Partida Rol por web

El Ídolo de La Pasión

1.0 Taberna El Gato Manchado

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03/10/2009, 17:23
Director

Una de las tabernas con la peor fama de la calle de las 100 tabernas de Altdorf

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03/10/2009, 17:30
Director

Altdorf, Año 2522 del Calendario Imperial.

Hornes, al anochecer.

Ya hacía un par de horas en las que las bulliciosas calles de la capital del Imperio habían dejado de serlo. El sol lanzó tímidamente sus últimos rayos a través de las nubes del cielo otoñal, que se había mantenido encapotado todo el día, tras llover ligeramente a la mañana, lo que provocó que las calles se mantuvieran grises, frías y mojadas durante el resto del día.

Las tiendas y pequeños puestos de los comerciantes, habían abierto desde primera hora de la mañana desafiando al clima y ya habían cumplido con sus tareas diarias, procediendo a cerrar cuando los dueños terminaron con sus jornada de trabajo. El resto de la ciudad, al igual que ellos, había procedido a terminar el día regresando a su hogar y a dejar las calles para los que no tenían un techo bajo el que cobijarse y para los que practicaban otro tipo de oficios que se llevaban a cabo, no a la luz del sol, si no bajo las misteriosas Mannslieb y Morrslieb, siempre que las nubes lo permitían.

Esta era una de esas noches en las que la claridad de las calles había sido limitada por el caprichoso deseo de las nubes y las dos lunas se mantenían ocultas tras ellas, dejando el trabajo de la iluminación a los faroles que se encontraban desperdigados por las calles y a la luces provenientes de las ventanas de casas, posadas y tabernas que continuaban su negocio, más allá del horario de la mayoría de comercios.

Y era en uno de estos locales, concretamente en El Gato Manchado, en donde ciertos individuos iban a reunirse a esas horas con Sigmund, el criado de cierto rico comerciante, para hablar sobre los detalles de un trabajo que podría servirles para conseguir sus propositos.

El local, con una puerta de entrada pequeña, de techo bajo y sin ventanas, salvo por las escasas aberturas entre los tablones de madera que constituían las paredes que daban a la calle , era sucio, maloliente y oscuro, apenas iluminado por unos pocos faroles y velas. Repleto de mesas y taburetes bajos ,el humo del tabaco de muchas pipas viciaba el aire con una espesa nube que llenaba la taberna y el poco serrín del suelo intentaba absorver infructuosamente la humedad dejada por la suela del calzado mojado de la clientela, así como diversos tipos de sustancias de origen desconocido que mezclaban su desagradable olor con el del humo. La clientela del bar, constituida por un nutrido grupo de hombres llenos de cicatrices y tatuajes y alguna mujer de dudosa reputación, miraba a la puerta cada vez que alguien entraba para luego continuar con sus temas de conversación.

Notas de juego

Cada uno ha llegado por su propia cuenta a la taberna, de modo que hasta que esteis juntos marcad vuestros post-s para que sólo los vea yo, no teneis ni idea de quien es Sigmund, pero vuestros informadores os han dicho que pregunteis allí mismo por él.

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03/10/2009, 22:33
Larymian Lari
Sólo para el director

Larymian entra a la maloliente taberna, y nota los ojos de los mercenarios posados en ella, aunque instantes después parece que vuelven a lo suyo... Mira por toda la taberna, y se acerca al tabernero/a:

- Vengo buscando a Sigmund. -le susurró al oído Larymian, que iba encapuchada con su tunica de viaje negra.

Notas de juego

La letra así en cursiva queda muy bien. Tomo ejemplo ;D

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04/10/2009, 13:09
Ruy De la Vega
Sólo para el director

La noche era fría y húmeda. Más húmeda del que los huesos del bueno de Ruy pudieran desear. En día como aquellos, grises, oscuros, lluviosos y resumiendo en una sola palabra, altamente feos, el corazón del estaliano echaba algo de menos el siempre radiante sol de su hogar.

