Partida Rol por web

En aguas inciertas

2. REBELDES CON CAUSA - Después del atentado

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05/11/2021, 20:52
Hans Grüber

Hans estaba intentando sin demasiada suerte endilgarle el soportar el peso muerto -¡JA!- que constituía en aquel instante Suzanne a algún buen samaritano para poder relajar el pinzamiento lumbar que se le había agarrado en la espalda tras el demencial ataque de Jan El Feo, tarea de dificultad comparable al avistamiento de una foca monje en celo en esa estación del año (*) en aquel condenado navío. Por suerte, apareció entonces su sobrina, Dafne Mary de las Mercedes Zola. Algunos nombres solo presagian ventura.

—¡Dafne! ¡Qué angustia, diablos! ¡Al fin apareces! ¡Y justo a tiempo para evitarme una hernia! —dijo resoplando algo airado al tiempo que le hacía entrega de las axilas de Suzanne a Wanda para que la arrastrase a la enfermería en su lugar—. ¡Voto a bríos que la vejez es una etapa sombría y triste! ¡Ugh! ¡Mi espina dorsal aúlla de dolor! —dijo mientras trastabillaba contra el escritorio de la capitana. —Ese chalado llamó a la puerta sin identificarse siquiera y sin previo aviso había apuñalado a la capitana en el pecho en cuestión de un parpadeo. La inmensa fortuna ha querido que este bienhallado muchacho de felinos reflejos reaccionase y ensartase al asesino como si de un espeto se tratase, por no mencionar que si no fuese por la joven Annalise, este cascarón ahora mismo sería pasto de las llamas... —dijo con ese matiz lúgubre tan característico en él mientras miraba a toda la tripulación. Convenía que supiesen de la que se habían librado.

—¡Pero basta por ahora de palabrería! ¡Tienes razón, sobrina! ¡Esta mujer está a punto de cruzar el umbral y no olvido que de no ser por ella uno que yo me sé estaría haciendo gárgaras en el vasto océano! ¡He de hacer honor a mi juramento hipocrático y hacer lo posible por salvarla! ¡Y. LO. HARÉ! ¡Abran paso! —bramó muy metido en su papel con los brazos cruzados, como si de un magistrado capitalino se tratase.

Notas de juego

(*) N. del J. Las focas monje no entran en celo. Todas hacen voto de castidad. Es bien sabido.

Me estoy partiendo yo solo de imaginarme la escena con Wanda xDDDDDDDDDDDDD

Baalis, si es procedente o necesario, hago uso del talento Buena Reputación para que la turba pirata considere prudente facilitarnos el acceso a la enfermería y transporten a Suzanne rápidamente. De igual modo, dejo claro la participación esencial de Andrei y Annalise para que no haya pasado nada gravísimo.

Lo dejo a tu criterio ;-)

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05/11/2021, 21:14
Hans Grüber

Notas de juego

Nota adicional: Cuanto Hans trastabilla con el escritorio es cuando coge el libro y lo esconde en la túnica. De ahí que antes deje a Suzanne reposar sobre Wanda ;-P

Luego se lo comentaré a Andrei y a Annalise, llegado el caso, como una sana broma del buen doctor.

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07/11/2021, 23:49
Hendrika van Haas

—Suzanne... ¿vive?

Los ojos de Hendrika echan llamaradas de odio. Rápidamente se reacomoda y prosigue con su teatro, hablando en voz alta para que toda la tripulación pueda escucharla. Hay unos quince piratas que se han alineado detrás de ella y que parecen ser quienes la apoyan con más decisión. Otros diez están con Jan el Bello, y un puñado de indecisos está en el medio. Un par de ellos, motivados por las palabras de Annalise, se pasan al bando de Jan el Bello [1].

—¡Suzanne vive! La Dama Fortuna nos sonríe, pero no permitiré que vuestras manos toquen a nuestra capitana —le espeta al doctor Émil y a Dafne—. Dos recién llegados que deberían haber sido dejados a merced del mar. ¡Y uno de ellos estaba presente cuando Jan el Feo quiso asesinarla!

