Partida Rol por web

La respuesta llegó con un viento umbral suave pero frío, que liberó tu mente de distracciones y de impertinentes ecos de la situación. Pensando en las palabras que Quimey había traducido para ti, contemplaste después de unos pequeños momentos la respuesta, que se mostró poco esquiva en ser encontrada.

Un bebé.

Llegó a tu mente en un relampagueo, era lo que más se ajustaba al acertijo que te había planteado el pequeño espíritu de cachorro.

Este te miraba sentado en sus cuartos traseros, quieto y poco efusivo, pero atento a lo que tenías por decir.

Nikolai -1 a la dificultad en las tiradas relacionadas con espíritus en esta escena.

Bryan  +1 a la dificultad en las tiradas relacionadas con espíritus en esta escena.

Juntos, atrapan al ciervo, saltas con gracilidad sobre su cuerpo mientras tus fauces se entierran en el cuello de la bestia que rápidamente sucumbe al ser derribada y luego inmovilizada por el resto de los lobos que te acompañan.

Una vida, un pago.

Arrastrar el cuerpo puede ser una proeza para un lobo joven, pero en forma hispo no representa problemas.

Cuando vuelven al Clan, Olor a nieve, agradece al espíritu de los ciervos por permitirles tomar a uno de sus hijos para alimentarse. El cuerpo de la bestia es seccionado y repartido, primero al líder del clan y luego en orden de importancia; pero un generoso pedazo de muslo es reservado para ti y para tu manada.

Quizás sea tiempo ya de volver con ellos, antes o después de comer.

La respuesta es un bebe, una cria.¿Por donde esta el objeto que les dieron ellos y escondieron ustedes?

Debio de ser la primera pregunta,que hiciera. No había caído muy bien antes.
Tendria que tener mas cuidado con lo que preguntara un espiritu era algo demasiado atavico, y misterioso como para regirse por las mismas leyes que una mente Garou

Era medio incomodo el ser llamado cachorro por un cachorro, pero lo importante era que había aceptado mi acercamiento y mis intenciones de trabar al menos un buen ambiente para ambos, siempre era un motivo para estar feliz ante situaciones así; quizás alguno pudiese tacharme de manipulador pero estaba lejos de serlo, la mejor manera de trabajar con el espíritu era que ambos mantuviesemos una buena relación.

Por ello no dude en prestarle atención ante sus indicaciones con la cabeza, le seguiría sin dudarlo realmente, el espíritu me había aceptado no dudaría de el y me limitaría a seguirlo tan rápido como el pudiese moverse. Pense en adoptar una forma mas común para ambos, la forma lupus, pero de por sí me sentía mas comodo como había llegado a este mundo y por lo visto a mi compañero no parecía incomodarle esto; aunque sería complicado entender su lenguaje de gestos sin la ayuda de Quimey, pero me esforzaría en ello.

Había traducido aquella primera respuesta que cada espíritu había dado a sus respectivos compañeros, ahora quedaba en ellos el deducir, interactuar y razonar con los espíritus.
Cada uno encaraba el desafío desde distintos ángulos, ambos válidos; pero era partidario de una combinación de ambas posiciones.
Miro a su Alpha e hizo un gesto de aprobación - Ahora veremos como continúan - comento en susurró.

Recién había comenzado el desafío y cada participante empezaba a dar sus primeros pasos demostrando sus personalidades y habilidades. Pero las cisas debían desafiar y poner a prueba puntos claves.
- Este día desafió, a pesar que no es un típico rito para la comunidad, si lo es para nosotros y debemos celebrarlo como tal, ya que algunos habrán empezado de la misma forma hasta tomar fuerza en toda la comunidad; así que los ojos del Trueno deben observar - tras decir dichas palabras a Faye, Quimey paso de la lado al mundo físico para buscar un serrucho largo y volver con su compañera.
Con su mano dibujo en el suelo aquel símbolo que identificaba a la manada, para luego ponerse dentro y agitar la herramienta. El vaivén de la hoja de metal cortaba en aire y su estruendo imitaba añ de una tormenta.

Spoiler (marca el texto para leerlo):

termino de comentar en el idioma de los espíritus a voz alta y viva.

El espíritu se quedo inmóvil, durante el momento que te tomó pensar y decir la respuesta al enigma que tenías planteado. Pegó dos ladridos, aceptando que la respuesta, aprobando tu acierto y moviendo su cuerpo espiritual sobre el camino umbral. 

