Partida Rol por web

Tras colgar pongo el telefono en una sola vibracion no me apetecia tener mas problemas del estilo... ya casi no recordaba porque odiaba aquellos aparatos.

Si mas segui mi camino a la puerta donde se encontrara mi pequeño Sabbat.

Pusiste la mano en la puerta sin que nadie te lo impidiera. Entraste en un pasillo con puertas cerradas a ambos lados, de algunas salian jadeos de otras chasquidos de latigazos acompañados de gemidos de placer... Una puerta mal cerrada te mostro un trio de mujeres sobre decenas de cojines en el suelo... al final la puerta que ponia "no traspasar" llamo tu atencion mas que cualquier otra.

Pusiste la mano en la puerta y le oiste.- Adelante señorita Arconte.

Al abrir le viste sentado en un sillon, esperando con paciencia. Fingio aplaudirte con una sonrisa.- Bravo, lo ha hecho bien, me ha encontrado ¿y ahora que hara?

Cerre la puerta tras de mi y me acerque despacio a el, bajando de mis tacones que deje al lado de la entrada - Pues no lo se, me aburre esta ciudad, Esta noche queria tomarmela libre, dejar que hagan loq ue gusten para asi darme razones de sobra para poder pedir unca caza de sangre sobre cada uno de ellos - Si mis palabras podian insinuar "comermelos" pues era la unica manera que la camarilla permitia no desaprovechar la sangre de otro vastago.

- Y tu me has llamado la atencion, eres peculiar, y gracias a ti y a una pequeña profeta he actado los cabos que me hacian falta, asi que ahor simplemente seguia mi instinto aburrida, esperando encontrar algo bueno aqui.

Con un gesto te ofrecio sentarte en el sillon.- Hableme de esa profecia, tal vez tengamos un buen tema de conversacion.- dijo con tono enigmatico.- Yo tambien me se algunas, me apasiona el tema y ya que es su noche libre... ¿Cree que hay alguna posibilidad de tentarla para unirse al sabbat?

- Como sigas tratandome de usted a lo que me vas a tentar es a matarte mucho antes de que me divierta - Le dico sin mas sentandome a su lado, recostandome en el sofa y cruzando mis piernas mientras movia mis pies descalzos, los tacones eran algo extremadamente estetico pero de lo ams incomodo.

- Nada... tonterias de teorias de Malkavians sobre el fin del mundo y estas cosas que siempre profetizan... - Llevaba demasiados siglos escuchando sus patrañas y esperando que la luna se tiñera de rojo... - Y eres libre de intentar cambiarme de bando, pero ya te digo que muchos otros lo han intentado antes que tu.

- Muchos otros no podian ofrecerte lo que yo puedo.- dijo con total conviccion.- Ahora eres una muñeca de porcelana en una jaula de cristal que pronto quebrara... Disculpa comienzo a hablar como un malkavian pero eso puede ser bueno. ¿Profecias del fin? Me se unas cuantas sino todas... La sangre debil, la luna roja, los unos deborando a los otros... ¿Sabias que todas las profecias apocalipticas del mundo se solapan? Si se juntan todas ellas tienes la profecia completa. Es realmente apasionante ¿Quieres algo de beber?¿Algo vivo tal vez?

- No gracias, ya he desayunado y realmente no me apetece nada de lo que me puedan ofrecer - Tenia algo, no sabia el que, pero tenia algo que me hacia no matarlo y permanecer alli, algo que queria descubrir... algo que fallaba en todo aquello - Mas bien me interesaria saber que haces en este lugar, no creo qeu simplemente divertirte, y tampoco creo te tomases tantas molestias en recivirme... - Lo mire de forma directa sonriedno - ¿Realmente te parezco una muñeca de porcelana?

- Creo que por obligacion lo eres.- dijo con seriedad.- Mas por dentro ardes de pasion, tu no eres un miembro de la camarilla apolillada por dentro, eres salvaje y libre, algun dia tu naturaleza te hara tomar otro camino.- baticino con seguridad.

- ¿Que hago aqui? Mi trabajo, como tu el tuyo.- dijo sin pestañear.- El principe a caido, seria muy facil darle una patada en el culo a quien sea que pusisteis en el trono y asentarme en el... demasiado facil.- dijo con un gesto de desden.

- Estoy aqui por algo mas. Algo va a pasar, algo grande... todo indica que sera pronto y sera aqui.- dijo dejando el halo de misterio derramarse entre su sonrisa.- Los Lupinos, lo saben, el sabbat lo sabe... hasta los humanos lo notan de forma incosciente. La camarilla es la unica que lo no lo ve.

- O son los unicos que no quieren verlo - Digo sin mas refiriendome a lo estrechos de miras que podiamos ser a veces - Sigo en esta ciudad por esa razon, esta mas sucia de lo que me imaginaba, me mandaron por el simple echo de la caida d eun principe pero... hay mucho mas detras.

Me acomodo descruzando y volviendo a cruzar la piernas - Pues sinceramente te agradeceria que destronaras al nuevo principe, eso me haria mucho mas diertida la estacia aqui, aunque... menos divertida mi relacion contigo, eso me obligaria a que vieras mi fuego interior como bien dices - Comento sin poder evitar reirme.

