Partida Rol por web

Beremode sonrie y dice:

- Con acompañarme a la cena de esta noche y habladme de vuestros viajes pues por vuestro aspecto supongo que sois una persona que ha viajado mucho me dare por perfectamente pagada

Mientras tanto en la sala ya estaban los trabajadores preparando las cosas para la cena, las mesas estaban siendo movidas por unos pequeños golems de aspecto rocoso que movian todo  lo pesado y transportaban incluso la comida sobre unas bandejas en sus cabezas, los trabajadores simplemente las cogian de ahi para colocarlas en las mesas.

Cuando la mesa estubo preparada Beremode toma asiento ayudada por el guardia que se sienta junto a ella sin decir nada, pero en su mirada puede verse que no le hace demasiada gracia la situacion, la mujer coge algo de comida y le sirven vino para cenar, entonces dice:

- Me habeis dicho que sois nigromante cierto? es un tipo de magia que no domino aunque he oido que puede ser muy poderosa, vuestros viajes tiene que ver con ampliar conocimientos sobre esta materia?

Belyye puede notar como justo en el centro el suelo parece mas fragil, unas pequeñas grietas y de hecho cuando paso por ahi dio un pequeño salto para evitar una de las grietas algo mas ancha que las demas, la bestia comienza a andar hacia los alli presentes movimeinto una de sus manos, por el ruido parece que la propia cueva se mueve mas que un ser con capacidad de moverse, algo mas atras Eliza parece estar muy atenta a lo que pueda suceder.

Bellye comenzó a retroceder lentamente a la misma velocidad que la del golem, intentando mantener siempre la misma distancia que les separaba, su intención era dirigirse hacia el centro de la sala haciendo que el golem lo siguiera para que terminara encima del suelo inestable, por otra parte el joven parecía intrigado sobre la criatura a la que estaba intentando quitar del medio sin necesidad de luchar ¿Por qué se había activado ahora y no cuando había pasado por primera vez?

“Eliza, será mejor que retrocedas un poco más por si acaso” Dijo manteniendo la calma mientras seguía andando hacia atrás con cuidado de no caer a causa del suelo en aquel terrible mal estado… Su intención era que en el momento que el golem pasara por encima de la zona mas inestable usaría algún conjuro de magia negra para desgarrar el suelo y hacer que se precipitara hacia los pisos inferiores… Siempre y cuando el suelo no se viniera abajo el solo y tampoco fuera lo suficientemente resistente para aguantar tanto el peso del golem como la magia de Geist a la vez.

Mmm... ya...

Parece que la chica está bastante perdida.

Pero explícame qué recuerdas exáctamente. Para poder permitirte éste viaje al menos has tenido que poder pagártelo. Tendrás que tener dinero encima, y ése dinero tiene que haber venido de algún lado. Si le buscas sentido a lo que te rodea, puede que te lleve a despejar las lagunas de tu mente.

Si tiene monedas, me ofreceré como protector a cambio de un pequeño salario mientras dure su búsqueda. Mientras ella busca respuesta en las bibliotecas, podría aprovecharlas para buscar mas información. Es perfecto para empezar.

- Ay ay ay ay ay déjanos déjanos. Qué estamos buscando a nuestra amiga. - Dije dando pataletas. - Déjanooooooooos

- Mierda. -Susurro en un suspiro... Quería ser de utilidad y al final terminaré por fastidias la caravana.

Me incorporo y observo por unos segundos a los hombres que corren hacia mi tanteando las posiblidades.

Lo primero que hago es desplazarme hacia un lado para poner a mis perseguidores en la línea de tiro del arquero, espero que no sea tan capullo como para jugarsela con sus amigos de por medio, ni tan bueno como para sí hacerlo.

Descarto el pelarme cuerpo a cuerpo con ellos, son tres más el arquero y puede que aún falte alguno que estuviera agazapado. De modo que disparo un virote de la ballesta casi a ciegas y sin tiempo a recargar ni hacer otro disparo me pongo a correr en dirección a la caravana para avisar al resto de compañeros.

