Partida Rol por web

Tras una noche agitada en la que conseguís recabar algo más de información, la nota de Andreas Markav confesando sus crímenes pasados y la nota de suicidio del marido de Belle, en la que deja claro que él liberó al Segador, os retiráis a las habitaciones para descansar y recuperar energías. 

A la mañana siguiente el día despierta con niebla, casi tan densa como la que se echa por las noches, frío y húmedo debido a una llovizna que cae fina pero implacable. En el salón de la posada ya hay un par de ciudadanos hablando con el posadero. Temblorosos y asustados, comentan la muerte de Andreas y la aparición de un segundo cadáver esa misma noche. Al parecer Victor Dargonasti ha aparecido ahorcado en su casa...

Bajo con una manta de la cama por encima de los hombros saludando a los parroquianos, -¡Buenos días!- y me siento con mi vaso de leche frio y unas galletas a desayunar.

MIro por la ventana y me da un escalofrío mientras me arropo aun mas. Palpo mi pecho y mis saquito de monedas. Luego me estiro levantando la manta con las manos pro enciama de la cabeza y me pongo un rato delante del fuego.

Mmmm, debería ir de "compras" aprovechando la niebla, necesito una pala jejejejeje -pensé que en establo hay alguna seguro para coger prestadas- y un equipo de escalada, últimamente me estoy quedando colgado de muchos sitios.

Me quedé sentado esperando a ver si bajaban los demás y ay les pedí el desayuno para que lo tuviesen preparado al bajar.

Lo cierto es que no habia descansando apenas nada esa noche. Entre lo tarde que llegaron y todo lo acontecido, poca ganas tenia de levantarse...Ya me avisaran Se dio media vuelta y siguió durmiendo.

Al menos mis marionetas estaban en su carro, descansando. El enano de cerámica incluso me dijo que porqué venía tan cansando, pero no quise contestarle, puesto que había vivido demasiadas experiencias ese día. Cuando me reuní con mis compañeros, antes de bajar a desayunar (si es que el posadero aún no nos escupía en la misma cara nada más vernos), les comenté algo.

Quizá esa tal Belle, la de la nota, haya renacido... -dije-. Se que es una locura, pero debemos ir al cementerio y desenterrar su tumba. Si no está allí... creo que podremos afirmar que fue ella, pero si sigue su cuerpo en su lugar... habría que pensar en que alguien de Barovia esta tras todo esto... y alguien vivo.

Shivan se tomo un momento para limpiarse lo mejor posible antes de bajar a desayunar, no había tenido la oportunidad la noche anterior y el maldito gato se había estado burlando de ella por eso a pesar de que el estaba peor.

Se sentó lo mas lejos posible del gato y se estiro antes de mirar a Boront con una mirada seria antes de decir - No digas estupideces.

Les veo aparecer a todos menos a la chica que al parecer se queda durmiendo y masticando otra vez la comida de forma sonora, muevo la cuchara apuntando al enano:

-¡Yo también quiero ir a desenterrar cuerpos! -miro a los parroquianos y bajo la voz- hay mucha niebla, y eso nos dejará actuar por el día sin que se nos vea, al menos hasta que escampe, casi tengo un plan trazado y todo, pero si vamos y no está su tumba ¿qué hacemos?

Si no es esa tal Belle, alguien en su nombre está acabando con todos los que hicieron mal antaño... Algo me dice que su cuerpo no está allí -dije a Shivan sin reprocharle su crítica-. Por una vez el maldito hombre gato y yo estábamos de acuerdo.

-¡Pues vayamos! -comenté pasando un brazo por el hombro del enano.

Desde le comedor me pongo a gritar:

-¡SEÑORITA MIRRA, SE LE ENFRÍA EL DESAYUNO Y YA NOS VAMOS!

En voz mas baja a los demás:

-Debe tener un antepasado de lirón esta chica...

La chica se gira dando la espalda a la puerta y poniéndose la almohada en la cabeza.... Dioses que pocas ganas tenia de levantarse.
Ya... ya va... enseguida me aseo y bajo. Estáis todos despiertos?
Con la noche de estress y movida que habían tenido, no entendía como tenían ganas de levantarse.
Se aseo y se pertrecho como cada mañana. Bajo pesadamente y con desganas la escalera hasta llegar a la mesa donde estaban ellos, dejándose caer en la silla.
Buenos días, espero que halláis descansado bien. Que hay para desayunar?

Lo cierto que con las prisas de la investigación y el cuerpo, no había desayunado. Esperé a que Mirra bajase para tomar las oportunas viandas en la taberna, y así partir con el estómago preparado.

- Aquí tienen el desayuno, señores - dice el tabernero poniendo un cuenco con tortas fritas y huevos revueltos con embutido. 

Con el estómago bien lleno y las energías renovadas, salís de la taberna todos. El día está nublado, con niebla y un frío que cala hasta los huesos. Lo primero que os llama la atención son unos gritos que provienen de la plaza principal, donde hay una multitud reunida. Al acercaros descubrís con horror la lóbrega figura del Segador de Medianoche, que observa a todos los acongojados curiosos mientras sostiene, desafiante, una lanza ardiente en su mano izquierda.
Algunos milicianos han llegado y le increpan, asustados, para que baje el arma, pero la criatura no les hace caso. Cuando se ha asegurado que todo el mundo lo observa apoya con fuerza la lanza en el suelo.

Se produce un ligero temblor, como si una carreta descontrolada pasara junto a vosotros. La tierra comienza a abrirse lentamente para formar con letras de fuego una serie de nombres. La milicia, henchida de absurda valentía, ataca al Segador, pero sus golpes lo traspasan como si fuera un fantasma.

