Partida Rol por web

[ELdG] La Venganza de Sasha Petrovich

I - Reunión en el túmulo del Rey Oso

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08/03/2019, 08:35
1-Estado de los personajes

Hizo correr dos rumores. Dos convocatorias en el mismo lugar, el mismo día, la hora bruja.

Fue un llamamiento a los supervivientes del Sunny Tear Sanitarium, el psiquiátrico de las afueras de Vallaki. Poco se sabe sobre lo que ocurrió. Una noche, los guardias y celadores no volvieron al pueblo. Días después se realizó una batida, y los exploradores que inspeccionaron el edificio trajeron las noticias de los cadáveres. Después de cotejarlo con los archivos del desván, faltaban once sujetos: el Doctor Heinfronth, la nieta del Doctor Rehner y nueve pacientes. Muchos de los aludidos pensaron que la persona que podría estar intentando reunirles era la diabólica asesina Bianca, con lo que se les brindaba la oportunidad de acabar con ella.

Fue un llamamiento a los cazadores de vampiros. Un intento de reunir a los más valientes luchadores contra el Mal. Barovia tenía una larga trayectoria en la lucha contra los no muertos. A mediados del siglo IV, poco después de que llegaran noticias de la masacre del Castillo de los Von Zarovich, la Paladina Lugdana usó el Icono del Cuervo para acabar con un cónclave de vampiros cerca de la colina de Lysaga. Desde entonces se reportaron distintos ataques y avistamientos entre las supersticiosas gentes de Barovia, la mayoría de poca credibilidad. Martyn el Loco sobrevivió en el año 475, hacía solo veinticuatro años, a un encuentro con los chupasangres. También se les atribuyó a los vampiros la muerte del Burgomaestre Kartov, alcalde de la aldea de Barovia, en el año 485.

Fuese cual fuese el motivo, lograron convocar a una docena de personas. El lugar estaba apartado, en una colina cercana a Vallaki y al sanitarium abandonado, y era conocido como el Túmulo del Rey Oso. Se trataba de una antigua tumba de los invasores bárbaros Terg. Una figura encapuchada aguardó en silencio en lo alto del túmulo, quizás esperando que llegasen más voluntarios. Pero los que ya había allí congregados se empezaron a reconocer entre ellos...

El Aquelarre casi se volvió a reunir al completo: Alice, Leiath, Flame, Onfale y la reciente incorporación del enano Thimaz.

Por su parte, Thimaz y el otro enano que allí había también se conocían de antes. Thimaz fue expulsado por su tribu, mientras Dragov era el encargado de hacer cumplir las antiguas leyes de los enanos que Thimaz incumplió.

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08/03/2019, 12:50
Leiath, Bruja de Hala

El retiro espiritual que la propia bruja se había impuesto hacía ya unos cuantos meses le habían sentado muy bien. Se la veía distinta, más madura, más distante y reflexiva.

Durante el tiempo que había estado apartada de sus compañeros de aquelarre, había puesto en orden sus ideas así como convertido la cabaña en la que había crecido en santuario y refugio para cualquiera que solicitase su ayuda. Fue su carácter altruista y profundo odio por las criaturas de la oscuridad las que impelieron a la sanadora a abandonar su refugio y acudir a la llamada de los cazavampiros. No esperaba encontrarse con sus amigos en el lugar de lacconvocatoria, pero hacerlo fue una grata sorpresa. Intuía que lo que les movía a ellos no era de la misma naturaleza pero toda ayuda era poca en la lucha contra el mal.

En silencio y semioculta tras la capucha de su negra capa de viaje, la bruja asintió como reconocimiento a sus compañeros. El símbolo de la diosa Hala brillaba sobre su pecho a la luz de la luna.

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08/03/2019, 17:42
Onfale

Al contrario que Leitah, Onfale sí que se había esperado encontrarse con los miembros del Aquelarre y esa era justo la razón por la que había acudido a la llamada. Al menos había esperado verla a ella, a la poderosa Bruja. Desde su separación habían ocurrido algunas cosas, sobre todo una, que tenían al perfumista preocupado. Su fortuito encuentro en la Ciudad de la Mil Puertas le había removido algo en su interior y no había tenido apenas oportunidad de intercambiar unas palabras con su antiguo grupo de aventuras, o más bien desventuras. Las luz de la luna y las estrellas, reflejada en el símbolo de Hala, daba un aspecto bastante impresionante a la Bruja de Hala. 

