a que intentara subirme. Agarrándome al animal me impulsé todo lo que pude para subirme, dudando de que tuviera fuerza suficiente para hacerlo. Sorprendido, el impulso me llevó más alto de lo que había imaginado, y durante una fracción de segundo me vi montando en aquel caballo a la primera. Claro que la sorpresa dio paso al horror al darme cuenta de que me había impulsado demasiado. A duras penas me senté en el lomo del caballo, desequilibrado y con la inercia empujando hacia el otro lado del mismo. Desesperadamente, agarré con fuerza la crin del animal, lo que finalmente provocó que se agitara y me mandara al suelo.

Con más vergüenza que dolor, me enderecé justo para ver las risas de los demás. Me empecé a poner rojo, y me obligué a calmarme de inmediato. Había sido un primer intento lamentable, pero un primer intento. Lo intentaría hasta conseguirlo. Solo esperaba que al resto se le diera igual de mal que a mí, o sería la burla del grupo durante lo que quedaba de día.  

Tras muchos infructuosos intentos, y tras rechazar varias veces la escalerilla que me ofrecía el monitor, por fin conseguí subirme cuando la mayoría ya lo habían logrado. Me miré la ropa con desaprobación la ropa, llena de barro y manchas verdes.

-Vaya comienzo de día –susurré, dándole un par de palmadas al caballo-.

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16/07/2018, 13:59
Jorge Schurberg

Jorge trató de mantener la sonrisa cuando oyó lo que explicaba el hombre relativo a los caballos. Así que había que montar las bestias, y no solo esto si no que además había que hacerlo "a lo indio" sin arneses ni silla. 

Bueno compañeros, veamos que se puede hacer dijo hablando para el resto de los asistentes y tratando de mantener una sonrisa mientras abandonaba el grupo y se acercaba a uno de los equinos. Tras observar la bestia desde un par de angulos distintos y consciente de que no había más opción se dispuso a encaramarse de un salto a su lomo desde un lateral. No sería lo más elegante pero quizás fuese efectivo. Así que cogiendo aire y plantando las palmas en el lomo trató de auparse. 

Lo que prosiguió fue un espectáculo no demasiado digno en el que se encaramó a la bestia, encomiable la paciencia del animal, como un naufrago que intentase subir a un bote. Finalmente tras mucho resoplido, algo despeinado y con una gota de sudor se encontró finalmente sentado encima de la bestia.

Bueno bueno, ¿no ha sido tan malo verdad? dijo mirando al resto del equipo 

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16/07/2018, 14:02
Jesús Yrion

Esos animales medio asalvajados no le gustaban un pelo al emisario de dios, pese a ello tenía que actuar y hacerlo rápido, a fin de cuentas, otros podrían ver la inacción o el miedo a una falta de fé en el poder del Señor Todopoderoso o incluso debilidad en Jesús. Tragando saliva, el emisario divino cogió y se puso los elementos de protección y se acercó a los animales.

-Que Dios me proteja de esas malas bestias... -Dijo para sí en casi un susurro.

Las piernas le temblaban, pese a ello Jesús continuaba su viaje; ahí un hermoso caballo blanco se alzó ante él. Estoico, firme y fuerte. Una montaña nevada comparada con el pobre Jesús quien parecía ser un carboncito ante ella. Tragando saliva ideó un plan para que esa bestia se arrodillara ante él, un plan que tenía más de experiencia con personas que con ingenio propio, engañarle con una recompensa invisible.

Chasqueó los dedos ante el animal y como si tuviera algo en la mano, la bajó mientras la cabeza del animal lo seguía en busca de una pequeña recompensa. Fue ese momento en que el para-nada atlético Jesús se deslizó cual vil serpiente tras el lomo del animal y se subió a su costado, mientras este seguía buscando en el suelo lo que podría tener Jesús, aunque en vano.

-No temas por la recompensa, pues Dios proveerá, pequeño ciervo albino sin cuernos....

