Partida Rol por web

Son ya 6 meses que llevas atrapado en esta harida y desierta tierra donde solo un puñado de seres vivos sobreviven. Recuerdas la ultima vez que viste a tus amigos, y prometiste alcanzarlos en su aventura hacia el gran glacial, hace 6 meses ya. Recuerdas todavia el libro de Har'Akir que leiste, la neblina que aparecio, y el calor sofocante que te cubrio. No sabes que es peor, el clima, o la falta de buena lectura en este lugar.

El clima es extremoso, pero ese no es el menor de los peligros a enfrentar en este lugar. Lo que has visto en los ultimos meses de verdad pone los pelos de punta a cualquier individuo comun y corriente. La gente aqui es amable contigo, sin embargo los ultimos eventos han hecho que los aldeanos sean mas reselosos. La gente desaparece y dias despues es encontrado su cadaver en el desierto sin una gota de agua en sus cuerpos. Esto es todo lo que sabes al respecto, porque te has dedicado a investigar una forma de salir de este lugar. En estos momentos te encuentras en el lugar donde vives, una modesta choza a las afueras de Muhar intentando traducir un pergamino antiguo cuando a lo lejos ves algo que parece un espejismo acercandose entre la arena, parecieran siluetas de hombres. Pero hay tanto raro aqui que no le prestas atencion.

Siphenias larga un suspiro, y se aleja del pergamino por un segundo. Recorre el aposento con la mirada, sin fijarse en nada, mientras empieza a sentir esa sequedad irritante en la garganta, pero sabe que debe ahorrar agua. Sus labios tampoco resisten más, secos y partidos por el duro clima. Siphenias se los humedece con la lengua y mira en uno de sus pergaminos, ya se cumplen casi 6 meses desde que llegó a este sitio. -6 meses... Creo que he estado aqui toda mi vida...- Al volver a su pergamino, murmura, sin darse cuenta: -Y si sigo asi, pasaré aqui el resto de mi vida, sin duda...-

La silueta ha tomado forma, a un lado de tu choza ves pasar un carruaje colorido, con los que reconoces como Vistani con ellos. Tus estudios te hacen recordar que son gitanos viajeros capaces de moverse entre neblinas magicas y pasar a diferentes planos, en ocasiones a voluntad y en ocasiones fortuitamente, incluso son capaces de abandonar Ravenloft (incluso Har' Akir territorio de Ravenloft) por lo que no les quitas la vista. Sigues el carruaje, mas adelante pocos metros antes de llegar al oasis notas que hay cinco personas mas acompañandolos, te parecen conocidos, pero esperas entre la muchedumbre, hasta estar seguro de quienes son.

Han avanzado un par de kilometros bajo un sol abrazador, el agua en sus cantimploras se ha agotado y las fuerzas poco a poco se van desvanesiendo, como sol en el horizonte, sin embargo estan llegando ya a Muhar una aldea del desierto, con chozas construidas de paja y adobe, poco a poco con forme avanzan la gente se acerca a su alrededor observandolos.

Al centro de la aldea hay un oasis con agua fresca.

Han avanzado un par de kilometros bajo un sol abrazador, el agua en sus cantimploras se ha agotado y las fuerzas poco a poco se van desvanesiendo, como sol en el horizonte, sin embargo estan llegando ya a Muhar una aldea del desierto, con chozas construidas de paja y adobe, poco a poco con forme avanzan la gente se acerca a su alrededor observandolos.

Al centro de la aldea hay un oasis con agua fresca.

La gente del lugar los rodea, mientras se aproximan al oasis. Los rostros y las miradas se confunden como en una ilusión, esta gente esta tostada por el sol y agotada por un modo de vida tan duro.
Al pasar entre la gente, Varomi percibe algo. Más bien alguien. Un rostro, por un instante, se diferencia de los demas. Como si fuera ligeramente familiar. Sin embargo, antes de que pueda enfocarlo, desaparece de nuevo. Evidentemente, alguien os ha estado observando.

Oh! Pero que bello lugar!!!... Ajummmm... ¿Y ahora que?... Un poco de agua para nuestros gaznates y un poco de descanzo para nuestras piernas. Vaya Nebulus, amigo, ¿cuanto darias por un poco de cerveza?.

La gente del lugar los rodea, mientras se aproximan al oasis. Los rostros y las miradas se confunden como en una ilusión, esta gente esta tostada por el sol y agotada por un modo de vida tan duro.
Al pasar entre la gente, Varomi percibe algo. Más bien alguien. Un rostro, por un instante, se diferencia de los demas. Como si fuera ligeramente familiar. Sin embargo, antes de que pueda enfocarlo, desaparece de nuevo. Evidentemente, alguien os ha estado observando.

