Partida Rol por web

Jordan reviso su arco y comprobo sus flechas. Solo esperaba que Mark dispusiera la formacion y su posicion en ella para entrar. Era buena disparando pero desde un punto alzado era mejor que a la carrera.

- Estoy lista.- dijo preparando una flecha pero sin tensar la cuerda.

- Creo que debe ser la sala de profesores.- Contesto a Mark después de pensar un momento que estancia podría ser.
- ¿Como sabéis que no está infectada?

- Esta asomada a la ventana y es de dia.- argumento Bruce.- La infeccion produce una fobia a la luz, ademas de hipersensibilidad, ademas los infectados no hacen señas, gruñen y tiran cosas... aun asi siempre hay que tener cuidado. Que ella no este infectada no significa que otros que puedan estar con ella no fueran mordidos...

Bruce asintio y busco que Marc diera la orden de entrar.

Hago un gesto con la cabeza de asentimiento y vamos para dentro. El orden ya lo dije antes.

La entrada y los pasillos tenian un aspecto lamentable. Los habia destrozado y habia excrementos por el suelo, mala señal. Los infectados no usaban los sanitarios. Los desperfectos eran muchos, habian roto tuberias y el tendido electrico salia por las paredes, los infectados solian tener brotes de ira bajo los cuales solo querian destruir todo lo que se encontraba a su alrededor.

Las tuverias rotas ofrecian un olor indescriptible, solo paliable con la suciedad del suelo. La entrada estaba bien iluminada pero oiais los gruñidos que venian del sotano, eran muchos y sabian que estabais alli. Verdaderamente debian ser muchisimos por la cantidad de daños y eces que encontrasteis.

Al pasar delante de un aula visteis numerosos restos humanos apilados justo en el centro, antiguos huesos raidos hasta la saciedad, como si los infectados hubieran decidido hacer algun tipo de macabra escultura con ellos.

Os corrio un escalofrio al pensar que pudieran estar, de alguna forma, cimentando algun tipo de civilizacion primitiva. Desde luego nunca antes habiais visto que hicieran nada semejante. Un vistazo mas minucioso os dejo ver otro monton de telas ensengrentadas en una esquina, la ropa que llevaban encima aquellos pobres que terminaron siendo su cena.

Por suerte ninguno infectado se atreveria a asomar la cara durante el dia, demasiado sol entrando por las cristaleras rotas, aunque habia algunas zonas mas osucuras, donde las ventanas habian sido tapiadas a conciencia por las que no os apetecia acercaros.

El grupo entro sin oposicion, atravesando la amplia entrada y siendo conducida por Daniel directos a la escalera, sin perder un minuto. Subir las escaleras resultaba facil, nada os lo impedia....

Sinceramente, habiendo hallado donde se encontraban los muchachos, lo más sensato para él hubiera sido acercar la furgoneta lo más posible, lanzarles una cuerda para que pudieran atar en cualquier lado, y que descendieran por la misma. Habría sido fácil y sencillo, pero no parecía ser ese el estilo de los guardianes, así que se limitó a asentir, preparar su arma por lo que pudiera ocurrir y ocupar su sitio al final del grupo como le había dicho Mark.

Avanzaba junto al resto, pistola en mano, atento a todo lo que se moviera. La presencia de los infectados se hacía demasiado notable, podían escucharlos, notar como se movían de un lado para otro buscando algún lugar donde atacar a su presa, que eran ellos en aquel momento.

Tragó saliva, sobre todo al ver la extraña figura que habían hecho con los huesos humanos, y no dijo nada. No hablaría mientras estuvieran en aquel lugar, salvo que fuera realmente necesario.

Bruce resoplo, la situacion no le gustaba. Comenzaba a pensar que la idea de la cuerda no era tan mala... salvo cuando recordo las cosas que podian tirar esos cabrones por las ventanas y lo poco divertido que seria descender tres pisos por una cuerda esquivando impresoras o sillas.

