Partida Rol por web

Las cosas se suceden con celeridad,no vi al constructo decirle nada al oído al gnomo,y ahora ya es hora de desayunar,el olor que me llega hasta mi habitación,hace que la noche se me acorte inimaginablemente,pero así es el tiempo y su designio,nacerá quien diga que el tiempo es relativo,por ahora,mi lugar esta en la mesa del salón para prepararme a un banquete,la próxima comida no se sabe cuando sera o si sera,y por ello me apresto a paladear esas delicadas comidas humanas que no son mas que manjar de cerdos, o de vacas a lo sumo,pero el hambre aprieta y no teniendo nada mejor que llevar a la boca,hasta este lamentable remedo de comida servirá para su propósito..... Bajo a la sala común y el enano dándose grandes aires de aventurero relata hechos mas o menos verídicos de su lejana juventud,su retirada por la simple perdida de un ojo la encuentro lamentable,pero no sera yo el que le eche en cara a un ser de la antigua raza su pésima reputación a vista de gentes de mundo como los que parecen escucharle,pues yo hace tiempo que deje de hacerlo,tras explicarnos donde surtirnos de lo necesario para una partida pronta,con lo que despacho las viandas ofrecidas y de gusto a ciénaga de los pantanos de Borewheim,y me dispongo a salir de compras por las penosas tiendas que a buen seguro surten este pueblo,podrida ser que algo se les hubiese escapado a los cortos vendedores y poseer una pieza de relieve....aunque dudo mucho de ello,en un pueblucho de mala muerte como este no hay nadie capaz de tener un arma,o algo por lo que pagar mas de dos monedas de cobre,seguro.... Miro a mi alrededor y aunque la posada este vacía,no veo en ella nada digno de llamar mi atención,un hacha mellada de escaso valor y menor interés y un cáliz que no engañaría ni a un goblin de su autentica naturaleza.....por lo demás la suciedad hace acto de presencia por doquier y es difícil entender por que los parroquianos continúan regentando semejante pocilga,pero si esta es de las mejores posadas del pueblo o la mejor,no quiero ni pensar como serán las demás... Salgo sin esperar a nada ni a nadie tras consumir el magro trozo de carne expuesto en mi plato,lo poco que se podía comer lo he intentado ingerir sin masticar,solo tragando para que la tortura fuese lo mas liviana posible y lo mas rápida que mis arcadas me permitieran..... Mi bolsa aun resuena con algunas monedas y espero poder comprar algo de valor para las jornadas venideras,con el grupo en el que me he visto casi obligada a pertenecer,a buen seguro necesitare de todo y mucho...

Kurtok yacía por la mañana en la misma cama que su tigre "Rayitas" el cual le servía a la vez de cómodo y confortable cojín. Siempre madrugaba mucho porque le gustaba ver como las flores se despertaban y solía aprovechar para recoger frutos o hierbas aromáticas. Otra de las rutinas matutinas del gnomo era realizar un hechizo que le proporcionaba unas buenas bayas con poderes curativos que seguidamente guardaba en su mochila por si hicieran falta.

Rayitas Acompáñame a bosque y mientras yo recojo unas hierbas tú aprovecha para comer algo porque luego tendrás que estar un rato más en el granero hasta que vuelva.

El gnomo y el tigre se adentraron el bosque y cuando terminaron sus quehaceres volvieron a ser escoltados hasta el granero, rayitas mostraba un chorro de sangre que le salía de la boca, sin duda aquellos conejos estaban deliciosos.

Bueno "rayitas" enseguida voveré y podremos porfin caminar juntos fuera de estas cuatro paredes agobiantes. Descansa un poco que seguramente sea un día duro y habrá que caminar bastante.

Kurtok se adnetra en la taberna y saluda efusivamente a su "amigo" el enano tabernero.

¡Hola enano! Como se que tienes problemas con los ingredientes para hacer infusiones - Aún estoy esperando la de ayer...- te he traido muérdago, estragón, orégano, salvia para que no tengas ningún problema, por cierto ya he desayunado en el bosque un poco de musgo de árbol húmedo y unas bellotas silvestres gracias, solo venía a regalarte estos ingredientes.

"Cicuta fuerte" se despide del enano ignorando por completo al resto de los presentes y pasa el resto de la mañana dando un paseo por liberta escudiñando sus flores, arbustos y árboles.

Ummmm este manzano está un poco escuálido, um igual con un conjuro de... ah y mira ese boj silvestre, realmente curioso - Kurtok siempre hablaba solo...

Este debe ser el castillo y ya es la hora indicada, entraré sin más dilación.