Sin embargo, la vehemencia del doctor Émil es demasiado poderosa: está decidido a atender a la capitana. Aquello es valorado por varios tripulantes. Entre los piratas se alzan voces de protesta contra Hendrika: "¡Deja pasar al doctor!", "¡Estás jugando con la vida de Suzanne!". Prestando atención a los comentarios, Hendrika cede terreno [2].

—Permitiré que tratéis a Suzanne... bajo vigilancia —Hendrika señala a dos de sus hombres de confianza—. Tú y tú, escoltadlos hasta la enfermería, vigiladlos, si hacen algo sospechoso, arrestadlos. Dafne, Émil, si Suzanne llegara a morir bajo vuestros cuidados, prometo que os haré colgar del mástil.

El doctor y Wanda se llevan a Suzanne bajo cubierta, a la enfermería. Amputapatas y Eva son convencidos por Andrei de ir con ellos [3]. También bajan Renacuajo y los dos escoltas designados por Hendrika.

Notas de juego

[1] Éxito de Comunicación de Annalise.

[2] Hans usa su talento de Buena Reputación para tener un éxito de Comunicación automático y abrirse paso entre la muchedumbre.

[3] Éxito de Comunicación de Andrei.

(sigue...)

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08/11/2021, 00:14
Jan el Bello

Andrei y Annalise le recuerdan a Hendrika que no es la capitana, y que el que sigue en la línea de sucesión es Jan el Bello, que es el segundo al mando. Hendrika rechina los dientes de furia. Los piratas que están a favor de Jan el Bello lanzan comentarios como "¡Andrei y Annalise tienen razón!" y "¡Eso, Hendrika, no eres la capitana!".

Sin embargo, el momento en que Andrei dice que Jan el Bello ahora es el capitán, el aludido mira a los lados, nervioso. Está sobrepasado por la situación.

—¿Yo? ¿Yo capitán? Ah, Andrei, amigo mío, creo que estás siendo... —traga saliva—. Te estás apresurando, amigo mío. Creo que... que... deberíamos... ¿votar? O esperar. Sí, quizás esperar a que, a que... a que Suzanne despierte. Como dice Annalise, no hay apuro.

Jan el Bello será un excelente luchador y un buen segundo al mando, pero evidentemente no tiene lo necesario para ser un líder en un momento de crisis. Los demás piratas se dan cuenta de esto y se muestran decepcionados por su falta de audacia, diciéndole cosas como "Papanatas", "Jan el Paciente". Incluso una voz tímida se anima a susurrar "¡Andrei capitán!" pero enseguida se calla.

Notas de juego

(sigue...)

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08/11/2021, 00:28
Hendrika van Haas

—Hasta que Suzanne mejore, la capitana soy yo, porque tengo sangre Van Haas en mis venas. Lo que es conveniente hacer o no hacer en estos momentos es mi decisión, Annalise, y no quiero volver a oírte cuestionar a tu nueva capitana si no quieres ser culpable del delito de sedición. En mi barco los sediciosos son pasados a cuchillo.

Se vuelve hacia la tripulación. Todos los que están a favor de ella corean "¡Hendrika! ¡Hendrika! ¡Hendrika!". El puñado de piratas que parecían neutrales entre Jan el Bello y Hendrika ahora parece más inclinado a apoyar a Hendrika porque ven que Jan el Bello no reacciona como un líder. Y los que apoyaban a Jan el Bello, no parecen muy complacidos con la nueva capitana Hendrika, pero no se animan a hacer nada en su contra.

—¡Este barco vuelve a ser comandado por alguien de la familia Van Haas! ¡Mi tío Ludo van Haas fue el primer capitán del Rapaz y con él este navío conoció la gloria! Veremos la gloria otra vez, y Ludo será vengado —dice en voz más baja, cargada de odio, mirando a Annalise a los ojos.

>>Andrei dice que Jan el Feo, que intentó asesinar a Suzanne, murmuraba no sé qué diablos sobre rubios y ladrones de cuerpos. ¿Nos tomas por idiotas, Andrei? ¿Tú, Annalise y el doctor estabais reunidos con Suzanne y permitisteis que fuera apuñalada? ¿No es demasiada casualidad? Y no habéis hecho ¡NADA! por defender a Suzanne. 