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16/07/2018, 15:10
Monitora

La monitora sonríe cuando ve que los primeros comienzan a atreverse, y se gira hacia los demás.

-!Ánimo! no progresamos si no nos atrevemos a salir de nuestra zona de confort.

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16/07/2018, 16:05
Viktor Ciara

Una noche tranquila, el trabajo estaba todo bien planeado para las próximas dos semanas así que esperaba que nada le interrumpiese en exceso.

Así pues, tras amanecer y tomar un desayuno raudo de esos que suenan al café de la oficina, les convocan para un primer desafío. Toma una manzana para después, pues seguro que tendrá hambre. Y así llegan...

... Hasta los caballos. Un desafío de puro físico. Seguro que alguien arriba debía estar riéndose muy fuertemente, además, había que montar sin sillas ni nada.

Como los elfos, montando a pelo...

Evalúa la situación, y también a los caballos, para terminar frente a uno marrón con la crin casi negra y las patas de color beis. Se queda mirándolo con cierta duda, había visto hacer esto cientos de veces, no tendría que ser tan complicado. Echa la mano a su preciada manzana y se la ofrece al caballo y, cuando éste abre la mandíbula para tomarla, lanza un gritito nada varonil mientras retrocede un paso y el caballo relincha.

En Minecraft parece más fácil.

Protesta. No obstante el caballo se calma, probablemente por la atenta mirada de uno de los monitores, y toma la manzana. Es entonces cuando va a lucirse, pone la mano en el lomo del caballo, pensando que no será muy diferente de una moto grande e incontrolable.

Ale... ¡hop!

Y se encuentra encima del caballo. Sonríe algo nervioso.

Venga, pequeño, no te portes mal ¿Vale? ¿o eres pequeña?

El caballo comienza a caminar sin su mandato y se abraza a él. Cualquiera diría que se está riendo de su jinete. No obstante, pasados unos minutos parece que éste responde mejor a los estímulos de Viktor y ambos caminan entre los demás. Su corazón latía a mil, tanto por la emoción de lo que estaban haciendo como por el miedo a caerse. De reojo observa a sus compañeros.

Tratadlos con cuidado y responderán.

Les sonríe, aún nervioso, dispuesto a ayudar si era necesario.

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16/07/2018, 18:02
Nadine J. Welch

Nadine observó a los animales y a sus compañeros de empresa acercarse a ellos con mayor o menor éxito. Todos parecían estar afrontando aquel reto como algo puramente físico, pero ella sabía que afrontar ese reto bajo un prisma puramente físico sería contraproducente para ella, así que lo intentó haciendo uso de su simpatía.

Con una sincera sonrisa en el rostro eligió a un caballo de aspecto hermoso color azabache excepto en las patas, justo al extremo antes de los cascos, que tenía en las cuatro extremidades una coloración blanca.

¡Hola, guapo! ¿Quién es el caballito mas bonito? Sí, tú. Claro que sí. ¿Cómo te llamas hermosura? ¿No me lo quieres decir? Bueno, pues te llamaré Calcetines. Hola, Calcetines. Yo soy Nadine

Mientras hablaba con voz amistosa se dedicó a acariciar el lateral del cuello del animal y a darle pequeñas y amistosas palmadas en lo que esperaba fuera interpretado como un gesto cariñoso.

¿Sabes qué? Me piden que te monte y paseemos un poco. ¿Qué me dices? ¿Me dejas que te monte?

El caballo respondió con un leve resoplido y un movimiento de cabeza que tanto podía significar que sí como que estaba molesto por las caricias. Lo cierto es que Nadine no sabía interpretar los gestos de un caballo porque no lo había hecho nunca, así que decidió interpretar que era un sí. Además, el recién nombrado Calcetines no parecía inquieto.

Muy bien, vamos allá.

Le dio una última palmadita en el cuello antes de abordar el problema de subirse a la grupa de un caballo sin estribo.

Enfocó el problema de frente.