- ¡Cuan lejos se hallaba Magritta de aquí!¡Qué diferente era de estas gentes del imperio!.-  pensaba de forma ensimismada. Las tabernas de Altdorf, jamás se podría comparar a las cavas o tascas del Barrio de Santo Tomás. El carácter hosco y frío de estas gentes invitaba poco a la guasa y la fiesta. Porque, ¿qué era sino la vida?... Mas que una sucesión de jarana y alegría. Para tristezas, ya existía el hambre, la peste y la guerra, y por ahora,... de todas ellas había escapado con vida... 

Lo que ya no tenía tan claro era si iba a salir ileso de sus deudas con Farny. Trescientas coronas tenían la culpa. Trescientas coronas y su mal vicio del juego, claro está. Pero como se solía decir en Estalia: "todavía no estaba vendido todo el bacalao". Con lo que Ruy, no iba a quedarse parado esperando a que "don seboso" viniera a marcarle la cara o algo mucho peor.

Le ofreció la oportunidad de trabajar, finando la vida de personas, pero él, era un caballero estaliano, no un asesino de mala madre tileana. Tenía orgullo para no dedicarse a eso y mucho más. Éra un rufián, sin duda, pero con clase.

Así que allí se hallaba, ante la puerta del Gato Manchado, un tugurio de mala muerte, intentando contactar con Sigmund. Al parecer su amo necesitaba personas para recuperar algo...

La paga era sustancial, con lo que no iba a andarse con chiquitas.

Entró en su interior y una bocanada de aire turbio y enfermizo le vino a la nariz aguileña. Mucha gente, le miraba con recelo y sorpresa, a lo que Ruy siempre respondía con una amable sonrisa y una reverencia de hidalgo. Se aproximó a la barra y llamó la atención del tabernero. Cuando estubo lo suficientemente cerca,le dijo:

- Estoy buscando a un parroquiano habitual de estas lindes, señor. Su nombre si no metraiciona la memoria es Sigmund. Sabría decirme, ¿dónde se halla en estos momentos?- pregunta el taimado jugador.

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04/10/2009, 17:05
Joss
Sólo para el director

-El gato manchado, que estúpido nombre para una posada- Miraba Joss el cartel de la posada mientras sacudía una de sus botas mojada por pisar un charco.

Hacía frio y la humedad le calaba los huesos, el viento le soplaba en la espalda como si le invitara a entrar a aquel tugurio de mala catadura infectado de malos olores y humanos apestosos.

Al fin entró y pudo calentar su torso desnudo solo cubierto por una sucia capa. Joss había decidido que si los gigantes no podían con él, tal vez lo haría una pulmonía. A parte del calor pudo deleitarse también con las fragancias que bien podrían provenir del culo de un troll y que a la gente no parecía molestar.

Se detuvo solo entrar y oteó curioso el panorama. Soltó un inperceptible gruñido de aprovación y se acerco con pasos firmes al primer parroquiano que no pareciera ni muy borracho ni muy de fuera, alguien que tal vez le pudiera decir quien de toda esta escoria era Sigmund y así ahorrarse el preguntarle al posadero (totalmente estupido por su parte, ya que el posadero era el candidato ideal. Pero Joss era así, así de estúpido y así de tozudo).

-¡Eh, tú!- Apoyó las dos manos sobre la mesa dejando caer el peso de su cuerpo hacia delante y así encararse con el parroquiano -Dime quien es Sigmund, he de verle de inmediato- Joss tenía muchas virtudes, pero la educación y la paciencia no eran una de ellas.

 

Notas de juego

 espero respuesta del parroquiano, no se si será un Pj, el propio Sigmund o alguien cualquiera

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05/10/2009, 02:30
Jekil Finster
Sólo para el director

Por fin, había llegado la hora del encuentro con Sigmund. No es que estuviera ansioso por empezar el trabajo, lo estaba por ocupar sus pensamientos y mantenerse concentrado en algo que no fuera la muerte de su padre. Aquel hecho estaba suponiendo un castigo bastante difícil de soportar. Rara era la vez en la que pasaba una semana y Jekil no había aceptado algún encargo. Siempre que tenía alguno se mantenía concentrado al máximo en éste. Quizás éste fuera el motivo por el cual tenía una buena reputación como cazarrecompensas.