>>Y el descerebrado de Jan el Feo, ¿alguien puede creer que él actuó por su cuenta? Hace un mes y medio, cuando elegimos al segundo al mando, Jan el Feo votó por ¡Jan el Bello! Jan el Bello, que es amigo de Annalise, Andrei y el doctor. ¿Cuánto de todo esto es casualidad... y cuánto es conspiración?

Notas de juego

Situación: por la pifia de Andrei, Jan no se anima a tomar el mando. Hendrika ahora los está acusando a ustedes de conspiración.

Acuérdense de no marcar a Wanda ni a Hans en los mensajes. Hay tres grupitos de piratas: 1) los que apoyan a Hendrika, 2) los que apoyan a Jan el Bello pero Jan el Bello no espabila, y 3) los neutrales, que por ahora parecen más convencidos por Hendrika, que muestra capacidad liderazgo. 

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08/11/2021, 00:57
Director

"Enfermería" es un nombre demasiado pomposo para lo que es ese habitáculo: un cuarto sucio y con humedad, con una rata merodeando por ahí. Sobre un catre hay un enfermo, Mauritz. Es un hombre de unos treinta años. Está flaco, su frente está mojada y tiene los mofletes morados. Farfulla incoherencias en voz baja. Tiene la lengua hinchada. Amputapatas le explica a Hans que este hombre está así desde hace una semana.

—Donsidación... daidodes... daición... donsidación... —dice Mauritz.

Sin mucha ceremonia, Amputapatas tira al suelo a Mauritz y deja que pongáis a Suzanne allí. La capitana sigue perdiendo sangre, cada vez se la ve más pálida, su respiración es débil. El pestilente perfume de Renacuajo, que va con vosotros, inunda la habitación. Hasta la rata huye despavorida. También está allí la bella Eva, hecha un atajo de nervios, y los dos escoltas que os ha asignado Hendrika.

Desde la cubierta superior penetra la voz de Hendrika, comentarios como "Hasta que Suzanne mejore, la capitana soy yo, porque tengo sangre Van Haas en mis venas", y "En mi barco los sediciosos son pasados a cuchillo".

Notas de juego

(sigue...)

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08/11/2021, 01:10
Director

El libro de Suzanne está a salvo entre los pliegues de tu túnica. Sobre un estante hay unos cuantos frascos, algunos sin etiqueta, e instrumental médico. Lo único que parece tener algo de uso es el serrucho y las pinzas. Que, no parece difícil de adivinar, es lo único que sabe hacer Amputapatas: amputar y extraer balas. Tus ojos van de aquí para allá, buscando escopolamina.

- Tiradas (1)

Notas de juego

¡Oh snap! No hay escopolamina, pero a cambio de un Doblón en contante y sonante, te doy un éxito automático y Hans encontrará un frasquito con la pócima en los estantes de la enfermería.

(sigue...)

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08/11/2021, 01:19
Amputapatas

Amputapatas os mira, esperando que hagáis vosotros la cirugía sobre Suzanne, porque cree que sois los expertos.

—¿Entonces Jan el Feo hizo esto? ¿Por qué cojones Jan el Feo haría esto?

Notas de juego

(sigue...)

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08/11/2021, 01:20
Renacuajo

—Oh, quién sabe... Recordaréis que hace cosa de un mes, o mes y medio, cuando elegimos al nuevo segundo de a bordo, Jan el Feo votó a favor de Jan el Bello. ¿Casualidad?

Notas de juego

(sigue...)

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08/11/2021, 01:22
Eva

—Otra vez lo estás haciendo —le dice a Renacuajo, con las mejillas encendidas—. Hace días que estás insinuando que Jan el Bello quiere hacerse con el control del barco. Y que Amputapatas y yo estamos involucrados. ¿Ahora dices que Jan el Feo estaba confabulado con Jan el Bello?

Notas de juego

(sigue...)

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08/11/2021, 01:25
Renacuajo

—Aquello eran bromas, Eva. No lo decía enserio. Pero ya va siendo hora de que dejes a Jan el Bello de lado y comiences a apreciar a Renacuajo el Apolíneo, mrebek-mrebek-mrebek.

Renacuajo pasa su sucio dedo índice por el cabello de Eva. Eva respira con intensidad y tiene las manos cerradas en puños.