Bueno, Calcetines, esto no debe ser muy distinto de subirse a una moto...

Enfocó mejor el problema.

...A una moto con el sillín a más de un metro y medio...

Ciertamente aquello iba a ser un problema. Nadie muchas veces llenaba el espacio, pero en realidad medía poco más de metro sesenta centímetros. Además, le encantaba vestir elegante, y por eso llevaba puesto uno de sus vestidos con falda de tubo hasta la rodilla.

Examinó el problema con detalle: una falda de tubo, un caballo con la grupa casi a la altura de sus ojos, una incapacidad de leer los pensamientos de un caballo aunque pareciese amistoso.

Bueno. Dicen que sin riesgo no hay gloria.

Con ambas manos cogió su falda entubada por ambos extremos del corte vertical que servía para tener algo de movilidad y tiró fuerte desgarrando la tela y aumentando la raja del corte hasta que enseñaba medio muslo. Desde luego, no era alguien al que le intimidase enseñar pierna.

Después echó las manos por encima de la grupa e intentó sostenerse en el cuello del animal para ayudarse a subir.

Saltó con fuerza y luego... volvió a saltar.

Vale, Calcetines, se ve que eres muy alto. ¿Qué te parece si buscamos una roca para que Nadine se ayude y pueda subir?

Guiando al animal que, al parecer, era apacible con ella, llegó hasta una piedra alta que usar de apoyo y se subió a ella para volver a intentar encaramarse a Calcetines.

Esta vez, de un salto, consiguió quedar tumbada con la barriga sobre la espalda del caballo. Los pies a un lado, la cabeza al otro y el culo hacia arriba. Calcetines decidió entonces dar cinco pasos en los que Nadine intentó no gritar para mantener la compostura.

Finalmente Calcetines se detuvo y ayudándosé de su cuello, Nadine giró sobre su barriga y consiguió finalmente sentarse a horcajadas muy digna. Con los muslos al aire, pero digna.

Bueno. Parece que lo hemos conseguido Calcetines. Y ahora... ¿Cómo se baja una de aquí?

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16/07/2018, 21:57
Shannon C. Turner

¿Como? ¿Que tenía que montarme en un caballo?

Hacía siglos que no me subía en uno esos bichos. Desde el internado, mas concretamente. Y recuerdo que, pese las instrucciones de la institutriz, la aventura no fué demasiado provechosa. ¿Y ahora tenía que intentarlo de nuevo y sin silla? Ufff....

Miré a ambos lados y la gente empezó a ir a sus caballos. Algunos con mas suerte que otros, pero yo estaba demasiado nerviosa como para fijarme en nada mas que en ese monstruo de color negro que parecía mirarme al alma y decirme: Que te como!

Al principio titubeé. Miré al caballo y reconocí lo precioso que era, y esa imagen de caballo infernal salido del infierno me hizo sonreir al animal. - Vaya...- Susurré mirando fugazmente al instructor que estaba conmigo. Una de mis manos salió algo temblorosa para acaricialo y sentir lo suave y cálido que era el animal. El animal se movió lo justo para empujarme levemente con su hocico. Quizá un pequeño golpe de "amistad" - Vamos a ser amigos ¿ verdad?- Pregunté vacilante, sin respuesta, acercándome hasta la zona de su lomo por donde debía subir.

Puse ambas manos en su grupa pensando que no podía ser tan difícil de recordar cómo lo hacía de pequeña. Un crujido me hizo levantar la vista. Y me quedé mirando hacia ese lugar, de donde procedía el sonido. Esa chica (Nadine) Había roto su falda de tubo? Wow. Bonitas piernas...  Ummm. Ladeé la cabeza para mirar como ella parecía tener problemas para subir, aunque al final lo solucionó muy dignamente. No pude evitar una ligera sonrisa pícara imaginando cosas raras, y cuando me di cuenta, me tapé los labios para que no se notara que la estaba mirando. ¡Ups...! Bueno, a lo mio. Así que...un, dos y tres.. y aaaarribaaa.

