Partida Rol por web

-Claro, claro... -Zed está inusualmente callado- podemos cerrar el conmutador y asignar un código.

Mientras la gente se prepara para el descenso y buscamos un lugar donde esconder la nave, Zed trastea con los códigos de arranque para encriptarlos.

Zed vuelve muy sonriente (éxito).

En realidad, Zed ha hecho dos cosas, para estar más seguro, retira conector del impulsor, de modo que establece dos barreras: una en el sistema y un física al quitar una pieza.

En un aparte intentará hablar con Vega y le contará que ha quitado una pieza del Sombra para evitar su vuelo. Zed es un buen hombre pero en ciertos contextos acaba volviéndose un poco paranoico. Y además ya lo avisó a todo el mundo: sistemas redundantes.

La cuestión, ¿le saldrá bien?

Virkmarth sé bajo de la nave, y suspiro al ver el cenagal en el que se habían metido. Tanto en sentido figurado, como en sentido literal.

Seguía sin entender muchas cosas, como, porque perdían un hombre, y no dejaban aquella nave allí. Si ellos no serian capaces de encontrar una nave sin saber dónde estaba, como iba nadie a encontrar la suya en menos tiempo.

Y tampoco entendía, porque nadie apagaba aquel droide, y lo dejaba encerrado en un cuarto de la limpieza. Pero estaba claro qué era el único que pensaba en pulsar el pequeño botón físico y desconectarlo.

No iba a seguir discutiendo, no iba a ningún lado. Reviso el mapa, y empezó a andar, aun les quedaba mucho rato antes de llegar a la “civilización”. 

Vega guarda silencio durante bastante rato, tras el encontronazo que tuvo con Vikmarth y dar su opinión sobre lo que deberían de hacer y observando la enorme densidad de aquella jungla piensa que quizás no ha sido una gran idea.

Tiene bastantes dudas en la cabeza ¿por qué esta tan convencido el devorioano de que el Czerka los va a traicionar?, ¿es alguna clase de trauma que tiene con los droides o es que sabe algo que el resto no?
Mientras avanzan por aquel fangoso pantano Vega rompe ya su silencio.

-¿Y una vez en el poblado qué?, ¿nos separamos y buscamos información?, ¿alguna brillante idea?...

En medio de la selva, como el que no quiere la cosa, me acercaré en algún momento a Zed y le comento, en bajito, que:

Creo que podemos confiar en Vega... más estando ella aquí con nosotros. Somos los pilotos de la nave y estamos contigo. Deberia de saber como nosotros el "semi-bloqueo" de la nave, aunque por seguridad, por ahora, solo nosotros dos sepamos el codigo... Que te parece Zed? 

Yo creo que el tata Ambros aprobaría la confianza a Vega, es una chica guapa, lista y comprometida por lo que hemos visto...

Está claro que un terreno pantanoso no es lugar para Zed, el hombre se mueve de manera torpe, ruidosa y no deja de rezongar sobre el fango, la humedad, los mosquitos y de sobresaltarse ante cualquier alimaña que espantan en su camino.

-Si me viera la pobre tía Petunia. Recuerdo cómo se sentaba en la mecedora a reconfigurar los algoritmos de distribución energéticos de los generadores de fusión de la colonia, mientras me decía: "mala idea, Zedito, fue la que tuvimos al abandonar el orbital, allí sabemos lo que hay, pero mira aquí, esos roedores destrozan siempre los cables de alimentación, las larvas de gorosh anidan en los circuitos de los colectores, los arruinan para siempre. Trabaja siempre en astilleros y cuídate de las tierras agrestes, jovencito".

¡Eso me decía! ¿Y dónde estoy? Aquí, chapoteando en... ¡ay! ¿Pero qué es eso? Algo me ha rozado la pierna... Señorita Vega, ¿ha visto eso? ¡Qué criatura más enorme! ¿comerá personas? ¿Es tan buena tiradora como dice Seer? Espero que sí, no me gustaría tener que vérmelas sólo con la pobre tía Petunia y esa cosa.

Pues es una buena pregunta... ¿qué pensamos hacer cuando lleguemos a la ciudad? Virk parece moverse a sus anchas en esos lugares, deberíamos hablar con él. Todos nos hemos equivocado alguna vez y hemos cogido una turbollave en vez del acoplador magnético. Es un error más común de lo que parece, ¿no lo sabía? Tienen un peso parecido y los modelos de la Sullust -los más comunes- tienen el mismo mango. Les pasa a todos los aprendices, incluso a los veteranos. No a mí, claro. Pero sí conozco compañeros de mono que han tenido algún incidente...

¡Gracias por sujetarme! No, no había visto esa raíz.

Pienso en el pobre Hobo, sólo en la nave, ¿qué pensará de nosotros? Es una persona de fiar. No sabemos ni lo que buscamos, lo habitual es preguntar en los bares, ¿no? Es lo que sale en todas las holonovelas. Virk supo hacerlo bien allá en Coruscant.

¡Seer no vayas tan deprisa! Cherk se queda atrás.

