Partida Rol por web

al parecer el agua no viene de las paredes o el suelo si no del techo, como producto de un mar supremamente picado, sin embargo nota como en una de las jaulas de la bodega sobresale una lona de color negro que protege algo parecido a una caja.

El par de jóvenes charlan en medio de la tormenta, de golpe un chasquido en la madera presagia tragedia, una sección del techo de la bodega es arrancado por algo, una enorme roca sobre sale por el boquete en el techo…

¡¡¡¡¡CAPITAN ESTO ES UNA LOCURA, ESTA ENBARCACION ESTA CONDENADA, VAMOS A MORIR!!!! [/B]Grita un hombre con lágrimas en los ojos,  mientras un hombre lo escucha con la cara como piedra al tiempo timonea la estropeada embarcación, cobarde si no puedes hacer tu maldito trabajo salta de mi barco ahora mismo. [/B]El marinero desconcertado mira la borda, y entiende al instante que seria un suicidio seria como saltar a las mismisimas rocas.

En lo alto del mástil mayor apenas audible se escucha el grito de un marinero

Spoiler (marca el texto para leerlo):

Los marineros parecen palidecer cuando el maestre grita OLA ASESINA CUBRANSE…[/B]

empiezo a acercarme a las jauas cuando en medio de mi distraccion nos golpea la primera ola, el golpe me coge con tal sorpresa que me arroja al suelo;

damn mashua, digo mientras trato de levantarme y al tiempo que hablo alcanzo a oir que algo gritan el panico se apodera de la nave.

antes de que logre levantarme por completo llega la segunda ola, pero esta vez no sera, con pericia me agarro de la juala que tenia al lado mio y aprovechando la sacudida que me da el barco, aprovecho para levantarme y ponerme de pie de nuevo.

La primer ola entra por la puerta de carga superior, el mar esta muy agitado y Rearnal iba distraido. Es arrastrado por el agua hasta golpearse con el fondo de la bodega. El agitar del barco es rápido, haciendo que Rearnal nuevamente se deslice hacia los caballos. Logra agarrarse del poste donde los tres animales están atados. Se levanta rápido y corta las amarras de los animales, escucha un grito de alerta.

Miler AGARRESE!!!

La vos de Rearnal alcanza a advertirle a su nuevo amigo, un semi elfo que porta armas que nunca antes vio. Pero Rearnal no pudo prepararse a tiempo la cuerda de la mula lo demoro mas de lo debido, la nueva ola lo golpea tirándolo. Queda agarrado de la soga de la mula pero ha perdido su primer daga, toma la segunda y corta la ultima amarra de los animales para ser arrastrado nuevamente por el agua.

Los dos jóvenes apenas se reponían del primer choque contra las rocas cuando la nave recibe el azote de una ola, los dos aventureros no logran mantenerse en pie ante el estrepitoso choque, por el contrario los corceles con gráciles movimientos se mantienen en pie y la mula sigue su ejemplo, el boquete en el techo revela la penosa situación de la nave y la cara del explorador parece mostrar asomos de miedo, apenas estaba hablando cuando una ola mucho más potente embiste el barco, esta rompe algunos tablones de la nave y algunos marineros caen del navío  a la muerte segura, en el interior de los caballos como si anticipasen lo que va suceder se encabritan y saltan mientras sus amarras se sueltan, los aventureros son despedidos por el aire, Miller hace muestra una vez más de sus grandes habilidades gimnastica evitando el daño de la caída, sin embargo su compañero Rearnal logra apuras penas evitar ser aplastado por algunos escombros del navío que avanza en la tormenta.

Para sorpresa de los aventureros la jaula de metal yace rota y una figura piedra asoma debajo de la lona, la estatua es de una arena cobriza es de unos 4 pies de alto y unos 3 de ancho, está firmemente asegurada por correas de cuero y tiene algunas inscripciones en una lengua extraña para ustedes, el soplido del viento sumado a los petrificados ojos de la criatura causa una sensación de incomodidad, la cual no esconden los animales incluso la calmada mula.

un relampago se dibuja en el cielo y su resplandor casi los ciega, escuchan siseos como si se tratara de serpientes que invadieran la nave y se arrastraran en todas direcciones.

