Partida Rol por web

El Retorno al Templo del Mal Elemental.

Parte 1: Hommlet y sus alrededores.

Cargando editor
08/11/2010, 09:42
Shafir

Como el mago había predicho, a Aelin le costaría mucho menos esfuerzo averiguar algo de los lugareños. Shafir logró saber que había un mercado "por arriba del pueblo", "yendo por ahí y luego pregunte", "tengo mucha prisa", etc. Pero Aelin lograba direcciones, indicaciones, invitaciones y piropos, todo en una, así como preguntas indiscretas en voz alta como: Ese tipo raro no será tu novio, verdad?... Menos mal, pobrecilla.

Así que algo divertido, por no sentirme con ganas de lanzar proyectiles mágicos, volví a ofrecerle el brazo a Aelin y a caminar a ritmo de paseo hacia las indicaciones detalladas que le habían dado a la hermosa elfa.

Pobre Aelin que me tiene al lado. Jejeje. Que buenas gentes, qué discretas y acojedoras con los que quieren, claro. Luego no me extraña que vengan magos malvados y se empeñen en levantar cementerios contra los habitantes de estas poblaciones, en invocar demonios, provocar terremotos o edificar templos elementales y maléficos. Jejeje.

Cargando editor
08/11/2010, 09:59
Nera

Nera estaba juguetona, pero su amo le obligó a caminar a su lado. Luego empezó a preguntar a las gentes y algunos le hacían sentirse menospreciado. El mago sentía algo de rabia y, sin querer, se lo trasmitía a su familiar.

Nera se puso alerta y se escondió de la mirada de los pueblerinos. Uno en concreto le contestó a Shafir algo que no le gustó nada. Así que fue por detrás y le arañó en las ataduras de su alpargata labriega. Tres pasos acelerados más adelante, perdía una de ellas y pisaba una acumulación de residuo equino blando y resbaladizo. Resbalaba y se embadurnaba el pantalón.

Mientras sucedía esto, Nera disimulaba limpiándose una pata con su lengüita rasposa.

Mierda! Sonó desde el suelo sucio. Alguien expresaba lo que veía y sentía con sorpresa y repugnancia.

 

Cargando editor
08/11/2010, 20:25
Director

Cuando caminais dirección el viejo mercado veis una silueta que os resulta familiar, es Brannagh, parece que ya ha echo su recado y esta de vuelta. Ya es media tarde, y el viejo mercado no estará abierto mucho tiempo mas pero si lo suficiente para que vosotros podaís llegar.

Cargando editor
08/11/2010, 23:57
Aelin

Conseguir indicaciones sobre dónde estaba el mercado no me resultó extremadamente dificil... es más no sólo conséguí las indicaciones para ir al mercado si no a unas determinadas casas a las afueras de la ciudad... en fin ¿para qué requerirían mi presencia alli?

Una de las ocasiones que nos cruzamos a un pueblerino que amablemente me contestó dónde estaba el mercado, echó una pequeña mirada a Shafir, y como curioso que era me preguntó si era mi novio...

Oh, ¿Shafir? jajaja ¡qué dices! este mago tontorrón digo mientras entorno una mirada de afecto hacia Shadir no, no de momento no, es muy joven para mí...  y una sonrisa de complicidad sale de mis labios.

Nada más termianr esta conversación tan...no se íntima supongo para algunos, para mí tan normal como casi dejar abierta la puerta de mi casa...

Noté por el rabillo del ojo cómo Nera iba sintiendo las emociones de su amo, al ser tan fuertes y el vínculo tan grande que existía entre ellos era demasiado evidente...

Cargando editor
09/11/2010, 00:05
Aelin

Después de pasear un rato lentamente manteniendo una conversación agradable con Shafir, mientras nos reiamos de las travesuras de Nera pude divisar un conocido algo más adelante de nosotros, que precisamente iba en dirección contraria a nosotros...