No dijo nada, estaba demasiado concentrado. Igual que la otra vez, entrar habia sido demasiado facil...

Jordan miro las ventanas, esperaba que el sol durase las suficientes horas como para salir de alli vivos. El olor no era nada agradable, sientio arcadas pero se contuvo y siguio adelante hasta llegar a la escalera.

- ¿Y si les gritamos que bajen?.- pregunto Jordan.- Podriamos encontrarnos en un piso intermedio y seria mas rapido ¿No?.- pregunto mirando a Marc. Ella habia hecho misiones antes, pero no de ese tipo, mas bien de reconocimiento y no sabia si habia dicho una tonteria o algo con sentido.

Los infectados ya sabian que estaban dentro pero no podian salir de dia.

No me podía creer como estaba mi antigua universidad. De hecho, no lo quería creer. La situación dentro del edificio era dantesca. Todo estaba tirado por cualquier parte a la que mirase. Las ventanas estaban rotas y lo peor... Había restos de cuerpos humanos en casi todas las estancias en las que miré al pasar.
Decidí no mirar más que al frente y así, intentar minimizar las horribles visiones de piernas, o mejor dicho, de huesos de piernas y brazos que había por doquier.
Y encima no hacía más que venir a mi mente el recuerdo de aquella pesadilla. Buf.
Mi primera salida de la zona segura no estaba siendo nada atractiva y mucho menos divertida. No quería ni imaginarme por un momento como deberían estar pasándolo lo supervivientes que estaban allí arriba, escuchando aquellos gritos de desesperación de los infectados locos por atraparlos.

Nos movemos rápido a través de las habitaciones, tenemos que ser como un buldozer, avanzar sin parar, rápidos y silenciosos. Que de un sólo vistazo saber que pasa. Me viene a la mente aquel trozo de revista que leí hace muchos años en la consulta de un dentista. En la portada aparecía un cuarentón con coleta rubia, camisa abierta y pantalones bombachos negros. Debajo en letras rojas, ponía, "Aprende a ser un Ninja". Será cabrón, un ninja dice, quizás tendría que haber ido a un curso de esos...

Tengo el machete en una mano y la mochila bien sujeta en la espalda, en la otra mano la linterna.

Daniel comenzo a subir la escalera, Bruce camino detras suya pero se detuvo notando algo raro. Era como un crujido, algo metalico desgarrandose pero muy sutil. Marc comenzo a subir y cuando estaba a punto de preguntar a Bruce porque no seguia subiendo y que motivos tenia para bloquear la escalera, esta, sencillamente se desplomo.

Jordan iba por el quinto escalon pero reacciono rapido, igual que Samuel y ambos lograron saltar de la escalera al suelo un segundo antes de que esta literalmente desapareciera, dejando un agujero y una nube de polvo blanco.

Daniel, Bruce y Marc cayeron directamente al sotano.

Pudo ser aluminosis, pudo ser un sabotaje, una trampa preparada o los cuantiosos daños que los infectados hacian por doquier pero al menos estan vivos y habian caido en algo blando.

Tenian linternas y cuando el polvo se asento pudieron ver que estaban en un viejo cuarto donde se guardaban balones, raquetas y afortunadamente colchonetas.

Aun asi los cascotes os dejaron magulladuras y golpes como recuerdo de la caida. Samuel y Jordan se habian salvado de caer pero el ruido no habia pasado por alto a los infectados que vivian alli abajo.

La puerta cerrada de aquel cuarto comenzo a ser golpeada por decenas de manos furiosas.

Daniel recordo que siempre se cerraba por fuera para evitar que los chicos entraran alli para darse el lote o robar balones pero no era una puerta de seguridad, no aguantaria eternamente.

Samuel cerraba el grupo, atento a todo lo que pudiera aparecer. Comenzaban a subir las escaleras que daban al piso de arriba cuando notó un extraño crujido. Al parecer Bruce también lo había oído, pues se detuvo justo antes de que el suelo cediera bajo sus pies y las escaleras se fueran para abajo.