Genial! Ya estaba encima del caballo. Pues no ha sido tan difícil!

Mi vista inconscientemente volvió hacia la muchacha y sonreí como ganadora, pues había conseguido subirme al caballo yo solita. Tan solo tenía que acariciar al caballo por portarse bien y..y.. eh....emm...¿Y su cabeza? Genial! Estaba mirando donde no debía y el giro lo hice al revés. Tonta! Si, estaba encima del caballo pero... Al revés.

Con vergüenza, temiendo perder la poca dignidad que tenía, giré, no sin dificultad para ponerme, eso sí, esta vez bien. En su sitio. Vamos, lo que viene siendo con la cabeza del caballo mirando adelante.

- Bueno, caballito... culpa mia... -supongo.- Ahora.. Llévame tranquilo, ¿vale? Prometo cepillarte mas tarde si no me dejar caer.- Susurré tímidamente al animal, intentando despejar de mi mente la cagada y, por supuesto, la idea de que alguien mas me hubiera visto.

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16/07/2018, 23:45
Jhon McWright

Amaneció el día siguiente. Empezamos por un gran desayuno antes de saber que es lo que nos depararía este nuevo día de campamento.

Allí estábamos todos esperando lo que nos esperaba. Apareció la monitora, esta vez acompañada de un nuevo monitor.
Nos señalan un grupo de caballos que allí había, parecía ser que esto iba a ir con animales. Escucho la explicación, y me dispongo a realizar la prueba. Veo que la mayoría de mis compañeros se defienden bastante bien, por lo que había que darlo todo.
Salgo hacia ellos, agarro la crónica de uno de ellos y me subo encima con un salto.
Vamos amigo, pórtate bien. Solo daremos un paseo susurro a mi caballo intentando no caer. Como habían comentado eran dóciles y parece que así se estaban comportando. Parecía que quizás la suerte nos estaba acompañando esta mañana. Espero que sea así el resto del campamento.

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17/07/2018, 01:44
Ximena Navarrete

Nunca me había acercado tanto a un caballo. Inhalé y exhalé profundamente, pensando como acercarme al animal. Por primera vez en toda mi vida deseé haber prestado atención a las telenovelas de mi madre, e insólito que eso hubiera podido ayudarme en mi carrera. De niña, en cambio, veía películas clásicas de acción incluyendo a Superman, de Christopher Reeve. Por primera vez, habría deseado no hacerlo, porque solo puedo pensar en como acabó mi ídolo de infancia por un caballo.

Tomé todo el equipo de seguridad, tratando de mirar al frente, aun sin saber como me iba a enfrentar al caballo. Con los gatos funciona poner el dorso de la mano, puede ser que eso resulte. Dijeron que eran dóciles. Me aclaro la garganta, tratando de despedir todo el cúmulo de ideas que se me estaban formando en la cabeza.

Habia elegido un conjunto que fuera informal pero no tan deportivo, con botines negros que no parecieran de campo o para correr. Había pensado meticulosamente en mi ropa y apariencia, en no intervenir mucho el primer día para poder observarlos a todos desde las sombras. Pero no pensé en un caballo, lo cual era casi lógico.

Escuchar al predicador solo aumentó mi mal humor. ¡Malas bestias!

Lo vi de reojo tratando de treparse al caballo. Me mordí el labio y miré al suelo para no reír, segura de que caería. Eso sería hasta deseable. Siempre detesté a los predicadores baratos. México sería mejor país sin la plaga del intolerante y clasista Catolicismo Romano.

Miré otra vez de reojo, y me quedé muda al verlo montarse. Tuve que voltear a otro lado, sin saber a donde descargar mi mal humor. ¡Solo eso faltaba, que hasta él pudiera, y yo no!

Ah no, un caballo no va a derrotarme. Ahora es personal...