Pero ahora en Altdorf, Jekil, no gozaba de esa buena reputación que tanto le había costado ganar. Buena prueba de ello era la taberna en la que iba a encontrarse con Sigmund. La imagen que ofrecía la fachada de la taberna no invitaba a entrar, de todas maneras no era un problema para Jekil.
Al entrar pudo comprobar que, en ese caso, las apariencias no engañaban. No pudo evitar que al entrar unas cuantas miradas se clavaran en él. Siempre prefería pasar desapercibido, aunque no creía que su aspecto fuera a llamar la atención en aquel antro. Se encaminó tranquilamente hacia la barra, desde allí observó unos minutos. Cuando llegaba a un lugar nuevo le gustaba observarlo todo a su alrededor, en especial a la gente. Tras el pequeño estudio de los parroquianos del lugar, con un gesto firme de su mano, Jekil intentó llamar la atención del regente del local.

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05/10/2009, 14:42
Gustav Johannsen
Sólo para el director

El joven se detuvo unos instantes frente a la puerta del, antro, podríase decir, y entrecerró los ojos para ver mejor si aquel era el lugar en el cual tenía que encontrarse con...Sigmund, o Segismund, no lo recordaba muy bien. Decidió que si, que debía ser aquel, pues aunque el cartel no tenía nada escrito, en él se veía un gato encrespado, y como la entrada del lugar era casi como un estercolero, El Gato Manchado era el nombre perfecto.

Subió con cautela los pocos y resbaladizos escalones hasta la entrada, sacudió sus botas en el dintel para quitar algo de barro, y empujó la puerta. La vaharada de humo y calor le sacudió la cara, y su nariz se arrugó con la terrible mezcla de olores que el humo traia consigo. La parroquia se giró para ver quien era el que cruzaba la puerta, y Gustav se sintió estudiado, aunque solo duró un instante, pues de nuevo los alli presentes volvieron como si nada a sus asuntos. El joven buscó algo parecido a un perchero para dejar su chaqueta larga y la mochila, ambas mojadas por la lluvia del dia, pero al no encontrar nada parecido, decidió buscar un taburete vacio, dobló la chaqueta y la puso, con la mochila encima, sobre este. Luego se acercó otro para sentarse y mientras buscaba con la mirada al tabernero para pedir un vino caliente, se preguntó si el tal Sigmund, o Segismund, al cual aún no había localizado, habría llamado a más gente para hablar de aquel asunto del robo. Puede que de paso, conociese a personas con el temple suficiente para ayudarlo en el cometido que tenía en mente...

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05/10/2009, 18:38
Tabernero del Gato Manchado

El tabernero de encontraba limpiando distraidamente una jarra de cerveza cuando la chica se acercó a preguntarle por la persona que había ido a buscar.

La miró de arriba a abajo y su cara demostró un curioso interés por la muchacha, delatando que se había dado cuenta de que no era de por allí o al menos, no una cliente habitual de su taberna.

-¿Está buscando a Sigmund? Le preguntó y acto seguido le respondió sin esperar su respuesta Si claro, se encuentra en aquella esquina de allí, ese viejo ya me avisó de que vendrían preguntando por él y me pagó por indicar quien era.

Sin darle mayor importancia a la situación, dejó la jarra que acababa de secar y se puso manos a la obra con otra.

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05/10/2009, 18:45
Tabernero del Gato Manchado

Cuando Ruy se acercó al tabernero, pudo observar a una joven encapuchada que hablaba con este, quien la miraba de arriba a abajo y su cara demostraba un curioso interés por la muchacha, delatando que se había dado cuenta de que no era de por allí o al menos, no una cliente habitual de su taberna.

Al acercarse y formular la pregunta se encontró con que el tabernero le estaba dando la respuesta a la misma pregunta a la joven:

-¿Está buscando a Sigmund? Le preguntó a la joven y acto seguido le respondió sin esperar su respuesta Si claro, se encuentra en aquella esquina de allí, ese viejo ya me avisó de que vendrían preguntando por él y me pagó por indicar quien era.

