Partida Rol por web

El tesoro de la Reina Dragón

Capitulo 3: El criadero dragón

Cargando editor
20/08/2020, 10:20
Égida

El informe de Leosim fue bastante esclarecedor, dando un trasfondo que Égida desconocía a todo lo que había acontecido desde que llegaron a Nidoverde. El problema es mucho más grande de lo que parecía. Allí había implicados Reinas antiguas y dos de los grupos más famosos y poderosos de las tierras: El Guantelete y los Arpistas. Y en medio de todo ello, cinco aprendices de héroes que apenas si llegaban a defender un simple pueblo. El forjado miró a Endozal, entendiendo por fin cómo se sentía el muchacho.

¿Y los huevos de quién son? ¿De Lennithon? —la imagen del dragón consumiendo en llamas al tiefling aún estaba fresca en su mente—. ¿Y qué papel cumple él en todo esto? ¿Cómo es que sirve a ese culto? Bueno, entiendo que le interesa que su Reina vuelva, pero es la primera vez que tengo trato con dragones tan de cerca.

Cargando editor
20/08/2020, 16:53
Joorin Saltolargo

Joorin se sintió abrumado por tasa aquella información. Dioses dragones, ejércitos, invocaciones... Todo aquello superaba el joven corazón del mediano. Era verdad que había aprendido mucho aquellos días y que ya no era el mismo mediano que salió alegremente de su pequeño poblado, pero jamás se hubiera imaginado verse envuelto en un lío de semejante magnitud.

Joorin suspiró superado por la situación.

Preparar la cena... Si, creo que eso sí que seré capaz de hacerlo. Sonrió a Endozal, agradecido de que esté volviera sus pensamientos a quehaceres más mundanos. - Pero nunca he cocinado para tanta gente! 

Cargando editor
20/08/2020, 19:47
Endozal Fik

Intentaba seguir pensando en la comida pero todo lo que les contó Leosim hizo que se fuera hundiendo poco a poco en la silla empequñezido ante la magnitud de lo que ocurría. Incluso él era un Arpista, un grupo de selectos héroes que hacían lo posible por mantener el equilibrio en Faerun. Sin duda todo lo sobrepasaba y cuando Egida le miró se hundió un poco más en la silla como queriendo desaparecer.

Por suerte Joorin le devolvió a su misión principal alimentar a la gente de Nido Verde y con voz temblorosa le respondió:

Yo si, tu sigue mis instrucciones y haremos que durante un breve instante olviden todo lo que se les ha venido encima. le dijo abrumado.

Cargando editor
21/08/2020, 12:09
Draenna Loranodel

Draenna escuchaba con atención la información que Leosim les estaba proporcionando, especialmente aquella que hacía referencia al regreso de Tiamat. El cuerpo se le estremeció desde los pies hasta la punta de las orejas, cuando la criatura de leyenda se le pinto como un cuadro en su mente. Se le representó como una bestia maligna y gargantuesca de cinco cabezas, cada una representando a uno de los cinco dragones cromáticos, arrasando todo lo que tenía a su paso y dejando tras de sí nada más que escombros y humeantes cenizas...

Cuando quiso darse cuenta Leosim ya había terminado su explicación y por no hacerle repetir lo dicho, aguardo a las respuestas de sus compañeros.

- Sí... - carraspeó levemente - será mejor que todos descansemos y comamos algo que nos llene el estómago antes de seguir adelante.

- Égida... - se acercó al enorme forjado. - Tú también podrás entrar en la cueva gracias a mi magia, así que será mejor que te prepares para el combate. Puede que tengas que enfrentar de nuevo a Langdredosa... - le intentó decir escrutando su mirada vacía bajo el metal - pero está vez no lo harás solo. - le dijo cuando iba a darle una palmada en la hombrera, pero se detuvo a pocos centímetros y la retiró con una forzada sonrisa.

El forjado no dejaba de ser una criatura extraña para la elfa y aunque sus intenciones parecían buenas, su mera existencia era algo que la desconcertaba y la hacía recelar. ¿Podía ese ser considerarse algo más que un constructo? No lo sabía... y ahora tenía muchas cosas sobre las que meditar que eran más acuciantes.

