Partida Rol por web

Mientras el elfo trata de usar su magia curativa sin demasiado exito ya que aparentemente las heridas de sus compañeros son demasiado para el o el mismo esta demasiado cansado Katsu piensa en usar su ki para curarse, es una buena idea, sin embargo nadie le ha enseñado como usar el ki de esa forma y solo es capaz de usarlo en combate

La oración no surte efecto. Miro mis palmas tratando de discernir a través de ellas los motivos de que las energías no obren su labor. Podría ser que las heridas de Katsumot sean demasiado para mi corto conocimiento. Después de todo no soy un maestro blanco. Este arte no lo tengo tan experimentado. Sin embargo, no parece que el humano rubio esté tan mal, sus heridas no parecen excesivamente graves...

Pero tampoco yo me encuentro en plenitud de facultades. Mis propias heridas me causan dolor y debilidad. Sí, eso debe ser. Estoy debil, debo recuperarme yo mismo antes de poder obrar la gracia de Ishtar en otros.

Sentado con las piernas cruzadas, abro los brazos y cierro los ojos elevando el rostro hacia el cielo. Las palabras resuenan en mi mente, una oración para sanar mi propio cuerpo.

Katsu solo puede hacer estarse quieto, moverse empeoria las cosas... la verdad es que el Ki era muy util para segun que cosas, sobretodo para los combates. Habia hecho algun uso suyo para seguir rastros, esto no era un mero uso combativo... creia que podia "automantenerse", otra cosa era el como. No le habia enseñado pero en el Ki habia sido bastante autodidacta... quizas consiguiera algo. A peor, era dificil ir, el elfo ya veria cuando tenia fuerza para "curarles". Siguio el procedimiento que era habitual, cerrar los ojos, concentrarse en si mismo, aislarse del mundo... cada vez lo conseguia con mas facilidad... y estaria asi un poco, a ver si podia sentir su Ki, y redireccionarlo a donde era mas necesario, a sus heridas y... dejar que pasara algo.

A veces, solo era eso, dejar que pasar algo, como si hicieras las cosas por instinto. Algunas veces, le habia funcionado, otras... no. Aun asi, tendria que hablar con los magos, y decidir que hacer:

-Bueno, estoy seguro que tendreis preguntas sobre lo que habeis visto...¿no? Yo desde luego si... pero habra que decidir que hacer con Eliza... bueno eso os lo dejo a vosotros, que tendreis mas idea de como despertarla.. pero también habra que ir a algun sitio, yo ya os propuse un curso de accion...

-Quiero tenerla cerca -dijo certéramente, en su sitio, aún taciturna- Supongo que quizá sea culpa del sueño inducido, y que quizá esté pensando que es una niña sola en el mundo, pero la siento cercana a mi de alguna forma.

El elfo se sienta y comienza a usar su magia, en esta ocasión parece que esta mas concentrado o su anterior intento fallido hace que sea capaz de reunir con mayor facilidad en esta ocasión la magia blanca que circula a su alrededor. Sus heridas visiblemente comienzan a cicatrizar y a sanarse, incluso el mismo se siente mejor, con mas energias, no esta totalmente curado, sin embargo si que lo esta en gran medida y solo es cuestión de tiempo y algo de descanso que este en plenas facultades. Mientras tanto Katsu se concentra en usar su ki, siente como se mueve, se desplaza, sin embargo no es capaz de curarse, aunque si sabe que sus heridas no se pondrán peor.

La verdad es que su Ki no deja de sorprenderle... no consigue lo que queria pero...las heridas se mantenian iguales. Lo seguiria intentando y necesitaba aprender mas de eso. Solo por eso, era otro motivo para buscar a la elfa samurai, era la unica que sabia usar Ki... bueno su hermana tambien... y Liath. Tuvo un escalofrio al recordar al temible luchador humano... tan joven y ya habia visto a grandes guerreros y cosas peores. No entendia los motivos de los magos pero ¿debia? Dudaba que los magos tuvieran un plan b. Sus motivos no los juzgaria, mientras fueran razonables. Todos querian lo mejor para Eliza:

-Claro, no lo pongo en duda, pero visto lo visto con la Cabala creo que deberiamos tener... reticencias para con ellos... ya lo dije, creo que Eliza se merece una oportunidad de crecer y ser una persona nueva , sed sinceros ¿creeis que alguno de vosotros podria enseñarle magia y guiarla?

