Partida Rol por web

El gran comedor se sitúa en el extremo Oeste de la Academia, lejos de los dormitorios, y aulas de estudio.
A través de sus ventanas, luz tenue se cuela de forma perezosa y casi imperceptible. Es por ello que son necesarias algunas lámparas para poder iluminar mejor el lugar, pese a que algunos rumores señalaban que cuando no había nadie, el comedor era iluminado simplemente por unas cuantas velas, cosa que no tenía sentido... Porque... Si no había nadie... ¿Para qué era necesaria la luz?
Es un misterio...

Varios cuadros con retratos de los fundadores del instituto y alumnos antiguos destacados en su labor al mundo (o simplemente exitosos), prestaban sus imágenes para decorar las paredes altas y señoriales de la sala, aunque algunos dicen que no están ahí para decorar, sino más bien para vigilar, puesto que "más de uno ha visto cómo, en plena noche, esos retratos cobraban vida propia"... Pero... Claro... Después de ello, aquéllos testigos nunca volvieron a ser los mismos, así que... Posiblemente no sean muy fiables sus palabras...

Las mesas en las cuales los alumnos comían, estaban separadas en secciones que se correspondían a su clase; estaban hechas de una fina madera, puesto que circulaba una historia de que, cuando eran de roble macizo, una de ellas cayó sobre el cuerpo de un alumno causándole la muerte tras algunos segundos de agonía...
Pero... ¿Qué era verdad o no?
Nunca lo sabremos...

La mayoría de las historias, quizás surgieron por nimiedades, como "manchas de sangre en una mesa", o "sombras danzantes en la noche", que, por supuesto, no son nada preocupante...

Sea lo que sea que haya pasado en ese comedor, jamás se ha confirmado o desmentido...

Así que...

¡Disfrutad de la comida, pequeños míos!

Nada más entrar, los estudiantes comprueban cómo cada clase posee su propia mesa para sentarse...

En cada una de las largas y enormes mesas, diversos tipos de comidas (desde ensaladas, a diferentes carnes, pastas, y otros tipos de comida y hasta lo realmente inimaginable), se extienden por sus superficies...

Los alumnos pueden comprobar cómo los estudiantes de otros cursos superiores toman posesión de sus asientos respectivos, así como "la mesa de los profesores" también se va llenando poco a poco...

En ésta última, los jóvenes divisan a sus tres tutores, de entre los cuales, Isabella se levanta, para pronunciar unas breves palabras:

Sonriente, y con una copa en la mano, la distinguida tutora de 1º C, deja que las palabras surjan desde lo más profundo de su garganta:

-Bienvenidos seáis, a nuestro Comedor... Esperamos que vuestro inicio de curso se haya dado con buen pie y que no hayáis tenido ningún problema respecto a las habitaciones...-realiza una pausa, y continúa:-Durante el curso veréis que habréis de acudir a esta sala, normalmente, tres veces al día, para el desayuno, la comida, y la cena... Siempre encontraréis diversos tipos de comidas con sus indicaciones al lado... Por si alguien es alérgico a algún elemento culinario... Claro está...

Vuelve a sonreír, y añade:

-Sin más, no dejéis que el apetito os avergüence, y disfrutad de todo lo que ha sido preparado para vosotros...-Alza levemente la copa en mano, y vuelve a sentarse...

Con esto se inicia la comida y ya todos pueden gozar de las delicias cuidadosamente preparadas...

Arhyan entra en la sala, con aire distraído, y realmente ausente...

Vaga por entre las mesas, hasta encontrar la correspondiente a su curso, y se sienta en el largo banco que bajo a la misma hay...

Suspira, y espera a que los demás lleguen, para ver si conoce a alguien de los allí presentes...

Cuando el breve discurso de la tutora de 1º C ha concluido, los estudiantes comprueban que, realmente, el número de jóvenes es grandioso, entre alumnos de primero, segundo, y tercero...

Entre las mesas de otros cursos, algunos logran distinguir a Fye y Renge, los guías que les llevaron a las habitaciones... Al parecer, pertenecen al segundo curso, puesto que están situados al medio de la sala... Y si ellos están a la izquierda... Los de tercero deben de ser, con toda seguridad, los que están sentados a la derecha...

Camino hasta sentarme en la mesa que me corresponde, la de mi clase. Me siento en una de las sillas, y viendo que soy el primero, saco mi libreta de notas para continuar apuntando las cosas que me han sucedido en la Sala Común.

