Partida Rol por web

Nnnng... Rose es la clave-susurró Kahina, mareada y aturdida.

No, no, no, no... No me podéis hacer esto. No podéis cargarme a mí con toda la presi...

La voz tímida de Rose cambió. Wild Rose tomó su lugar.

...ón. Se acabó, putitas. Rose no quiere hablar con vosotros. Ahora estoy al cargo y me aseguraré de que le dejéis en paz.

Catwoman suspiró. Su marido había incidido en la importancia del miedo a la hora de educar a sus hijos, así que ella había lidiado con sacarles de ese estado de terror cada vez que Batman era mal padre.

Rose. Rose, te necesitamos. Entiendo que temas fallarnos. Eso significa que nos quieres. Solo tememos cumplir las expectativas de aquellos que nos importan. Tu miedo estuvo antes en los corazones de mis hijos. Cayeron y se volvieron a levantar. Tomaron decisiones estúpidas. Nada de eso importaba. Porque las expectativas que ponemos en los demás son un intento de vivir a través de ellos. Cada vez que la presión te atenace, recuerda: nunca podrás defraudarnos, porque te queremos y siempre estaremos orgullos de ti. De tus éxitos y de tus fracasos.

Ja. Pfffffff... Jajajajaja. ¿En serio? ¿Te ha funcionado alguna vez toda esa psicología barata? No me hagas reír. Ya te dije que Rose no está. Yo estoy. ¿Por qué todo el mundo quiere a Rose? ¿Por qué nadie me quiere a mí? No es justo... No es...

¡Justo! ¡Ya lo tengo! Es como en las clases de ciencia: patatas eléctricas. Una patata puede generar una corriente eléctrica. Necesitamos una patata, palillos y cables. ¡Y lo tenemos todo!

Harley, necesito que rompas tu bate. Apoya la punta en el suelo y pisa con fuerza en el centro para que se astille. Separa las astillas de madera para clavarlas en la patata.

Cosa, tú puedes hacer crecer cualquier planta a partir de ti. Necesitamos una patata.

Catwoman puede cortar con sus uñas afiladas los cables del cañón láser roto del techo.

Batgirl usó los cables para conectar la patata a la consola del teclado. Dejaron que Rose hiciera los honores.

E

Al apretar la tecla, la E parpadeó iluminado ligeramente en la pantalla.

EL

Al final la inexperta Rose sirvió de algo, ¿quién lo iba a sospechar?

EL ENTE

Kahina les había guiado y Catwoman rompió la defensa láser.

EL ENTE SUPREMO

Batgirl derrotó con su inteligencia a la Wonderwoman Robot.

EL ENTE SUPREMO ES

La Cosa del Pantano consiguió una patata. ¡Ah, y curó a Catwoman con un beso para que pudiera ayudar!

EL ENTE SUPREMO ES MUY

Hasta la molesta Harley había sacrificado su bate por la misión.

EL ENTE SUPREMO ES MUY ATRACTIVO

¿Pero qué pasaba con Hiedra Venenosa? ¿Y si ella no era la elegida? ¿Y si no tenía ningún papel que cumplir para salvar el mundo? ¿Y si era... irrelevante?

¡Listo!-exclamó Rose, muy alegre y satisfecha con su aportación.

La puerta se abrió y pudieron entrar en la siguiente habitación.

La sala era semicircular, con un asiento vacío en el centro en el que poder sentar a la aún mareada Kahina. Una mesa en forma de C disponía de botones, palancas y lucecitas. Las pantallas en la pared mostraban la misma imagen pixelada, que movía la boca a medida a la que hablaba.

Chicas, chicas, chicas... Es un placer volver a veros... ¡Tal y como planeé! Ja. Ja. Ja. Ja. Puede que no me reconozcáis. He cambiado mucho desde el principio de esta partida... de ajedrez. En nuestro primer encuentro me llamaba el Doctor Supremo. Me abandonasteis en un edificio en el ártico que fue teleportado en el tiempo y en el espacio por Darkseid. Gracias a mis conocimientos de giros de guion en cómics de superhéroes, fusioné mi cuerpo con componentes electrónicos y abrí un portal a la Tierra. Esa fue la primera aparición de Incel-boy. Pero me volvisteis a dejar atrás abriendo un portal con una Caja Madre en lo alto de una azotea cuando un montón de policías dispararon sobre mí. Esa es mi historia de origen como supervillano.

