Partida Rol por web

Vuestro padre dispuso que todos comenzarais la prueba el mismo dia para que contarais con el mismo tiempo exacto para realizar vuestra labor.

De tal modo que fue al alba del dia siguiente, domingo, fue cuando dio comienzo la prueba para todos. Se te dio lo mismo que a tus hermanos, un caballo maravilloso y provisiones para el viaje. Los nobles vivian en una ciudadela al este, en la mejor zona del reino como no podia ser de otro modo, rodeados de los campos que trabajaban sus esclavos para ellos.

Se levanto al alba, escogiendo cuidadosamente sus prendas para vestir, habia dispuesto que dos cortesanas le ayudasen a elegir la ropa adecuada, pues tres opiniones valen mas que una, y la metio en un petate, como era una reunion de nobles, la armadura de la guardia, estaba de mas, por lo que se pondria unas protecciones de cuero ligero bajo la ropa, no confiaba mucho en ese tipo de protecciones, pero, el camino podia ser peligroso, no solo por ataques de bandidos.

Escogio la espada de Jarvan para la ocasion, en las misiones importantes en solitario, era siempre su unica compañia, y despues bajo a la armeria, buscando una ballesta y unos virotes, mando a un criado a preparar alforjas en el caballo con provisiones y agua, despues, cogio una capa con capucha y un pañuelo con los colores del reino* y se lo preparo para tapar parte de su rostro,  penso en pasar a despedirse de Anne... y dudo unos instantes, preguntando a uno de los guardias de la puerta- Jean, amigo, has visto salir a mi hermana Anne?-

Jean asintio ante tu pregunta.-Si, salio casi al despuntar el alba. El viaje que la aguarda es largo, si se demoraba la cogeria la noche en los caminos y ya no son tan seguros como solian.- te respondio.

- Sus otros hermanos tambien se han encaminado a sus destinos, señor.- te explico.

- entiendo- asintio, al parecer, era el ultimo en salir, y eso le cambio el semblante a uno mas serio- en fin, me pondre en marcha, cuidad del rey y el castillo en mi ausencia- replico al guardia y dicho esto expoleo el corcel para salir a toda prisa del castillo, conocia algunos caminos para llegar aunque dejo que el sentido le guiara, pocas veces salia del castillo, pero salir en grupo llamaria la atencion y con un guia le retrasaria, por suerte llebaba un mapa de la region entre las provisiones para el camino, si se encontraba alguna encrucijada, lo consultaria.

Tu corcel corrio como el viento en direccion a las casas donde vivia la nobleza. No recordabas la ultima vez que habias estado por aquella zona pero las casas se veian el doble de grandes y ostentosas que nunca. En cambio, los criados y los esclavos tenian la amargura grabada en la cara y latigazos en el resto de la piel.

-¡Oh! Al fin llegais, principe Garen. Vuestro padre nos aviso de que mandaria a alguien hace dias pero pasad a mi morada, por favor. Seguro que estais cansado. Mis criados se ocuparan del caballo, por favor, entrar. Hace frio fuera mi señor.

Garen observo la desolacion que sufrian los criados y la plebe, y un gesto de tristeza se dibujo en su rostro, mas el pañuelo y la capucha no dejaron adivniarlo, cuando Adler se acerco, Garen bajo del caballo y se inclino levemente a modo de saludo respetuoso.

- tranquilo, dejad que yo mismo ate mi corcel, no quiero interrumpir a tu gente de sus tareas... con que uno de ellos me guie, es suficiente- afirmo con seriedad- es todo un honor ser recivido en vuestra morada.

Te llevaron a los establos donde pudiste dejar a tu caballo de modo confortable. Despues se te llevo a la mansion. Era una casa impresionante, llena de riquezas y tapices preciosos recubriendo las paredes.-  ¿Quereis tomar alguna cosa?¿Algun licor que os entone en un dia tan frio?.- te pregunto ofreciendote asiento y despues dibujo una sonrisa maligna.- o... ¿Una mujer bella que os haga entrar en calor rapidamente?

Garen entro detras de Adler, apoyando su mano izquierda en la empuñadura de su espada, para que no resonara el golpeteo al caminar y la derecha se movia a ritmo de sus pasos, observo la ostentosa casa del noble y se reservo su opinion sobre esta, ninguna habitacion de ningun hermano tenia ni la mitad de lujos innecesarios que esta casa.