Realmente esperaba algo más de los Tres Soles. Lo que me había comentado aquel tesorero gnomo no impulsaba demasiado mis deseos de adentrarme en aquella aventura, pero quien sabe... a lo mejor no me estaba contando toda la verdad. Ya que había iniciado el viaje, no era momento de terminarlo, al menos no ahora. ¡Si, eso era! Aventura, aventura. Era algo que me fascinaba, y ahora que había caminado bien lejos de Falcon Gris, mi espíritu se resistía a volver tan rápidamente a la civilización.

No se que me depararía esa extraña misión, aparte de muchos riesgos y puede que una muerte prematura, pero bueno, al menos daban algo de oro...

Con cierta desgana, alargué la mano hacia el papel y escribí mi firma con un trazo enérgico. Acto seguido extendí el papel hacia adelante, para que mi conjénere recogiera el papel firmado. Parecía que el día terminaba y aunque mis parpados empezaban a pesar más de la cuenta sentía una gran curiosidad por entablar conversación con los desconocidos. El forjado, sin duda era quien más me interesaba. Quería saber que pensaba o que sentía, pues al fin y al cabo, cuando practicaba mi magia con los objetos, podía sentir el alma de ellos y notar el vínculo mágico y energético que se producía entre esa cosa y yo. Ahora podría comprobar realmente si las "cosas" tenían alma, lo cual sería un hallazgo sorprendente.

Agité la cabeza, pues notaba que mi cerebro iniciaba un viaje de cavilaciones sin destino ni origen. Subí correteando las escaleras y me preparé para el reconfortante sueño. Al ver la cama, me recordó languidamente a la de mi estudio, en el que había vivido largo tiempo, en la casa de mi Maestro. Ahora añora un poco la conversación de mi Mentor y su sonora risa. Era hora de dormir, buenas noches Mundo.

______________________________________________________________________________________

A la mañana siguiente, desperté suavemente. Más de lo que hubiera imaginado. Un sabroso olor me levantó de la cama, incitado por el rugido de mis tripas. Con la excitación del viaje y la charla de la noche anterior, me había olvidado de cenas o cualquier tipo de comida. Me arreglé rápidamente, cogiendo todas mis cosas y revisando que no faltara nada. Tras ello, bajé brincando las escaleras para encontrar un animado panorama, aunque mucho menos festivo y salvaje que como cuando había llegado allí por primera vez.

Una vez abajo, me sorprendió toparme con el enano de anoche. Cualquiera hubiera dicho que era la misma persona. Hacía unas horas era un atronador enano, que agitaba a la borrachuza muchedumbre a base de alcohol duro. Ahora era todo sonrisas y viejas historias. Revisé los objetos que decía... que interesantes, que interesantes. Mis dedos revoloteaban debajo de la mesa, y me mente tanteaba coger prestado ese cáliz. Brillaba tanto y era tan bonito... pero al escuchar el comentario del enano acerca del aprovisionamiento, esta idea se esfumó rápidamente de mi cabeza.

Miré atentamente a los ojos, bueno... al ojo al tabernero y escuché sus palabras con atención, mientras observaba el mapa al que se refería. Estaba logrando la inestimable proeza de engullir el desayuno mientras dejaba mi vista fija en el mapa y memorizaba las distintas localizaciones.

Tragué un buen pedazo de carne y llegué a la conclusión de que realmente necesitaba provisiones, puesto que al fin y al cabo había realizado aquel viaje más como una peregrinación mística y misteriosa que como una misión clara, así que no había cogido todo el equipo que ahora sentía que necesitaba. Aquel componente, ese instrumento, este otro pergamino... eran muchas las cosas que me apetecía tener a mano, pues tras el oscuro panorama que nos habían pintado los caballeros de los Tres Soles, me ponía en lo peor.

Terminé de comer y miré vagamente que hacían el resto de mis compañeros. La efusividad del primer encuentro se había disipado un tanto, pues ahora mi mente bullía haciendo una lista interminable de cosas que podría necesitar, quitando y poniendo, poniendo y quitando cosas que pudieran ser útiles.

Tras unos instantes decidí que era muy temprano para poner a mi mente en semejante estado de ebullición. El mapa de Thorbadin mencionaba algo sobre una torre de un Archimago. Aquello era interesante... generalmente los magos solían ser gente reservada y no muy amistosa, al menos los que había conocido, pero yo había iniciado aquel viaje en pos de conocimientos y no podía perder la oportunidad de ver a un señor del Saber.