Es extraño... pero tengo un hambre que me muero... El miedo me da hambre...

Entro a la gran sala, aun chorreando agua, cada pasó es el ruido del agua al chocar contra el suelo, su camisa roja brillante ahora es opaca por estar mojada al igual que su jean, sus cabellos están pegados a su rostro, algunos se voltean extrañados otros lo ignoran, busca en su mesa a Antha, pero al ver que todavía no a llegado, decide sentarse en cualquier lugar de los de 1ro

Entra tras el ruso Yuriy el cual venia empapando todo a su paso, el paso del chico era lento y al ritmo del ruso sin mucho animo en realidad y una frialdad en su rostro que adornaba su expresión de indiferencia hacia cualquier ser cercano, no se estaba fijando mucho en por donde iba y sus cabellos oscuros tenían un rastro de haberse mojado levemente mientras que las manos del chico estaban guardadas pulcramente en sus bolsillos.
Luego de unos cuantos minutos después de haber entrado al Gran Comedor su vista empezó a visualizar todos y cada uno de los lugares y rincones de la habitación los cuales no llamaban mucho su atención excepto un alma ahí sentada en la mesa de la clase del "1°A", una chica con un rostro hermoso y cuerpo de ninfa casi sacada de lo mas profundo de los sueños del joven de ojos oscuros, ojos solo tenia para ella mientras que para otros importancia no causaba a Ryuzaki camina aun con fría actitud hasta pasar por detrás de la joven de platinos cabellos se detiene y pasa su mano derecha la cual había sacado con anterioridad de su bolsillo para acariciar el cuello de la chica causando sorpresa en ella ante la acción sin aviso, acerca su rostro hacia el de la chica rozando sus labios con la pálida piel del rostro de ella dedicándole unas tibias palabras antes de proseguir su camino, ya que no podía estorbar en el camino de los demás alumnos...Al terminar de pronunciar aquel susurro continua su camino sin voltear su mirada y mostrando su túnica negra algo vampirica para el pensar de alguna que otra persona y tomando asiento en el lugar correspondiente para él.

-Temía el no poder verte nuevamente, deseaba encontrarte pronto y tenerte cerca mió aunque fuera un segundo, un simple instante me satisfacía para poder calmar tantas ilusiones que sin ti no podría aguantar...Al fin pude verte de nuevo mi bella princesa...

Alexander entra en el comedor y no puede evitar pararse a echar un buen vistazo. Guau, eso es enooooorme! -exclama, haciéndose oír por encima del murmullo de sus compañeros. Al darse cuenta de su infantil actitud, intenta remediarlo bajando la vista y haciéndose el mayor, aunque de poco le sirve. Con un trotecillo alegre, se va a la mesa de 1ºB y se sienta junto a sus compañeros. Saluda con un gesto de cabeza y una sonrisa a los mayores.

Ayu entra junto a Hyuga y Umma al Comedor. Se queda con la boca abierta mucho rato observando el enorme y elegante comedor mientras da vueltas.

¡Andá! ¿Habéis visto lo grande y clásico que es esto? ¡Parece un palacio! Exclama después de un silbido poco femenino. Por suerte los 3 estaban en la misma clase y se pudieron sentar juntos. ¡Yuju! ¡Comida! Qué buena pinta tiene todo... Dice emocionada y se sienta para servirse un plato que nadie diría que podría comerse.

Umma había entrado distraída justo detrás de Ayu y cuando ésta se paró para admirar la grandeza del salón, Umma no logró frenar a tiempo y pisó sus talones dándole un leve empujoncito.

-Huy, lo siento Ayu! -Se disculpó. Entonces se dispuso a observar junto con su compañera de clase y dormitorio todo el lugar de arriba a abajo. -Es un lugar demasiado solemne! Miren qué grande es todo esto! -Ya su amiga se había separado para buscar un asiento y comenzar a servirse en su plato. Umma aún permanecía a un costado del pasillo observándolo todo.

Nada que ver con la modestia y humildad de su hogar. Pensar eso le dio añoranza de su casa, por más que hacía tan solo horas les había dejado. Igual ya extrañaba a su madre y hermano. Dio un gran suspiro y su rostro mutó a una faceta melancólica. Se volteó y vio que Sato permanecía detrás de ella. Se encogió de hombros e hizo una sonrisa forzada. -Vamos a sentarnos con Ayu. -Y hacia allí se dirigió para tomar asiento al lado de la chica que ya comía. Tomó su plato y decidió colocar en él una cucharada de ensalada de arroz y un poco de pollo.