Notas de juego

El asunto, claro, es que ni Wanda ni Hans son cirujanos reales. Podéis tirar ambos Erudición dificultad 14 a ver si hacéis alguna costura un tanto chapucera para emparchar a Suzanne (os regalo un +1 extra de bono por hacerlo en equipo).

¿O tal vez pedirle a Amputapatas que realice él la cirugía? ¡Vuestra decisión!

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08/11/2021, 09:20
Hans Grüber

Hans parecía rebuscar con conocimiento de causa entre el escaso material médico que se advertía a simple vista en aquel tugurio apodado con mortal ingenuidad enfermería. No sería de extrañar que muchos de los allí tratados muriesen antes por las deficientes condiciones higiénicas que circundaban al navío que por la letalidad de sus heridas.

Hans no estaba especialmente preocupado por la intervención de marras sobre Suzanne. De hecho, daba como elevada la posibilidad de que feneciese tras la cuchillada de Jan el Feo. En realidad, Hans estaba especialmente preocupado por encontrar una salida viable a aquel embrollo de mil pares de diablos en el que se había metido con su sobrina en el maldito momento en el que los rescataron de morir ahogados. Era, en su docta opinión, un caso de libro de aquella frase que reza: hemos pasado de la sartén a las brasas.

Pareció encontrar algunas pócimas que captaron su interés y también algunos instrumentos a medio oxidar de lo más adecuados para asegurar una muerte horripilante a Suzanne. Cogió las primeras. Descartó los segundos.

—Bien, estoy listo para operar —dijo de repente con una mácula tenebrosa reverberando en la voz—. Damas y caballeros, voy a pedirles tres cosas: en primer lugar, necesito una aguja e hilo para coser, además de agua y pedazo de tela seca y limpia. En segundo lugar, necesito aire. La paciente también. Somos demasiados en esta estancia. Dafne, quédate conmigo. Serás mi enfermera. Señor Amputador (?), quédese aquí usted también. Necesitaré otro par de manos firmes —dijo paladeando la ironía inherente a su petición—. Y en tercer lugar, nada de tocamientos impúdicos en la enfermería —dijo arqueando una ceja al tiempo que miraba de soslayo al salaz Renacuajo y sondeaba la reacción de Eva—. El resto, si son tan amables, esperen afuera. Su capitana se lo agradecerá.

Se giró hacia la Matatigres. Su rostro evidenciaba que estaba a las puertas de la Muerte, escuchando el redoble de las campanas que portaban en su eco su mismo nombre. Hans apreció el sarcasmo de la situación y se permitió una sonrisa de satisfacción. En sus manos se encomendaba en silencio el espíritu de aquella mujer. Y él ni siquiera era médico. ¡Qué comedia!

—Y ahora... comencemos —musitó Hans invocando a su alrededor un ensordecedor y dramático silencio—. Enfermera... el instrumental.

* * * * *

Entregado al arte de la sutura en travesía, Hans empezó a animarse al ver que sus largos dedos le respondían a la perfección, consagrados al sutil encantamiento de la costura sobre la carne trémula de Suzanne. La capitana tenía el torso de una mujer joven y una innegable complexión atlética, si bien la herida le dejaría una fea cicatriz cerca de uno de sus senos. Hans había considerado indecoroso que la viesen así sus hombres, por no mencionar a Renacuajo, ese malandrín lujurioso. El doctor estimó que era toda una cortesía profesional de su parte hacia su más modélica alumna en los entresijos de la gramática.

—Más hilo —ordenó mientras visualizaba el fin de su tarea de precisión—. Corte por aquí, señor Amputador. Limpien la herida. Apliquen un paño mojado en agua fría en la frente de la capitana. Y ahora, enfermera... Sudor. Ahem. Sudor... Gracias. Bien. Hemos concluido. Señor Amputador, ayúdeme a ladearla un poco. Dafne, recubre el torso. Así. Eso es. Excelente

Hans se enjuagó las manos de sangre en la tina de agua y se secó el rostro tras la evidente sudoración. La operación -su primera operación- había sido todo un éxito. Loados fuesen los hados por permitir semejante carambola en su destino.

Vive... —dijo Hans admirando su obra—. ¡Viiiiiiveeeeeeee!