Vuelvo a respirar, lentamente. Me acerqué al animal, lentamente. Muy lentamente, con una mano alzada.

Relinchó en respuesta, alzándose sobre sus patas traseras, y recordé otra vez a Superman en silla de ruedas. Tuve que usar mucha fuerza de voluntad para no retroceder.

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17/07/2018, 17:35
Gerald Casas

Vestido y preparado para sudar con unos pantalones de cintura elástica y una camisa de franela Gerald escucho las indicaciones y la primera prueba con total escepticismo. -Como voy a trabajar en equipo con un animal que ni siquiera es seguro subirse a él sin ningún tipo de arnés... Esto no es ético. -Se agarro el tabique nasal mientras intentaba comprender la utilidad de tal ejercicio y por si acaso, pudio el kit-completo de protección. Si debía de caer al menos que no se torciera nada, lo ultimo que quería era morir estúpidamente.

Por suerte prepararse para lo peor le ayudo a poder ver a los demás intentarlo primero. Y ver a mas de uno con problemas, como la mujer que se sentó al revés, el primero de todos ellos que cayo del caballo y alguno mas que ni siquiera estaban seguros de poder subirse le tranquilizo un poco. -Bueno es obvio que ninguno sabemos lo que hacemos. Menos el hipster claro, seguro que le encanta el campo... Como esta de moda.

Cuando finalmente se decidió a ir a por su caballo intento elegir el mas pequeño, después de todo no se veía capaz de saltar hasta la grupa de un caballo de tamaño normal. Pero para su desgracia todos eran bastante altos. Así que eligió ese que estaba pastando no muy lejos de los demás, teniendo la cabeza agachada tal vez seria mas fácil subirse a él. Con pies de plomo, poco a poco y con las manos adelantadas se acerco al caballo él cual le miro indiferente. Para cuando por fin llego hasta el gran y fuerte cuello del animal este le estaba esperando mirándolo directamente.

-Buen caballo... Buen caballo, ahora déjame... -Pero nada mas tocar la crin del animal este levanto la cabeza y a punto estuvo de elevarse con él. -¡Woou! Esto es peligroso. -Comento con los dos pies en el suelo. -Vale déjame intentarlo de nuevo. -Al segundo intento, con una mano acariciaba su cuello y con la otra agarraba su cabello, pero se dio cuenta muy pronto que no tenia nada que hacer, estaba demasiado alto como para usarlo a modo de cuerda y subir hasta el animal. Así que dio un par de pasos laterales para ponerse en su costado, mientras le acariciaba, esperando que eso le mantuviera tranquilo e hizo el primer intento. Un salto que ni siquiera consiguió tocar su estomago con la grupa del animal. Al segundo fue otro saltito inútil que no llego a nada. Y es que el tamaño de Gerald junto con su forma física no le permitía alcanzar la altura optima para llegar de un salto.

Por lo que opto por buscar esos mencionados escalones. -Es que no llego... Creo que ese caballo es muy alto, pero no me rindo. -Comento al monitor mientras se hacia con la herramienta y volvía con el caballo quien había caminado unos pasos en dirección opuesta.

Gerald se acerco de nuevo con cautela y acaricio al animal mientras colocaba el mismo las escaleras. Y con la herramienta adecuada ahora si, él hombre había conseguido montar aquel animal sin mas problemas, aunque estaba casi al final del mismo. Lo que comprobó que era peligroso cuando el propio animal empezó a caminar hacia un árbol cercano, el hombre tuvo que tumbarse en él, mientras intentaba no gritar, arrastrase lo suficiente para agarrarse a los crines y poder así incorporarse ligeramente para evitar caerse.

-¿Por que se mueve solo? eehh... so caballo, so amigo. Para, por favor. -Sorprendente mente el animal pareció escucharlo o simplemente de aburrió de mofarse de aquel sudoroso hombre y se detuvo ante sus suplicas.

-Ufff... Pues no parece tan difícil. -Intento autoconvencerse el mismo, mientras rezaba por que no le diera por trotar ya que no tenia coquilla.