Anduvo sobre sus cuatro patas y se sentó sobre sus cuartos traseros a un lado del camino. Permitiéndote seguir por la vía hasta el siguiente tramo.

Recorriste el terreno liso, hasta toparte con un frondoso bosque fantasmal. Un puente blanco brillante aparecía frente a ti, al subirte oiste la madera umbral crujir bajo tus pies.

Y al pisar al otro lado, notaste que llegaste a una especie de laberinto verdoso, con altos muros de vegetación que eran imposibles de pasar de un salto, ni siquiera en tu forma crinos. Lo peor fue darte cuenta que cuando te diste la vuelta, la escalera habia desaparecido.

El espíritu corrió junto a ti, mostrándote un pequeño atajo al saltar de un camino umbral a otro. Sus cuatro patas lo llevaron lejos hasta el borde de una zona verdosa.

Recorriste el terreno liso, hasta toparte con un frondoso bosque fantasmal. Un puente blanco brillante aparecía frente a ti, al subirte oiste la madera umbral crujir bajo tus pies.

Y al pisar al otro lado, notaste que llegaste a una especie de laberinto verdoso, con altos muros de vegetación que eran imposibles de pasar de un salto, ni siquiera en tu forma crinos. Lo peor fue darte cuenta que cuando te diste la vuelta, la escalera había desaparecido.

Pero al menos el pequeño perro espiritual, aún te acompañaba en tu travesía.

Un laberinto, un simbolo de busqueda de un camino. Reflejod e misterios y secretos insondables en un mundo misterioso. En que podia confiar alli, nada era lo que parecia, las leyes de nuestro mundo no servian aqui, debia de librerarme de mi razon y mi logica humana y unirme a mi espiritu. 
Mi figura comenzo a cambiar poco a poco tomando la forma de un lobo blanco,buscando mi  naturaleza espiritual mas afin a Gaia.

Cierro mis ojos y prescindo de mi olfato, como de mis oídos. Camino lentamente, mientras murmuro entre sonidos animales una súplica de guía. Busco una guía que ya no depende de mi. Muestro mi absoluta confianza en los bosques para guiarme a donde quieran llevarme y en los designos de los espiritus.
Me interno tan profundo como puedo, en el laberinto y en mi espíritu. Empiezo a acelerar mi paso poco a poco, confiado en nada más que el espíritu, sin la luz de Selene sobre mi. 

No sabía si Burza estaba siendo gentil conmigo al correr a mi lado y no frente a mi, pues tenía entendido que los espíritus eran muy veloces moviéndose en la penumbra, o si su velocidad no podía superar la de mi forma homínida algo que de por si dudaba mucho que pudiera ser por eso; lo que si sabía con fe absoluta es que valoraba ese gesto.

Salte lo mas sincronizado posible cuando cambio la dirección de su carrera en dirección a una gran zona de un verde radiante que podía percibir a la distancia, parecía que se trataba de un bosque aunque me sonaba extraño que fuese tan brillante siendo que todo tiene un tinte mas siniestro en la umbra o al menos en la capa mas cercana a teluria. Mi sorpresa fue mas grande al llegar a estar frente al primer escalón de esta escalera espectral frente a mi; la arboleda era lo suficientemente grande en altura como para que no pudiese ser capaz de sobrepasarla saltando ni en mi forma de guerra, algo demasiado curioso como para no intentar escalar esta muralla de arboles apiñados entre si como para no poder atravesarlos, pero de momento estaba en una prueba y por como Burza comenzó a subir por la escalera del puente que finalmente pude ver después de unos pasos, fue que perdí el interés en comportarme como un mono al trepar ese desafió.

Aunque por lo visto quizás no debía pasar tan rápido ese puente, no me agrado llevarme la sorpresa de encontrarme con el hecho de que al ver sobre mis hombros este no estaba mas; al menos al volver la vista hacía el pequeño cachorro este se encontraba allí a la espera de mi actuar.

-Bien, ahora viene lo bueno...Si te cansas me avisas y te cargo- La verdad aun no estaba seguro si los espiritus conocían realmente el cansancio, pero esa oferta aun así se mantendría pues en cierta forma me agradaba lo suficiente Burza como para llevarlo en brazos. Sin mas que hacer o decir comenzaría a caminar, lento en un inicio para esperar a mi compañero y ver su reacción, así decidir si debía seguirlo o simplemente seguir a un ritmo de caminata que el pudiera igualar, si es que no lo superaba y yo debía acostumbrarme a el.