   Shafir, ¿no es ese Brannagh? digo ya contestandome a la pregunta por mis agudos sentidos de elfa...

Sin esperar a que Shafir comenzase siquiera a responderme a la pregunta que le había hecho, me suelto de su brazo y empiezo a mover los mios agitadamente...

   ¡¡Brannagh!! ¡¡Brannagh!! salgo medio corriendo disparada hacia él y me pongo a darle saltitos delante

   ¡¡Holaaaa!! Soy yo Aelin, ¿me recuerdas no? ¿Qué compraste? digo mientras miro muy curiosa los achiperres adquiridos

Cargando editor
09/11/2010, 00:41
Brannagh

Me dirigía a la posada suficientemente ocupado en mis pensamientos como para fijarme en ningún detalle de la ciudad cuando de repente alguien grita mi nombre y poco después aparece Aelin saltando frente a mi y preguntándome sobre una compras que no he realizado.

- Nada.

Respondo quizás demasiado seco, pero es fácil corroborar que no llevo ningún vuelto de más, ni de menos, desde que me separé de ellos.

- ¿Acabasteis ya vuestras compras?

Añado buscando a alguien más entre la gente del mercado, porque según recordaba Shafir había dicho que iría con ella...

Cargando editor
09/11/2010, 09:00
Shafir

El guerrero buscaba a Shafir con la mirada después de hablar con la risueña Aelin.

Hola Brannagh, no hemos hecho compras todavía, nos demoramos en la posada. Allí están los demás ahora mismo. Qué tal te ha ido?

Al acercarse al austero compañero, Shafir se dio cuenta de que todo el mundo estaba abandonando el mercado.

Vaya, no sé si habremos llegado algo tarde. Nos han indicado el mercado, pero lo cierto es que busco alguna tienda donde pueda encontrar algo de magia. De lo demás me encuentro pertrechado. Aelin, tú tienes que comprar alguna cosa de aquí? Será mejor que nos demos prisa. Compadre Bram, supongo que nos echarán pronto, podéis esperar unos minutos y así nos cuentas lo que hayas averiguado?

 

Cargando editor
09/11/2010, 11:06
Brannagh

El que la gente comience a irse resulta un detalle a tener en cuenta después de haber hablado con Tarcil. A partir de ese momento cualquiera podía ser un posible enemigo que podría aprovechar para tendernos alguna trampa cuando estemos sin ningún curioso. Empiezo a mirar suspicaz a la gente, como si todos pudieran ser ese enemigo dispuesto a atacarnos.

- Tiradas (1)
Cargando editor
09/11/2010, 12:13
Shafir

La gente se iba y el mago no sabía si era por la hora o porque pudiera haber algo que los espantase. Su mente era rápida para analizar y captó algunos de los más mínimos detalles del entorno. Se le escaparía algo importante?

 

- Tiradas (1)
Cargando editor
09/11/2010, 12:18
Nera

La gatita también era una astuta fiera con los instintos a flor de piel. Pero su posición a ras de suelo no le dejaba ver mucho más que pies. Sin embargo su oído estaba atento. Un transeunte que le quisiera pisar la cola o una rata escurridiza no podían pasarle desapercibidos.

Para ver mejor saltó a un tonel cercano a su amo. Quizá luego pudiera ver algo más.

- Tiradas (2)
Cargando editor
09/11/2010, 20:44
Aelin

    oh vaya, pues entonces no entiendo para qué fuiste al mercado ummm digo mientras le sigo revisando con la mirada.

Al darme cuenta de que busca a alguien más a mi alrededor me doy la vuelta al acordarme de que he dejado a Shafir por detrás de mi cuando había salido corriendo...

Cuando llega a mi lado sonrío aún más y justo cuando iba a decir algo Shafir se me adelanta...Como tonta me quedo con la boca abierta pero rápidamente la cierro...

Vi a Shafir contemplar a la gente que parecía ir en dirección contraria a nosotros, igual que Brannagh...