- Me gusta tu nueva imagen, Leiath.- Le dijo con sinceridad. Visto de cerca el mago también había cambiado algo. Ya no hacía gala de la esbelta figura de la que tan orgulloso estaba. Los eunucos tendían a engordar si no se cuidaban y Onfale tenía un cuidado obsesivo con su constitución física y su aspecto, siguiendo un estricto sistema de ejercicio físico. Quería mantener la figura sin curvas, de niño, con la que había sido "diseñado". Sin embargo tenía un aire diferente. ¿Acaso tenía curvas? No podía decirse cláramente pues disimulaba su silueta con un elegante sari* y un gran gusto para el vestir. Por lo demás era el mismo y había recuperado, con la libertad para recrearse en sus cuidados, el lustroso aspecto de siempre. Pelo largo, negro y liso, aceitado que caía como una cascada de agua sobre la espalda. Tez morena, labios carnosos y ojos perfilados con bistre. Entre ceja y ceja una joya adornaba su frente a modo de bindi**.

Prefería encontrarla allí a Leiath que haberla tenido que ir a buscar a su hospicio de mala muerte. Hala era acogedora pero estaba seguro de que no habría allí demasiadas comodidades para alguien de gustos tan exquisitos como los suyos. El eunuco agarró a la mujer por los hombros e hizo ademán de darle dos besos en las mejillas, sin que las éstas y los labios llegaran a encontrarse.

- Veo que volvemos a reunir al....Aquelarre.- O lo que quedaba de él. Solía ser para él como un harén de mujeres del que cuidar con alguna incorporación masculina, como la de Jadewo, o Tymaz. Ahora habían sustituido a esos portentos por un enano mal de la cabeza.- Me alegro de volver a veros.- Se dirigió a los otros aunque sus gestos y actitud denotaban que daba máxima importancia a Leiath frente a los demás. Echaba en falta a la alocada, aunque poderosa, Aire.

- Apenas tuvimos tiempo de despedirnos la última vez, ¿eh? Flame- Se dirigió ahora a la mujerona.- Leiath, Alice, Thimaz y yo nos vimos envueltos en un asunto realmente incómodo. Aunque nada que ver con ese manicomio de mierda.- Mientras esperaban a saber para qué habían sido convocados bien podían ponerse al día.

Notas de juego

* El sari es un vestido tradicional usado por millones de mujeres del subcontinente indio.​

**El bindi (del sánscrito bindu, 'gota' o 'punto') es un elemento decorativo de la frente.

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08/03/2019, 21:07
Vinthrael

Los rumores llegaron hasta Vinthrael desde diferentes fuentes y lo cierto es que algo en su interior trataba de persuadirle que eran tan sólo eso, rumores, y que realmente nadie se reuniria, por lo que al llegar hasta el lugar y ver un pequeño grupo de personas, respiró más tranquilo.
Posiblemente esto fuera lo que él había estado buscando, una señal de bondad, una prueba que todo lo que le rodeaba podria ralmente superarse si la voluntad era fuerte, una mision en busca de la luz que tenia la fuerza suficiente como para atravesar las nieblas,.....esa era su esperanza.

Observó a los asistentes y se mantuvo en respetuoso silencio. Por toda la colina llamada el tumulo del Rey Oso, pudo ver gente que se mantenia alejada entre ellos, tal y como hacia él, y miraba al resto no con desconfianza, sino valorando sus aptitudes, aunque la sensación que le transmitian a Vinthrael era de un vinculo con la luz común.
Un grupo de aventureros comenzaron a apiñarse en una de las zonas, parecian conocerse y por lo que hablaban a voz en grito, no en las mejores circunstancias.

Vinthrael se mantuvó apartado, comprobó por enesima vez todas las armas prendidas a su cinturón y se colocó la bolsa en la espalda, para que no le molestara si debia moverse rápido, y así, esperó hasta que el que les había convocado comenzara a hablar.

Notas de juego

cuando braderick me confirme que el equipo que tengo apuntado es correcto, pongo una descripción mejor de mi personaje

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09/03/2019, 08:08
Leiath, Bruja de Hala

Leiath recibió a Onfale con una sonrisa sincera. Se le veía realmente espléndido. Había ganado peso y su piel y pelo se veían más relucientes que nunca. Parecía brillar con luz propia.