Desde donde estaba junto a Qui, estoy viendo como mis dos compañeros de manada corren a través de la umbra hablando con los espiritus. Hasta llegar al centro del laberinto, uno está más adelantado que el otro, vaya, a Abuelo trueno estará encantadole esto.

Veo a Quimey moverse y entrar en una especie de entonacion umbral mientras habla y pide algo.

Lo miro y asiento a todo lo que ha dicho, sus palabras en la umbra se vuelven inesperadamente sabias; levanto una de mis manos y le revoloteo el cabello amistosamente, para luego continuar mirando en silencio aquella prueba que nos daria al proximo beta de la manada.

Tus instintos te llevaron a caminar por el laberinto, al principio el camino tenía pocos pasadizos que escoger, hubo dos aperturas entre los altos arbustos, decidiste al azar sin considerar mucho si era mejor la izquierda o la derecha.

El silencio lo plagaba todo, no estaba presente ni la caricia de una lejana tormenta, ni el sonido de criaturas umbrales, ni el de ninguna otra criatura. Helios iluminaba desde el cielo, llenando de luz todos los recovecos que intentaban ocultarse de su calor.

El camino terminó en una pequeña apertura que daba paso a una pequeña pileta de piedra, rebozante de agua cristalina y transparente, o lo parecía desde la distancia de donde veias.

Varios espíritus rondaban alrededor de la fuente.

Burza" te condujo a caminar por el laberinto, al principio el camino tenía pocos pasadizos que escoger, hubo dos aperturas entre los altos arbustos, el perro espiritual te condujo por la ruta de la derecha.

El silencio lo plagaba todo, no estaba presente ni la caricia de una lejana tormenta, ni el sonido de criaturas umbrales, ni el de ninguna otra criatura. Helios iluminaba desde el cielo, llenando de luz todos los recovecos que intentaban ocultarse de su calor.

El camino terminó en una pequeña apertura que daba paso a una pequeña pileta de piedra, rebozante de agua cristalina y transparente, o lo parecía desde la distancia de donde veias. El can se acercó y empezó a dar ladridos hacia el interior de la fuente

Lo espíritus revoloteaban sobre y alrededor del agua.

No dudaría de la guía de mi compañero, le seguiría sin siquiera cuestionarle, incluso me encontraba un poco emocionado pues no sabía con que me encontraría y eso suponía quizas un peligro, pero sobre todas las cosas era la sensación de entrar en una aventura nueva la que me tenía así de animado, aunque estuviese dentro de una prueba no me importaba mostrarme animado por la misma.

El sitio al que poco a poco nos ibamos adentrando fue haciendose notar con el silencio abismal que a cada metro recorrido iba acallando mi entorno e incluso lograba lo que mucha gente no consiguio en años de conocerme, silenciar mis labios con un ambiente que me obligaba a estar pendiente de todo mi entorno; no solo por lograr superar la prueba antes que Bryan, si no por la curiosidad de este sitio.

-Que lugar tan peculiar al que me has guiado compañero- comente animado mientras en mi visión comenzaba a formarse la imagen de lo que parecía ser una pequeña piscina formada por un anillo de roca donde los espíritus parecían concentrarse. Los ladridos de Burza me llamaron la atención; al parecer lo que buscaba o mi destino actual, se encontraba dentro de la fuente. Le sonreí y hasta trate de acariciarle la cabeza, si es que me dejaba, si no lo hacía simplemente haría un gesto de disculpa bajando un poco la cabeza, antes de encaminarme hacía esa pequeña piscina. -Disculpen espíritus, no quiero incomodarles ni molestar...Soy Nikolai Petrov, Danza en la tempestad, me han encomendado buscar algo y las pistas me han traído hasta aquí- Hable en ingles pensando y esperando que los espíritus tuviesen mayor facilidad de comprenderme en ese idioma, aun no sabía hablar en el de ellos.

Trataba de ser lo mas cordial posible, pues se consigue mas con miel que con porras con púas.