-El día que vine a solicitar los papeles para mi inscripción escuché a unos alumnos hablar sobre las cosas que se cuentan de éste lugar... -Dijo por lo bajo, quizá para apartar de su mente la añoranza de su familia. -Me han parecido muy tontas...

Antha entró en el gran comedor todavia portando su intrumento en su espalda y a Pandora entre sus brasos.

...vaya...esto es más enorme de lo que pense...- Pensó mientras miraba a su alrededor detallando el enorme comedor del instituto. Los cuadros en las paredes la inquietaban un poco, se sentia enormemente observada. Antha luego buscó la mesa de su salón correspondiente y notó a Yuriv en la parte lejana de la mesa. Antha se dirijio hacia el y al llegar al asiento al lado de él, solto a Pandora y coloco su violoncelo debajo de la mesa para no generar estorbos.

Antha se sentó y luego volteo a mirar al ruso, y fue en ese momento que noto el peculiar aspecto del mismo. ...Vaya...no sabia que hubiera una piscina en el instituto tambien...luces hermoso... dijo en tono de sarcasmo sonriendo levemente.

-Es una larga historia, pero lo de mojarme no fue idea mía, agradeceselo a aquellos dos
Levantando la mano y señalando a Ryuzaki y Alejandro... levanta una ceja y sonrie ante el comentario adulador
-No necesitas esconder tus sentimientos asía mi detrás de tonos sarcásticos... dime que no puedes resistirte a ver mi cuerpo mojado y te encantaría ducharte conmigo...
Mientras sacude la cabeza de lado a lado como perro, mojando levemente a los que están cerca
-Por cierto les a pasado algo extraño a ustedes en su habitación?? algo relacionado con una especie de humo??

Lilith entró con la serpiente enroscada en el cuello por el final de la cola y con la cabeza reponasdo en el hombro.

Se acercó hacia donde estaba sus compañeros.

Vaya, no sabía que si riegas a las personas, crecen como las plantas... Sonrió divertida al ver el aspecto de Yuriy.

Luego miró a Arhyan de un modo extraño, como si ocurriese algo, pero le hizo un gesto con la mano mientras caminaba hacia ella para sentarse en la mesa de su clase..

Arhyan, ¿te importa si me siento contigo? Le preguntó. Era con quien más había hablado quizás de su clase.

Mitsuki entró en el salón comedor junto con Miwako y Akane,mientras una de las profesoras explicaba la distribución de las mesas.

La joven se dirigió hacia la mesa correspondiente al primer curso,observando con interés la arquitectura y decoración del salón.Al pasar junto alas mesas de tercero y segundo apretó bastante el apso,nerviosa por estar con gente más mayor,por ser nueva en el lugar.

Sin embargo,al llegar a la mesa de primero se calmó,y saludó a los que ya estaban allí sentados.

Buenas tardes a todos dijo con algo de timidez aún,antes de tomar asiento.

Alexander empieza a picotear, aunque como no ve muchos postres dedice comer poco en un principio. Empieza directamente por un plato de carne, aunque no se sirve demasiada. Al empezar a comer, se da cuenta que Sirius está sentado a su lado. Casi ni se había fijado. Empieza a hablar con él.

Oye Sirius... Que haces con una libreta? -le dice al darse cuenta que está escribiendo cosas en ella- No tienes hambre?

Mitsuki comienza a  servirse algo de ensalada ,y toma varias piezas de fruta.Divertida,sonríe mientras Alexander busca con la mirada los postres,y le acerca una de las bandejas de pasteles que tiene a su lado y que el joven no veía por estar tapados por la fuente de estofado.

¿Te apetece?...¡tienen pinta de estar deliciosos! le dice con una sonrisa cándida.

Antha empieza como si nada a comer emepezando con el pan blanco que se encontraba en el centro de la mesa, al escuchar el comentario del ruso se voltea hacia el. Ya quisieras tu, no me digas que te mojas tambien como estrategia de conquista. Antha despues de haber comido dos panes, coge un poco de uvas negras que se encontraban hacia su derecha.

Cosas extrañas...mmm diria que tu aspecto es lo unico que he divisado por el momento.