Cargando editor
21/08/2020, 12:51
Égida

¿En serio? —la revelación de Draenna le sorprendió. Daba por hecho que con su enorme cuerpo no sería más que un estorbo en misiones de infiltración como aquella, pero que con su hechizo pudiera hacerle invisible — desconocía cómo funcionaba su magia, pero si era cierto, era extremadamente poderosa — abría muchas posibilidades—. ¿Enfrentarme de nuevo a él?

No sabía qué sentir. El ansia de venganza era un sentimiento muy humano pero, ¿era realmente eso lo que sentía? ¿O quería comprobar si había mejorado en sus capacidades desde que combatieran por primera vez? El metal crujió cuando Égida apretó el puño, demostrando que parecía emocionado ante la perspectiva.

Gracias, Draenna. Eres muy amable. ¿Hay algo que pueda hacer por ti mientras coméis? ¿Con tu equipo?

Cargando editor
21/08/2020, 12:59
Draenna Loranodel

No... - le respondió de nuevo con esa sonrisa torcida que intentaba mostrar agradecimiento y confianza, pero que sólo era capaz de mostrar una cordialidad y cierto reparo. - Gracias... pero los druidas sufrimos cierta distorsión en la magia cuando nos vemos forzados a combatir con cualquier objeto de metal más grande que una espada. Y por ahora me las arreglo bien con mi fiel bastón. - y sintiéndose orgullosa de él, dió un golpecito en el suelo y este emitió un fulgor verdoso como si de hiedra mágica se tratara.

Notas de juego

Mecánicamente no tenemos competencia con armaduras o escudos de metal. Por lo que lo mejor que puedo llevar es Armadura de Pieles.

Aunque por alguna razón en armas no dice nada de eso ya que soy competente con cimitarras incluso.

En cuanto al arma, llevó un bastón con el Truco de Garrote que lo hace tremendamente útil ya que paso de atacar con +1 y 1d6-1 (o 1d8-1 a dos manos) a atacar con +5 y hacer 1d8+3 y cuenta como arma mágica.

Cargando editor
24/08/2020, 13:37
Director

Terminadas las apreciaciones sobre lo que haría o no llegado el momento Endozal y Joorin se dirigieron a las cocinas del pequeño castillo que estaban llevadas por una mediana de pelo largo y rizado, un semielfo que debía tener unos 15 años  en apariencia y una humana que hacía todo lo posible por complacer a la mediana que, sabiendo la noticia de que debían dar de comer a tantas personas en tan poco tiempo, había empezado a moverse por la cocina como un vendaval mientras daba ordenes aquí y allí para organizarlo todo. 

Egida, Abdali y Draenna estaban en le patio de armas, apartados hablando sobre si podría fabricar o conseguir mejor equipo del que tenían. Ellí mismo un grupo de personas estaba colocando mesas y sillas para disponerlas para el festín que ocurriría en unas horas al ponerse el sol. No muy lejos de donde estaban pudieron ver a uno de los enanos que les había acompañado que charlaba la mujer que había conducido el otro carro. En lo alto de las murallas los guardias hacían sus rondas preocupados de que pudiera haber otro ataque aunque por suerte para Nidoverde no quedaba mucho que saquear.

Cargando editor
27/08/2020, 11:00
Joorin Saltolargo

Por unas horas, Joorin pareció olvidarse de dragones, cultistas y mercenarios. Se dedicó a cortar, salar, pelar y realizar todas las indicaciones que Endozal de indicaba.

Se sentía bien entre fogones, algo abrumado por el volumen de trabajo, pero tan entretenido que olvidó los pesares que atenazaban su corazón.

El joven explorador intentó conversar con la mediana, que parecía la jefa de cocina. Le interesaba saber cómo había acabado en aquel lugar, de donde era, y saber si por casualidad tenían algún parentesco. Vamos intentó mantener una conversación típica de medianos. El joven se dio cuenta de cuánto añoraba su hogar.

