Partida Rol por web

El corazón de Caín

[18] La Orden de Babel

Cargando editor
22/10/2019, 12:37
Gustavo Cortés

Cortés reaccionó a la indicación del muchacho sacando el arma y empuñándola con las dos manos. 

- Monteros... ¿te quedas con el chico? Regístralo y no le quites ojo de encima. Seoane... ¿vienes?

Dicho esto se acercó a la puerta e intentó abrirla.

Cargando editor
22/10/2019, 14:23
.=Corazón de Caín=.

En la tienda Gustavo sacó el arma y se dirigió hacia la puerta del almacén. La abrió con cuidado, apuntando hacia el interior con su pistola en cuanto la tuvo abierta. La luz que entraba desde la tienda rompía la penumbra para mostrar una serie de estanterías de metal repletas de cajas y objetos antiguos. Las estanterías estaban dispuestas en hileras que formaban dos estrechos pasillos por los que pasar. Con cuidado el agente pulsó el interruptor de la luz. No vio el acceso al sótano, así que debía estar al fondo del almacén, después de las estanterías. Había el espacio justo para pasar de uno en uno por los pasillos que formaban y aunque ahora estuviese iluminado el sitio era bastante claustrofóbico.

 

Notas de juego

¿Seoane acompaña a Cortés?

Cargando editor
22/10/2019, 14:27
Javier Durás

En la planta superior el grupo se detuvo ante el estudio de la segunda planta, en cuyo interior estaba Montalbano.

Durás contempló la escena sin expresar ninguna emoción. Ante la pregunta de Gutiérrez se encogió de hombros:

—Agente: le recuerdo que no me han explicado el motivo de este despliegue. Creí que sería por cierto tema de aduanas pero me parece que hay algo más gordo de lo que se me está acusando. Parecen demasiado nerviosos como para que esto vaya de un tráfico ilegal de objetos egipcios. ¿Qué frasco esperan encontrar?

El hombre parecía haber recuperado la calma.

Cargando editor
23/10/2019, 00:17
Guillermo Montalbano

Montalbano esperaba delante del estudio donde los documentos y libros se extendían en abanico. 

—En principio nuestro interés se centraba en su relación con las obras de Bernabe Ablaneda, pero veo que está usted mucho más familiarizado con el tema de lo que esperábamos— dijo señalando a los documentos. 

—Esa cojera señor Durás ¿hace cuanto tiempo que la tiene?

Cargando editor
23/10/2019, 11:24
Angel Gutierrez

Gutierrez dudó un segundo cuando aquel hombre pareció calmarse y comenzó a hablar de aduanas y objetos egipcios de contrabando. Pero la palabra egipcio le trajo los recuerdos del museo subterraneo de Marina Bragante.

- ¿Ha estado recientemente en la zona de Puerta de Hierro o cerca de la calle Estrecho de Corea? - preguntó omitiendo la pregunta del hombre mientras observaba su reacción ante las dos localizaciones de los crímenes anteriores.

El bastón y la cojera les había llevado a pensar que podía ser uno de los partícipes de los crímenes anteriores pero aún les faltaba uno si el zumbado detrás de todo seguía las gilipolleces del libro ese.

Cargando editor
23/10/2019, 14:14
Patricia Monteros

Patricia siguió a sus compañeros a la planta alta, atenta a que no hubiera nadie más allí. Si bien los detectives habían montado guardia, no se le escapaba que el autor de los crímenes había aparecido acompañado en las filmaciones de la casa de Bragante, y, al corroborar que el local tenía sótano, siempre cabía la posibilidad de que hubiera estado escondido allí unas horas antes.

Eso la hizo pensar en que tal vez sus compañeros necesitaban apoyo abajo, más las sirenas cada vez más cercanas, le hicieron descartar la idea de bajar. Quería ver cara a cara a Durás, estudiar sus facciones y reacciones cuando lo interrogaran, intentar atisbar la locura que lo movía, o simplemente descubrir que era un cínico hijo de puta que se había cargado a su jefe y dos personas más, por el solo hecho de poder hacerlo.

Se contuvo de interrumpir a sus compañeros a pesar de que ella lo hubiera dejado hablar. Los asesinos en serie eran narcisistas, necesitaban demostrar su superioridad, pero seguro habría tiempo para ello. Por ahora dejaría que la experiencia de Montalbano y Gutierrez encaminara el interrogatorio, mientras ella permanecía atenta a lo que los rodeaba a fin de evitar sorpresas.

Notas de juego

Están yendo muy rápido XD

@Figaro, yo había declarado que iba al fondo con Gutierrez y Montalbano, así que no estoy para cubrir al chico. 

Me mantengo alerta por si aparece algún cómplice. Si llego a escuchar lío desde abajo voy a correr a ayudar a Cortés y Seoane.

Cargando editor
25/10/2019, 09:53
Aldara Seoane

La verdad es que era la primera vez que estaba en el foco de una operación Huracán de este estilo no es que los nervios pudieran conmigo, era una sensación de subidón de adrelanina supongo.

- Sí, voy contigo Gustavo.

Acompañándole mientras me colocaba los guantes de látex tras él para el registro pertinente, cualquier cosa podía salir de esto y siempre iba preparada para estos efectos.

 

Notas de juego

Me empané, disculpad.

Cargando editor
25/10/2019, 14:35
Gustavo Cortés

Gustavo miró a Adara antes de hacer girar al pomo y asintió a su ofrecimiento para acompañarle abajo. El inspector se aseguró de que algún patrulla ya estuviese entrando por la puerta para que el chico no se quedase solo. No parecía el típico que guardaría una escopeta de cañones recortados bajo el mostrador, como en las películas americanas, pero todo aquello estaba muy lejos de convertirse en una investigación rutinaria y era preferible prevenir.*

Notas de juego

Post para declarar varias cosas...

1. Que no leí que Monteros estaba arriba con Montalbano y Gutiérrez. Lo siento.

2. Que no voy a dejar que el tipo se quede solo. No me fío ni de mi sombra. Chemo... si ves que me he excedido al presuponer que algún patrulla ha entrado y puede echarle un ojo al dependiente me lo dices y lo cambiamos pero creo que es lógico que, antes de entrar al sótano, me asegure de este punto.

Cargando editor
28/10/2019, 11:25
.=Corazón de Caín=.

Notas de juego

Voy a separaros para que la cosa no se nos líe con las conversaciones de arriba y la exploración de abajo. Como siempre podréis verlo todo pero más claro para leer.

Aldara y Gustavo van a la planta baja.

Angel, Guillermo y Patricia a la planta superior.