Tampoco pasaron tanto rato entre la taberna y el Templo, hablando de sus cosas. Ya daba por negativa de encontrar alguna pista de las chicas en aquel poblado. Preguntaria en la capilla (Templo con mayusculas era de donde venia). Bueno, el y su relacion con la religion peculiar... en Arisu, estaba muy presente, y creia y ejercia, pero ¿que se podia decir de un pais que adoraba a un enorme dragon dorado? Bueno tampoco era cosa de la gente pero no era tan raro. Aquello era un templo de Ishtar y Gaea... poco que decir. No habia escuchado nada de los elfos de lo que hubieran estado hablando con... ¿una sacerdotisa? Que poco extraño le parecia eso... ah, claro en el Valle del Viento, todas lo eran. Que novedad.

Ademas,tenia cosas frescas del Viento. Ahora se acordaba de su hermana y de las conversaciones que habia tenido sobre Elenaide. Sabia lo espectacular que era la elfa samurai. Sus comparaciones del Ki descomunal que poseia, los cinco espadachines, los siete heroes. No, no tenia biblioteca que consultar pero... tenia un avezado aventurero que podria saber cosas. Consulte a Rufus tenia que llamarse la cosa, antes de entrar en la capilla, el chico pregunto algo al aventurero humano:

-Rufus, hace poco escuche historias de los llamados 5 espadachines, los mejores considerados de Gaia...¿que sabes de ello? Y tambien unos rumores, de los llamados 7 heroes...¿te suena?

Bufo.Tenia un poco oxidado el protocolo con la religion occidentalis, asi que tampoco hizo nada especial, ni reverencia ni saludos liturgicos. Los Dioses habian tenido un respetuoso silencio con el... el queria tenerlo con ellos. Hizo un gesto como saludo a los elfos, o a lo mejor queria llamar su atencion, pero tampoco dijo nada, para no interrumpirlos. Lo bueno del chico era la capacidad de sorprenderse o la capacidad de que le sorprendieran... y lo que veia no podia ser verdad. No habia bebido alcohol, pero ¿habia visto una figura femenina y enana montada en una libelula? Sus ojos le debian jugar una mala pasada, y entonces si, si que se escapo:

-No puede ser, lo que veo no es real...¿Rufus ves lo mismo que yo?

Y tambien miro lo que dijeron los otros. ¿Podia ser aquello una hada sin alas? Que cosa mas rara, evidentemente, centro su curiosidad, pero no se acerco a ella. Con voz lenta le dijo, porque claro, no sabia si entendia el comun, el idioma de los humanos:

-Hola...¿entiendes lo... que digo?

Gabriel escuchó atento a lo que sucedía en el otro barco, parecía una charla interesante, un tipo de charla que ya había escuchado antes. No tenía duda alguna, se trataba de un barco mercante de esclavos, y por las palabras, las criaturas no eran precisamente unas "putillas" humanas. Hadas, ¿quizás?, eso definitivamente se iría directo al mercado negro. Pensó en abordar el barco, pero no se arriesgo. La verdad, no había certeza alguna de que la hija de Perkins haya sido secuestrada para ser vendida como esclava, por lo demás lo dudaba, así que no había motivo alguno para abordar la nave con la que estuvo a punto de chocar para obtener, probablemente, información nula. Eso pensaba, más era otra cosa la que haría, estaba acostumbrado a actuar más por instinto que por lógica. Había sincronizado la nave con el sistema de su brazalete, pero solo podría apagar o encender el motor a distancia, mas no controlarlo. Eso hizo, apago el motor, y aprovecho la cercanía con la otra nave para abordarla, sujetandose con fuerza a ella para no caer, aún el clima era turbulento, por lo que debía de escalar con cuidado. Si todo salía bien, no solo conseguiría algo de información, si no que también mucha acción.