Sin darle mayor importancia a la situación, dejó la jarra que acababa de secar y se puso manos a la obra con otra.

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05/10/2009, 18:50
Larymian Lari
Sólo para el director

Larymian sin dar siquiera las gracias, y pensando en lo rico que debía ser ése hombre si pagaba a un tabernero para indicar que estaba en una esquina en vez de recibirles él en la entrada, se dirigió hacia la esquina que había indicado el tabernero, pasando de cerca por la mesa donde los mercenarios, para dar una ojeada a lo que hacían o hablaban allí, aunque tampoco era demasiado importante. Debían esperar a alguien, nada más.

Notas de juego

EDITADO POR EL DJ: He hecho un apunte sobre lo de las cursivas y las negritas en la escena Mesa de Juego.

No me molesta que hayas escrito estos dos post-s en cursiva, pero te comento esto para que te limites a usar las cursivas como he mencionado, por comodidad ;)

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05/10/2009, 18:50
Cliente del Gato Manchado 2

Las jarras de cerveza de la mesa se zarandearon y una casi cayó al suelo cuando el matador golpeo con fuerza la mesa al apoyarse en ella. Los hombres allí sentados lo miraron con desprecio lanzando juramentos y maldiciones y uno estuvo a punto de hablar, pero el hombre al que Joss había preguntado lo interrumpió contestando a su pregunta.

-Vigila tus modales enano, si no quieres acabar tus días en un callejón olvidado. Le respondió amenazadoramente pero sin poder evitar mostrar un ligero temblor en su voz, al ver la impresionante y musculada figura de Joss El viejo al que estás buscando se encuentra sentado en aquella silla le dijo señalándolo indiferentemente con el dedo mientras sus 3 compañeros observaban la escena.

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05/10/2009, 18:57
Tabernero del Gato Manchado

El tabernero se encontraba limpiando una jarra de cerveza cuando Jekil le hizo el gesto para llamar su atención. En el momento en el que este lo vio, le preguntó sin soltar la jarra y el trapo:

-¿Que le sirvo caballero?

Formuló la pregunta mientras caminaba hacia su dirección detrás de la barra.

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05/10/2009, 19:00
Tabernero del Gato Manchado

El tabernero se encontraba limpiando distraidamente una jarra de cerveza cuando reparó en Gustav, pero otro hombre ya había reclamado su atención. En el momento en el que lo vio, le preguntó sin soltar la jarra y el trapo:

-¿Que le sirvo caballero?

Formuló la pregunta mientras caminaba hacia la dirección del otro hombre por detrás de la barra y le hacía una seña con la mano a Gustav para indicarle que en seguida lo atendería.

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05/10/2009, 19:50
Ruy De la Vega

Ruy miró a la joven. Si buscaba a Sigmund, seguramente acudiera a sabiendas de la oferta de trabajo. El truhán estaliano, tenía un buen don de gentes. En cierta forma, no solía buscar problemas directamente y con respecto al sexo femenino, se podía decir que era una persona resuelta en esos tipos de menesteres. De esta forma, decidió "envidar a la grande" y con su jovial sonrisa, se acercó a la muchacha. Se colocó delante de ella y con una excelsa reverencia de su sombrero le dijo:

- Perdone que la interrumpa señorita, pero me ha sido imposible resistir la tentación de escuchar su conversación con el tabernero. Creo que ambos buscamos a la misma persona el susodicho Sigmund. Para este caballero estaliano, don Ruy De la Vega, sería un placer acompañarle en esta reunión que espero nos reporte un buen jornal, ¿qué me dice?- finaliza su pomposa presentación.

Notas de juego

Supongo que la muchacha es Larymian. Si no es así corrígeme.

EDITADO POR EL DJ: Efectivamente, es ella, supuse que no era necesario especificarlo y por eso no lo mencioné ,ni dije nada sobre empezar a marcar destinatarios ;)

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05/10/2009, 20:03
Larymian Lari

Larymian no se esperaba tanta cortesía en una taberna como ésa. Se dirijió a Ruy de la Vega:

- Supongo que no hay nada de malo en tener a un hombre como vos a mi lado. -dice la aún encapuchada chica.