- Tiradas (1)

Notas de juego

¡VAAAAAMOOOOOOS AHÍ!!! DOC GRÜBER & NIECE IN DA HOUSEEEE!!! ¡JAJAJAJAJA!

Lo hicimos, Wanda. ¡Lo hicimos! ;-D

Dejo margen a Wolvie para que conteste y prosigo, que quiero dar un par de instrucciones al señor Amputador y necesito tener una charla con Wanda en privado de alguna manera ;-)

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08/11/2021, 10:01
Hans Grüber

Notas de juego

Gasto ese avieso doblón para hacerme con la escopolopo, claro que sí. ¡SE APROXIMA LA HORA DE LA VENGANSA! ;-D

Además de la escopolopo cojo otro frasco con algún brebaje inocuo. Por si hay que hacer un cambiazo al más puro estilo Hans Grüber ;-P

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08/11/2021, 22:04
Andrei Demidov.

Andrei entrecierra los ojos con suspicacia al ver la reacción de Hendrika, no es demasiado descabellado pensar que de alguna manera está confabulada con Jan el Feo.

Observando lo tensa de la situación, el espadachín hace un conteo rápido de cabezas. Tuerce un poco el gesto percatarse de que son menos, pero no tarda mucho en posicionarse cerca de Jan el Bello, haciéndole un gesto a Annalise para que se acerque. Ambos habían prometido mantenerse alejados de aquel embrollo, no obstante… la verdad es que ya era demasiado tarde. Reposó su mano hábil “casualmente” sobre el pomo de la espada.

Una vez más, la sobrina de Ludo no tarda en tratar de poner la balanza nuevamente a su favor, aunque afortunadamente es detenida en seco por la vehemencia del Doctor Émil. No confiaba del todo en el hombre, sin embargo el isleño tenía que admitir que, como rezaba el viejo dicho, el enemigo de tu enemigo era tu amigo. Logran bajar, pero acompañados por 3 monigotes de Hendrika.

El papanatas, nunca mejor dicho, de Jan el Bello se deja sobrepasar por la situación, echando por tierra prácticamente la única opción que tenían de algo de estabilidad en la nave. El rubio lo mira con cara de pocos amigos.

— Tienes que hacer frente a Hendrika o todos estaremos en peligro, Jan —Andrei se inclinó sobre el oído del pirata, cubriendo su boca con la mano como si se estuviera acariciando la perilla (que en realidad no tenía), para que tampoco pudieran ver sus labios—. Empezando por ti, porque estoy seguro de que no tardará en acusarte de alguna conspiración contra Suzanne o contra ella misma, y siguiendo también a Eva, Annalise y Dafne —apeló a lo mujeriego del bucanero, a ver si había suerte y recuperaba la valentía—, por apoyar a la Matatigres.

Hendrika volvió a atacar, granjeándose el apoyo de algunos de los piratas que se mantenían neutrales. Andrei se mordió el labio inferior, inseguro.

— ¡El ser capitán no es algo hereditario! —respondió él, alzando la voz—. ¡Para elegir a un nuevo capitán, luego de que Ludo muriera —evitó mirar a Annalise, notando la mirada de odio que la pelinegra había dirigido a la alquimista—, se hizo una votación! La diferencia es que Suzanne sigue viva, así que lo tiene sentido es que Jan asuma el mando, ya que es su segundo, es lo que ella hubiera querido —hizo una pausa, para humedecerse los labios—. ¿Qué ganamos nosotros con asesinar a la Matatigres? Por ella estamos en este barco. En cambio, tú no has perdido tiempo en declararla muerta y en nombrarte capitana, pasando por alto la votación que debería tener lugar.

- Tiradas (2)
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08/11/2021, 22:17
Annalise

Suspiró muy profundo cuando escuchó a la mujer imponerse y ganar súbditos para que la apoyen en esta locura, lo cual hizo que Annalise sienta una furia que quizás nunca en su vida había tenido. Por esa razón es que tras posicionarse junto a Andrei y Jan el bello, escuchó a su amigo mientras ella pensó en lo que debía decir. 