Revisando el mapa, también había una herrería... podría ser interesante ver las obras de un compañero de gremio. ¡Siempre era tan interesante ver las creaciones de otro! Mmm... otros asuntos serían más difíciles de encontrar. Mis artes ocultas, de las que aún no había mencionado palabra, necesitaba un equipo especial, que sería difícil encontrar en ese pueblecillo. Quizás el prestamista... ese tal "Zorro"... le haría seguramente una visita más tarde.

En cualquier caso, terminé mi plato, bebí un poco de vino, pero muy poquito, pues no era de esa clase de bebidas. Mi Maestro era un asiduo cervecero, pero a mí personalmente, esas bebidas que embotaban la mente y turbaban el espíritu no me gustaban. Para eso ya estaba yo y mis locos pensamientos.

-Estaba todo muy bueno, Thobadin- agradecí el detalle del desayuno, que si bien no era soberbio, llenaba y alimentaba, algo más que de sobra para un gnomo acostumbrado a precariedades-. En otro momento, me contarás más historias de tus viajes, pues siempre me gusta escuchar relatos sobre viajes y cosas desconocidas - añadí alegre-.

Tras ello, salté del taburete y a paso rápido me encaminé hacía la torre del hechicero. Tenía solo dos horas, que debía aprovechar y exprimir al máximo. Suerte para mis cortas piernas, que en aquel pueblo las distancias era cortas. El sol brillante en la cara y la brisa fresca de la mañana me reconfortaban y me daban unas fuerzas unisitadas. Aquel día sería importante, sin duda.

Tras entregar mi contrato firmado y ver cómo se va el gnomo no tardo en subir a mi habitación.
El cuarto es pequeño y alejado del bullicio del salón principal de la posada, una pequeña ventana da al exterior, al asomarme veo que da a un callejón estrecho.

Cojo el cojín donde descansara mi cabeza durante la noche y lo pongo en el suelo me siento sobre él y de mi mochila saco una venda de terciopelo de color negro que ato a mi cabeza tapando mis ojos y extendiendo mis brazos para empezar a reza.
Los rezos duran unas dos horas, rezo en silencio para que inunden mi interior, sabiendo que al día siguiente empezara la aventura y que las posibilidades de un combate son mas inminentes solicito nuevos conjuros.

Al terminar me acuesto en la cama y mis ojos se cierran rápidamente.

Al día siguiente la luz del sol que entra por la ventana me despierta a primera hora y de nuevo realizo el mismo ritual que la noche anterior, pero no solicito conjuros nuevos, mis rezos son para los que me acompañan, por su buenaventura, una vez termino y recojo mis cosas me dirijo al salón principal.

La estampa es bien distinta a la de la noche anterior, el enano está contando historias y veo como el gnomo que se presento la noche anterior está saliendo de la taberna.

El enano me comunica que en una hora tengo que estar en el castillo y me muestra un mapa.

-Perdone señor ¿le importaría que me llevase este buen mapa? por lo que veo mis compañeros ya han salido todos y a ninguno le ha parecido importante, una cosa más podrías hablarme del cáliz que descansa en la pared.

Le digo mientras como un poco de venado con mostaza un placer para mi paladar, tras lo cual me dirijo al exterior de la posada la brisa es agradable combinada con los rayos de sol disfruto de esa sensación unos minutos antes de dirigirme a EL templo de lathaner.

-Porsupuesto que te lo puedes llevar , tengo mas y siempre es bueno hacer un favor a un hombre de fe, de alguna manera me siento en deuda con el de mas arriba y esta es una forma de corresponderle, ya me entiende

El enano se rie sobriamente , por su actitud sientes que lo que dice lo dice con sinceridad y que el misterio de sus palabras estan apunto de ser reveladas ,cuando coge aire una vez mas para contestar tus preguntas

-Lo que digo tiene relacion con ese caliz de oro ,que simpre tengo en el mostrador para recordarme esa deuda, es un caliz de una abadia de monjes con voto de silencio que hacen un excelente vino y como lo consegui ,fue en una de mis aventuras donde estuve al borde de la muerte, es la vez que mas cerca estuve de runirme con el Creador.