Y rodeando a Ruy de la Vega, se dirije donde su destino aguarda, hacia Sigmund.

Notas de juego

Perdoneme master! Pensé que quedaba bien la letra en cursiva xD

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05/10/2009, 20:29
Ruy De la Vega

Ante la afirmación de muchacha, Ruy extiende uno de sus brazos mostrando el camino y comenta:

- ¡¡Las damas primero!! - con un aire serio y solemne.

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05/10/2009, 23:26
Joss
Sólo para el director

 Joss volvió a gruñir de forma que daba su aprovación a la información recibida y sin levantar sus cuerpo de la mesa miró en la dirección donde debía estar Sigmund. Observó al viejo y supuso que era él.

El robusto enano liberó entonces su peso bruscamente de la mesa haciendo que las jarras se zarandearan de nuevo -Tómate algo, invito yo. Y de paso pídeme lo mismo-

Joss abandono a sus nuevos "amigos" sin más palabras y de nuevo, con la firmeza que solo un soldado enano es capaz de tener, se encaminó Hacia Sigmund

-¿Eres Sigmund?- Preguntó sin más vacilaciones, es decir, como siempre, rudo y directo.

Notas de juego

si aceptan la invitación y cuando el tabernero nos sirva, dime lo que cuestan las consumiciones que me borraré el dinero

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05/10/2009, 23:10
Jekil Finster
Sólo para el director

Jekil esperó hasta que el tabernero estuvo frente a él. Sabía que el encargo, por el cual se encontraba en ese lugar, estaba relacionado con ladrones por lo que debía extremar precauciones. Apoyó el antebrazo derecho en la barra para poder inclinarse y tener más cerca al tabernero. No pretendía andar susurrando pero tampoco quería que ningún oído ajeno se enterara de cual era su cometido en la taberna.

-Sírvame una cerveza-Realmente no le apetecía tomar nada pero sabía que, aunque no le pagara directamente por la información, el tabernero hablaría mejor con algunas monedas en su bolsillo- aunque a quien realmente estoy buscando es a Sigmund.

Notas de juego

Akrabu se que estarás liado y tal pero cuando tengas un hueco dime como me queda el tema del equipo y el dinero, ya sabes por lo que te comenté. Supongo que dinero para una cervecilla me habrá quedado ¿No? XD. El tema de gastos ¿Lo apuntamos en algún sitio, lo restamos nosotros o eres tu el que se encarga?.

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06/10/2009, 00:15
Gustav Johannsen
Sólo para el director

-Un vino caliente, por favor!

Respondió el joven al tabernero, aunque al que observaba era al otro individuo que se le habia adelantado. Sería quizás Sigmund, o Segismund...?

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06/10/2009, 19:13
Sigmund

El grupo de hombres murmuró complacido por la invitación de Joss y cuando el que le había indicado quien era Sigmund recibió las monedas para la bebida, no dijo que no a la invitación, preguntando a todos lo que querían tomar y procediendo a levantarse para ir a la barra.

El hombre indicado se encontraba sentado en uno de de los rincones de la taberna bebiendo tímidamente de un vaso y sin dejar de mirar a Joss, a quien, como todo el mundo, ya había echado el ojo nada más entrar.

Según se acercaba terminó de beber y dejó el vaso en la mesa para recibirlo, con las manos unidas formálmente sobre la mesa. De edad avanzada, pelo cano y ancha frente a causa de la perdida de cabello en la zona delantera de la cabeza, se veía una vigorosa energía a través de sus ojos, solamente provocada por una buena actividad física. Sus ropas eran elegantes, pero adecuadas para no llamar mucho la atención en el lugar.

Esperó a que el enano se acercara y hablara primero, levantándose para tenderle la mano y responder a su pregunta:

-Así es matador, supongo que has venido por el trabajo que ofrece mi señor ¿Verdad?

Notas de juego

Tranqui, ya te lo descuento yo mismo ;)