Yo también me alegro- susurró sin querer llamar mucho la atención, ya que estaban rodeados por gente desconocida.- Se te ve muy bien, mi querido perfumista.

Y qué os ha traído por aquí?-preguntó al Aquelarre en general, aún sin levantar mucho la voz-. Me encantaría que me pusierais al día. Maese Thimaz, qué tal lleva su dolor de piernas?

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09/03/2019, 10:46
Alice

Alice había cambiado sus antiguas vestimentas negras del aquelarre por un vivo corsé de color rojo y una falda a conjunto. Su melena rojiza volvía a esta cubierta de mechones de diversos colores azules, blancos e incluso verdes. Los mechones demostraban que la maga había vuelto al estudio de nuevos conjuros, también una señal de ello era el olor a azufre y humo.

Hola viejos camaradas. Os veo realmente bien. Dijo con una sonrisa. Sí, todo el asunto de la mole sombría fue algo muy turbio que desearía olvidar.

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09/03/2019, 12:58
Thimaz

Thimaz volvía a la carga, tras aquella terrible experiencia en aquel juego de cocina, ahora se encontraba ante algunos antiguos participantes del juego, otros viejos conocidos del Hospital, otro viejo conocido al cual al verlo tan solo pudo apretar con firmeza la mandíbula, y un par más de desconocidos.

-Veo que siempre que ocurre algo, vosotros tres tenéis algo que ver -dice señalando a Leiath, Onfale y Alice- ¿Vivir la vida tranquila no es una opción para vosotros? Aggg... -Thimaz niega con la cabeza mientras pone sus brazos en jarra- Sea como sea, me alegra volver a veros.

El enano da una sonrisa sincera a Leiath, a fin de cuentas ella se había preocupado por el desde que tenía memoria, al menos desde que tenía memoria desde el hospital psiquiátrico, lo cual es decir poco tiempo pero muy intenso.

-Las piernas están bien, ya casi no tengo secuelas de lo del Doctor, aunque he de admitir que no me hace ni pizca de gracia la electricidad... -Dice el enano con una mueca de molestia- Gracias por preguntar. ¿Que tal usted con... esto... esas cosas que usted hace...? En verdad no tengo ni idea...

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09/03/2019, 21:52
Onfale

- Cuando tengas un momento me gustaría contarte algo...- Dijo misterioso el perfumista dejando claro que necesitaba que fuera en privado.

- Maese Thimaz.- Saludó al enano con una leve inclinación de la cabeza. Sus quejas sobre ellos le provocaron una media sonrisa. La verdad es que no podía culparlo de pensar así. Allá donde iban les perseguía la desgracia.

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10/03/2019, 08:15
Leiath, Bruja de Hala

Un secretillo? Uy eso le apasionaba, enterarse de los cotilleos. Sin duda había sido un gran aliciente para la solitaria bruja en los últimos meses el que sus paisanos acudieran a ella para pedir consejo o conseguir alguna poción amorosa, y así enterarse de todos los rumores que circulaban por la región.

Sin duda, en este caso, debía tratarse de algo bueno por lo bien que se le veía al mago. Habría encontrado la felicidad al lado de un rubio hombretón de anchas espaldas?

- Sí claro, aprovechemos a que aún no han empezado con la charla, que luego siempre se nos lía la cosa. Si nos disculpais...

Leiath se retiró a cierta distancia para proporcionar a Onfale la discreción que solicitaba.

- Cuéntame.

Notas de juego

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10/03/2019, 10:44
Onfale

Onfale se alejó de los demás con el rostro serio y la miraba baja. Casi pareciera que se miraba las puntas de los pies al caminar. Y no era para menos. ¿Por dónde empezar? Quizás lo mejor sería no usar las palabra y que la Bruja de Hala lo viera con sus propios ojos. El perfumista introdujo las delicadas manos entre los pliegues del sari deshaciendo la sujeción de la tela en torno a su cuerpo. Dejó a la vista sólo la zona del abultado abdomen.

 

Se quedó observando el rostro de la normalmente afable Bruja temiendo una airada respuesta. 