-Ves el retrato de ahi? pues eran mis compañeros de armas , y formabamos un grupo de aventureros muy famoso en esta region por librar a nuestros ciudadanos de mounstros terribles. Una vez llego a nuestros oidos que un ser terrible amenazaba un rico poblado , en medio de una ruta de comerciantes, fuimos a averiguarlo nos contaron que un niño estaba explorando el bosque cuando se encontro y una bestia horible en la noche ,que le dijo que avisara al alcalde porque una terrible maldicion se cernia sobre el pueblo que se podia evitar si el mosntruo recibia un tercio de las riquezas del pueblo. Cuando el niño se lo conto al alcalde este desoyo la amenaza y creyo que era la imaginacion de un niño, pero paso un tiempo y una mañana una parte de sus habitantes estaban conevertidos en piedra ,con expresiones de horror en su cara , el niño volvio a hablar con el alcalde diciendole que el mounstruo le habia dicho que si no pagaba todo el pueblo se convirtiria en piedra asi que pago. Pero nos contrato para averiguar que pasaba . Tras hablar con el niño averiguamos que se trataba de una medusa ambiciosa y sedienta de oro y el alcalde nos contrato para matarla por si volvia a extorsionarle . Encontramos la caverna en la que se escondia y llevamos espejos para poder verla y no nos afectara sus hechizos. Estaba vagamente iluminado y el grupo se dividio para tener mas oportunidades pero yo tuve mala suerte y me encontro , me ataco desprevenido y justo cuando iba a mirala a los ojos el mago lanzo un hechizo de oscuridad y me salve de convertime en una estatua por poco ,pero me clavo su espada envenenada hiriendome gravemente . Consiguieron matarla y sanarme las heridas ,pero el veneno etsba en mi sangre y ya conoces la fama del veneno de las medusas, . Me llevaron a la abadia y los clerigos me atendieron durante semanas , tuve que luchar contra el veneno dia y noche y lo pase muy mal,pero me salve. Como recompensa el alcalde nos permitio que nos llevaramos un diezmo de lo perdido y en mi parte se encontraba este caliz que pertenecio a la abadia en la que los monjes salvaron mi vida , con el que cada dia brindo por estar vivo

Mi deambular por el pueblo se hace monótono y aburrido,nada de lo que veo hace que mi interés aumente lo mas mínimo,por ello tomo la decisión de volver a la taberna ya que a buen seguro mis compañeros en este viaje,ya sea largo o corto habrán partido buscando cualquier nimiedad que encontrar en un pueblo como este...

Al regresar para esperar la hora de partida,me siento en el mismo rincón oscuro que elegí el día anterior,prefiero ver a ser vista.....con la tranquilidad que ofrece en esos momentos la posada repaso los conjuros y hechizos para tenerlos preparados si tenemos que afrontar cualquier contingencia,leo con la escasa luz que ofrece la ventana que hay cercana a mi asiento las esquivas letras que un profano no podría mas que ver bailar,eso con suerte,ya que lo mas sencillo seria que se volviese loco de tan solo posar sus débiles y curiosos ojos en las paginas de mi libro....

La mañana trascurre apacible,pues no siendo molestada ya es un gran logro para mi,la capucha que cubre mis rasgos es un parapeto natural difícil de franquear por aquellos que puedan mirar desde lejos y tan solo acercándose a escasos palmos de mi,podrían distinguir mis facciones,me gusta la intimidad y no ser molestada por palurdos de pueblo,ni otros seres menores....

La hora de marcha se aproxima,y me voy preparando para la llegada del que nos vendrá a buscar....aun resuenan en mi mente las palabras del tesorero..

Cita:

Creo que llevo todo lo necesario,un vistazo mas a mis pertenencias es necesario para comprobar que así es o tener el tiempo justo para hacerme con lo que falte...

El camino hacia la torre del hechicero se me hizo muy corto. El aire fresco cargaba mis pulmones de una energía inusitada. La idea de empaparme de conocimiento era muy atractica y podía notar el canto de sirena que emanaba la torre. Estaban sucediéndose grandes cosas en poco tiempo y aunque me sentía algo abrumado cuando pensaba en el rumbo que había tomado mi vida, daba un paso adelante con decisión y sonreía al viento: me encantaba la aventura.

Tras caminar unos largos minutos que se me hicieron brevísimos instantes, llegué a las cercanías de la torre. A lo lejos, se vislumbraba como una estructura gris y vetusta, que con sus pocas ventanas, transmitía un aire misterioso, oculto. ¿Qué podría encontrar allí? Que nervios. Aceleraba el paso, cuando mi mente daba con estos derroteros.

Para mi sorpresa, la entrada a la torre parace despejada. Aminoro drásticamente el paso, y de manera casi instintiva activo todos mis sentidos. Era una buena costumbra, esa que había adquirido, de estar alerta cuando llegaba a un nuevo lugar. Introduje lentamente la cabeza, para ver una estancia maravillosamente desordenada.