Saltó hacia atrás como un acto reflejo y logró llegar de nuevo al descansillo. – Joder!!!. – exclamó al ver como se desplomaba todo y caían sus compañeros.

Se acercó hacia el agujero que había quedado y se agachó. – Mark! Bruce! ¿Estáis bien?. – comenzó a llamarlos, esperando escuchar algún tipo de respuesta por su parte, aunque sin alzar demasiado la voz para no atraer a los infectados. En ese momento, se dio cuenta que Jordan también había conseguido eludir la caída.

Jordan logro apartarse a tiempo del desplome de la escalera.- Ire por una cuerda.- Aviso a su compañero. En la furgoneta tenian y era mas seguro que treparan a que caminaran por los sotanos oscuros.- Iluminales con la linterna, los infectados odian la luz.

La ostia fue terrible.- Joder.- gruño Bruce al menos haber caido sobre algo blando, aunque polvoriento. Se puso en pie, los ruidos tras la puerta no le gustaron.- Ya decia yo que oia un ruidito raro... ¿Era una trampa?.- pregunto a Mark como si lo supiera, podria serlo pero ¿Como estar seguro?

- ¿Todos vivos? Tenemos que pensar como salir de aqui.

El machete cae a unos metros de mi después de la caída. Me cubro la cabeza por los últimos tablones podridos que caen del techo, y luego lo recupero mientras lo meto en su gran funda de cuero. Miro a mi alrededor para ver quienes estamos aquí. Obviamente una de las salidas no parece la adecuada. Así que tenemos que volver por donde hemos caído. No hay más opciones.

- Yo estoy bien Bruce, ¿Daniel?- pregunto a nuestro aturdido camarada.

Hago inventario rápido de lo que hay en la sala. ¿Hay red de volley y sus palos?, ¿las colchonetas que hay son suficientes para amontonar hasta la salida? ¿Cuanta distancia hay hasta la salida del techo? ¿hay porterías de Hokey o de algún tipo?

-Si fuera una trampa, esa puerta estaría abierta. Hay que apuntalarla como sea- comparto con Bruce lo que busco con mi linterna.

- ¡Joder!.- oisteis decir arriba, era la voz de Samuel.- ¿Mark! Bruce! Daniel! ¿Estáis bien?.

Jordan dijo algo de una cuerda pero la oisteis lejanamente. Habia unos tres metros desde el agujero al suelo del sotano.

La caída me pilló desprevenido y cuando me quise dar cuenta ya estaba en el suelo. Por suerte caímos en el almacén donde se guardaban las herramientas deportivas y eso hizo que en vez de caer sobre las baldosas, cayésemos sobre las colchonetas que estaban allí apiladas.

- Estoy bien, estoy bien. - Contesté a Mark mientras me quitaba una pequeña montaña de escombros de encima.

- La puerta está cerrada con llave pero no sé lo que podrá aguantar. Voy a buscar una cuerda a ver si podemos salir de nuevo por el agujero. - Fue lo primero en lo que pensé después de ver que la puerta estaba cerrada..

Con la linterna me puse a buscar entre los balones, los aros y demás aparatos deportivos.

Voy corriendo contra la puerta y me pongo de espaldas a ella, empujándola con mi cuerpo para mantenerla cerrada. Cualquier momento que ganemos es bueno. Con dificultad al recibir golpes en mi espalda, enfoco con la linterna la estantería modular.

- Coger esa estantería e inclinarla contra aquella pared, como una escalera- apremio a mis amigos- rápido vaciarla, usar cajas de balones medicinales y todo lo que podáis para apuntalarla.

Los gritos están resonando en mis oídos, como una promesa de muerte, y no son agradables, estoy a punto de perder los nervios, pero tengo que aguantar aquí, para que la puerta no sufra tanto los golpes.