- ¿Recuerdas al Gentil Que Llama?- Le preguntó para que se fuera situando. Era aquel diablo atrapado por Strahd en una antigua posición de guardia en forma de torreón, cuando tenía el aspecto de una mujer hermosa y se hacía llamar Sandansola. Un diablo que el Aquelarre había liberado durante la Edad del Lobo en Dorvinia. Lo que le preocupaba al perfumista era cómo aquel feto, o lo que fuera, iba a salir de su cuerpo. Por otro lado, existía la posibilidad de que Leiath le abroncara por hacer tratos con diablos, pero sabría pararle los pies. No debía meterse en su vida. Los amigos estaban para eso, para ayudarse en los momentos difíciles. Necesitaba su apoyo y si iba a sermonearle que fuera después, cuando todo hubiera pasado.

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10/03/2019, 12:43
Leiath, Bruja de Hala

Por las barbas de mi abuela, menudo barrigón! Se le pusieron los ojos como platos al vislumbrar el redondeado vientre de su compañero de aquelarre.

Primero se le pasó por la cabeza lo que a cualquiera que supiera algo sobre sanación; gases. Es bien sabido que los gases pueden hacer que el vientre se hinche y además son bastante molestos. Pero el aspecto del afectado no era de malestar, y luego estaba aquello que decía sobre 'El Gentil que Llama'. Ese no era un diablo con el que se habían cruzado casi al principio de su viaje? Se habría encontrado Onfale de nuevo con él y le había lanzado una maldición?

Puedo?- pidió permiso para palparle y valorar mejor de qué se trataba.- Qué ha pasado? Qué te ha hecho?

- Tiradas (1)

Motivo: sanar

Tirada: 1d20

Resultado: 14(+11)=25

Notas de juego

Dejo tirada de sanar por si da pistas de lo que lleva dentro (forma, ritmo cardíaco normal si lo tuviera, etc...)

Alguna idea de como llevar esto a buen puerto? :D

Un hechizo de adivinación nos puede ayudar, pero no sé si nos va a dejar Braderick tiempo suficiente. También quizás un detectar el mal. Si es algo malo, un quitar maldición?

Si es bueno, pues una cesárea en el momento adecuado y punto, me supongo. Como te pongas de parto en medio del combate...

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10/03/2019, 16:23
1-Estado de los personajes

Un par de preguntas le bastaron a Leiath para evaluar mejor la situación.

¿Meas más de lo habitual? Sí, Onfale meaba más de lo habitual. Eso significaba que la cavidad en la que estaba el bebé presionaba la vejiga, y eso significaba que el bebé no estaba dentro de la vejiga. Eso era bueno, ya que significaba que el orificio del parto no sería el tracto urinario.

¿Cagas heces más delgadas? Sí, las heces de Onfale eran más delgadas. Eso significaba que el bebé presionaba las tripas y no había espacio para que los detritus se asentasen en grandes truños. Y también significaba que el bebé no estaba en plan tenia engordando en el interior del intestino. El bebé no iba a ser cagado.

Eso significaba que la bolsa en la que estaba el bebé estaba aislada, lo que llevó a Leiath a preguntarse cómo llegó la semillita de papá a entrar en la semillita del otro papá. ¿Fecundación in éter? Es decir, ¿algo entró incorporalmente en la barriga de Onfale y soltó sus óvulos o algo así?

Lo más parecido era la reproducción de los perros intermitentes, que por otro lado era un tema bastante poco documentado. Pero si uno de los progenitores tenía la capacidad de volverse etéreo, el bebé heredaría ese rasgo y podría salir de la barriga de Onfale cuando fuese necesario. O devoraría a Onfale por dentro para abrirse paso a dentelladas, ¿quién sabe?

El resto de condiciones que podía percibir Leiath tocando eran las normales para un feto humano de unas veinte semanas.

Notas de juego

No tengo ni idea de si las embarazadas cagan heces delgadas... Esta situación también es nueva para mí.

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10/03/2019, 21:46
Rathandal

La figura que les había convocado retiró su capucha y mostró su rostro. Sus orejas élficas eran lo más exótico de entre los presentes. Algunos solo habían oído hablar de los elfos en los cuentos de hadas.

Ejem... No creo que venga nadie más. Creo que podemos empe...