El humo de los burbujeando alambiques, los ruiditos y gorgoteos desconocidos, libros por doquier. Aquello parecía un oasis del conocimiento, de las artes desconocidos: un cofre lleno de olvidados tesoros. Quien sabe... quizás alguno podría ser mío...

Un brillo ausente en mi ojos, que indicaba, que para variar ya estaba absorto en mis pensamientos debió llamar la atención del mago que salió de entre aquel entrañable caos y me preguntó que podía hacer por mí. Rápidamente me espabilé y di un paso atrás, en señal de respeto. Esbocé una mirada inocente y cálida, a la vez que miraba al anciano y comenzaba a hablar, aunque mis palabras quizás era más pícaras que mi expresión:

- Pues verá señor, me presento: mi nombre es Cerrojo y soy un estudioso de la magia, que viene de lejanas tierras. Mis asuntos, relacionados con los Tres Soles, me han traído hasta este lugar. Había escuchado a numerosas gentes decir que vos érais un interesante erudito de los saberes mágicos y estaría interesado en aprender de usted. ¿Qué podría decirme del campo del Artificio? Actualmente ando enfrascado en el estudio de esa rama de la Magia. Estoy muy interesado en estudiar la magia que afecta a la materia, con el fin de ayudar a las pobres gentes que viven en este mundo asolado por la terrible guerra.

Casi sin darme cuenta, daba un énfasis más tragico del que usaba normalmente. Miraba arriba, abajo, izquierda y derecha, de vez en cuando, pareciendo casi que al hablar rogaba la ayuda de algún dios, pero realmente estaba inspeccionando rápidamente si había algo de interés. Algo que mis ágiles dedos quisieran coger prestado. No obstante y aunque mis ojos estaban bien entrenados para reconocer cualquier objeto especialmente llamativo, estaba más enfrascado en el monólogo que lanzaba al mago, pues al fin y al cabo, deseaba que si pudiera enseñarme algo, lo hiciera.

Me acerco al almacén y le pido al vendedor que me enseñe los arcos compuestos,las espadas de calidad y aquellas armas que considere que son de algún valor,ademas de pedirle que el precio sea justo para la causa a la que nos enfrentamos,pues representamos al señor gran Drako....si no son asequibles,puede que el lo vea como una afrenta a su persona y a sus elegidos en misión especial y única....

Después de firmar, se levanta de la mesa, precipitado por la rabia que le habían producido sus recuerdos. La silla vuelve a quejarse. Mira a todos los que había sentados en la mesa y dice: ¡Me voy...fuera!.

Entonces el constructo, sin esperar respuesta,  camina hacia la puerta. Ésta se abre justo ante él y entran una pareja de aldeanos, bastante ebrios. Entonces se encuentran con Hark y sus rostros transmutan por la impresión. Parece como si la bebida hubiera dejado de hacer su efecto. Acto seguido consiguen desentumecer sus miembros y se apartan. Entonces, Hark camina unos pasos y se sienta en un banco. Éste se queja. 

Pasan las horas y el constructo sigue ahí. Hark no necesitaba dormir, ni comer, ni beber. Aunque muchas veces se había preguntado, cómo sería deslizar un largo trago de cerveza por su garganta. ¿Qué sensación le produciría?. Hasta ahora, lo único parecido en algo al placer,  era eso que él había observado y considerado como placer en los humanos. Por ejemplo, esa sensación, de los soldados llegando exhaustos del campo de batalla recordando a los caídos, cerveza en mano.

Ese suspiro al beber, ese rostro expresando alegría, descanso...¿eso debía ser el placer?  Pues eso es lo que sentía Hark después de una buena lucha. Esa sensación que recorría toda su espalda hasta iluminar sus ojos...Placer.

Suponía que dormir sería igual de placentero, dado los rostros relajados que mostraban los que lo hacían. Bueno, no todos. Algunos mostraban dolor. ¿Sería eso otra forma de placer?.

Hark tenía mucho tiempo para pensar. Lo hacía durante horas, observaba a su alrededor y lo guardaba en su memoria.

A la mañana siguiente, decide ir al castillo, no sin antes pasarse por por el almacén.

¡Hola, me llamo Harkuar Arkanatuir! . ¡Quiero la mejor espada y escudo que tengáis!...¡y procurad que sean buenos porque lo sabré!.

Hark no era de mucho hablar. Los primeros constructos poseían una manera de relacionarse muy simple, no como los de última generación que habían recibido una educación más completa. Para luchar, la palabrería no era necesaria y tampoco le importaba demasiado.

