Me acerco a la oriental, la que chupa pilas, y le sonrío, aunque no parece darse mucha cuenta de ello.
-Hola, yo estuve apunto de hacerme también ese personaje- y al darme cuenta de que eso no tenía sentido con la trama, rectifiqué- digo, ¡hola!
Me pregunté si ella sería la que por fin me haría caso. De momento, he dado de pleno con personas que no contestan. Maleducados.
No separa los dedos de su cargador, pero Cha levanta la cabeza hacia el sonido. Conocía a ese interno, era invisible. No sabe como, pero sabe que igual que todos saben que ella es una cyborg, todos saben que él es invisible.
Hola! Me gusta tu ropa El que no pueda verle no significa que no pueda ser educada.
Empiezo a escuchar voces - Fantasmas? FANTASMAS! - Empieza a correr de nuevo, sin mediar palabras con los mortales... solo en algún momento que mete su mano en el bolsillo de la niña eléctrica, para sacar caramelos y empezar a engullirlos - Me los voy a Comer a TODOS! JAJAJAJAJAJAJAJA - De repente una enfermera llega, le da una pastilla y cae de nuevo en el mueble, todo controlado y con la mirada perdida en el techo - Fantasmas van... fantasmas vienen...
-Sí, es una sábana de esas baratas que se compran al por mayor, estiliza mi figura- señalé a Cha Young y a su vestimenta de hospital- Veo que tú tienes un traje parecido, no como estos tíos, que no sé como los han encerrado con ropa de calle... si esto es un manicomio.
Miré alrededor y solo vi imperfecciones que le restaban realismo a la ambientación.
-Park Chan-wook sí que sabe hacer películas, no como el que está dirigiendo este sitio... espero que no le paguen.
Juan Z. escucha la melodía que entonaba su vecino de celda habitación así que se olvida de Jack dejándolo un momento en paz. -Mmmm, esa tonadilla me suena.... mmmm, mmm, no, no me acuerdo quién la hizo. ¡Hey tío! ¿de quién es ese hit? lo tengo en la punta de la lengua y no puedo acordarme.
Mientras aguarda la respuesta del otro interno, escucha una voz pero no logró localizar a su interlocutor. Sin embargo, su tono y el estilo racional que parece imponer le da una leve esperanza.
-Oye tú, el que has hablado recientemente. Tú pareces muy cuerdo. Se nota que sabes qué es este lugar. Me ayudas a salir? ha habido un error, yo no debería estar acá. Me quieren matar, todos me quieren matar y me han encerrado para poder hacerlo con impunidad. Vamos, sé majo y sácame de aquí.
Murdock se rasca la cabeza tras recibir un chipotazo...Oye niño, no es esto lo que yo quería!!
De pronto una bolsa amarilla repleta de basura se acerca a él y le habla. Murdock se siente feliz: ¡¡¡BOLSA!!! ¡¡¡Y me hablas!!! ¿Quieres se mi amiga? Se pone a vaciarla de desperdicios. Aunque hueles un poco mal, la verdad, habrá que hacer algo...Y se pone a rebuscar a ver si encuentra algo con qué limpiarla.
La voz de un hombre me interrumpe, así que me doy la vuelta, haciéndole un gesto de disculpas a la oriental. La voz procede de un hombre clavo, serio y vestido de negro, como los malos de las películas.
-¿Me dices a mí? ¿Me dices a mí?
Me quedé como dos minutos mirándolo.
-Si me dices a mí estás hablando con el tipo equivocado. Yo me pierdo siempre por estos lados, pero supongo que puedes seguir las flechas esas que indican la salida. Además, éste sitio no está tan mal, a veces nos abrigan con unas camisas calentitas.
La voz parece provenir de una sábana. ¿Una sábana que habla? Juan se pregunta al tiempo que se rasca la cabeza. Pero... las drogas mis dulces me los quitaron al entrar, sigue reflexionando, ¿que está pasando aquí? ¿están todos locos? Bueno, que pregunta tan tonta la mía.
-Oye tío gracias por los consejos. Ahora en cuanto me abran la puerta sigo las flechas, pues quedarme aquí no va on mis planes. Además, nadie me quita mi chupa, menos para cambiarla por una camisa. He dicho
Juan se sienta en su cama y se agarra la cabeza. Al parecer, este día va a ser muy largo y cada vez está mas seguro de que no le será tan fácil salir de allí.
Por fin Murdock decide limpiar los restos de suciedad de la bolsa de basura con una sábana perdida que el viento está llevando de un lado a otro. Al hacerlo, parece que la bolsa se queje, pero no puede comprender cómo eso podría molestarla, así que pasa de las voces. Ya verás qué bonita te dejo, vamos a ser grandes amigos. Dicho lo cual, se mete dentro de la bolsa arrebujándose.
El Pac Man había cogido unas cuantas cosas que no le pertenecían. No importaba, Cha tenía muchas pilas en su habitación. Una eternidad encerrada... Menos mal que tenía un alijo interminable de pilas y baterías.
Si, me ha costado mucho decidir que ponerme hoy. Iría desnuda, porque para mi, la piel ya es un vestido, pero a los que nos vigilan no les gusta que vaya por ahí sin esta cosa blanca, dice mientras mira su camisón.
Ah, y ¿quién es ese Park del que hablas? Muchas veces me llama por telefono, pero le cuelgo, Cha pone morritos, el Invisible ya no la estaba prestando atención.