—Solo diré una sola cosa si me permiten, su Capitana no ha muerto y ya hay una sola persona que se consagra dueña de este barco sin importar la salud de quién les ha dado un lugar aquí—comentó decidida—. Yo aconsejaría que antes de tomar partido hacia una persona que al parecer no le interesa la salud de Suzanne, esperaría a ver qué sucede y si nuestra querida Capitana puede estar con nosotros nuevamente.

»Está claro que posicionarse en contra de la persona que dirige esto, ya sería traición y ya saben cómo se paga en este lugar—dijo muy segura—. Además, Hendrika no te veo preocupada, si hambrienta de poder y las acusaciones son falsas, considerando que jamás le haría daño a la mujer que me hizo un lugar aquí y me aceptó cuando en tu caso, solo quieres cortar cabezas. 

Tras decir todo aquello, se mantuvo firme y pensó que tal vez los que estaban indecisos por respeto a su Capitana no se verían convencidos por esta víbora. 

- Tiradas (1)
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09/11/2021, 01:55
Wanda Weiß

Antes de que comenzara la dificultosa operación, Wanda recordó de pronto que debían esterilizar la aguja en alcohol, tal y como le había escuchado una vez a cierto matasanos de dudosa fama que conoció en una travesía; porque confiar en que algo en ese cuartucho estuviera limpio... parecía un imposible. Trató de hacerle beber también un trago a la capitana, pero esta estaba sumida en un sueño profundo y totalmente inconsciente así que al final fue ella misma quien bebió un poquito de ese licor amargo. Aquel ron —o lo que demonios fuese el líquido de la botella— le supo a rayos, mas le daría la entereza y el cuerpo suficiente para aguantar allí, contemplando una operación tan complicada en manos de alguien que sabía de medicina lo mismo que ella... O algo así.

Wanda asistió tanto con incertidumbre como admiración a la clase magistral de cirugía improvisada por Hans. Mientras le iba proporcionando el instrumental que le pedía, sin rechistar o poner caritas al hacerlo, la muchacha se daba cuenta de lo cerca que estaban de convertirse en pasto para los tiburones de no ser por esa rápida (y arriesgada) jugada. Contuvo la respiración, pasando un trapo por las gotas de sudor que perlaban la frente de su mentor, lanzando alguna que otra mirada indirecta a la capitana, confiando en que siguiera con vida. 

Los minutos fueron pasando y ella se mantuvo con el alma en vilo y el corazón en un puño, rezando por lo bajo a Fenre, encomendándose a su gracia para que no arrastrase esa alma al otro lado. En aquel instante no interpretaba el papel de Dafne como llevaba haciendo desde que se aupó al barco, sino que mostraba a la propia Wanda; una joven que, a pesar de las vicisitudes del destino, seguía siendo un tanto inocente y bondadosa con el prójimo. Por eso, no pudo evitar esbozar una sonrisa nerviosa, a la par que palmeaba la espalda de Hans con una alegría más que palpable, cuando, contra todo pronóstico, el resultado final fue más que digno. "No apostaba ni una pieza de plata por este señor y lo cierto es que me ha cerrado la boca" —se dijo, fascinada.

—¡Qué buen trabajo has hecho, Tito Émil! Algún día puede que un busto tuyo decore la plaza principal de una gran ciudad —procedió a felicitarle de un modo adulador, sabedora de que el hombre saborearía cada piropo como si fuese el primero que recibía en su vida—. Deberías estar trabajando en alguna corte, con un despacho propio y no ser un médico itinerante... La gente no reconoce aún como es debido tu talento con la medicina.

"Ni con las patrañas" —pensó, ladeando la cabeza, para mirar brevemente a su alrededor. Al menos habían salvado el pellejo hasta nueva orden.

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09/11/2021, 15:38
Hans Grüber

—Tus loas y parabienes me resultan tan hiperbólicas como de todo punto precisas y ponderadas, querida sobrina. Soy un talento desaprovechado en este campo científico. En verdad mi genialidad médica supera la ficción narrativa más lisérgica —dijo Hans mirando a algún punto no especificado del éter en el horizonte de lo metafísico, perdido sin duda en la adoración a sí mismo. En verdad solo le faltaba levitar de lo trascendental que sentía su prodigiosa -a la par que de todo punto increíble- intervención quirúrgica. Suzanne Matatigres podía dar gracias a Fenre por tener a uno de los barones del crimen del continente a su lado para improvisar una sutura de emergencia.