Rearnal se asombra de encontrar en este momento y lugar una estatua tan bien tallada de una criatura de la que solo escucho una historia. Esa historia tan bien contada y narrada por su mentor le permitio identificarla. Pero el problema de la tormenta ahora era lo que mas ocupaba su mente.

Aunque había notado desde antes la figura, la buscaba con la dificultad que representaba la tormenta aun sin tener muy claro de que se trataba, al verlo pensé que talvez debí quedarme en mi camarote.
empiezo a creer que esos monjes se traen algo mas que un simple paseo

al mirar la estatua reconoces el tallado, la forma, se trata de un basilisco, una abominable criatura que con solo mirar sus ojos puede convertirte en piedra, por la calidad de la talla estas seguro que se trata de una estatua, ya que dichas criaturas tienden a ser un poco mas grandes y mas violentos.

Los dos aventureros miran la estatua, sin demasiados reparos, quizás por lo problemático de la situación. y se apremian a evaluar los daños de la ola sin encontrar mas de lo evidente.

De repente la voz furiosa del capitán resuena hasta la bodega: QUE HACEN HAY SALGAN DE ESA BODEGA AHORA Y AYUDEN EN ALGO, O PERSONALMENTE LOS ARROJARE POR LA BORDA ANTES QUE SE HUNDA ESTE TRASTO, el capitán había sido un poco huraño desde que comenzó el viaje, les permitió unirse a la tripulación por lo apremiante de los viajes de los aventureros, pero nunca les mostro el menor afecto o interés, por el contrario parecía desconfiar de cada uno de los héroes y en rara ocasiones les permitía vagar solos por la embarcación hasta el día de la tormenta.
El sonido del viento es cada vez más potente y es casi ensordecedor, los caballos se mueven de un lugar a otro en la bodega siempre evitando acercarse a la estatua.

Aunque no me inspira nada de confianza el hallazgo no demoró en atender al llamado del capitán, doy la vuelta tan rapido como puedo y hecho a correr por la bodega tratando de no chocar con nada, tan pronto llegó a la cubierta veo que la tormenta es peor de lo que parecía desde adentro.
aqui estoy capitán, con ánimos de no ser arrojado por la borda... jajaja, Esperemos que lurue nos proteja en estos momentos difíciles

...??...Si capitan, ya voy...

Rearnal estaba cansado y preocupado mas por las caballos, le costo concentrarce en sus tareas ya que su mente volvia una y otra ves a la estarua. Era simplemente una estatua? Sus preocupaciones eran leves, pero pronto se pondria en marcha a un ritmo mas alto en sus tareas como marino. Las chances estaban sobre la tormenta. Pero ahora tenia que ganarce el pan y el costo del viaje.

presurosos los jóvenes suben a cubierta para encontrarse con el coas encarnado, algunos marinos lloran como infantes acurrucados en el piso mientras afirman el final de sus vidas en inteligibles lenguas, el maestro suplicante mira el océano que estrella los cuerpos de los náufragos contra las rocas, y en la proa los 3 misteriosos monjes miran el océano como si esperancen algo.

el barco se mese con violencia mientras navegan junto a los risco de la costa, las astillas y pedazos de madera que se agolpan en el suelo evidencian lo traumatico de las embestidas, y al sud este iluminado por el destello de los relámpagos la devastadora imagen del tifon que parece en ruta de conlición con la embarcación.

el vigia no esta señor grita uno de los marineros que aun conserva la compostura, que alguien asegure las cuerdas yo subiré señor, el hombre salta como un simio por el mástil tratando de abrirse paso hasta la cola para el vigía.

el maestre que los ve de pie en medio de la escena les señala las cuerdas, y algunos barriles y cajas que vagan libremente en cubierta.