Volvió a fijarse en sus uñas, esperanzada que por fin terminara de cargarse.
La abuelita sale de su celda acolchada. Sólo lleva 10 días aquí. Desde que ZP le bajó la pensión y le subió el tabaco. Y encima ahora no puede fumarse un “piti” en el bar mientras se toma su orujo mañanero.
-A ver monines ¿alguien me tira un cilindrín? -
Como suele ser habitual, Juan es sacado por dos celadores que lo llevan sujeto por los brazos, mientras este intenta escapar, emitiendo sonidos guturales, y moviéndose de forma descoordinada, hasta que lo dejan de cara a una pared, donde poco a poco se tranquiliza. Una vez tranquilo lo sueltan y se alejan unos pasos para fumar un pitillo mientras controlan a Juan.
Al principio Juan se queda quieto frente a la pared, balanceándose levemente hacia los lados, hasta que pasa a su lado la niña de rosa gritando algo de que llega tarde, momento en el que Jack se gira hacia el origen del sonido emitiendo un gemido bajo que va subiendo de volumen. Pero aunque la niña pasa a su lado, el solo mira hacia el lugar donde estaba la niña momentos antes.
Con movimientos lentos y espasmódicos se dirige lenta pero inexorablemente hacia una pared, hasta que llega hasta ella y comienza a aporrearla mientras gruñe e intenta atravesarla. Hasta que oye voces a su lado, se gira hacia el origen de las voces pero allí no hay nadie, se mueve torpemente hasta que se acerca al vacío y comienza a olisquear al Hombre que se cree visible pero que no lo es, gruñe mientras lo olisquea.
Un hombre de aspecto anodino y con traje corbata intercepta a uno de los celadores en su intento de interceptar a uno de los residentes.
- Amable caballero, ¿podría decirle al doctor que necesito verle? Mire, tiene que ser un error. Un error. Simplemente tengo un problema auditivo, un problema auditivo, sí - ¡¡callaos, estoy intentando hablar con el celador!! - ¿lo ve? Además, con las pastillas, se callan. Y no me hacen quemar cosas, ni hacerle daño a nadie... ya no. Palabrita del niño Jesús.
El celador negó con la cabeza y continuó su ronda. El hombre se pone rojo de ira y comienza a dar vueltas por la habitación, despotricando en un tono de padre enojado. Alza la voz, pero no llega a gritar:
- ¡Es culpa vuestra! ¡No me habrían echado del trabajo si no me hubiérais obligado a prenderle fuego a la cantina! ¡Pirómanas! ¡Traviesas! - se para un segundo, con cara de estar escuchando algo. Asiente para sí - Ya sé que la comida era una mierda, pero tampoco era para ponerse a destruir propiedad de la Empresa... ¡y menos delante de la Junta de Accionistas! ¡Maldita suerte la mía!
John se golpea la cabeza con el talón de la mano repetidas veces, mascullando para sí.
El Lugarteniente general de la Orden Real Galáctica Internacional Avanzada se pasea por el manicomio, con una mano a la espalda y la otra sujetándose el monóculo, sin lente, ya que los dirigentes del manicomio creen que no es seguro darle cristal a los reclusos.
-Así me gusta... Actividad caballeros Actividaaad!
Daba pasos exageradamente largos para recorrer toda la estancia.
-Es conveniente que la moral de las tropas esté alta, las trincheras necesitan hombres y engendros valientes como vosotros para combatir a los Venusianos...
El ganador de 12 Oscares consecutivos, 14 premios nobel y 18 grammys al fin sale de su camerino, esperando las ordenes del director. Pero que condiciones son estas, no hay caviar en la mañana para el desayuno. PFF. Exijo un aumento del 500%. Al final ve un monton de actores tratando de arrebatarle el protagonico, por lo que se acerca a su director a comentarle:Sir Cornelius, al fin ha llegado el hombre que esperaba, estoy listo para eliminar a todos esos venucianos que desean invadir nuestra galaxia. Ya he cargado mi rifle de rayos x, y me he despedido de mi hermosa esposa y mis amados hijos. Esyoy dispuesto a dejar el culo por salvar a nuestra amada Rusia
Tras despachar al tipo calvo y abrigado con una chupa negra cuasifuturista-retro vuelvo a hablar con la china, o coreana.
-¿Park? Dicen que es un director de cine, pero por las pelis que hace yo creo que él es de los nuestros... así que quizá si un día estás muy aburrida siempre puedes coger una llamada suya y reírte de él contándole tu vida.
La chica dice que prefiere andar por ahí denuda. Yo asiento, también prefiero que ella ande por ahí desnuda.
Vamos a SALTAR! SALTAR SALTAR! - empieza a dar brincos mientras grita como loco que es... - LALALALALALALALALALALAL
PASAME LA MORFINAAAAAAAAAAAAAAAAA
Un hombre corpulento aparece por el pasillo empujando una silla de ruedas vacía mientras grita: Soy el jinete nocturno, un tanque de gasolina suicida. ¡SOY EL JINETE NOCTURNO!
Rusia? Querra decir Prusia, soldado!
Tendria que hacerle un juicio de guerra aqui mismo!
Su falta? Ofensa a la patria, traición y regocijo!
hmm es mas. Voy a hacerle el juicio aqui mismo! Escoja a un abogado.
y mas le vale que no sea uno de esos charlatanes lunares ni un gigapollo de Quargon7 como los de la última vez