Zed aprovecha la chapa que le da a Vega para contarle una cosita que ha hecho por su cuenta. Parece muy avergonzado cuando lo hace.

-Nadie más lo sabe, señorita Vega. Quizás no debí hacerlo, somos un equipo, una cuadrilla pero algo se me cruzó por la mente. Pudieron ser todos esos gritos, las acusaciones, Virk nos ayudó a Hobo y a mí... bueno, con la tía Petunia a mi lado podríamos haber salido con bien pero nunca se sabe. Me fue simpático, ¿sabe? Pero dejar que nos metamos de cabeza en una rencilla hutt... nos ha ocultado información, aunque se arriesga con nosotros... No sé, estoy confuso.

Ya, ya, al grano, como decía el tata Ambrose. He hecho un pequeño arreglo en el impulsor, he extraído el conector. Nooo... no lo llevo conmigo. Si me pasara algo. Está escondido en el mamparo de ingeniería. Sí, debajo de mi camastro. Me gusta dormir junto a los motores, me ayuda a conciliar el sueño. El generador de la Sombra casi me arrulla. No es difícil de reconectar pero es una medida de seguridad... brrrrr... quedarnos varados aquí.

La verdad es que no sé por qué lo hice, al fin y al cabo Hobo está en la nave ¿hice mal? 

La última pregunta la hace en tono contrito, buscando algún tipo de absolución.

-Una laguna es mala idea; si la sumerges, puede que no despegue: se llenará de líquido y fango por dentro de los motores, a través de las toberas de escape de gases posteriores. Por algo las naves que pueden ir bajo el agua, son distintas de las espaciales... son medios diferentes.

Hundir una nave en un pantano... ¿a quien se le ocurriría hacer eso?

Si Zed, Czerka se queda atrás porqué no viene con nosotros. teme que sus circuitos no resistan la humedad... 

Si alguno no puede seguir el ritmo, mejor se quede. Esto no va a ser fácil. Yo también preferiría ir montado en una Vaina de doble turbina, aunque fuera soltando aceite, pero esto es lo que hay!!!

Cuanto antes lleguemos, antes podremos iniciar las pesquisas y decidir el siguiente paso a cubrir.

Ánimo.

Al rojo le molestaba tanto el ambiente como a todos los demás, pero caminaba concentrado.

Vega hizo una pregunta, y estaba convencido de que no hacia falta responderla, no ahora. Pero recordó, que esta estaba molesta con el, así que procuro responder.

O al menos eso iba a hacer antes de que Zed volviera a inundar sus oídos con un torrente de chachara familiar. Aquel hombre no era capaz de mantener la boca cerrada, y eso podía ser un problema o una ventaja, dependiendo de lo que se pretendiera.

Aprovecho un minuto de silencio para comentar al resto, y sobre todo a la azulona.

- No creo que debamos preocuparnos en exceso por localizar al tipo. Tengo su imagen grabada en la memoria. Y ese tipo es nuevo en el lugar. Y nosotros también, alguien nos relacionara con él, y seguramente el tipo, si tiene media neurona, intentar salir de allí o vigilarnos por si hemos ido a acabar con él. Simplemente habrá que estar atentos. -

No explico nada concreto, pero se le veía convencido de aquello. Para estropear su explicación, volvió la cara, y puso aquella estupida sonrisa que ponía todo el tiempo.

No lograba resultar agradable con ella. Eso seguro. 

Vega avanzaba en silencio, escuchando las historias de la tia petunia el viaje a pesar de no ser nada agradable se le hacía más ameno.

-No es la primera vez que me veo en una ciénaga asi, pero es sin duda la que peor huele y por experiencia propia dudo mucho que la fauna de este lugar ataque a un grupo tan numeroso, o eso espero.-dice la twi´lek con agua hasta las rodillas mientras andaba con dificultad. Se le estaba haciendo bastante duro el viaje pero disimulaba lo mejor que podía para no aparentar nada de debilidad.

Vega le aguanta la mirada a Vikmarth, en su mirada queda bastante claro que no se fía ni un pelo del devoriano y no lo oculta-Eso suponiendo que el tipo esté vivo.

Vega escucha como zed le comenta la jugada en silencio.

-Zed, puedes llamarme simplemente Vega y no te preocupes, entiendo que antes fue una situación complicada, que es difícil confiar en los compañeros, pero te aseguro al menos por mi parte que estoy en el mismo bando que tú. No puedo decir lo mismo de Vik, no sé a qué se debe tanto secretismo Y tanto odio al droide. Yo no me fiaría de él ni un pelo y creo que tu deberías hacer lo mismo. Ve con los ojos abiertos siempre y no te preocupes por lo de la nave, no hiciste mal, solo estas guardando tus espaldas y agradezco que me lo contases- Dice ella en un tono bastante conciliador y comprensivo.

Tras el nuevo tira y afloja verbal entre la chica azul y el chico rojo (si, esto parecía un concurso!!!), Seer decide, dejarse alcanzar por la Twi'lek.

Oye Vega, si necesitas algo, pídelo, no querría perder a nuestra piloto por un exceso de orgullo.