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17/07/2018, 18:45
Viktor Ciara

Tras pasar unos minutos en el caballo, éste ya respondía a los gestos de Viktor. No es que este se sintiese particularmente tranquilo de estar en un bicho que se movía, haciendo equilibrios a más de un metro de altura, pero poco a poco su corazón se calma un poco, o al menos lo suficiente para que no pueda comenzar a considerarse un problema.

Desde su posición puede ver cómo una de las chicas ni siquiera ha conseguido subirse, enfrentándose a un corcel negro, y sin pensarlo, dirige el caballo hacia la posición de Ximena. Respira un poco fuerte al llegar, denotando el esfuerzo físico que hace, y le ofrece una mano.

Con ayuda es m-más fácil.

Comenta algo entrecortado, aunque era difícil distinguir si era por la respiración o por el nerviosismo frente a ella. En cualquier caso sonríe y alza la mano, buscando que el caballo contrario la mire y luego baja la mano, rezando porque siga los gestos que éste le indica y así poder ayudarla a subirse.

Sin embargo, una cosa era tratar de manterse a flote y otra muy distinta ayudar a otro sin bajar primero. De éste modo su propio caballo comienza a moverse un poco nervioso y la situación termina con Viktor deslizándose para hincar las rodillas en el suelo sin más daños que alguna raspadura por debajo de sus baqueros. Ríe aún más nervioso si cabe.

Oh... mierda, lo siento.

Se disculpa. Tratar de ayudarla no sólo había resultado inútil, sino que había terminado con él mismo en el suelo, enseguida trata de buscar una salida digna de algún anime estúpido.

Pero somos un equipo, debía intentarlo...

Desvía su mirada hacia algún punto perdido en el suelo.

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17/07/2018, 22:21
Nadine J. Welch

Nadine no había aprendido a bajarse de Calcetines, pero poco a poco e intentando disimular su torpeza, había acabado sintiéndose relativamente cómoda allí arriba. Era toda una suerte, dado que probablemente si nadie la ayudaba a bajar iba a bajarse mucho más rápido de lo que se había subido, pero también aún peor.

Calcetines decidió caminar un poco ajeno a su amazona y Nadine decidió seguirle... más o menos.

Finalmente acabaron junto a una chica castaña de preciosos ojos azules almendrados* y su montura. Ella no parecía mucho más segura de lo que hacía que la propia Nadine.

Es divertido ¿no? Ver cómo nos sacan de la rutina y cómo nos hacen hacer cosas que nunca haríamos. Soy Nadine, por cierto. Disculpa si no te estrecho la mano.

Hizo una breve pausa antes de continuar

En parte debería haberme esperado algo así, una actividad que se alinee con el valor de self confidence de la compañía, pero no me lo esperaba. Cuando vuelva voy a decirles a Stephan y Chris que han intentado hacerme arrepentirme de impulsar la autoconfianza como un valor de compañía. Ellos no querían, decían que qué clase de valor empresarial es ese. Que no conocían ninguna empresa con ese entre sus valores. Precisamente ese fue el argumento definitivo para impulsarlo

Suelta una risa breve cargada de autocrítica.

Es curioso. Incluso ahora, parte de mi cabeza está dándole vueltas a cómo les estará yendo a los chicos sin mi. Seguro que la están liando de lo lindo.

Notas de juego

*Shannon

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18/07/2018, 08:49
Director

- Bien. Lo están haciendo bien - Va animando el experto - Nosotros les ayudaremos a bajar.

Llamen a uno de los monitores para que esté a su lado y evitar caídas.