    Eh Shafir ¡Mira eso! todo el mundo está volviendo del mercado...¡Eso puede significar aventura! digo mientras sonrío tímidamente no seas tan trágico Shafir, nada de compras tranquilas, esa costumbre que tienen todas las mujeres de estarse miles y miles de segundos delante de un puesto sólo para saber qué collar se van a poner es absurdo, yo no soy así, me gusta regatear por lo que quiero, y soy muy directa... ummm ¡cuánto por conocer de mujeres como yo! digo gesticulando mucho con las manos y exagerando mis plabras con los gestos...

Intento parecer relajada con la conversación animada que tengo, aunque realmente estoy atenta al por qué de la movilización de la gente...

Quizá alguna pelea... quizá el mercado sea en la otra dirección... ummm interesante... definitivamente QUIERO ir al mercado pienso mientras una chispa pasa por mis ojos

Agudizo mis orejas lo máximo que puedo, cualquier sonido anormal será una señal de qué ocurre...

- Tiradas (2)
Cargando editor
11/11/2010, 15:26
Shafir

La risueña pícara intervino como si no pasase nada, pero en realidad no pasaba gran cosa.

Tenéis razón, poco sé de las mujeres, pero convivir contigo me ha enseñado que no hay dos iguales. Por ello pienso que es una quimera conocer a las mujeres, pues supondría conocer a cada una de ellas. Creo que se puede dedicar toda una vida para conocer a una mujer, así que no me salen las cuentas Aelin. Jejeje.

Bien, si Bran se digna a contestarnos algo en vez de mirar a todos como si algo misterioso supiera, pero no dice, podremos seguir nuestro camino. Eh, Bran, nos dirás algo de lo que estás pensando o podemos, sin miedo a ofenderte, dejarte en paz y hacer algo de provecho?

Dijo Shafir algo aburrido del mutismo del guerrero.

 

Cargando editor
11/11/2010, 23:22
Brannagh

Nadie parecía esconder secretos a la luz del día, aunque éste se encontrase cercano a su fín, es por ello que mis sospechas no se vieron confirmadas mientras que la gente continuaba su camino ocupada en sus tareas.

- No es lugar para mostrar mis pensamientos.

Sentencio, consciente de que mis sospechas no deberían ser formulada en mitad de la calle donde cualquiera podría enterarse de ellas.

- Acabemos vuestras compras. Seguro que si os acompaño terminais antes.

Concluyo porque cualquier comerciante se lo pensaría dos veces el regatear demasiado conmigo cerca, por no mencionar el detalle de que será menos provable que nos pase algo cuantos más seamos y quizás, sólo quizás, escuchemos algo interesante entre el gentío.

- Tiradas (1)
Cargando editor
11/11/2010, 23:41
Shafir

Sólo aceptaré vuestra compañía si prometéis que no asustaréis a los tenderos aunque no quieran bajarnos el precio de algo. Pensad que esta vez me gustaría poder volver a una ciudad con la capucha bajada. Jejeje. Es broma, todos sabemos que eres un gran diplomático. A mí me convences de todo solo con un gruñido. Por cierto, Bran, no vendrías del mercado dando un rodeo, verdad?

Insinuó Shafir con, quizá demasiada sutileza, que la gente huía de él.

Cargando editor
11/11/2010, 23:55
Brannagh

- De la capilla de San Cuthbert.

Le respondo, dejando claro que ni me he acercado al mercado de la villa.

Cargando editor
12/11/2010, 00:13
Shafir

Estupendo, jejeje, entonces preguntemos dónde venden objetos mágicos en este pueblo.

Aelin, querida, con tu encanto especial podrías averiguar donde? Atento Bran, esto puede ser interesante.

Shafir tenía esperanzas de que hubiera alguna tienda donde un aventurero pudiera comprar algún artículo mágico. Pero recordaría Homlet los viejos tiempos o ya no habría mercado para baratijas hechizadas, pociones y pergaminos?