Torre (artifice)

-Pues no puedo ayudarle cerrojo ya que yo me dedico a la magia tradicional ,pero un momento......presiento algo en ti.....es como si tu aura fuera muy fuerte por alguna extraña razon ,pasemos dentro un momento

Se sienta en la mesa en la que estabas esperando y trae una bola de cristal,acontinuacion te coje la mano con su izquierda y con la derecha la bola. acontinuacion se queda en trance y mira la bola

-veo un buho ....si un buho, es un buho muy raro tiene el plumaje blanco........ esta encima de la rama de un arbol......... una arbol muy antiguo. es todo lo que veo

Acontinuacion te lee la mano y dice:

-veo que esta son las manos de un forjador y esta linea de aqui representa la linea divina y esta muy marcada ¿eres muy religioso?......... Espera no........... esta linea tambien lo esta y es la linea de los exitos en la vida y se cruza con ella.

Sale del trance de un golpe y dice:

-la comunicacion se ha cortado. No veo mucho mas

Armeria

(Warlock)

-Arcos cortos compuestos son 75mo y espada corta normal 10 y si son de calidad el doble

(Forjado)

-Pues tengo de todos los tipos , doble hoja ,simple, aserrada, cimitarras,etc

-Se lo que necesita un aventurero con solo mirarle, aver ..... como veo que llevas una espada te recomiendo que la combines con un escudo los tengo grandes y pequeños y de madera y de hierro , te recomiendo uno grande de hierro ya que eres fuerte . Madre mia nunca habia visto un forjado tan grande , Vale 20mo pero como veo que no llevas espada de dos manos esta de 50mo te vendra bien, si te llevas los dos te rebajo 5mo. Me has caido bien.

Un atisbo de decepción recorrió mi rostro ante la confesión del hechicero, al decirme que no podía ayudarme a mejorar mis conocimientos en la materia del Artificio. Quizás había sido demasiado optimista al pensar que un mago afincado en una población tan reducida pudiera poseer unos grandes conocimientos.

Me sorprendió cuando comentó el asunto del aura. Generalmente, cuando yo practicaba las artes mágicas relacionadas con la materia y los objetos, podía notar esa extraña "aura", como el mago decía, así que el hecho de que él se refiriese a mi aura me llamaba la atención sumamente. Yo no era capaz de sentir a los demás en ese aspecto, aunque si podía desarrollar esa habilidad al interactuar con los objetos. Curioso, muy curioso todo aquello. Lo seguí rápidamente, mientras miraba de un lado a otro de la habitación constantemente.

No me esperaba que sacara una bola de cristal, pues tenía entendido que eran tipos de magia banales y usados generalmente como engañabobos, aunque quien sabe, aquel tipo parecía algo más que un simple timador. Me sentí receloso cuando tomó mi mano, aunque acepté sin muchos miramientos.

Todo quedó en calma hasta que note una fuerte presión en la mano. Vi como el hechicero me agarraba fuertemente y al levantar la visto y mirar al rostro de éste, vi que sus ojos estaban en blanco. Arrancó a hablar con una voz algo diferente a la que me había hablado hasta entonces. Era más... evocadora, lejana, no parecía la suya, definitivamente.

Habló de un buho de plumajes blancos posado sobre un árbol antiguo. ¿Qué podría significar aquello? No sabía sobre sus palabras, pues nunca me había fiado en exceso de esas artes, pero realmente aquella situación parecía demasiado fortuita y cuando uno anda metidos en los asuntos en los que yo me muevo, uno sabe que las casualidades son solamente cosas de gente poco preparada. Decidí que sería bueno tener en cuenta sus palabras.

Siguiendo en su tónica, liberó un poco la presión que ejercía sobre mi mano, para sorprendentemente, darle la vuelta y leerla. Sin duda, las habilidades que mostraba parecían más las de un pitonisa que las de un gran mago. En cualquier caso, esperé a que él terminara de hablar, para responderle. Parecía que al haber terminado sus últimas palabras, su místico trance había cesado. Lo miré a los ojos unos segundos echando un poco mi cabeza hacía atrás para ello, antes de empezar a hablar.

- ¿Está bien? - mis ojos lo escrutaban de arriba a abajo-. ¿Qué es eso sobre un búho blanco sobre un árbol antiguo? He leído libros sobre esto o aquello, pero nunca he escuchado nada sobre eso que dice. ¿Tiene que ver conmigo? ¿No hay nada más que pueda aclararme?