Suspiro ¿cuanto tardaria Saryllion en hacer un nuevo intento de curacion? No sabia como se hacia eso... habia estado con magas blancas competentes siempre y eso le habia salvado:

-Me gustaria que me escucharais, las personas que os propongo son de total confianza... una es la elfa samurai conocida como Elenaide, una de las mejores espadachines de toda Gaia... la otra es una amiga intima, se llama Yui y es una formidable hechicera...ellas nos podrian ayudar y mucho...

-¿Para que ir tan lejos? Su poder interior es claramente oscuro, excepto que me digas que tu plan es enseñarle otras clases de magia, pero esto ya de por si puede ser infructoso, el talento nato no puede esconderse a la larga. En cuanto a lo primero, mi familia es desde hace muchisimas generaciones especializada en magias...negativas, dicho de forma tendenciosa.

Siento el calor reconfortante de la magia blanca recorriendo mi cuerpo, una corriente mística de placidez que entumece mis músculos y alivia el dolor de mis heridas. Reconozco que nunca hice demasiado caso a las lecciones acerca de esta escuela mágica, pese a la insistencia de mi madre, y es ahora cuando me doy cuenta de mi error. No siempre iba a contar con la asistencia de los experimentados sanadores de mi pueblo, para quienes estas heridas no son más que molestias menores bajo el influjo de su poder.

Uf, muchacho no paras de hablar... -Me quejo abriendo los ojos, con una placidez semejante a la de alguien recién despertado de una buena siesta- No tengas tanta prisa en tomar una decisión, descansa y recupérate, si no vamos a ir a ninguna parte. Además, mi capacidad con la magia blanca es bastante inestable, no la controlo demasiado, esto podría llevarnos un tiempo. ¿Los humanos no conocéis la paciencia?

Pongo mis manos en dirección a Katsumot, ligeramente contrariado por el hecho de que no deje reposar su mente y cuerpo ni se centre en lo verdaderamente urgente: su recuperación. Además, Scire le sigue la corriente, incordiando la concentración que necesito. Tales pensamientos nublan mi hechizo, siento un hormigueo en las palmas de mis manos que me anuncian lo mal que circula la esencia mágica a través de mí. Algo malo va a suceder, la corriente mística está descontrolada.

¿Ves? Ya sabía yo que pasaría esto...

La magia del elfo simplemente no surte efecto, en lugar de eso Katsu siente como las heridas le escuecen aunque no se le estan curando. por desgracia Sallyrion se da cuenta que no podra usar su magia blanca durante un tiempo

La magia del elfo no funciona, casi le da la sensacion que las heridas van a volver a abrirse, pero simplemente, no funciona. Casi hizo una mueca de dolor. Aquello no estaba bien. Si para la mañana siguiente, no se habia recuperado y muy mucho, seria prescindible. Quizas el elfo tuviera tiempo y paciencia, pero como buenos humanos, el y Eliza, el tiempo no les sobraba, era bastante finito. Yui ahora tambien tenia el tiempo finito, que raro era todo eso... pero ¿porque divagaba de aquella manera?

No dijo nada al elfo, solo le hizo un gesto para que le dejaran descansar. Podian dejar la discusion para por la mañana, a ver como se encontraba.  Solo dijo una cosa:

-De acuerdo, lo podemos hablar mañana... necesito descansar para que las heridas se cierren...

Intento serenarse un poco. Los magos tenian que seguirle, darse cuenta que no tenian plan y que el los estaba ofreciendo una salida...

-Quizá deberías dejar descansar tu energía mágica. Puedo tratar de atender tus heridas a la antigua con algunos vendajes. -ofreció.

Hombre, eso se dice. El no tenia ni pociones ni vendas, sino habria intentado hacer algo de ese estilo... aunque era un poco manco para curarse. El chico siempre confiaba en su habilidad y en su tecnica para evitar ser herido... hasta ahora le habia funcionado bastante bien... excepto cuando le sacaban clones sombra y le daban pal pelo. Y siempre habia habido algun mago blanco para parchearle las heridas. La proxima vez que pasaran por un poblado, gastaria gustosamente parte de su dinero en vendas y alguna pocion o unguento. Esto no debia volver a pasar.

El chico suspiro. No estaba molesto era solo que... a veces le gustaba hacer algunas cosas en la intimidad, es decir, que no se le acercaran demasiado... a veces era raro. Si hubiera sido Yui, eso no hubiera pasado... pero Scire, no la conocia, y a su manera era bastante mona...¿en que diablos estaba pensando? Con un repentimo deje de inseguridad, nada propio de el, dijo a la maga:

-Eee, si por favor... me gustaria estar todo lo bien para mañana por la mañana... y no soy un experto en primeros auxilios o en vendajes... ¿necesitas que haga algo especial? Supongo que quitarme la armadura y eso...