Cargando editor
12/11/2010, 16:19
Aelin

    Shafir, qué exagerado eres... si no recuerdo más en las costumbres de mi tierra cuando elijes a una mujer la elijes para toda una eternidad y con una carcajada termino mis comentarios sobre mujeres...

  Ya tendrá tiempo de descubir por sí mismo...ya...

Viendo cómo Shafir preguntaba a Bran y lo único que conseguía era apenas juntar cuatro monosílabos empecé a aburrirme... realmente no tenía que comprar nada en el mercado pero no quería quedarme sin hacer nada viendo cómo los demás buscaban cosas... podia investigar a mi manera...

Cuando Shafir por fin me indicó a hacer algo volví a recuperar la postura adecuada de una dama elfa, con la cabeza bien alta...

Uno de los hombres que pasaban en dirección contraria a nosotros se quedó mirándonos fijamente, y ya que tenía tan cerca la oportunidad, no la desaproveché.

Me solté del brazo de Shafir y fui andando despacio hacia el lugar donde el hombre seguía contemplándonos.

  Buen día hace señor, ¿No es cierto? Mi nombre es Aelin y tengo el placer de conocer a dejo un tiempo para que me diga su nombre mientras le tiendo la mano Veras mis amigos y yo estábamos dirigiéndonosal mercado por donde anteriormente nos habían dicho, y sinceramente o nos estamos equivocando mucho de dirección, o el mercado está cerrado o pasa algo... ¿De todas formas podría indicarme por donde queda? digo mientras gesticulo incesantemente con las manos

- Tiradas (2)
Cargando editor
12/11/2010, 18:49
Shafir

Toda la vida de un elfo son unas cuantas de un humano. Los elfos hombres no sé si tienen una paciencia infinita o se conforman con cualquier cosa. De todas maneras, los humanos no podemos comprenderlo. Aunque viéndote, Aelin, cualquiera diría que sí a despertar todos los días a tu lado.

El mago guiñó un ojo a la elfa y le dejó interactuar con los lugareños.

Jejeje. Se reía por dentro. Era un divertimento verla relacionarse con los pueblerinos, los cuales se debían quedar fascinados.

OOh, pero qué despistada, no ha preguntado por lo que le dije. Esta juventud élfica, necesitan al menos 100 años para que les entre el juicio. Jejeje.

Pssst, pssst! Intentó llamarle la atención. Pssst, pssst!

Cuando por fin se giró la elfa, el mago, muy gracioso, gesticulaba como si estuviera lejos y hablaba muy bajito.

Magia, Aelin,... dónde venden magia?

Cargando editor
12/11/2010, 19:18
Nera

Nera se había dormido en este rato muerto. Los gatos tenían ese don. Pero la intervención de Aelin le había hecho levantar un ojo en lo alto del tonel donde podía otear lo que pasaba. Se disponía a cerrarlo de nuevo, pero cuando pudo ver a su amo gesticular como si fuera un mono, pensó que estaban jugando a algo sin ella. Se puso de pie ipsofacto (otro don de los gatos) y de un salto se puso a la altura de su amo. Estiró las patas delanteras y se puso de pie un instante hasta que perdió el equilibrio. Luego lo intentó de nuevo y daba saltitos hasta que su cuadrupedad, le llamaba a una posición más estable.

El campesino al que paró Aelin se quedó mirando absorto por lo que veía. Un gato bailando! Dónde se había visto aquello? Su amo no se daba cuenta de nada.

Cargando editor
13/11/2010, 12:25
Pueblerino

El pueblerino ve llegar a Aelín y tras darle los buenos dias este se extraña un poco - Buenos días pero si es de noche casi? - pensó este. - Esto buena tardes señorita, si mira usted allí ese es el mercado pero ya esta cerrando creo que sería una mejor opción que vinierais por la mañana - informa este a la picara con una sonrisa en la cara.