Se sube entonces a uno de los caballos que quedan libres con un gesto sencillo, más que acostumbrado. El animal se mueve y da varios pasos, sorprendido por la velocidad con la que se ha movido, pero en seguida se estabiliza. - Pueden hacerlo así - Va realizando cada acción a medida que la describe - Primero, sosténganse con fuerza de la crin. No se preocupen, no les duele. están más que acostumbrados. Inclinen el tronco hacia delante y ligeramente hacia un lado a la par que levantan sobre la grupa la pierna de ese mismo lado, pasándola sobre el lomo hasta que las piernas cuelguen por el otro lado y estén apoyados al caballo sólo por el abdómen.

Ahora tienen que dejanse caer. Así - Toca el suelo sin problemas - Inténtenlo despacio.

Si alguien necesita ayuda, sólo tienen que decirlo, pero si no se sienten capaces, podemos dejarlo en este punto - Esto último lo dice mirando a Manuel, Itziar y Ximena.

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18/07/2018, 19:28
Ximena Navarrete

No me gusta del todo pedir ayuda, pero ante el comentario del coach sé que no voy a tener muchas opciones. ¿Claudicar así? Ni en sueños. Antes me parto la columna a enfrentar tamaña vergüenza.

Miro al caballo. Era más fácil pensar heróicamente que lograr subirse a él. Al final acepto la mano de Ciara y trato de subir, pero tampoco contaba con la reacción del caballo y por la presión que hacemos los dos sobre el animal este se agita y Ciara cae. Me llevé las manos a la boca del susto y de inmediato me hinqué a su lado, pero por fortuna solo tenía raspones. Me paso una mano por el cabello, ¡mayor vergüenza para hoy! ¡Y aparte él es quien se está disculpando!

- No lo sientas. Al menos tienes la decencia de ayudar. - bromeé, viendo a los que sí lo habían logrado. - Quizá deberíamos pedirles ayuda.

Hago una mueca mientras veo a quien podemos pedir un apoyo entre los que han logrado subir. Al predicador definitivamente no...

Veo a Shannon y a Nadine juntas.

- Creo que ellas nos pueden prestar una mano. - le comento a Viktor. - ¿Vamos? - me levanté y le ofrecí una mano para ayudarlo a levantarse, sonriendo.

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18/07/2018, 20:45
Viktor Ciara

Enseguida la chica a la que pretendía ayudar se inclina para ayudarle a levantarse y un tono ligeramente rojo aparece en sus mejillas, tomando no obstante su mano para recuperar una posición correcta. Se esfuerza por dibujar media sonrisa aunque al ver el panel parece mascullar algo con cierto disgusto.

Parece que hemos llegado tarde. Yo ya subí y tuve todas las emociones de hoy y de mañana.

No obstante, aunque te hayan puesto nota... ¿quieres volver a intentarlo? No está tan mal.

Tuvo que reconocer, pese al miedo pasado encima era una sensación extraña que mezclaba ese sentimiento con la emoción de estar en sintonía con una bestia como eran aquellos caballos.

Si aceptaba, le acompañaría con Shannon y con Nadine para darle un segundo tiro y, de paso, quizá quedarse algo mejor.

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18/07/2018, 22:26
Ximena Navarrete

Me costaba ocultar mi decepción. "Lo que empieza bien, termina bien", se supone, y me habría sentido ya ganadora si hubiera arrancado la carrera con una nota alta.

Pero no todo estaba perdido. Lo que sí, si me quiero recuperar tendré que impresionar. Por hoy tendré que lograr, sea como sea, subirme a un caballo.

Vamos. - le señalé con un movimiento de cabeza a Nadine Welch y Shannon Turner.

Comencé a acercarme a las dos, con una sonrisa y una mirada algo curiosa. Turner montaba con naturalidad, como si lo hubiera hecho desde antes. Se vería imponente, a no ser por el pequeño detalle de montarse al revés. Welch no tenía miedo a renunciar a la apariencia y se desgarró una preciosa falda entubada, y aun así dominó el juego. Saludé a John a la distancia, quien había montado sin problemas, también debería pedirle un consejo.

No me presenté antes. - no fui muy social en la bienvenida. - Me llamo Ximena, y mi amigo y yo tenemos problemas. - hice otra mueca, tratando de minimizar un poco la vergüenza que me hizo pasar mi corcel.