Aunque al inicio no parezco un marinero prometedor pues antes siquera de agarrar al menos una de las cajas que esta suelta, me resbaló y tropiezo con el mástil mayor, pero una vez logró ubicarme, empiezo a moverme como un pez en el agua, y aunque el azote de las loas es fuerte rapidamente voy recogiendo barriles sueltos y mientras los ruedo por la cubierta los llevo hacia la bodega donde los aseguro, cerca a donde habia dejado mis cosas, despues regreso a la cubierta a continuar, apenas y recogo un par de cajas y regresó a la bodega 3n parte porque me siento mas comodo adentro y en parte porque rexorde la explicacion de como funcionan las bombas para sacar el agua de las bodegas y comienzo a sacar el agua que ya se ha filtrado desde antes.

Rearnal se maneja instintivamente en el barco, conoce la profecion aunque no sea un facultativo en ella. Esta debe ser la 4 tormenta en su vida, pero la primera de tan alta intencidad. Hecha un vistaso pronto a la cubierta, y se dirije a proa.
Ve como un barril suelto, con agua dulce, recorre la proa. Busca una cuerda y lo ata como mejor puede contra un costado, la tormenta es feroz y dificulta la accion de amarrar pero termina el trabajo. La amarra del ancla estaba a punto de liberarce, tomando una segunda cuerda lo afirma y estabiliza avisando al capitan. El ancla si se hubiera caido los abria arrastrado a todos a ser un punto estatico entre la lucha en el mar y eso destruiria el barco, pero podria ser util que el capitan sepa que el ancla esta asegurado. Pasado un tiempo, ve como el golpe de dos olas grandes continuadas el barril de hace un momento se afloja nuevamente y golpea a un marino. Esta ves decide no cometer nuevos errores, asi que ata el barril perfectamente a uno de los cañones. Pero Rearnal no pudo notar por la falta de luz que el amarre del cañon estaba a punto de cortarce. Fue cosa de esperar unos minutos y justo mientras bajaba a la bodega para ayudar con las tareas de desagote ve como el cañon corre de un lado al otro del barco con un barril arrastras... Ambosw cañon y barril van al mar, por suerte ningun marino termina herido esta ves...

marineros de agua dulce grita en carcajadas el maestre mientras ve correr a los semielfos como pollos si cabeza tratando de cumplir las órdenes, de golpe el hombre mira hacia en dirección al mástil mayor y una sombra cae en la mitad de la cubierta, la sangre se esparce en todas direcciones, y la cara de todos queda atónita, es un marino, a este le falta la mitad de la garganta por lo que parece un mordisco, el horror invade la nave y los marineros se vuelcan a sus armas, espadas y cachiporras llenan la cubierta al igual que fritos en muchas lenguas, algunas desconocidas. Malditos salid y pelead, quien eres monstruo, por la gracia del rey del mar te matare miserable, el maestre aterrado mira la velas en búsqueda del responsable al igual que el resto de la tripulación, el capitán mantiene la mirada en el mar mientras trata de mantener el rumbo.

Rearnal es uno de los primeros en ver la herida del marino. No logra descubrir la criatura que causo esa herida. Hasta que lo ve.

Los marinos entran en panico, Rearnal conserva su calma y lentamente busca dirigirse a la bodega. Sus armas estan ahi y esto se pondra feo antes de mejorar.

Apenas empiezo a salir de la bodega cuándo veo el cuerpo caer desde el mástil sólo puedo recordar aquél hombre que subía cual simio, seguramente sera lo recuerdo de alguna charla que habremos sostenido, mientras mi mente divaga trato de ver que lo causo pero no veo nada; sin embargo, se siente la presencia maligna y rapidamente espero lo peor y pre paro mi arma, no caeré sin luchar

estas buscando al responsable cuando comienzas a sentir un cabio en el aire, al mirar al sud este lo vez escondido en el caos de la situacion, un maldito tifon se dirige a la enbarcación a toda velocidad.