El elfo detuvo sus palabras, y levantó la vista clavando sus ojos en Alice. La miraba entre extasiado y extrañado, como si no se esperase su presencia.

¿Anna? Anna, ¿eres tú? Perdona, tu pelo rojo me recordó a un antiguo amor. Yo... Mi nombre es Rathandal. No soy de aquí. Vine de un lugar lejano llamado Faerún.

El viejo Rannhard reconoció en el cuello del elfo el símbolo sagrado de Lathander. Ambos habían llegado a Ravenloft desde las mismas tierras. Ambos creían en el mismo dios.

Hace mucho tiempo, conocí a una hermosa mujer de cabellos rojos y mirada distraída. Una mujer que me robó el alma. La encontré ingresada en un psiquiátrico, después de que un vampiro le robara a ella la razón. Afirmaba ser la reencarnación de una campesina llamada Tatyana.

Uno de los dos motivos por los que os he reunido aquí es... Quisiera saber si alguno de los supervivientes del Sunny Tear Sanitarium se encontró con otra reencarnación de Anna. Una mujer de pelos tan rojos como los de esa mujer-dijo, señalando a Alice-, que dijese ser reencarnación de Tatyana o de Anna, que dijese estar atormentada por un vampiro. ¿Es así? ¿Alguno de vosotros, quizás, conoció a alguien así en el Sunny Tear Sanitarium?

La mirada de Rathandal mostraba desesperación. Por otro lado, ¿cual era el otro motivo de esta reunión?

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11/03/2019, 08:32
Leiath, Bruja de Hala

Leiath vio interrumpida su interesantísima conversación con el eunuco por un duende del bosque.

Algo importunada pero consciente de que en realidad habían acudido a la llamada de aquel extraño se giró para escuchar atentamente lo que tenía que decir.

 Y quedó decepcionada. Pensaba que se habían reunido para crear una batida y destruir a todos los engendros del mal que se encontraran en su camino, pero a cambio tan sólo se trataba de un enamorado desesperado en la búsqueda de su amada. En vez de acudir a su hospicio como todo el mundo, en donde podrían haber descubierto el paradero de la mujer con su bola de cristal en un 'plis' y dejar zanjado el tema con una donación a Hala, le hacía abandonar a sus gatos y tener que desplazarse por los peligrosos caminos de Barovia. Pobre mininos, ahora estarían tristes y solitos sin que nadie les encendiera el fuego del hogar.

La cara de la bruja era un poema.

Tiró de toda su fuerza de voluntad para no reprender al duende orejudo delante de su audiencia e intentó recordar si había visto a una mujer con esa descripción en el Sanatorium. Recordaba a Rachel y a Aubrey, dos de las pacientes que les acompañaron durante la huida, pero ninguna de ellas era pelirroja ni hablaba de vampiros. También estaba Isabella. Aquella asesina despiadada tenía el pelo oscuro, le parecía recordar. Los demás pacientes habían conservado la máscara que les habían impuesto a todos los internos y guardas desde el principio.

Mmmmh, yo no vi a nadie con esa descripción- susurró al aquelarre- vosotros?

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11/03/2019, 13:16
Flame

El aspecto de Flame había cambiado considerablemente. Su frente ya no lucía una única escama como antes, ahora su rostro estaba cubierto por varias de ellas de diferentes tonalidades pues según cómo incidiese la luz en ella cambiaban o no de color. Antiguamente, Flame había vestido con colores rojizos e incluso había tratado de ocultar su rostro para pasar desapercibida, como quien huye de algo o teme que la descubran. Pero ya no, ahora lucía orgullosa su aspecto y los colores de su ropaje habían cambiado a colores más relacionados con la naturaleza que le rodeaba. Vestía con verdes y marrones que a veces le confundían con el entorno.

Flame había pasado mucho tiempo sola y cuando escuchó el llamamiento se dirigió hacia allí. Su sorpresa fue cuando se reunió de nuevo con casi todo el Aquelarre. No podía creerse que estuvieran allí y fue entonces cuando se dio cuenta lo muchísimo que les había echado de menos.