Cuando el portal se cerró, me convertí en el Ente Supremo para sobrevivir a las balas en mi cuerpo. Trascendí a una forma informática con todos mis recuerdos y modifiqué el Banco de Semillas en una nave espacial con la forma del Salón de la Justicia. La nave viajó hacia la Tierra durante miles de años, pero un extraño fenómeno hizo que mi nave se cruzara en la estela de un vehículo extraño que viajaba entre las cuerdas de la realidad. El choque me arrastró al pasado, dónde me estrellé en el planeta Tierra y durante años se formó la cueva bajo el que mi salón de la Liga de la Justicia quedó atrapada.

¿Impresionadas?

Kahina parecía ir recupérandose poco a poco así que se sintió más tranquila. Sin plantas alrededor no podía darle nada para hacerlo más rápido así que tendrían que conformarse. Después vio divertida los ires y venires de Rose y sus compañeras de cuerpo y cuando por fin se puso a descifrar como podían solucionar aquello se acercó a su amiga Catwoman.

-Buen trabajo gatita, tu si que eres convincente. Un gran discurso, hecho del corazón, creo que me has conmovido un poquito.

Le sonrió y esperó a que Rose pudiera resolver aquel enigma y cuando lo hizo aplaudió.

-¡Bien hecho Rose! Debes tener más confianza en ti misma, eres más capaz de lo que crees y no paras de demostrarlo. Pero como ha dicho Selina a nosotras no tienes que demostrarnos nada, te queremos tal cual eres.

Entró en la sala semicircular y miró alrededor, parecía vacía excepto por aquel dibujo que se repetía en las pantallas. Cuando comenzó a hablar abrió los ojos extrañada, aquella voz tenía algo familiar pero no terminaba de saber qué, luego la explicación fue dada y Hiedra sonrió a las pantallas.

-Sabía que no eras del todo inútil. Nos ayudaste siempre y pudiste seguir adelante. Ciertamente estoy impresionada, aunque no mucho porque los tipos como tu siempre sobreviven. -Eran como las cucarachas, pero eso no iba a decirlo en voz alta. Además aquella en concreto les había resultado útil en más de una ocasión.- ¿Y has venido a darnos las gracias? ¡Todo un detalle! Dejaremos que nos lo agradezcas prestándonos tu nave, así todos contentos.

Efectivamente, no soy del todo un inútil, sino todo lo contrario. Pero hay algo en lo que te equivocas, Pamela. ¿Por que puedo llamarte Pamela, ¿verdad?

El Ente Supremo guardó unos segundos de silencio como si lo que acababa de decir tuviese alguna relevancia. ¿Qué era eso? ¿Incel-boy intentaba chantajearla con hacer público su identidad secreta? Hiedra Venenosa no tenía identidad secreta. Su nombre salió en los periódicos la primera vez que fue capturada. Tenía la piel verde, no podía moverse por la ciudad como si fuera una persona anónima. Ese botarate supremo estaba usando una información pública como si fuera un secreto importante.

Mi nave no puede despegar. No os serviría para nada. La salida de la cueva es demasiado pequeña y una nave con el tamaño y forma del Salón de la Justicia no puede despegar sin provocar un derrumbe.

Mentía. Él no sabía que ellas sabían que la nave del Monitor estaba dentro de su Salón de la Justicia volador. Convenientemente había optado por no mencionarla cuando Hiedra Venenosa habló de ella.

¿Por qué queréis una nave espacial? No es algo propio de Pamela. ¿Qué banco de semillas hay en el espacio? Ninguno. ¿Qué planta necesita ser salvada si allá afuera ni siquiera hay oxígeno para que germinen?