- no gracias, calentare mi cuerpo mejor con algo de com...- su frase fue interrumpida por el ultimo ofrecimiento el cual hizo que su ceño terminara de fruncirse- no me insulteis Adler, bien sabeis quien soy, y no compartire lecho con ninguna mujer de sucias costumbres- dicho esto, se volteo observando de nuevo la habitacion- he de decir, que teneis un gusto impresionante para adquirir objetos con los que decorar vuestra morada- elogio al noble para suavizar sus anteriores palabras, y de paso tantear el terreno.

No era mi intencion ofenderos y menos proponeros una vulgar ramera. Me referia a una esclava joven que a entrado a mi servicio recientemente pero como gusteis.- dijo alzando las manos, a modo de rendicion.

- Gracias por el cumplido, joven principe, hago lo que puedo por mantener la belleza a mi alrededor.- Aseguro antes de ir al tema que le ocupaba y preocupaba.- Sois un hombre ocupado, yo tambien, asi que permitizme que sea directo. Hace una semana dos de mis esclavas fueron robadas por otro noble de este mismo lugar. Vive a corto viaje de aqui, en una finca rodeada de campos y bosque. Cuando fui a reclamar me hecho de su propiedad como si fuera un mendigo ¡Fue humillante!.- exclamo con aspavientos innecesarios.- Pague muy caras a esa esclavas, me pertenecen, son mias aunque llegaran a su morada fugadas de mi casa. Desde entonces las tensiones con ellos han ido en aumento. A otros nobles tambien les a quitado algun esclavo. El caso mas flagante fue hace tres dias, cuando su hija entro en la propiedad de otro noble señor y se llevo en brazos al bebe que acababa de parir una de sus esclavas y que por derecho pertenecia a su amo.

El hombre acalorado se sirvio una copa de vino hasta el borde y bebio con azan hasta apurarlo por completo.- Es intolerable en sumo grando. Teneis que hacer algo, mi señor o pronto despertara una trifulca entre nosotros de la que nada bueno puede salir.

Garen escucho atentamente las palabras del noble, y su cara reflejo una preocupacion clara, aunque no era la misma que presentaba el noble, se meso la barbilla, pensando como abordar el asunto con delicadez, el tema de esclavos era algo que no le gustaba nada, y mas de una vez habia discutido esos asuntos con su padre sin llegar a ningun lado.

Camino alrededor del noble, pensando y movio como pidiendo el alto cuando el noble termino de hablar- porsupuesto que debo hacer algo, no os preocupes, como bien sabeis, el robo se debe castigar, es uno de mis ideales, esto no quedara asi...- intento transmitir calma al noble y confianza, aunque sus palabras estaban cargadas de dobles significados que un acomodado noble al que hacia años que no veia, no entenderia.

- por lo pronto, vos habeis perdido dos esclavas, puedo hablar con el resto de ellos? quiero que me hablen sobre ellas... y despues, partire hacia la morada del ladron, para... parlamentar...- la ultima palabra la dejo caer con cuidado, arrastrandola y miro a los ojos de Adler, esperando una respuesta.

- Claro señor, podria hablar con ellos.- dijo poniendose en pie.- Pedire que vengan, espereme aqui.- dijo saliendo de la sala. Al poco rato llego acompañado de dos hombres, dos viejos con cara de amargados y nariz aguileña.

- Mi señor, permitiz que os cuente. Ese hombre a convertido su propiedad en un arca donde recoge a todos los esclavos que se escapan de nuestra propiedad. Se niega a devolverlos... contamos que al menos se a aporpiado de 5 o 6.

Garen observo a los dos esclavos que entraron en la sala y se meso la barbilla-supongo que sabeis quien soy...-pregunto primero-¿conociais a las "personas" que se llevaron?- remarco personas, sin utilizar la palabra esclavas en ningun momento- ¿sabeis si tenian familia bajo la custodia de el que se las llevo?- camino por delante de los dos esclavos, a paso lento y sin mirarlos pensando en las posibilidades y el porque un noble estaba secuestrando, como habia dicho adler esclavos.

- Harol Benoit es su nombre señor.- dijo Adler. Recordaste que tu padre habia elogiado a esa familia tiempo atras, por ser gentes de bien y de gran nobleza.- y las mujeres que se llevaron eran nuestras propiedades, las conociamos... no por sus nombres, si es que esas salvajes tienen alguno.- bromeo sin gracia.-... ya me entiende. Se escaparon de nuestras casas...

Al bebe lo robo su hija, la hija de Harol, una niña caprichosa sin modales.- gruño uno de los recien llegados a lo que Adler añadio.- Esa niña esta descontrolada, como no la case pronto va a dar problemas a todo el mundo....A mi me robo una rubia de 15 primaveras y otra peliroja de 14.