Los nombres grabados a fuego en el suelo son los siguientes:

Malcolm Van Hutter
Elisa D´Averc
Mirra Cinnamon
Gerard D´André
Boront Siembravientos
Shivan
Hank Williams

Cuando el último de los nombres queda grabado en el suelo, se forma junto a ellos el dibujo de una lápida e inmediatamente después se desprenden de la tierra y se colocan en posición vertical, como si fueran losas reales. Comienzan a escucharse gritos y llantos, y el Segador desaparece entre una densa nube brumosa...

Asorta, como si fuera una simple espectadora  que no puede hacer nada mas que mirar, despues de todos los hechos mirar los nombres y reconoce la gran mayoria, quizas sin pensara un poco mas, todos, pero en ese momento no estaba para eso. Terminado de leerlo, mira a sus compañeros y dice con una sonrisa fria

Deberiamos tormanolos como una indirecta?

Shivan se frota las cienes por el comentario de Mirra y simplemente dice - Eso me parece muy directo.

Ella observa a la multitud un momento, acomoda su capa y dice: - Tenemos que encontrar de donde carajos salio ese amuleto. - Se giro buscando Schicksal y cuando lo encontró, dijo a todo pulmón para que no pudiera escapar de la multitud: - ¡Gato roñoso! ¡Dame la nota que le robaste al ahorcado!

Me giro y digo:

-¡Eso roñoso! -señalando a cualquier persona que tuviese detrás mio- ¡dale lo que te pide la gata rabiosa!

Me acerco a ella y en voz mas baja le digo:

-Sino quieres que hunda tu sucio hocico de un cabezazo aquí mismo, ciérralo necia -mi mirada no era la de siempre, algo había cambiado en mi de repente- y ahora mismo nos vamos a reunir los cuatro en algún sitio mas acogedor y sin tanta gente, ya que tenemos mucho de que hablar, sobre todo de esa nueva lista que ha aparecido ahí en el suelo, de quien sale, quien no  sale, y por qué. Y si sabéis que os conviene, no llamaréis mucho la atención, ya que todos estáis en peligro de muerte, y puede que yo sea el único que tenga suficiente poder para salvaros. El amuleto es lo de menos, lo importante es lo que pasó en la sala del ahorcado puesto que como está muerto, los que le hicieron daño han de morir y nadie lo podrá evitar, ahora mismo hay cosas mas importantes de las que tenemos que hablar.

Comienzo a caminar hacia la posada mientras voy remugando:

-Debería irme como había pensado y dejar que se  los coma a todos, la gata primera por bocazas, a veces mas que gata parece cocodrilo.

¡Maldición! -dije abrumdo tras ver huir a ese Segador fruto de los infiernos-. Y entonces me di cuenta que había nombres ante que los nuestros, y también después...

¡HOMBRES Y MUJERES DE BAROVIA! -dije en alto, justo antes de que se dispersase la multitud y mientras Shicksal ya se iba-. MI NOMBRE ES BORONT -si: era una especie de discurso, y yo no sabía captar con fuego la atencio (bueno, podría, pero...), y por ello lo hice con la palabra. Yo era bajo, pero mi voz podía "yerguerse" más allá de las montañas más próximas-... BORONT "SIEMBRAVIENTOS"... SIMPLE VIAJERO, Y SÉ QUE EN ESTA VILLA HABITA GENTE HONRADA COMO VOSOTROS, PERO NO SÉ SI GENTE VALIENTE... MI NOMBRE Y EL DE MIS COMPAÑEROS SE HALLA "ENLAPIDADO" AHORA, Y POR ESO DOY UN PASO AL FRENTE -y di un paso hacia adelante-. ¿QUIÉNES SON EL RESTO QUE AQUÍ SE HALLA? ¡DAD UN PASO HACIA DELANTE TAMBIÉN! ¡HEMOS DE DESCUBRIR TODOS JUNTOS EL PORQUÉ DE ESTA AMENAZA!

Esperaba que el resto de personas con de aquellos otros nombres apareciera. Quizá pudiéramos encontrar cosas comunes con nosotros y averiguar porqué ahora estábamos amenazdos por ese demonio.

El sheriff, y sus hombres, empiezan a despejar la zona e intentan tranquilizar a la gente. Aunque intenta ocultarlo, se nota que Gerard también está aterrado pues su nombre es uno de los que aparece en la macabra lista del Segador.

Aquellos que escuchan el discurso de Boront dan un paso al frente y podéis observar sus caras. Son gente que no habéis visto en vuestra vida, como el resto de ciudadanos de Barovia.
Puede que antes las víctimas del Segador tuvieran algo en común, eran los asesinos de Belle, pero ahora es como si los hubiese elegido al azar... aunque algunos de vosotros también estáis dentro de la lista.

- Tranquilos, no pasará nada. Esta noche, aquellos que hemos sido nombrados por esa sombra pasaremos la noche juntos en la Iglesia. Sabiendo cuáles son sus intenciones estaremos preparados. Ahora por favor, regresen a sus quehaceres...

Los aterrados ciudadanos se dispersan y Gerard se acerca a vosotros, con el sudor perlando su frente y la cara pálida como una pared.

- ¿Qué demonios era esa cosa? - pregunta sin dar crédito a lo que ha visto - ¿De dónde ha salido? ¿Y por qué está asesinando a los vecinos de Barovia? Esto se nos está hiendo de las manos. Vosotros también aparecéis en la lista. Si habéis descubierto algo, este es el momento de contarlo todo...

Perdone Sheriff pero aun no sabemos que sabemos... Dice la chica encogiéndose de hombros.
Lo de juntar a todos de la misma lista, no seria facilitarle las cosas a ese asesino?