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19/07/2018, 02:17
Nadine J. Welch

Antes incluso de que la amazona castaña tuviera ocasión de responder, el monitor dio instrucciones sobre como bajarse del caballo e inmediatamente después, la belleza latinoamericana y el que se había presentado como Viktor Ciara (y que por el nombre Nadine había reconocido como la mano derecha del CIO de la empresa) llegaron hasta ellas.

Al girarse para recibirlos Nadine se fijó en que habían publicado los resultados iniciales en el tablero y no se le escapó que, a falta de dos personas por puntuar, estaba empatada en el segundo puesto por la cola con un tal Gerald y la que fuera de toda duda, tenía que ser la amazona que les acompañaba. Ximena, por su parte, ocupaba el único puesto por debajo y Viktor...

Hola Ximena, Viktor ¿no es así? Casi diría que tu amigo no tiene tantos problemas como nosotras - Dice con el tono amistoso de quien suelta una broma para distender el ambiente mientras señala el tablero.

Parece que las chicas de la empresa no estabamos muy preparadas para esta prueba. Pero no sufráis, ¡los últimos serán los primeros! - Añadió dando ánimos a las otras dos mujeres y acompañando el comentario de una actitud risueña.

Después de el recibimiento con bromas, dio una palmadita suave en el cuello de Calcetines al tiempo que se presentaba en respuesta a Ximena.

Yo soy Nadine y este es Calcetines.

Dejó hueco para que Shannon se presentara a sí misma.

Si te digo la verdad, yo también tengo unos pequeños problemas aquí arriba. ¿Os importaría ayudarme a bajar?

Es cierto que el monitor había dado las instrucciones para bajar, pero ella era muy bajita y un poco de ayuda no le vendría mal con o sin instrucciones.

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19/07/2018, 11:35
Jorge Schurberg

Jorge "desmonta"  por el poco refinado procedimiento de poner ambas piernas al mismo lado del equino y deslizarse como si fuera un improvisado tobogán. Aterrizando con un ligero trastabilleo se sacude el polvo de los pantalones mientras se decide a poner distancia entre él y la bestia no sea caso que esta albergue algún rencor por toda la experiencia.

Decidido se acerca al grupito que han formado Viktor, Nadine y Ximena. Con una sonrisa que busca ser amable pregunta ¿Y bueno que tal vais con la equitación? ¿Os echo una mano para bajar?

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19/07/2018, 16:33
Gerald Casas

-Al fin hemos terminado este sin sentido -Pensó aliviado cunado anunciaron y enseñaron a bajarse de aquel animal. Aunque no tan aliviado al ver el tablón y su mala calificación, es obvio el funcionaba mejor con las personas que los animales, ni siquiera a conseguido que su perro lo obedezca al 100%, como hacerlo con un caballo resabiado.

Con este pensamiento en mente, chasqueo la lengua, antes de procurar que el caballo no se moviera mientras él lo hacia. Agarrado, como si no hubiera mañana, de los crines del animal, paso la pierna derecha al lado izquierdo y quedo mirando el suelo, demasiado alto para él. Eso es lo que pensaba, pero deseaba bajar cuanto antes de aquella atracción, tras pensarlo al menos dos eternos segundos, decidió saltar, pero olvido doblar las piernas, lo que provoco que las plantas de sus pies se resintieran por el golpe y no pudo evitar caer de culo al suelo. No grito ni dijo una sola palabra, el caballo ya bufo por él al caer tan cerca de sus patas. Ademas de que el dolor en su ego era mayor que el de sus nalgas.

Se levanto tan digno como pudo y limpio la suciedad de su trasero, mientras se despedía del caballo, quien ni se digno a mirarlo y se reunía con el resto.

-Hola, ¿Menuda prueba verdad? Espero que la siguiente... sera mas normal. -Comentaba mientras se dolía del golpe.