Sonrío amablemente y asiento mientras digo-Será un honor, a la vez que un placer, mi señora.-entonces los pétreos sirvientes comienzan a preparar el salón. Me aparto un poco, mientras preparan la mesa, dejando espacio para que los trabajadores coloquen los enseres correspondientes. -Fascinantes criaturas-digo mientras observo a los golems. Recuerdo que mi maestro y yo encontramos uno en una tumba. Algo debía ir mal con él, pues nos ignoró completamente. Lo cual, fue una suerte, he de añadir..

Cuando la comida está servida, retiro mi capucha hacia atrás, pues podría considerarse descortés cenar encapuchado, y aunque lo que piensen otros no es algo que perturbe mis noches, no me gustaría incomodar a una persona obviamente importante, y con un guardia al lado. La cautela ante todo.

Comienzo a partir los alimentos mientras escucho la pregunta de Beremonde.-Mis viajes son, en cierto modo, para ampliar mis conocimientos sobre la materia. Pero a la vez, el errar es parte de mi vida, desde que era un niño imberbe.-esto es novedad. No suelo hablar demasiado de mis viajes con terceros. Aunque normalmente no intimo demasiado con terceros, claro, salvo que necesite información, como ha sido el caso.

Darian da varias vueltas con su libélula y se acerca un poco al niño que acaba de llegar.

- ¡Hola! dice en común, ¡Claro que te entiendo! ¿Qué hacéis? dice divertida y sonriente mientras con Dyss le da varias vueltas al niño, le gusta su pelo rubio.

Fineas arqueó las ejas al ver la hada, lo último que se imaginaba era encontrarse una, no solo sin alas, sino montando a una libélula.

- Melissent, deberías darla la mano, o dar algo más de información sobre tu madre si queremos seguir con la búsqueda... - dijo a su compañera mientras observaba a la hada.

El que si se acercó muy curioso al ver semejante criaturita fue Almare, que casi inhala sin querer a la hada al acercarse tanto para observarla, y acto seguido miró a Fineas.

- No... Almare, las hadas no se comen, a no ser que quieras escupir polvos mágicos en vez de hielo el resto de tu vida - dijo el elfo a la vez que esbozaba una media sonrisa como de ironía.

Y al escuchar a Katsu se giró hacia la pareja de humanos. - Qué rapido... ¿No había cerveza en la posada? - dijo con cierto sarcasmo y borrando esa media sonrisa rápidamente de su cara.

Una fria recepcion por parte de Fineas, no se lo podia reprochar, hace unas semanas, el actuaba asi cuando estaba con Yui. Ser protector, ahora mismo no podia. Lo comprendia pero eso no dejaba de parecerle un feo, pero bueno, podia estar en su derecho, quizas habian interrumpido a la pareja:

-Bueno, habia hambre y hemos comido rapido... Rufus es el que ha bebido cerveza, a mi no me gustan las bebidas espirituosas, te desconcentran y dañan el espiritu, pero parece que tenemos una nueva visita... es la primera vez que veo una...¿hada?

.... Metaforicamente hablando. Es decir, el alcohol embotaba los sentidos, la percepcion empeoraba. Intentaba no tomar alcohol sino era necesario. Habian sido muy estrictos con el, en ese sentido y habia calado hondo en el chico. Pero lo mas raro en la capilla ahora mismo era la hada sin alas... no debia entenderlos, sino ya les habria dicho algo.

Melissent, en ese momento se despistó completamente y dejó de mirar a la sacerdotisa, para echar un vistazo a la pequeña visitante: - ¡¡¡Un hadaaaa!!! Ay, qué linda... ¡Es adorable!

Parecía muy entusiasmada hasta que volvió en sí y se acercó de nuevo a la sacerdotisa: -Perdón, se me ha ido la cabeza. Bueno, pues si puede ayudar todo esto a mi madre de alguna manera, que así sea.

Dicho esto, puso la mano al alcance de esta con expresión curiosa. A ver qué pasaba... 