Instinto, esa fuerza original que se encontraba dentro de todo animal, la cual habia salvado y guiado a estos desde el principio de los tiempos.  Una conexion quizas con los primeros lobos o con el espiritu de Lobo, no sabia pero habian veces en la que este era mas acertado que la razon no por algo los Garous eramos seres entre dos mundos.
Silencio, apenas nada. Aquello me recordaba a la calma o el silencio que reina en el interior del huracan, justo en el ojo de este, en mitad de la tormenta. Mire unos momentos a Helios,estaba en lo mas alto.
No habia rastro de abuelo trueno en aquel lugar ni de sus cuervos.
Me hubiera gustado que estuviera presente para ver la prueba, pero mi orgullo tenia un limite,hasta  alli donde entraba el respeto por mi totem y mis compañeros de manada.
Habia dado con varios espiritus, ellos eran mi guia como un  lazarillo en mitad de la noche eterna de un ciego. Era extraño aquel lugar , como si estuviese en otro lado, pero a la vez en un sitio cercano. Era el momento de actuar.

Me acerque a estos,sin cambiar de forma era el lobo el que mas pertenecia a este sitio y no el hominido.
-Mi nombre es Cuervo de venganza-dije presentandome, ante todo debia guardar respeto-aunque este no es importante. Soy un servidor de Gaia,aunque apenas un cachorro.-inclinando mi morro demostrando  mi solemnidad ante estos-  Vengo con humildad a pedir ser puesto a prueba y poder demostrar mi valia, ademas de esperar ser participe de  la gran sabiduria que solo ustedes poseen. 
-Debo encontrar algo que ha sido oculto y solo en enigmas puedo conseguir vislumbrar el camino.-dije esperando si habia sido lo suficientemente respetuoso, a la espera del enigma y de resolverlo conseguir que estos me indicaran despues la direccion por la que seguir hacia el lugar indicado.

Tenia la sensacion que aun estaba lejos de la meta,pero mi instinto como Fenris no me dejaba caer en el pesimismo tan pronto. Es en el camino donde uno se forja, donde comprende porque es como es y como se conoce a uno mismo. La meta solo  es la conclusion. Habia  de demostrarme a mi mismo de que estaba hecho.

Casi podia escuchar las palabras de mi mentora en un momento asi. -                                                                       -Mueve tu trasero de cachorro y deja de quejarte. Aun queda mucho por hacer, alzate y lucha una vez mas.Solo es cuando te rindes cuando todo se termina. Mientras te quede un aliento podras seguir luchando por Gaia, eres un fenris no lo olvides.

Burza se dejó acariciar la cabeza, emitiendo dos ladridos y moviendo la cola a medida que te acercabas a la fuente. Al acercarte hacia la pileta y hablar con los espíritus, estos se abrieron para dejarte avanzar. Mucho porque "Burza" te acompañaba. Sin embargo, al llegar al borde de piedra, el "perro" se quedó detrás y te miró desde allí en sumo silencio.

Bryan por su parte, encontró a los espíritus algo recelosos y al avanzar sintió en algunos tramos algún resquemor sobre la piel que lejos de dañarlo, solo le hacían notar que llegar a la fuente iba a tener el precio que estaba pagando.

Pero los dos llegaron cada uno al borde de la fuente, ambos veían dentro del agua espiritus serpiente nadando sobre el agua, como lo harían miles de gusanos dentro de una manzana podrida. Pero el agua era cristalina, purísima y las serpientes blancas, hermosas, perfectas.

El cielo Umbral se abrió en respuesta al llamado de Quimey y una negrura espesa invadió lo celeste, plagando y tiñiendo con su negrura de alas y plumas toda la luz directa que Helios podía darles. El efecto de la oscuridad gris y los graznidos atronantes reventaban en ecos que alejaban a los espíritus más gentiles, intimidados por la presencia de los mensajeros de Abuelo Trueno. Quien acudía al llamado de Quimey para presenciar el duelo de sus protegidos, solo uno podría primar sobre el otro.

Uno de los cuervos descendió hasta el hombro de Faye y se fundió con sus ropas en una espesa capa corta de plumas de negro obsidiana. Mientras que otro grande también, se poso sobre una piedra cerca del theurge y graznó dolorosamente, hacia la manada.

Y allí mientras asomaron sus rostros, dentro y veían los cuerpos ondulantes de los ofidios espirituales; pudieron verse, Bryan vio a Nikolai dentro de la fuente y a su lado un pequeño perrito. Nikolai, observó la mirada adusta y decidida de Bryan, con la piel algo enrojecida y algunas heridas superficiales sobre la misma piel.