Cargando editor
27/08/2020, 12:25
Abdali yn Iham

Cuando quedó claro que maese Egida no podría hacer mucho más por mejorar su equipo, Abdali se coló en la cocina y fue 'catando' todo lo que podía.

Cuando le pillaban en el acto se iba corriendo al lado opuesto e intentaba robar alguna vianda o meter el dedo en alguna salsa en aquel otro lado. Le llovían los puntapiés y las collejas, pero él se lo estaba pasando en grande.

El mejor momento lo tuvo cuando Joorin distrajo a la jefa de la cocina. Se hizo con una patata recién salida del horno que olía que era un delicia pero que quemaba igual de bien.

Cargando editor
27/08/2020, 17:19
Draenna Loranodel

La elfa se tomó el descanso a su manera. Mientras los humanos pasaban el tiempo entre fogones preparando lo que podía ser la última cena de sus vidas, ella sacó de su bolsa los utensilios para hacer un preparado de hierbas.

En cierto modo era muy parecido a preparar una buena receta. Era necesario tener los ingredientes adecuados, saber prepararlos, mezclarlos en su justa medida y controlar el tiempo.

La poción de un tono rojizo iba tomando forma mientras por su mente no dejaban de dibujarse escenas en las que los descubrían, los atrapaban o incluso los mataban a todos. Pero esos pensamientos prefirió guardárselos para si misma y no preocupar a sus compañeros más de lo que ya estarían.

Que poderosa y llena de confianza se había sentido en su forma animal y que frágil se sentía ahora...

Cargando editor
27/08/2020, 18:11
Rosala

La cocinera al principio no pareció hacer mucho caso a Joorin pero no tadó en entablar conversación con el mientras trabajaban. Le explicó que era de Elturel pero que llevaba practicamente toda su vida viviendo en Nidoverde, que su familia pertenecía a los Campoflor y que trabajaba allí mismo preparando la comida a los guardias de la ciudad.

-Por eso-le decía a Joorin- es mejor hacer más cantidad que calidad normalmente pero suelen agradecer que uses especias fuertes cuand... ¡Eh tu, ya vale no!-gritó lanzando una cucharilla en dirección a Abdali que salía corriendo por la puerta con una patata en las manos quejandose por que se las estaba quemando- Mucho héroe, mucho guerrero pero al final todos acaban vencidos por sus barrigas-dijo cambiando de nuevo el tono y sonriendo al mediano.

Cargando editor
28/08/2020, 08:51
Endozal Fik

Con Joorin se acercaron a las cocinas y saludaron a la mediana y el semielfo que eran los cocineros habituales del lugar. Al ir inspeccionando la cocina pudo dejar atrás la sombra del miedo que le había acechado desde que había escuchado a Leosim y comenzó a sentirse confortable y seguro dejando atrás todo lo que no fuera lo que tenía entre manos.

Se presentaron a ambos cocineros locales y se puso manos a la obra. Junto a la mediana comenzó a dar instrucciones y se centró mucho en los fogones. Abdali apareció por la cocina y Endozal lo saludó mientras seguía manos a la obra aunque no vio con buenos ojos que el guerrero comenzará a picar de aquí y allí. Con una mano muy rápida al ver una patata solitaria, echó mano de uno de los sacos de guindilla molida y la especio antes de que este la cogiera pero no pudo evitar que este le viera y sonriendo le dijo:

Patata divertida, la llamamos en la taberna. Espero que la disfrutes. y girándose hacia los dos medianos les sonrió y susurró. - No volverá por un rato

- Tiradas (1)

Notas de juego

Arghhh mala tirada xD Pero me parecía divertido hacer algo así.

Cargando editor
28/08/2020, 11:20
Joorin Saltolargo

- No se lo tenga en cuenta, mi señora. Es un buen hombre. Contestó Joorin a Rosana divertido ante la situación causada por Abdali. - A ese chico le gusta el buen comer. Diría que tiene un agujero en el estoma, y que lo diga yo... Dijo señalándose la prominente tripa. - Es mucho decir. Añadió con una sincera carcajada.