Rufus iba a empezar a hablar a Katsu pero tambien se quedo mirando el hada, asi que prefirio ser breve:

- Claro que he oido las historias, dicen que son los espadachines mas poderosos del mundo y esos heroes al parecer salvaron el mundo de la resurreccion de un gran demonio o algo asi ya que parte de la realidad se ha juntado con la leyenda

Mientras observa lo que hace la sacerdotisa curioso, parece que alguna vez ha visto algo similar, aunque no podria decirse si realmente ha visto lo mismo

La sacerdotisa permanece esperando sin decir nada, simplemente coloca sus manos sobre las de Melissent, esta siente un poco de calor por todo el cuerpo y todos pueden ver como una energia azulada pasa de la sacerdotisa a Melissent a traves de las manos unidas, la sacerdotisa dice:

- Piensa en tu madre, su rostro y facciones

Tras unos segundos la energia comeinza a desaparecer absorvida de nuevo por la sacedotisa, esta se separa dejando a Melissnet con algo de frio y comeinza a hablar:

- Ya se como es exactamente tu madre, no la he visto, pero rezaremos a nuestra madre Ishtar por que puedas encontrarla

La mujer mira hacia la representacion de la diosa y comienza a hablar:

- Madre Ishtar, madre de todo lo bueno, creadora de las nobles criaturas del bien que moran estas tierras, por tu gracia, sabiduria y poder guia a esta joven y sus acompañantes para que su objetivo sea cumplido, ayuda a encontrar a su progenitora, una de tus hijas que se encuentra perdida

La criatura parece seguir a Belyye hacia el lugar que este desea, sin embargo parece que el suelo puede aguantar aunque le haria falta un pequeño empujon para que la criatura cayera al suelo. Viendo la distancia el golem se coloca apuntando con su brazo, las lianas que cuelgan de este comienzan a moverse a gran velocidad, las lianas se estiran en direccion a Belyye y a Eliza, son tres en total que se dirigen hacia los dos, la primera de las lianas parece quedarse corta, sin embargo la segunda de ellas consigue atrapar el pie de Belyye aunque no consigue hacerle caer y no esta demasiado fuerte agarrada, la tercera de las lianas habia sido lanzada contra Eliza que es repelida cuando esta coloca el libro a modo de escudo delante suyo 

Yui asiente y dice:

- Si que tengo dinero, y lo que recuerdo es el nombre de Katsu que era un chico occidentails rubio que siento que es o al menos era importante para mi, se que soy de arisu y que estoy aqui por algo que se llama Varander, a parte de eso no recuerdo mucho mas, tampoco recuerdo como entre en este barco.

En ese momento se escucha a un trabajador avisando que la cena esta preparada, Yui sonrie y dice:

- Si me permite le invitare a cenar y asi podemos hablar con mas tranquilidad

El marinero no hace caso de lo que dice el hada y lanza su red para tratar de atraparlas, Torween y su amiga la esquivan a duras penas, pero el marinero esta dispuesto a atraparlas, es entonces cuando pasa algo, un hombre vestido de forma extremadamente extraña aparecen, el marinero le grita:

- Eh, tu quien eres? que haces en este barco? y de donde has salido?

Gabriel llega sin demasiados problemas a la parte superior del barco, alli puede ver una escena curiosa, un marinero bastante grande con una red que trata de atrapar a dos pequeñas hadas, al ver a Gabriel el marinero con mas pinta de pirata que de marinero exclama:

- Eh, tu quien eres? que haces en este barco? y de donde has salido?

La jovencita sin alas voló de un humano a otro, alucinada con sus rostros, sus gestos y sus palabras, que en parte eran tan altas que hacían daño en sus sensibles oídos.

Trató de comunicarse con ellos, pero al parecer su voz era tan bajita que no la habían escuchado.

Después una luz llamó su atención y revoloteó de nuevo por encima de la sacerdotisa y Melissent.

Se acercó a la chica y gritó, para ver si esta vez la escuchaban: ¡Hola! Soy Darian. Puedo entenderos.

Sonrió y revoloteó alrededor de la chica, estaba tan feliz de encontrar gente y poder hablar con ellos que no podía mantenerse quieta de tanta ilusión.