Era sorprendente como aquella Flame indiferente, seria y distante había cambiado tanto. En cuanto vio a Leiath se lanzó directamente a abrazarla. Los ojos de la lagartona estaban empañados y una sonrisa de alegría dibujaba su rostro. Leiath le había hecho creer en Hala y había logrado que dejase su culto pagano a los dragones. Hala les había bendecido en multitud de ocasiones y les había dado dones y beneficios impensables. Eso solo podía definirla como la diosa verdadera y por ello había empezado a creer.

Después vio a Onfale y recordó los primeros sentimientos que tuvo al verle. Como aquel hombre de aspecto aniñado le había despertado una gran curiosidad en él que al principio lo confundió con algo similar al deseo hasta que comprendió que ella y él solo podrían ser amigos. Nuestros destinos están ligados, le dijo, y sin duda volvemos a encontrarnos, de ahí que no hubieran hecho falta despedida. Pero veo que estos meses te han tratado bien. Concluyó con una ligera sonrisa irónica al ver el aspecto del perfumista.

Y por último miró a Alice a quien abrazó también y le dedicó otra amplia sonrisa. Alice y ella habían compartido un destino bastante común desde que se habían encontrado entre la niebla y se habían salvado la vida la una a la otra varias veces, y por desgracia alguna que otra vez no lo habían logrado. Pero ahí seguían todavía, vivas y juntas de nuevo.

Y por último vio al enano, a él no le ofreció su cariño. Thimaz aún estaba lejos de ganarse su confianza y tan solo le estrechó la mano para saludarlo pues no tenía ninguna intención de ser maleducada con él. Al fin y al cabo gracias a él también habían logrado salir del sanitario.

Y entonces llegó la decepción, el exótico elfo que les había reunido allí no habló de matar demonios o de acabar con criaturas de la noche, no... ¡se puso a hablar de un amor perdido! Y Flame, una mujer que poco creía en el amor, se quedó totalmente decepcionada. Si no hubiera sido por que se había vuelto a reunir con sus compañeros, sentiría que había ido hasta allí absolutamente para nada.

En el sanitarium todos íbamos con máscaras que nos impedían ver nuestros rostros. Le dijo al elfo con un tono bastante malhumorado. Aquella ya sí que parecía la Flame de siempre. Así que no, yo no vi nada. Terminó decepcionada.

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11/03/2019, 17:49
Vinthrael

Ante las primeras palabras de aquel que los había llamado, los rostros y murmullos de decepción se filtraba en el silencio que rodeaba a los espectantes y vinthrael no pudo menos que chascar la lengua y esperar que la segunda razón de la convocatoria fuera algo más serio.

No sabía nada de lo que hablaba, del sanatorio mental, sin embargo, el grupo de aventureros de su lado si sabían de lo que hablaba y por su reacción, no era un buen lugar, como casi nada en esta tierra sombría...

Notas de juego

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11/03/2019, 20:07
Onfale

La conversación con Leiath se había visto interrumpida demasiado pronto. Aún le quedaban dudas, aunque la Bruja le había dado algunas pistas. Era la incertidumbre de saber cómo iba a suceder el milagro de la vida lo que más le preocupaba. Sí, podía ser a través de una intermitencia. ¿Por qué no? El conocía el conjuro. por nada del mundo quería que le abrieran un canal en su cuidada piel que impregnaba de aceites untuosos todas las mañanas para hidratarla y evitar que se diera de sí o le salieran estrías. Por otro lado estaba el asunto del instinto paternal. ¿Sería capaz de cumplir una de las peligrosas misiones del Aquelarre? Quedó aliviado al escuchar el primer motivo de haberlos reunido allí.

- No conocimos a nadie así, aunque, como te dicen, algunos ingresados en el sanatorio llevaban siempre máscaras.- Los grandes ojos del perfumista no dejaban de fijarse en Flame. Leiath había cambiado, pero lo suyo era una auténtica transformación. Estaba guapa, a su manera.

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11/03/2019, 20:52
Thimaz

Thimaz se rascaba la cabeza pensando en sus experiencias en el Sunny Tear Sanitarium, y por mucho que pensaba tan solo le venían recuerdos desagradables, sensaciones terroríficas y vejaciones por todos lados, por lo que decidió dejar de pensar y hablar sobre algo, que quizás tuviera que ver.

-¿Era la mujer de la ballesta?. -Preguntó Thimaz- ¿O quizás el objetivo del asesino que nos acompañó desde el tunel?.