Y no habéis sentido nunca el deseo de conocer mundo? De ver maravillas lejanas? Siguió charlando el mediano con Rosana mientras se afanaba en hacer su trabajo.

- Yo soy un mediano de campo, y no me acabo de acostumbrar al ajetreado ritmo de la ciudad. Pero tampoco quería pasarme toda la vida en la granja de mis padres. Sabes? Mi hermana ya ha tenido dos hijos, y nunca a salido del condado. Yo quería tener aventuras... Joorin pareció pensativo por un instante. - Aunque tampoco era mi deseo toparme con un dragón. Añadió algo abrumado.

Cargando editor
28/08/2020, 15:41
Égida

Joorin, Endozal y Abdali se fueron a las cocinas, unos para cocinar y otro para saquear todo lo que estuviera a mano. Draenna, mientras tanto, se fue a un rincón apartado a trabajar con unos frascos y recipientes. También cocina, a su manera.

Él se quedó en un lugar apartado, mirando al cielo nocturno cuajándose de estrellas. No tenía hambre, ni sed, ni siquiera estaba cansado. Esa energía que le envolvía y le permitía lanzar hechizos había regresado, y ahora sabía hacer otras cosas. No se lo había dicho a sus compañeros, pero cada día que pasaba, sentía esa compañía más cercana. Si se lo llegara a confesar algún día me tomarían por loco. Seguramente serían efectos secundarios de su particular condición: un defecto, un mal funcionamiento. No importaba. Ahora lo que necesitaba era que la energía regresara cada día a su cuerpo, que las runas se mantuvieran en buen estado y que eso siguiera confortándole.

Pronto volverían a ese lugar, y gracias al conjuro de Draenna, no se quedaría a un lado. No, ahora tocaba ser útil, usar sus fuerzas para otra cosa que no fuera cargar peso. Sería su escudo, su protector, su sanador. Y regresarían sanos y salvos.

Cargando editor
28/08/2020, 16:35
Rosala

-¿Ver mundo? ¿Maravillas? -dijo la mediana- la verdad es que no. Me gusta esto. Como mucho ir a Puerta de Baldur unos días, creo que es lo más lejos que he viajado. Pero no gracias, estoy bien en Nidoverde. Al menos cuando no hay dragones y bárbaros intentando matarnos-bromeó la mediana mientras batía unos huevos en un bol de madera con un tenedor- Tampoco tengo intención de tener hijos y echar raices ya pero nunca se sabe. ¿Tu a donde irás tras marchar de Nidoverde?-le preguntó al mediano.

Cargando editor
30/08/2020, 23:33
Draenna Loranodel

La elfa terminó con la primera parte de los preparativos. Había que dejar reposar la mezcla durante varias horas antes de darle los últimos retoques.

Se acercó entonces al forjado que de alguna forma y siendo tan distintos, a veces veía cierta similitud en los extremos. El también parecía meditar a su manera, en vez de dormir.

- Sabes... se acercó a él mientras contemplaba el firmamento. - A veces pienso que somos los únicos a los que nadie echará en falta si morimos. Ellos tienen un futuro, pueden rehacer sus vidas en la región, entre los suyos. - explicó refiriéndose a los humanos y al mediano.

- Llegado el momento de elegir, no dudaré en interponerme entre el acero y cualquiera de ellos. - le confesó al forjado.

Irónicamente era al único que no incluía en esa promesa y a la vez era al único al que se lo podía contar.

- No te pido que hagas lo mismo, pero si caigo, llevate mi medallón y escóndelo dónde nadie pueda encontrarlo. ¿Lo harías? - le preguntó muy seria...

Cargando editor
31/08/2020, 08:48
Égida

El gigante metálico se sobresaltó cuando Draenna apareció entre las sombras. Maldita sea, qué silenciosa es. Estaba seguro de que si tuviera un corazón que latiera en su pecho, ahora correría desbocado.

No voy a dejar que os pase nada —se sinceró—. Cuando... nací, no tenía a nadie en el mundo, pero sí un objetivo claro. Y pensaba que iba a tener que hacerlo solo aunque me costara varias vidas. Pero os he conocido a vosotros, y créeme, sois lo más parecido a una familia que tengo y tendré. Guardarás ese medallón contigo mucho tiempo, confía en mí.