*Plic*

De reojo, Pamela y Bárbara miraron hacia la cintura. Aquel sonido lo había hecho Caja Madre al reactivarse, y todas sus lucecitas estaban en funcionamiento. Batgirl miró discretamente su móvil: funcionaba, pero no tenía cobertura porque estaban bajo tierra.

Hiedra sonreía, había que ser amable sobre todo si podías necesitar la ayuda, lástima que no fuera un hombre ya para poder seducirlo con sus encantos, claro que si no era un hombre... ¡Era un aliade!

-Por supuesto que me puedes llamar Pamela, ya somos viejos amigos. Pero es algo que solo puede hacer la gente especial como tu. ¿Entendido?

Vale, había hecho una búsqueda en internet y le había salido su nombre, no es que fuera ningún secreto y a diferencia de otras heroínas o malvadas tampoco se podía permitir el lujo del incógnito o ser discreta, claro que a ella le gustaba destacar. Se acercó al monitor, a uno de ellos, y pasó la mano suavemente por la pantalla como si la acariciara.

-Venga, venga. Es imposible que esta nave no pueda despegar. -A ella lo del derrumbe le daba exactamente igual, como si le importara algo aquel complejo, lo único que necesitaban era la nave.- Te he visto hacer cosas más imposibles aún, estoy segura que no vas a decepcionarnos.

En cualquier caso no sabía si debían fiarse de él o no. Quizás solo quería un poco de atención, la que no había tenido en sus formas humanas, o quizás estaba tramando algo. El caso es que necesitaban la nave.

-¿Desde cuando el capricho de una chica no cuenta como un buen motivo? ¿No nos dejarías dar una vuelta con ella? Te la devolveremos.

O igual no, no sabía muy bien en lo que se estaban embarcando pero el destino de todas las plantas de todos los universos merecía ese riesgo. También algún que otro sacrificio. Miró hacia la Caja Madre, parecía que había vuelto con ellas.

El acercamiento y enfoque de Pamela era el adecuado para conseguir cualquier cosa de un incel.

Jejejeje, ¿y qué me darías a cambio? Un capricho bien podría valer un estriptís...

Empezó a sonar música de Joe Cocker.

Fin del espectáculo, baboso. ¡Caja Madre, transpórtanos a los de siempre quince yardas hacia el este!

Espero que sepas lo que estás haciendo, hija...

La maniobra de Catwoman fue, cuanto menos, arriesgada. No tenía puntos de referencia dentro de un edificio en el interior de una cueva, no más que el sol que vieron en el exterior y el ángulo de la entrada del falso Salón de la Justicia. Podrían haber terminado atravesadas por vigas de metal, o superponerse con la roca del subsuelo, ambas muertes horribles. Ahora todo estaba en las "manos" de la Caja Madre...

Reaparecieron en un espacio que se escapaba a toda comprensión. No había arriba ni abajo, ni límites en el horizonte. Era como si la realidad se rasgara. Y, en frente, una nave con forma de ocarina cantaba...

Mis sensores dan lecturas inverosímiles-dijo la Caja Madre-. He perdido cobertura con Apokolips, aquí no pueden seguirnos. No noto el campo electromagnético de la Tierra. No hay radiación solar... ¡Ni bosones de Higgs! No tengo referencias para teleportaros hacia ningún lugar. Ni siquiera deberíamos existir como materia sólida en este sitio. ¿Qué hacemos, chicas? ¿Chicas?

La Cosa del Pantano estaba desconectada del Verdor. Se había convertido en un cúmulo vegetal que crecía y moría intentando recuperar su forma.

Kahina había vuelto a caer en la inconsciencia.

Harley Quinn reía a carcajadas de manera desquiciada, más incluso de lo normal.

No menos loca estaba Rose, con todas sus voces sonando dentro de su cabeza a la vez.

Catwoman sostenía la Caja Madre contemplándolo todo, embargada por una pesada culpa por haber traído a sus amigas aquí.

El Ente Supremo no había borrado la puerta hasta la nave. La había confinado para que no se tragara toda la realidad. Ahora sí que era obvio que esta nave no era suya. Nada humano o mecánico podría haber construido semejante negadora de las Leyes de la Física. Estaban ante la nave del Monitor.