Finalmente Thimaz alzó los hombros en un gesto universalmente conocido como "No tengo ni la más mínima idea".

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11/03/2019, 23:02
Dragov Puñodehierro

Una imponente figura  desconocida para los allí reunidos apareció acompañando a uno de sus congéneres, el que se hacía llamar Thimaz. El enano  vestía una reluciente armadura completa, escoltada por no pocas armas de guerra entre las que destacaba una bella y afilada hacha de guerra de clara manofactura enana. El portador de  aquel arsenal tan solo dejaba mostrar sobre todo aquel metal, una larga y cuidada barba grisácea que decoraba una cara de piel recia y curtida. Un noble porte trasmitía con una mirada tan penetrante como serena. Pero de toda aquella oronda y corta figura destacaba sobretodo el animal que la llevaba con paso firme sobre su  colosal lomo. Un monumental jabalí  se dejaba cabalgar como dócil corcel por el insigne enano,  atesorando más peso y robustez que el más pesado de los caballos de guerra.

El distinguido jinete avanzó tras su acompañante, fijándose en todos los presentes. Al ver que parecían conocerse, permaneció en silencio mientras se saludaban , aprovechando el momento para observar con atención  a todos y cada uno de ellos con su penetrante y persuasiva mirada.

Aquellos que cruzaron la vista con el robusto enano, sintieron una extraña sensación de bienestar mientras notaban como algo les sondeaba por dentro. Tras eso permaneció en silencio, atento a lo que la figura que los había convocado tenía que decirles. Las inocentes palabras de aquel joven no parecieron contentar a los presentes, pues al parecer, esperaban algo más que tener que prestar su ayuda a un enamorado para encontrar a su amada. 

El jinete enano permaneció impasible sobre su montura, esperando que aquel joven diera alguna explicación más adecuada que aclarara la necesidad por reunir a tan pintoresco y notorio grupo de personas.

 

    

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12/03/2019, 22:52
Rathandal

Yo... Supongo que habría sido mucha coincidencia, pero tenía la esperanza de que quizás ella... quizás nuestros caminos se volviesen a entrelazar.

No se refería a la posibilidad de que la reencarnación de Anna hubiese muerto en el Sunny Tear Sanitarium, sino a la esperanza de que hubiese sido una de las pacientes que habían logrado huir. Volvió a mirar a Alice, tratando de encontrar algún parecido con su antiguo amor.

Entonces hay otra cosa que tenemos que tratar en esta reunión: mi venganza. Pretendo vengar a mi amada matando al vampiro que la enloqueció: el Conde Strahd Von Zarovich. Él desapareció, recluído en su castillo desde el momento en el que las Brumas rodearon Barovia, pero la sed de sangre le hace abandonar su fortaleza para alimentarse. Las desapariciones... la epidemia de anemias... Todo prueba que Strahd sigue activo.

No era una prueba definitiva, pero el elfo necesitaba creer que sí. Los caminos son peligrosos, y las desapariciones pueden ser cosa de otro tipo de monstruos. Un vampiro podría justificar la tez pálida y la falta de sangre de esas anemias, pero también lo hacía la enfermedad y la plaga.

Y ahora viene el punto más importante... En Krezk, dentro de siete días, se va a celebrar una subasta. Uno de los objetos subastados será el Símbolo Sagrado del Cuervo. Es un medallón antiguo, la más poderosa herramienta con la que cuentan las fuerzas del Bien. Strahd ni siquiera puede tocarlo. Es como si fuese la luz del sol hecho metal.

Mi plan es conseguir el Símbolo Sagrado del Cuervo, entrar en el castillo de Strahd y acabar con él, para que nunca vuelva a atormentar a ninguna reencarnación de Tatyana Federovna... Bueno, para que nunca vuelva a morder a nadie.

Rathandal giró la cabeza noventa grados, como intentando redirigir el pabellón auditivo hacia algún ruido en la noche...

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Esconderse y moverse sigilosamente

Tirada: 2d20

Resultado: 9(+10)=19, 3(+10)=13 (Suma: 32)

Tirada oculta

Motivo: Iniciativa

Tirada: 1d20

Resultado: 1(+6)=7

Notas de juego

Tirad avistar CD 19.

Tirad escuchar CD 13

Tirad iniciativa CD 8.