Partida Rol por web

- Como no - dijo Dholmer como mucha educación a Zaius, luego se fue a la cocina y volvió con lo que el clerigo le habia pedido - Aqui tiene señor - dijo alzando la mano con el pedido.

Gracias Señor Dholmer, es un placer como nos atiende. Si vuelvo a pasar por aquí, será donde querré estar.

Le pago y, sonriente, le doy un afectuoso estrechamiento de manos, aunque no demasiado fuerte, lo que resultaría ordinario y desagradable para alguien de su tamaño.

Bien, caballeros, si quieren que nos pongamos en marcha, yo ya estoy listo. Mientras, me apuro el zumo degustándolo con placer.

Terminando su desayuno a toda prisa Corintur se levanta de la mesa y agarra sus cosas.

Supongo que no deberíamos demorarnos más, el druida espera, mientras antes empecemos...

¿En serio queremos ir a darnos de ostias con gente que no conocemos por motivos que no nos incumben?

¿De verdad?

¿Y si una generosa paga de por medio?

Jejeje, es el destino del soldado, cobrar poco y repartir mucho. Unas veces nos lo ordena el capitán y otras nos lo pide un amigo. Jejeje. Nuestra vida es así. Pero a mi me agrada saber que ayudo a buena gente, ya he asumido que no voy a salir de pobre, compeñeros.

no os preocupeis que la paga sera generosa si cumplimos la mision con exito.....yo esoy listo si los demas tambien lo estan pues entonces vamonos sin dilacion ..dije con uan sonrisa en mi cara y llendomeenbusca de la llama

Y ya que vamos a hacer el capullo ayudando a un desconocido... lo minimo sería aprovisionarnos bien y adquirir quizas una montura o dos, ¿no?

Buena idea. No querréis que un viejo tenga que caminarse todo el permiso. Señor, Dholmer, perdone que le moleste de nuevo, podría decirme dónde encontrar monturas a buen precio.

Al compañero con la voz más baja: Creo que esta vez te referías a equinos, no es así, Arcturus? Jejeje.

- La verdad señor es que aqui no hay ningún lugar donde puedas hacerte con montura - dice este. Mientras pasa un trapo mojado por encima de la mesa.

En ese caso será mejor partir ya. Gracias por todo señor Dholmer. Que Elhonna le bendiga.

Salgo de la posada y miro al cielo y respiro el aire libre. Umm, nublado o soleado creo que es un buen día para... caminar, me temo. Jejeje.

- Tengan ustedes un buen viaje - dijo este mientras hacia una pequeña reverencia.

Espero que el lugar se entibie un poco más y el frío no me obligue a quedarme nuevamente cobijado. Voy tomando las prendas y vistiéndome rápidamente para que el calorcito que tengo encima no se escape. - Bueno, nuevo día, nuevas fuerzas. -

Acomodo mis pertenencias para disponerme a bajar, tampoco es que sean un montón de cosas, pero las que tengo las ordeno. Bajo sin más ha la posada y espero poder encontrar a mis compañeros, seguramente algunos de ellos se levantarán más tarde por la gran fiesta que se han dado anoche.

Fue salir de aquella posada y ya empezaba ha tener nostalgia de unos los dias libre, sabia que no tendria mas dias libre durante mucho tiempo.

Cuando estaís a punto de salir de la posada, veis bajar al mago que todavía se encontraba en la habitación, parece ser que había tenido un buen descanso, pues se habia levantando bastante mas tarde que vosotros.

Hola Dragus, quieres comer algo, puedo compartir mi desayuno si quieres. Vamos a ver al druida, estás listo?

Corintur salió de la posada y volvió a quedarse encandilado con los juegos de manos de los gnomos del pueblo.

Loy, no hay tiempo que perder. - espetó el elfo.

Supongo que deberíamos parar en el próximo pueblo que encontremos a comprar provisiones y monturas, ¿no?

- ¿Ya? - No termino de bajar que ya me están llamando a irnos. - ¿Pero por qué tanta prisa? Déjenme tomar algo antes, así por lo menos me saco la pasta que tengo por saliva. - Miro al cantinero un momento mientras sigo avanzando, esperanzado de que el pudiera socrrorerme antes de ir a dar vueltas por ahí en este estado.

si quereis y estais cansado del viaje sin problemas podeis descansar a lomos de mi llama....antes era muy arisca pero ya se a vuelto docil y no tendreis probelmas de ir a lomos de ella...dije mientras me dirigia a ellos caminando y con las riendas en mi mano

- Aquí tiene mi buen amigo, tiene razón será mejor que desayune pues no es buena costumbre en nuestro pueblo trabajar sin meternse nada en la barriga - dijo este mientras de servia un buen desayuno al mago.