La guerra del Eón había hastiado al veterano Lao hasta el punto de obviar el protocolo de cara a sus subordinados. Era querido por sus subordinados y cuestionado por sus superiores. Aseguraban que era una persona infame que no impartía disciplina, pero a pesar de su entredicha reputación, nunca pudieron quitarle de enmedio. Era una persona indispensable en el frente. Sin embargo su superior, el capitán Hardeman acostumbraba a coartar su disciplina.
Demasiado trabajo en las últimas semanas habían dado al traste con todo resquicio de paciencia que el teniente pudiera tener. Se había convertido en un hombre pragmático, primando la utilidad de las cosas por encima de tanta disciplina inútil e ineficaz. Él prefería, siempre que podía, acercarse a sus soldados y empaparse de sus experiencias. Era demasiado viejo para estar en el frente y demasiado revolucionario para estar encerrado con los militares de mayor rango. Sentía cada día que pasaba que su cerco se estrechaba y cada vez menos encajaba en aquel lugar, sin embargo sostenía la esperanza que las cosas mejoraran y su rango volviera a relucir como antaño.
perdonad por el error, puse que eran sub-oficiales. Pero en realidad esto son sus rangos.
Darragh Walsh "Rushberg" - Sub-oficial jefe
Rune Johnsen "Myrmidom" - Guardamarina
Para que entendais un poco los rangos os pongo una breve referencia.
Soldado < Sub-oficial 3ª < Sub-oficial jefe < Guardamarina < Teniente < Capitán
Oteé al pequeño escuadrón de Callahan esbozando una sonrisa en mi rostro, aquella gente era digna de mi admiración - Bueno... hablemos de lo que nos conscierne - realicé una pausa para tratar de ordenar mis ideas - supongo que ya conoceis a Rune. Él será vuestro líder a partir de hoy, tanto de éste batallón como de vuestro relevo. Yo no os voy a poder dar más órdenes, almenos por un tiempo. Me han relegado del cargo temporalmente - bajo la mirada - a raíz de los acontecido la semana pasada en el frente me han hecho un consejo de guerra, así que permaneceré por un tiempo a la sombra - volví a mirar a aquellos veteranos soldados - pero no quiero que digais nada al resto del batallón sobre esto, no quiero que ésto os condicione en vuestras labores de defensa del frente - miré a Darrang - y bueno, esa también es la razón por la que Darrang está aquí - saluda sin decir nada esta vez, mostrando respecto al teniente Lao - él es de la Agencia Global de Inteligencia, ha venido para echar una mano en las defensas del frente y para estudiar de cerca al enemigo. En pocas palabras, es el ojo avizor de la NGT. Su veredicto aquí podrá hacer que éste frente sea fortalecido por el NGT o abandonado definitivamente si considera que la ofensiva es terriblemente devastadora - acabo el discurso diciendo lo siguiente - para el resto del pelotón no será más que el sub-oficial jefe. ¿queda claro? - aguardé unos segundos esperando que asintieran
Oso permaneció unos minutos en silencio, contemplando a Lao y sus subordinados. Dejó que el teniente expresara su camaradería, pues había oído cosas de todo tipo hacia su persona. Lao era un tipo polémico, pues se permitía ciertas licencias que en el ejército no eran demasiado bien vistas, pero que a Efraín personalmente le gustaban. Querer charlar con los hombres que sostenían el frente era una cosa bastante humana, y convertían a Lao en mejor persona que otros muchos que decidían el devenir de los pelotones como si comieran bombones. Luego Lao comentó el relevo en los mandos del pelotón, cosa a la que el soldado no tenía nada que contrariar. Eran órdenes y como tales, debían ser obedecidas.
Tras unos minutos, y a riesgo de ser reprendido por XianFeng, Oso decidió preguntar lo que todo el mundo pensaba y nadie se atrevía a pronunciar.