Hice una pausa antes de seguir, como pensando mis palabras, pues sobre lo que iba a hablar era un tema difícil:

- Pues la verdad es que no... no soy demasiado religioso. A lo largo de mi vida he visto mucha miseria y vivido bastante penurias como para pensar que existen los Dioses, y si estos existieran, parece que nos hubieran abandonado - un claro desencanto teñía mis palabras, pues mi mente recordaba vívidamente los años con mi familia en los que viví plenamente las consecuencias de la posguerra en forma de miseria-. Aunque claro, puede que si existe un Infierno de donde vienen los demonios de las historias, no veo raro que existe un Cielo, donde habiten los Dioses. Aunque bah... no es algo que me quite el sueño...

Mi aguda vocecilla se hacía más grave cuando hablada de esos temas, como si mi mente creyera que debía ser más seria y formal. Seguí ahí sentado sobre una silla baja, con algunos libros que había cogido rápidamente antes de posarme sobre el mueble, a modo de cojín. Esperaba que el mago pudiera decirme algo más, pues sus revelaciones me habían impactado de una manera llamativa.

-Lo que he hecho a sido lanzarte un hechizo de la escuela de adivinacion de mi creacion,en el que combino la lectura de la mano con la lectura de la bola , algo asi como el hechizo de augurio de sacerdote de nivel bajo pero mas poderoso, en otras palabras :..... Te he leido tu futuro y las imagenes suelen ser vagas pero son como alegorias de tu destino . Te pondre un ejemplo hace tiempo hice lo mismo con un caballero de Solamnia que tenia un aura igual de fuerte que la tuya , una de las imagenes que vi en la bola fue una parca de espaldas y en la mano la linea de la vida se cruzaba con la linea de la muerte haciendo una sola line muy larga , bueno pues mas tarde me entere que a dicho caballero se le encomendo la mision de proteger a una noble de la que estaba enamorado y durante su mision unos bandidos asaltaron su carro y la mataron y a el tambien el lo vio antes de morir y desde entonces se formo la leyenda que un fantasma -caballero deambula encerrado en ese camino los dias de luna nueva matando a todos los viajantes 

-Pero no te alarmes los signos de tu adivinacion son positivos a diferencia dde el y respecto a lo de quye seas un hombre de fe puede que no lo seas directamente sino que solo sea un simbolo con otro significado

mensaje reservado por si alguien quiere comprar algo, escribidlo de forma normal si no os a dado tiempo y yo lo pegare aqui

mensaje reservado 2: podres comprar antes de salir del pueblo despues ya nop sera posible

Puesto que ya habeis ,hecho las visitas al pueblo antes de partir tal como se os habia aconsejado decidis ir a la posada y subir al piso de arriba y descansar un rato en vuestras camas para reposar vuestros huesos antes de la partida

Al rato se oye unos pasos sonoros y decididos , como si alguien en una pesada armadura subiera las escaleras al piso de arriba, no mucho tiempo despues, casi de imediato ois golpes sonoros en vuestras puertas , como si alguien golpeara con la parte baja del puño tres veces en cada una.

-MOVED ESOS CULOS CUADRADOS DE TROLL QUE TENEIS , SOLDADOS¡¡.

-VENGA , QUE VUESTROS CARROS NO OS VAN A ESPERAR ETERNAMENTE ,SEÑORITAS.

Cuando salis de la habitacion alarmados por tal miliciano estruendo, veis a un hombre humano enfundado en una armadura completa con una espada a dos manos cuya base de la hoja es mas grande que su cabeza y esta hecha de intrincados relieves.

-Soy sir Ragnar , Capitan del regimiento de refuerzo del Duque Drako, teneis 5 minutos para hacer el petate y pagar al posadero , ¡¡¡Venga con brio¡¡¡

-¡Vamos con mas brio, cigarras¡

Al armero....

Un arco compuesto largo,serian unas 100mo,supongo,si tienes uno me lo llevo,y dame un par de carcajs,de tus mejores flechas.....

No creo que de en el blanco ni a un paso de distancia con ese arco,ni esas flechas,los humanos no saben de armas,no serian capaces de distinguir la punta de la pluma ni aunque se pincharan en un ojo....no se como no han desaparecido como especie aun...supongo que por que se procrean como conejos....

Tras las compras,me voy a la posada a recuperarme del esfuerzo de aguantar a tanta purría holgazana y dejar que mis pensamientos vaguen por las adorables tierras de mis antepasados....

Un tiempo después unos golpes impetuosos hacen que salga de mi ensoñación....

No puede ser de otra manera,debería gastar un minuto de mi tiempo en enseñarle modales a ese tipo...pero para que perder el tiempo,el contrato esta firmado y si no sabe mas que ser un grosero cabo chusquero,no malgastare ni un segundo en demostrarle que hay otras maneras de llamar y de convocar a la gente....

