Partida Rol por web

Guillem mira horrorizado a su señor. Este buen hombre ha perdido el juicio definitivamente. Necesita un sanador. O tal vez esté encantado. Necesita un cura. Mira a Serapio. En cualquier caso de ninguno de ellos disponemos hoy aquí.

Si, ehmm... mi señor, yo ¿voto? por salir de aquí. Creo que es necesario para todos. -se gira hacia Serapio- Y, de vender el caliz, nada.

No dudaría en ir a una muerte segura por su honor o el de su señor. Pero, ¿una votación?

Bah... que estupideces estoy diciendo!! - se baja del caballo, coge una piedra y la tira a traves de las imagenes de los seres - si tiro esta piedra y oigo que rebota quiza... estos son solo una imagen un espejismo... - sujeta el caliz Serapio... - le da el caliz al cura de nuevo, se monta en su caballo y sin el caliz cabalga - que Dios me ampare - atravesando al fantasma por la niebla.

Guillem, que presencia otro cambio de humor del noble, reacciona, no puede permitir que su señor afronte estos peligros solo, y espolea a su caballo, partiendo detrás de Don Julián al encuentro con los seres.

Ahhhhhh!!- grita el soldado con la maza moviéndose en circulos sobre su cabeza.

Don Julián se dispone a atacar al jinete sin cabeza con la espada desenvainada cabalga sobre su caballo dispuesto a hincarsela para defender a los demas visto que es la unica forma de salvar a los inocentes debe pasar por donde estan el trio de espectros - que Dios me ampare, si he de morir sera luchando... como siempre he hecho... - mientras cabalga su mirada fija se clava en un punto fijo concentrado y por su mente pasan todos los recuerdos de duras batallas...

Me guardo el caliz convenientemente, y de la manga de mi toga saco mi cuchillo...

No pienso luchar, pero siempre viene mejor prevenir que curar. Además, ahora no es el mejor momento para huir...

Don Julián carga lanza en ristre contra el jinete sin cabeza que reacciona tarde . EL jinete esquiva la lanza en el ultimo momento y esta se clava en la pierna izquierda del jinete atravesándole la pierna.
A don Julián le tiembla la mano de la fuerza del impacto y no puede evitar dejar caer la lanza al suelo. Ambos se giran y el Jinete enristra la lanza para atacar a Don Julián que desenvaina su espada y agarra el escudo con fuerza listo para recibir el ataque.

"hemos empezado, que alegria" digo para mis adentros.
Tenso el arco y preparo mi flecha, buscando un punto donde pueda atacar.

Guillem, que iba justo detrás de Don Julián es testigo directo del duro impacto, y haciendo un quiebro, arremete contra el gule que se haya a su derecha. ¡Muere, criatura del Averno!
Y, acto seguido, descarga la maza sobre el ser con todas sus fuerzas.

Guillem ataca con su maza al gul dándole en la pierna izquierda, el impacto ha sido fortísimo y tanto el gul como Guillem estan apunto de caer al suelo del golpe. El mazazo le abre la carne del muslo izquierdo al Gul que lanza un grito de dolor.
El Jinete sin cabeza carga contra Don Julian empuñando la lanza, Don julián levanta el escudo intentando defenderse pero es inútil, la carga del jinete es perfecta y pese a que Don Julián lleva yelmo , la lanza atraviesa metal y carne y Don Julián sale despedido de su caballo volando por los aires hasta caer finalmente bocaabajo inmóvil.

El gul1 que estaba a la izquierda del jinete ataca a Guillem mordiéndole en el abdomen pero sus largos y afilados dientes no logran traspasar la armadura de Guillem, que queda ileso.

El gul2 con una herida muy grave en el muslo derecho muerde también a guillem pero éste esquiva el mordisco habilmente girando sobre sí mismo.

Hola! Soy el nuevo. Debo hacerme un personaje o pillo uno ya hecho?

viendo que Don Julian se encotraba tendido en el suelo y que a Guillem le atacaban 2 gules. decido tirarle al gul que no ha recibido daño aun. "para ver si puedo frenarle"
-Toma esto, engendro del demonio-

La flecha de Bizen se clava en el pecho de la criatura , pero desgraciadamente aunque ha sido un buen disparo no ha impactado en ningún órgano vital y la criatura suelta un alarido de dolor pero sigue en pie, sólo un hilillo de sangre cae por la herida abierta.

Aquí estoy. Disparo mi largo arco. La flecha de dos codos parte rauda (TUANG!, vibra el arco) yyyyy...

FALLO!

Andrés toma una flecha y apuntando cuidadosamente al gul de la derecha, tensa la cuerda y suelta pero el proyectil sale desviado y se clava en la tierra a bastante distancia detrás de la criatura.

Estaré fuera hasta domingo tarde.