Porque claro, no estaba nada habituado a aquello. Si se quitaba la armadura y demas ropas, Scire podria ver que el cuerpo de Katsu tenia un par de cicatrices variadas, alguna de tajos y de armas...

Me observo las palmas nuevamente, en un gesto infantil, como si la magia dependiera del estado de las manos del mago. La verdad es que parece que la energía blanca se niegue a circular con sus beneficios en dirección al humano. Los hechiceros que se dejan cegar por presunciones religiosas dirían que algo malo oculta alguien a quien la magia blanca niegs por dos veces. Por fortuna no soy así, conozco la esencia mística lo suficiente para no atribuirle ese tipo de cualidades, y sí la de ser extraordinariamente caprichosa. Por eso amo el fuego: consume con igual capricho que la magia.

Bueno, puede que mañana haya más suerte, de momento no creo que sea buena idea seguir empleando la magia sobre esas heridas. Y sobre a donde dirigirnos y qué hacer... me avengo a la propuesta de Katsumot, si no hay nada mejor. No soy yo quien pueda ofrecer una alternativa.

Me recuesto y pongo mis manos bajo la nuca, mirando al cielo con el cuerpo estirado. No me había percatado de lo cansado que me ha dejado el combate y la posterior caminata.

-Si, sería raro vendar algo que estuviese bajo la armadura...

Levantó una ceja mientras decía esto, extrañada. Cuando estuvo listo, observó primero, y tomó de su bolsa bordada un odre de agua. De esta no asomaba mucho mas, un par de pergaminos, lo que parecían ser raciones envueltas, pluma y un frasco de tinta.

-Va a estar frío -advirtió sin dar apenas mas que un segundo antes de comenzar a lavar las heridas de la sangre. Pasó los dedos con suavidad sobre piel y carne para quitar el rojo innecesario junto con un paño negro durante un cuarto de hora, y luego se apartó apenas.

-Siéntate -indicó. Ya estaban limpias, así que era hora de vendarlas. Se escuchó un rasgar de tela. Una hebra de oscuridad afilada como un escalpelo cortaba la manga de su brazo izquierdo de forma pareja, creando una sola tira firme de vendaje negro hecho con las mismas. Lo mismo le sucedió al otro brazo de la prenda, dejando su atuendo sin mangas. Le quitaba porte, pero seguía siendo funcional. Afortunadamente eran muy holgadas, lo cual produjo una buena cantidad de vendas, que empezó a utilizar sin demora tras que la voluta de oscuridad se desvaneciera en la nada.

-Eso es todo. No soy experta en el tratamiento de heridas, pero debería ayudarte. Deberías comer algo para recuperar tanto la sangre derramada como las fuerzas -dicho esto, tomó unas raciones de su bolsa, bien envueltas y sin abrir.

-Estas son de mejor calidad que las comunes, así que estarán mas apetecibles. Comamos algo y descansemos hasta mañana. Vigilaré, necesito mantenerme despierta aunque sea un par de horas mas para...meditar.

También le tendió una a Saryllion y conservó una para si misma.

El chico no dijo gran cosa, y no puso inconvenientes a lo que dijo Scire. Se dejo hacer. Hizo acopio de fuerzas y disciplina, para poner las menos dificultades posibles a Scire. Le supo mal que tuviera que rasgarse sus vestiduras para tener que improvisar unas vendas, pero ni asi dijo nada. Despues de sus largos 15 minutos, los primeros auxilios terminaron. Se notaba un poco mejor y ya habia cenado... pero Scire tenia razon, tendria que comer mas para recuperar aun mas fuerzas. El chico se limito a hacer un gesto de agradecimiento y declinar la comida, el ya tenia de la suya... si estuviera bien, podria forrajear un conejo o algo.

Cogio de su comida y saco un poco mas, para acompañar al elfo y la maga en la cena. Era hora de ser un poco solicito:

-De verdad te agradezco lo que has hecho... si no estuviera asi, podria haber forrajeado algo...cuando lleguemos a un pueblo o una ciudad comprare algo de material para estos casos... y tendre que encontrar la manera de pagar esta deuda... teneis razon, lo mejor es esperar a mañana y decidir que hacer... una vez descansados...

-Una vez eso, hablaremos y pondremos las cosas en claro -dijo.