Bajando un poco la voz, le sigo diciendo:

Bien, has de saber que hemos asegurado la nave para que no pueda saltar al hiper-espacio. Nadie sabe nada excepto tu yo y Zed, y así ha de seguir. Esa nave es la puerta para salir de este lugar y no me fío mucho de cierta gente. Por ahora creo que Zed es tan legal como inocente... Ahora para disimular, dame un tortazo, seguro que no te costará mucho.

Y subiendo la voz un poquito por si alguien escucha, suelto:

Venga ya princesa!!! Solo será una celebración con mucho amor, al acabar la misión...

Y me preparo para recibir un severo guantazo o puñetazo (atento a culatazos, rodillazos y otros trucos barriobajeros)

Vega avanza con naturalidad escuchando lo que le dice Seer y tras unos segundos de silencio le guiña el ojo de manera cómplice

-Algo me había comentado zed- y después le cruza la cara con una buena bofetada.

Habían caminado por unos 20 minutos, media hora como mucho, pero el denso ambiente los cansaba el doble.

El iktochi y la rylotheana mantenían una conversación privada cuándo algo sucedió -Venga ya princesa!!! Solo será una celebración con mucho amor, al acabar la misión-, en respuesta Vega le tira una bofetada que no llego a destino porque Seer se sumerge en las apestosas aguas de aquel marjal con un grito de terror "AAAHHGLglrrff", claramente aquello no había sido una maniobra evasiva. El sonido de la voz de Seer se perdió por unos segundos... escalofriantes segundos.

Con un estruendo un grueso tallo emergió del fango y en su extremo la "flor", si se le podía llamar así a aquella monstruosidad, trataba de llevarse consigo al iktochi, que en su desespero había logrado ceñirse a una gruesa rama, pero aquella planta lo tenía sujetado con una especie de lengua de su pierna y la fuerza que ejercía era brutal pero de momento su poderosa musculatura resistía.

Si el primer sobresalto no había sido suficiente para espantarlos, el segundo probablemente lo fué. Tres cabezas más emergieron, la espinosa "lengua" de una de estas salió despedida hacia Zed.

En cuestión de minutos tus compañeros se aprontan y te dejan solo junto al droide de protocolo, que se pone a tu disposición.

En conjunto se disponen a camuflar la sombra, mientras el te alcanza ramas tu, desde el techo del carguero, las vas colocando. Czerka intenta de iniciar una charla contigo -se que ustedes no confían en mi, pero te aseguro que mi mayor interés es que ese cargamento llegue a las manos de Jorghen, ¿por qué iba a tratar de estorbarlos si son los únicos que pueden ayudarme a lograrlo?- 

Czerka arrancaba una rama baja de un árbol cuándo ves a un sigiloso felino emerger de entre las ramas que están encima del droide, ¡un nexu!

Sin darte tiempo de alertarlo, se abalanza sobre el confundido Czerka y comienza a rasguñarlo emitiendo un espantoso chirrido a metal, de ser el sullustano el que estaba juntando ramas aquél zarpazo le hubiera abierto el estómago. ¡Hoboo, por favor quitamelooo de encimaa!

Alguien tenía que quedarse a ocuparse de la nave.. eso no lo ponía en duda, y si otro se hubiese presentado voluntario antes... no le habría importada quien lo hubiese hecho, el puesto era suyo... pues el miedo a volver y no encontrarla, o directamente perderla... ponía los pelos de punta, y no porque el "patrón" pudiese reclamársela, sino por el temor a quedarse en tierra.

Dado que habían aterrizado en una zona boscosa, y menos mal que evitando zonas pantanosas... el trabajo se limitaba a evitar que fuese fisible desde arriba; era pues cuestión de poner ramas, y cualquier tipo de vegetación que pusiesen tener a mano; vamos, trabajo de jardinería, que sería agradable salvo por el hecho de que Czerka se puso a contarle su vida, sus traumas y sus quejas...

-A mí no me lo cuentes... me ha contratado tu jefe para hacer un trabajo, y me limito a ello...

Mientras esperaba alguna respuesta del androide, o un bienvenido silencio... oyó otra cosa, un ruido como el de un golpe seco, seguido de un chirriar sumamente desagradable... lo siguiente, los critos de socorro de Czerka.

Hobo no se hizo esperar; echó mano a una herramienta metálica larga, que estaba utilizando para colocar la vegetación sin tener que estirar demasiado el brazo, y corrió a ver que pasaba... Cuando llegó...

-Ah!, bueno, tranquilo... es carnívoro, no te comerá, en cuanto descubra que no eres com...-entonces se dió cuenta: si se daba cuenta de que Czerka no era comida... lo mismo iba a por el- ¡Vale, resiste!!

Como el felino estaba ocupado, pudo acercarse desde detrás, levantó el trasto, para darle un garrotazo... por un momento pensó en pegarle un tiro... pero si fallaba, podría darle a Czerka, y no es que le importase, es que entonces sería uno contra uno, y no uno contra dos, como ahora.