Hans se permitió una fugaz mirada al rostro inconsciente de la capitana antes de esbozar media sonrisa, reflexionando sobre lo que había unido la gramática y la alta costura en una soleada tarde apta para el asesinato más demente.

—Necesitará reposo durante varios días y evitar esfuerzos innecesarios. El peligro inmediato ha pasado, pero la Muerte aún bate sus ávidas alas sobre esta mujer. Hemos de ser en extremo cuidadosos. Señor Amputador, puede proceder a comunicar la buena nueva. Por cierto... Respecto de ese interfecto... —inquirió señalando con un dedo acusador al tal Mauritz mientras arrugaba la nariz en un gesto de desaprobación—. No puede quedarse ahí tirado como si de un muñeco sin hilos se tratase. Este hombre necesita atención médica. ¿Dice que lleva así una semana? ¡Voto a bríos! ¡Traiga una silla! ¡Algo!

Cabía pensar que Hans se había venido arriba y estaba dispuesto a salvar a medio navío del escorbuto si era necesario, pero nada más lejos de la realidad: Quería saber qué diablos estaba tratando de decir Mauritz.

Demasiadas casualidades durante todo el día como para bajar la guardia.

Y como Hans mismo decía: la casualidad es la forma en la que los dioses preservan su anonimato.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Antes de conspirar comentar nada con Wanda, dejo a Baalis que nos indique la reacción de Amputapatas.

¿Es posible intentar entender algo de lo que dice Mauritz? Algunas palabras podrían tener sentido para mí, si soy sincero. Leo sus balbuceos y creo entender alguna cosa que me llama la atención xDDDDDD

Dejo una tirada de... ¿Comunicación? Y que Baalis provea si es necesario ;-)

¡Vamos, Hans! Do it, baby!

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12/11/2021, 14:59
Amputapatas

La improvisada sutura le compra a Suzanne Matatigres unos días más de vida, pero tal y como señala Hans, necesitará descansar y recuperar fuerzas. El doctor le comunica las buenas nuevas a los que esperan afuera: Amputapatas, Renacuajo, Eva y los dos escoltas. Los cuatro, inmediatamente, vuelven a entrar en la enfermería. El cirujano Amputapatas se mesa la barba mientras contempla a la capitana.

—Se la ve bien, pero no le habéis amputado nada. ¿Estáis seguros de que eso es correcto? Suzanne tenía una herida en el lado izquierdo del pecho, ¿no deberíais haberle cortado el brazo derecho para compensar la perdida de sangre en ambas mitades del cuerpo?

Aquello es completamente estúpido e insensato, pero no es como si Amputapatas supiera un cuerno de medicina. Hans observa al enfermo Mauritz y le indica a Amputapatas que le consiga una silla.

—Mauritz, pobre diablo, está más cerca de Fenre que de los vivos. Sugerí amputarle los dos hígados antes de que empeorara, pero Suzanne no me lo permitió, y aquí lo veis, ha llegado a este estado lamentable.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Hice una tirada y puse el 11 de dificultad donde iba el modificador, cosa que no está bien. Pero el resultado igualmente supera con creces la dificultad, así que va a algo de información jugosa para Hans...

(sigue...)

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12/11/2021, 15:11
Director

Hay una espumilla amarillenta en las comisuras de los labios de Mauritz. Al acercarte y olerla (¡qué difícil es oler algo entre la peste de Renacuajo!), te parece que se trata de... ¿arsénico? Alguien ha intentado envenenar a este hombre. No consigues dilucidar qué dice. 

Notas de juego

No te doy por válida la tirada de Comunicación porque quiero ver qué has interpretado que dijo Mauritz xDD. Pero vamos, estoy seguro de que lo has descifrado.

(sigue...)

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12/11/2021, 15:15
Renacuajo

—¿Suzanne está fuera de peligro? Gloria a Fenre, a la Dama Fortuna, y a las manos del doctor y la enfermera. Esto alegrará al resto de la tripulación. Menos a Jan el Bello, claro, que tendrá que responder muchas preguntas, mrebek-mrebek. Jan el Bello era muy amigo de Jan el Feo.

Notas de juego

(sigue...)