Maese Ludovico sabeis que mi aficion a la cerveza es proporcional a mi gusto por derrotar goblins..jajaja...pero por esta vez creo que me conformare con un trago de agua fresca y un sitio a la sombra donde descansar.

Nebulus, en ese momento se acerca a uno de los hombres de la aldea y con una reberencia,a modo de saludo, les dice en comun:

Saludos hombres y mujeres de Muhar, somos un grupo de pequenos comerciantes y creo que hemos perdido nuestro camino, venimos sedientos y cansados podriamos usar su agua y su sombra para tomar un respiro en nuestreo camino?. Tambien nos ayudaria bastante si alguien nos digera en que tierras nos encontramos y quien es el senor de las mismas

Vaya, ahora si que estamos... en medio del desierto en un miserable poblado ¿este es el significado de "aventuras"?. Aqui de seguro no podre ni encontrar un miserable escarabajo para mi coleccion. Ahhh Nebulus, que facilidad de palabra tiene, aunque lo de pequeños comerciantes si que tuvo gracia, no me lo imagino regateando por un paño o por un puñado de guisantes, mi buen amigo, a cada cual con lo suyo y encima de todo este calor!!!... Puffff... A contentarse Caldero!!!. Llenare las cantimploras parece que yo debo hacer todo, pero ¿si no soy yo quien?. Tyriael como que ha salido de combate y tiene esos ojos de cordero con la gitana... puajjjj... Varomi, nada, que canta y hace sus cosas, Hanovan sin armadura parece un poco mas flaco, bueno y quedo yo... Vamos a por el agua!

Miro en direccion a donde vi a ese alguien familiar. Luego cuando Ludovico se acerca a por mi cantimplora, le digo en vos muy baja para que nadie pueda oir:

Presta atencion Ludovico, creo haber visto alguien que me conoce o NOS conoce, ponte alerta, tengo la sensacion de que alguien nos observa, pasa la vos

En baja vos:

Ja! ¿Y eso? Crei que estabas orgulloso de tu fama, siempre te la pasas diciendo lo conocido que eres Varomi!... Vale... vale... ya le dire a los otros.

Busco por la escena aquel rostro que me resultara familiar, estoy en un serio aprieto en esta tierra y cualquier ayuda podria serme util. Deambulo por las callejas mas proximas sin alejarme, no sea cueltion de que me asalten o algo asi.

Una mujer vestida con una túnica adornada con oro, se encuentra en el borde del oasis rodeado de palmeras. Un turbante dorado rodea su cabeza. De el centro del turbante sale una serpiente. Lleva un medallon de oro alrededor de su cuello y alhajas tambien de oro que adornan sus muñecas y sus manos. Tambien sostiene un cetro con la cabeza de una cobra dorada en su extremo. Los observa, y nota lo sedientos y poco acostumrados que estan a estas condiciones.

Oh! Que bueno!... ¿Que tipo de regla puede ser esa?... Algo asi como "quedate, abre un chiringuito al borde del oasis o sino adentrate en el desierto y muere de ser". Vaya que sera divertido esto!

Reverencia

Salud Isu Rehkoep Sacerdotiza de Osiris! Mi nombre es Ludovico Caldero, honorable señora, tendreis a bien explicar a este humilde e ignorante viajero sobre que base se asienta esa regla... de no poder llenar las cantimploras. Pregunto, pues podria hacerse una excepcion ¿no?

Gracias por aclarar mis dudas Señora, ¿podria usted decirme otra cosa?, ¿Que caracteristicas tiene el culto a vuestro dios... Osiris?

Entonces Hanovan se dirige a su compañero halfling:
- Ludovico, después de la dura y larga jornada que hemos pasado bajo el sol abrasador de su tierra, supongo que el agua es sin duda su tesoro más preciado en en un lugar como este. - va al frente, descansa su mochila y la malla que carga su caliente y pesada armadura y saluda a Isu Rehkoep con una cordial reverencia.

- Tenga seguridad mi señora de que somos conscientes de ello y respetaremos su justa petición. Somos viajeros y venimos en paz y sólo pedimos que nos honre recibiendónos como sus humildes visitantes.

Recapacita para sus adentros con no muy buena espina
- Por mi Dios Odín que esto no me agrada nada... Puede traernos sin duda muchas complicaciones en este viaje al ver lo que ya ha sucedido...