No me perturbe con la repentina muestra de respeto de los espíritus, camine tranquilo entre estos pues ya estaba demasiado acostumbrado a que cuando caminaba junto a mi madre en el túmulo donde nací, la gente se hiciera a un lado, pero eso era por su presencia mas que por la mía, en este momento era casi la misma situación, pero la gran diferencia radicaba en que no me molestaba en lo absoluto que aquellos espíritus mostrasen respeto por mi compañero.

No dude en acercarme lo suficiente al estanque natural que estaba formado frente a mi, depositando mi mirada en la cristalina agua que me permitía ver a esas curiosas y hermosas serpientes que quizás podrían provocar terror en muchas personas, siendo el caso contrario pues resultaban cautivador el color de sus escamas, algo que las podía volver mucho mas peligrosas de lo que ya eran. Pero estos espíritus no parecían querer usar su encanto para alimentarse de mi, parecían mas sumidas en sus propios asuntos como para prestarme atención.

Grande fue mi sorpresa, pero no por ello no grata, al notar que mi reflejo se desvanecía para enseñarme en la superficie del agua la silueta de Bryan. Se notaba que se encontraba decidido en su mirada, seguro de que pensaba que podría ganar estos desafíos antes que pudiera hacerlo por mi mismo, y esas miradas eran las que me motivaban a devolverlas con la misma intensidad.

-Se te ve bien hermano- comentaría sin mostrar un apice de duda en mi voz o mi expresión, estaba también determinado a vencer, y luego de ver sus heridas y su dedicación, no podía no seguir esforzándome por vencer.

Dedique un segundo para volver a adoptar un gesto sereno y serio ante los espiritus, ellos merecían respeto en este momento y no me pondría de bromista con ellos.

-¿Me muestran a mi hermano de leche pues es lo que mi alfa y mi maestro de rito me han encomendado encontrar?- Preguntaría con seriedad pues si eso era lo que debía encontrar, esperaba que pudieran guiarme mejor pues sería raro zambuyirme sin pensarlo con tal de encontrarme con Bryan.

A cada paso en mi camino notaba como un fuego consumia mi piel y me heria, pero esto para mi era familiar. Cada zancada me hacia pensar si aquel laberinto era tambien un reflejo de mi interior, marcado por las emociones o el odio que albergaba en mi,desde lo sucedido con mi hermana aquella venganza,que habia prometido cumplir.

Abraze el precio pagado caminando hacia la fuente.Los espiritus de alrededor vagaban aun por alli, no sabia que esperaban quizas soloquerian ser espectadores de algo. Y entonces el cielo se abrio. Helios era conquistado por fin por Abuelo trueno, el cual enviaba sus cuervos. El gran espiritu acudia a la llamada del theurge para observar y presenciar aquella prueba.

Entonces acerque mi vista al estanque y alli vi reflejado a mi compañero.  No un  lobo de pelo niveo, ni unos ojos duros y determinados si no el rostro de un hermano.

El estanque se encontraba lleno de aquellas criaturas otros espiritus, con forma de extrañas serpientes de mar.
Las reglas habian sido las de buscar un objeto,mire entre las aguas del estanque pero presuponia que nada habia. Habia de preguntar por segunda vez se suponia, y seria puesto a prueba para despues indicarme el camino.
Dos caras en una misma moneda. 

Asome mi ocico al estanque tenia que hablar con los espiritus, aunque si cruzaba hacia el lado de Niko...
-Espiritus de la fuente y la sabiduria acudo a ustedes en busca de algo que ha sido escondido. Busco un instrumento una flauta de hueso, resto de un animal muerto y que de ese objeto  sale ruido al soplar, musica. Con humildad y decision yo Bryan Wolf acudo a ustedes para preguntar por donde se encuentra y confiar en su gran sabiduria.-si me equivocaba era un paso atras, pero era un paso sin lugar a dudas que tenia que dar.

- ¿ezzzz quién o ezzzz qué? -una de las serpientes brilló en un tono dorado al responderte, llevaba sobre las escamas el color de la tierra misma. Su cabeza se alzó sobre el agua y su lengua siseante, serpenteó en el aire- ¿Qué pago rzezzzzibimos nozzzotrazzzz a cambio, lobatozz? -siseó con su cabeza alzándose más sobre el agua- Entreganozzz a wolfzz, que entre con nozzotrazzz al agua, llamale y te lo daremozzz