Otro de los hombres continuo la lista.- Se quedo con una esclava morena de 17 primaveras ademas del bebe que me secuestro descaradamente.

El ultimo dijo.- A mi me faltan dos gemelas castañas, unas rosas tiernas que esperaba poder catar este invierno.

Entiendo...- Garen supo rapidamente que su mision iba a ser mas complicada de lo que pensaba, los Benoit.. si estaban haciendo eso, tenia que ser por una razon mayor... tendria que ir a verlos en persona cuanto antes, para intentar solucionar el peliagudo tema- partire cuanto antes a parlamentar con ellos, pero antes, ¿por que no celebramos mi llegada con algo de comer? hablaremos un rato y partire sin demora, a conocer las verdaderas intenciones de lord Benoit con los esclavos...

.. ahora, todo estaba removido en su cabeza, pero quizas cuando llegara a las tierras de Harol benoit, todo se aclarara un poco.

Adler palmeo con alegria y comenzaron a servir una comida opulenta, con asados y caldos esquisitos. Durante la comida viste lo mal que trataban al servicio, con desprecio y casi como si no fueran humanos.

Al termino de la comida te indicaron donde encontrar a ese noble que parecia tan malvado a ojos de aquellos hombres.

Garen probo poco la comida, y a pesar de los golpes e insultos profesados hacia el servicio, el no dejo de agradecer a este cada vez que le retiraban o le ponian un plato o le servian  la bebida, al terminar felicito a una de las esclavas, para que diera la felicitacion en la cocina, y no le importo la mirada de el resto de nobles, a lo que simplemente añadio- para que volvamos a tomar manjares tan ricos como estos todos los dias, hay que tener una cocina contenta....- y lo que pensara cada uno despues, poco le importo, aunque sabia que en el fondo, a mas de alguno le habria llegado el mensaje.

camino acompañado de algunos nobles hacia los establos, para montar de nuevo su caballo, le indicaron el camino mas corto y partio hacia alla sin demora, agradeciendo nuevamente tanto a nobles como esclavos, el trato recivido en el lugar.

por el camino empezo a encajar piezas del puzzle, sin duda se dirigia a un lugar mucho mejor bajo su punto de vista que del que acababa de partir, y ahora, tendria que buscar soluciones para todos....

Partiste dejando a los nobles contentos y te encaminaste a las tierras de Benoit. En la entrada de las mismas viste un arco sobre el camino que rezaba "Ningun hombre a de ser prisionero ni de su propio destino".

Los criados que te encontraste parecian felices y contentos. La mansion era menos ostentosa pero rodeada de flores y risas. En el patio delantero una joven leia cuentos a un grupo de niños, hijos de los criados por sus ropas.

La muchacha era de noble cuna, con el cabello dorado y una sonrisa angelical. Su ropa era sencilla aunque de buena factura y jugaba con los pequeños como si fueran sus iguales. Al verte se tenso como la cuerda de un piano y mando a los niños entrar. Con paso firme, aun con un cuenta en la mano, te salio al paso.- Buenas tardes joven señor ¿Que os trae por aqui?.- pregunto con seriedad.

Garen aminoro la marcha del corcel al entrar en las tierras de los Benoit, observando todo lo que le rodeaba con cierta alegria, aunque su sueño era aun mejor que aquello. Se acerco a la joven que salio a su paso, mirandola desde debajo de la capucha y descubrio su rostro, no era dificil saber que era alguien de la realeza aun cubriendose, enarco una ceja al ver a la joven tan tensa-¿ algo os incomoda?- pregunto dedicando despues una amable sonrisa- solo vengo a hablar con el señor de la tierras, tengo que proponerle algunas cosas, nada preocupante....

Bajo del caballo de un salto y lo agarro por las riendas para tenerlo sujeto, el dia estaba tocando a su fin y probablemente tubiera que pasar alli la noche, pero era mucho mejor que volver de nuevo con Adler.

- Me incomodan los estraños que se presentan al caer la tarde.- respondio la joven. Era valiente y atrevida. Sin duda no os reconocia por vuestro aspecto.- Mas aun cuando no tienen la educacion de presentarse.- espeto.- Ademas ahora no es posible ver a mi padre, no se encuentra en la casa, salio a presentar sus respetos a la tumba de su esposa, mi madre, como es su constumbre desde hace mas de diez años.- Te informo como si fueras un niño que hubiera olvidado algo que todo el mundo supiera.

- De modo que tendra que hablar conmigo o dar media vuelta, señor.