Cargando editor
02/09/2020, 08:23
Director

La tarde pasó volando. Para cuando el sol comenzaba a ponerse y los cielos se tornaban de colores anaranjados y rosas, frente a la fortaleza, se había montado un gran banquete. Se habían colocado varias mesas formando una enorme U rodeadas por sillas y banquetas. Los aldeanos habían traido platos y vasos de madera y se habían orneado grandes panes del tamaño de platos para que se usasen como tal, algo que se acostumbraba a hacer en Nidoverde ya que el pan se empapaba de la grasa del asado y se podía comer también. 

La decoración no era muy abundante aunque habían puesto antorchas alrededor de las mesas y en el camino que llevaba desde la puerta de la fortaleza hasta las mesas. La comida era bastante mejor de lo esperado dadas las circustancias. Había carne de cerdo asada y patatas hervidas acompañado todo ello de abundantes verduras, todo ello con abundantes especias que le daban un toque picante y sabroso cuyo olor no tardó en inhundar el pueblo. También habían llevado varios barriles de cerveza y alguna barrica de vino desde las tabernas locales. Unas cien personas se habían reunido para celebrar y el ambiente era festivo, lleno de risas y canciones, aunque de vez en cuando el fantasma del miedo cruzaba sus caras.

Los guardias vigilaban desde las torres y habían puesto algunas patrullas a vigilar los alrededores del pueblo para evitar algún ataque sorpresa pero era imposible estar del todo tranquilo dada la destrucción a su alrededor. 

En el centro de la mesa habían reservado un sitio para los Héroes de Nidoverde y frente a ellos se sentaban el Gobernador Nighthill, Leosim, Scobert y un poco más allá Emthrane y los enanos Hunder y Mugrim. Los últimos en llegar fueron Joorin y Endozal a quien Rosala tuvo que echar de la cocina por que "no podía permitir que los héroes de Nidoverde llegasen tarde a la fiesta por estar hirviendo patatas".

La fiesta comenzó mientras el sol se escondía en el horizonte y no tardaron en llegar los primeros brindis por Nidoverde y por sus campeones.

Cargando editor
02/09/2020, 09:29
Draenna Loranodel

Draenna dejo las preocupaciones a un lado aunque sólo fuese durante un breve periodo de tiempo. Se sentó a la mesa e intentó disfrutar de ese momento.

- Me alegra ver el ánimo de vuestro pueblo. Después sufrir y pasar por todo aquello aún siguen viendo el lado positivo y celebrando la vida y estar unidos...

En el fondo ella también se sentía unida en cierto modos esa gente, especialmente a los que ahora luchaban a su lado.

Que valientes le parecían los dos cocineros que habían dejado sus tranquilas vidas para enfrentar a la amenaza, poniendo sus vidas en juego. No despreciaba al forjado y al calishita, pero lo de aquellos dos era algo encomiable.

- Ya era hora de probar uno de vuestros platos. A ver si están a la altura de lo que prometían. - bromeó cuando los dos se sentaron cerca.

Cargando editor
02/09/2020, 12:54
Égida

Al principio pensaba quedarse a un lado, vigilando junto a los soldados las murallas y escudriñando la oscuridad. Temía que esos malnacidos usaran la noche para atacar de nuevo, no para saquear y matar, sino para llevarse más esclavos a esas siniestras cuevas. 

Pero antes de que pudiera subir las escaleras del torreón, un par de muchachos tiraron de él y le convencieron de que se uniera a ellos. No como, quiso decir. No soy ningún héroe, quería decir realmente. Pero apenas si le permitieron interrumpirles mientras le arrastraron con sonrisas y halagos junto a sus compañeros en un lugar de honor en la mesa.

Muchísimas gracias por esto... no sé qué decir —dijo, visiblemente azorado. Tomo una jarra de peltre e hizo ademán de beber, pero luego se la quedó mirando, ausente. Estaba vacía, de igual modo que lo estaba él.