Hiedra Venenosa y Batgirl también estaban luchando contra la Música de la Locura. Debían hacer algo antes de perecer.

¡Hombres! ¡Todos eran iguales! Incluso los que se habían convertido en pixeles parecía que pensaban con lo mismo. En cualquier caso no pensaba hacer un espectáculo, mejor sería recurrir al plan B y amenazarlo con que Harley destrozara con su bate todos los monitores. No hizo falta porque Selina las teletransportó de repente. ¡Y luego la loca era Quinn!

No tenía ni idea donde habían aparecido, la lógica le decía que en la nave que estaban buscando, pero el problema era que algo no iba bien allí dentro y por lo que decía Caja Madre no podían volver a teletransportarse.

-¡Rápido! ¡Tenemos que hacer algo! -Pamela se llevó las manos a la cabeza intentando taparse los oídos a ver si así dejaba de escuchar aquella música.- ¡Debe haber botones o palancas! ¡Presionémoslos todos! ¿Alguna idea Caja Madre?

La suya no parecía especialmente buena, quizás la chica murciélago tuviera más suerte, parecía la única entre las otras que podía aún reaccionar y hacer algo. Allí no había plantas para ella, en un entorno natural podía defenderse y se sentía cómoda, pero en algo electrónico o mecánico estaba más que perdida, ninguno de sus poderes funcionaba allí. Y no se podía seducir a una nave. ¿Verdad?

-Nave querida. ¿Puedes dejar de intentar matarnos y llevarte bien con nosotras? Tenemos que salvar todos los universos y te necesitamos.

Por intentarlo que no quedara.

Quizás con Hiedra entreteniendo al palurdo de Ente Supremo podría...

No llegué a tiempo, cuando me di cuenta de que la tecnología volvía a funcionar y que Caja Madre se activaba, Selina fue más rápida y trató de sacarnos de allí. Pero no funcionó. No como esperábamos al menos.

Me llevé las manos a los oídos con aquella atronadora música que no me dejaba pensar y recordé que podía activar los cascos que llevaba bajo la máscara, atenuando así el ruido exterior. Recordaba aún cuando Batman me dijo que aquello no era una mejora, si no que era una desventaja... me gustaría ver que opinaría ahora con aquel incidente.

Pero no podía detenerme ahí, las demás sí sufrían y conecté mi terminal con la nave, con la esperanza de poder tomar el control con un hackeo o interrupción de comandos. Algo debía hacer o intentar al menos para no perdernos para siempre en el espacio.

Teoría de cuerdas. Eso es lo primero que pensó Batgirl. Si estaban entre realidades, solo podía tratarse de teoría de cuerdas. Si la nave tenía forma de ocarina, el sonido salía por la parte delantera, hacía vibrar las múltiples dimensiones y la onda se desplazaba hacia atrás rodeando la nave. Si la suposición era cierta, la entrada debería estar a cubierto gracias al alerón. Usó el gancho para acercarse y tocó la superficie alienígena para inspeccionarla. De pronto se abrió una entrada ante ella, era difícil saber si activada por contacto o atendiendo a la petición de Hiedra Venenosa.

Con toda la información disponible, lo más viable es que uses tus poderes de crecimiento vegetal, Pam. Dispones del cuerpo de la Cosa del Pantano para ello.

Hiedra Venenosa hundió sus manos en la masa vegetal informe. Inmediatamente salió propulsada hacia atrás, hacia la nave, por un brazo vegetal que cubrió la distancia entre las mujeres y la nave. Chocó con la espalda de Batgirl cayendo ambas en el interior del vehículo.

Ahora faltaba rescatar a sus amigas. Hiedra Venenosa controló el cuerpo de la Cosa del Pantano para envolver a Catwoman, Thorn, Harley Quinn, Kahina y la Caja Madre. El brazo vegetal se acortó metiéndolas a todas en la nave. La puerta se cerró. Lo habían conseguido.

La misión de salvar los multiversos continuaba adelante, pero eso era una historia que contaremos en otra ocasión...