Salgo y veo a un arrogante humano,no podía ser de otra manera,con aires de superioridad y haciendo ostentación de un arma que a buen seguro va en contraposición con su hombría y tamaño de "cerebro",dentro de una armadura para protegerse dentro de una taberna de mala muerte,en un pueblo que casi ni aparece en los mapas un tanto decentes......su aspecto asexuado me hace pensar en que genero ostenta tal sujeto,si macho o hembra,aveces es difícil distinguirlos....

Recojo mis escasas pertenencias que ya tenia mas que preparadas y me apresto a salir del lugar,los carros nos esperan y mi caballo también,pues ya me encargue tras regresar de comprar las miseras armas de que así fuese,estando a mi disposición en la puerta....no es que fuese un rocín digno de consideración,pero tras mi mala racha con la economía bastante precaria y la bolsa necesitando una transfusión urgente de oro,no podía permitirme mas que eso,haría su cometido y no daría problemas,eso es lo único que podía esperar y hasta ahora así había resultado....

Un hechizo de adivinación... interesante, interesante... sin duda, y por la forma en la que hablaba, aquel hechicero estaba convencido de lo que decía. Un brillo en su mirada de ojos grises me confirmó que hablaba totalmente seguro de sus palabras. Si más adelante tenía algún encuentro referente con las palabras del hombre, debería cambiar mi visión excéptica hacia ese tipo de magia.

Con la analogía del caballero de Solamnia todo me quedó bastante más claro, aunque tomé como nota aquella historia: mejor no ir por caminos malditos con espectros sedientos de sangre. Al menos en mi caso, parecía que el adivino no había visto nada terrible, lo que era de agredecer. No obstante, el tema del simbolismo religioso me dejó calladamente turbado. ¿Qué podría significar? Más tarde lo pensaría.

Un pensamiento cruzó mente a la velocidad del rayo: tenía que darme prisa. No tenía mucho tiempo y aún quería visitar otro lugar en el pueblo.

- Mmm... muchas gracias por la predicción, Netheril. Es una lástima que no pudiera ayudarme en mi búsqueda, pero sin duda supongo que sus palabras me serán de ayuda en un viaje que se torna muy extraño. Ahora, debo dejarle, pues el tiempo me apremia.

Me despedí levantando la mano en señal de adios y salí de la torre. Me hubiera gustado hablar algún rato más con aquel tipo, pero no tenía mucho tiempo antes de la hora prevista. Eché un último vistazo a la estancia antes de partir definitivamente: sin duda, debido a mi tamaño, aquella estancia llena de libros y objetos raros parecía mucho más grande de lo que realmente era. Adios Netheril. Adios.

Recordando el mapa que el enano nos había mostrado, decidí encaminar mis pasos hacía ese tal Zorro, el prestamista. Los prestamistas eran generalmente tipos de diversa índole, no muy generalmente. Si alguien entendía de asuntos turbios en aquel pueblo sería ese tal Zorro, pues los prestamistas estaban acostumbrados a las miserías de todos y sabían explotarlas a voluntad. Necesitaba un mejor equipo y seguramente aquel tipo tendría lo que necesitaba.

Mientras caminaba hacia el lugar, mis pensamientos, como si tuviera un lado del cerebro dedicado a cada una de las dos facetas de mi vida, se centraron en las palabras que había dicho el tesorero gnomo. Ellos sabían en que andaba metido, sin duda había sido sutil, pero lo sabían. ¿Cómo se habrían enterado? La Mano Azul era una organización bastante privada y sólida.

Me asustaba que supieran más de la cuenta. ¿Tendrían pruebas de algo? Podría meterme en líos... de hecho, a lo mejor todo aquello podía ser una estratagema para desarticular al Gremio. Mmm... ciertamente no había pensado en aquello. Debía ser cauto, sin duda, y en cuanto pudiera, tenía que avisar a algún miembro de la Mano Azul y avisarlos de que los Tres Soles tenían espías o informadores entre nosotros.

Aunque por norma general no éramos violentos, al menos yo, el robo estaba mal visto por esos nobles avariciosos. No podían enteder que el robo podía ser un Arte como cualquier otro.

Mientras cavilaba en estos asuntos, una sombra turbia recorría mi rostro. Quizás la búsqueda de conocimiento había enturbiado mi vista. Debía ser más cauto. Sin duda, guardaría mi faceta menos querida por las leyes a ojos de mis acompañantes. Solo conocerían a un inocente Artífice...