- Señor. Siento faltar al protocolo, pero en este lugar hemos sufrido el ataque de simbiontes completamente fuera de sí, con una capacidad combativa y regenerativa verdaderamente aterradora ¿Se conoce el origen de dicho fenómeno? ¿Existe alguna forma eficaz de combatirlos?¿Hay más casos de tropas que hayan sufrido ataques similares?...- Oso miró al Teniente con una mirada sincera. El día anterior, había estado a punto de palmar a manos de una criatura que no sentía ni miedo ni dolor, y eso preocupa a Efraín mucho... Tal vez demasiado.
Edito un poco porque nos habíamos pisado.
El testimonio de Oso escapaba de mis conocimientos, a mis oídos habían llegado todo tipo de horrores. Pero sin duda esto superaba con creces todo lo que podía esperar, consternado respondí - Algo me comentó Rave ayer noche. Sin embargo no he tenido tiempo de averiguar de qué se trata - miré de soslayo a Darragh, con la intención de que él pudiera arrojar algo de luz a tan entrincada pregunta. Pero nada ocurrió, Darragh me miraba sin soltar palabra, con las facciones tensas, casi parecía tener cara de preocupación más que de asombro. Mientras Rune estaba estudiando cada palabra que decía, confundido por su reacción traté de desviar el tema - pero no os preocupeis, ya están trabajando para dar con una solución - resolví, con la esperanza de que fueran ciertas las palabras que acababa de escupir.
por mi parte me someto al examen medico sin mostrar ningún tipo de inconveniente, puesto que es una orden del teniente.
Estais allí aproximadamente una hora, os hacen análisis de sangre y demás pruebas médicas. La doctora está en todo momento con vosotros, parece estar bastante concentrada en lo que hace. El servicio médico os realizan las pruebas de manera casi automática, como si lo llevaran haciendo toda la vida.
Tras las pruebas se os vuelve a dirigir la Dra. hacia vosotros - Bien, tenemos que analizar las pruebas. Ya pueden irse - dijo en un tono amable y calmado - a la tarde necesitaré hacer revisión de vuestros Engels - tras decir esto se pone de pie, os esboza una sonrisa y se despide cordialmente de vosotros
Nguy está durmiendo profundamente, puede que se le escape algún ronquido...
Ya avisarás cuando me despierto y de qué me he enterado, imagino que lo qué me digan mis compañeros.
El teniente al ver, ahora sí, vuestras caras, decide dejar la amena conversación para otro momento. Se despide de vosotros con un fuerte apretón de manos e insta a sus acompañantes que se retiren.
Oso, a menos que quieras hacer algo más intuyo que te dispondrás a dormir un rato.
¡¡Tú dirás!! ¡¡Estoy petao!!
A la piltra de cabeza.
XDDD
(mientras salimos de allí)- ¿como estas Xianfeng?.
Miré a Callahan y respondí irritado - ¿cómo quieres que esté? - señale a la carpa - ¿tu crees normal esto, amigo?, ¿acaso somos ratas de laboratorio? - mis facciones se tensaban de cólera - ¿qué coño pinta la Dra. Ridel aquí?, ¿sabes quien es? - interrogué brevemente a Rave con la mirada, pero era evidente que no sabía de lo que hablaba - no, claro que no. Esa tipeja trata a los que están mal de la cabeza, además es experta en tratar con los Engels "defectuosos" - me crucé de brazos mientras seguía con mi monólogo - es evidente que alguien nos está tratando de majaras, no sé que sucias intenciones tienen nuestros superiores, pero esto no augura nada bueno, amigo - tras decir estas palabras me quedé mirando a Callahan con la intención de que respondiera a tal encrucijada.
con cara de sorpresa-tienes razón no se quien es, ni de que va todo esto, pero de una cosa estoy seguro no servirá de nada ponernos nerviosos y perder las formas, debemos mantener la calma y ver como se desarrolla todo, no creo que el teniente intente jugárnosla.
Este vendría a ser el aspecto más o menos aproximado de los Engels con los que os habéis pegado.
Mañana continuo la escena
Coño, si tiene mejillones... ¡Mariscada! Es una broma del jugador, si no pega aquí la pongo en otra sección de la partida.
VALE AHORA ME ACOJONO UN POCO MAS..... XDDDDD