No.. deja a Blasie en su trono de papel, que se divierta mientras le dure... Es tan previsible, seguro que llama a la pedante de su hermana para que le ayude.- dice sonriendo.- ¿Porque no visita a Seldom, primogenito Tremere y le pregunta por sus experimentos? No por los que usa a los Garou y a los Gangrel... por los otros. Leonar era un jodido naci, queria mejorar la raza... temia el tiempo de la sangre debil y buscaba formas de... evolucionar la especie. ¿Por que se lo digo? Porque seguro que se lo restriega a Blasie, que no sabe una mierda de esta ciudad y al pobre le cae un goteron por detras de la cabeza, al mas puro estilo manga.

- Visitare al primegenito tremere pero lo hare con la pequeña Amanda, que sinceramente me parece extraño que no este lamiendote la manita en busca de asilo y oder, sabe que sus dias aqui estan contados y ha dejado la lealtad en las cenizas de sus sire... - Remarco dejando claro varios factores, el que no me fiaba de ella, el que sabia que ella tenia que visitar a los tremere y... dejando claro que no lo consideraba un rival debil.

- Como ya te he dicho hoy quiero relajarme, dejarles jugar lo suficiente, que no olviden mi presencia, eso es lo mejor, el olvido, son crios aunque tengan titulos.

- Te equivocas con Amanda, yo solo le enseñe que tenia potencial... ella lo esta explotando a su manera. Yo nada tengo que ver con eso y dudo que vuelva a dejarse tratar como un perro faldero. A probado la libertad... y le gusta.

- Pero bien, nada de trabajo ¿Quiere acompañarme al teatro o prefiere cualquier otro tipo de distraccion?

- El problema es que Amanda si es un perro faldero, un pero que necesita un bozal, por muy libre que quiera ser, por mucha sangre de un antiguo que haya tomado sigue siendo una cria que mas poder del que sabe asimilar, y una marioneta demasiado facil de coger... - Si realmente esa chica tenia potencial, lo unico es que se guiaba demasiado por sus emociones...

Con sus iltimas palabras si que no puedo evitar reirme a carcajadas - ¿Teatro? Definitivamente tienes razon, nunca pense que termeniria escuchando a alguien de tu secta invitarme al teatro - Vuelvo a reirme apartando el pelo de mi cara - Eso es mas propio de nuestros estirados y refinados toreadores y ventrues...

- Soy un gangrel antitrubu incomprendido.- dijo con una sonrisa.- ¿Que mas puedo decir? Esperaba que la invitara a una horrible masacre a la luz de la luna o prefiere acompañarme a uno de los cuartos privados de este local.

- No se por lo que me juzgarian pero si por lo primero o lo segundo - Comento divertida con la situacion - Pues en esta mi secta ceo que ven igual de mal una masacre a la luz de la luna que intimar con el enamigo - Y era bastante ironico la verdad... pero yo no haia firmado las reglas, los acuerdos que imponian las leyes - Aunque por lo que se en tu bonita secta tamoco te permiten ni estar en esta sala conmigo... Mmm... ¿Como nos llamabais? ¿craneos blancos? Algo asi era hace tiempo... " si os encontrais con uno no podeis dudar en destruirlo y evidentemente no desaprovechar su sangre" - Mi tono con la ultima parte era como una imitacion que recordase, momentos de otro tiempo, de un pasado casi olvidado.

-Como en todo hay excepciones, me uni al sabbat por mis motivos no por su politica, ellos lo saben y lo aceptan porque mis habilidades les resutan muy provechosas. Mi odio a la camarilla va dirigido a mas arriba de usted... de ti.- Se corrigio con una sonrisa.- Yo, no hace tanto, tambien era un craneo blanco, un perro de la camarilla en el sentido mas literal y si, supongo que hablar con usted es un riesgo e intimar seria un delito muy grave... aunque siempre puede decir que domine su mente y la oblige... normalmente funciona como excusa.

Me volvi a reir divertida y me acerque a el mas de lo propio, dejando mis ojos clavados en los suyos, manteniendo una escasa distancia entre ambos, mas que una accion de seduccion era... un alarde de que no temia sus juegos mentales. - Esa leve escusa puede que se le haya pasado a la pequeña Amanda pero cariño... conmigo no seria tan sencillo, soy antigua y por mi puesto tengo varios rituales encima, un arconte no puede permitir que manipulen su mente tan facilmente, si no... no cumpliria muy bien su trabajo - Le digo de forma suave sin apartarme lo ams minimo - Ademas no quieres intimar conmigo, quieres ver que sucederia a la par que mantenerme distraida y seguramente apropiarte de un poco de mi sangre...

- En tal caso, Sophia, diremos que fueron tus ojos los que me dominaron a mi.- dijo y sin mas se atrevio a besarte en los labios, un beso atrevido y no falto de intencion pero mantuvo su lengua quieta dentro de su boca.

Me quede quieta reciviendo aquel beso, estaba claro que era una gran manera de evadir lo ultimo que le habia dicho, queria algo de el y esa era una manrea facil y no agresiva de conseguirlo, pues a mi tambien me interesaba apropiarme de su vitae...

Cuando se separo deslice mis labios por su mejilla hasta su oido - Disfruta esta noche... pues sera la ultima concesion que te conceda... - Dije dejandole claro que ya no habria mas juago despues de hoy.

El se rio con una sonora carcajada.- Eso ya me lo he oido antes.- declaro y despues añadio en un susurro.- Estoy preparado para mañana y para no ver mañana desde hace años, Sophia. Me arriesgo al limite en cada accion sabiendo que cada uno de mis pasos me conducira ha las cenizas. Por ello, si mi fin esta cerca ¿Que me impide asomarme al limite y ver que hay al otro lado?