Partida Rol por web

Supuestamente era el Agata, pero me los quito igual no pro.

Mientras Khazdor le narra lo ocurrido a Gimli; Tolgur, quien, ayudado por la magia de las gemas, había salido a dar caza a los últimos dos trasgos, hace acto de presencia en la parte alta de la colina, totalmente cubierto de sangre.

En definitiva, las palabras de Khazdor no habían sido del agrado de Gimli quien torció el gesto al escuchar lo ocurrido y le hizo señas al Mirnethron para que se acercara, en definitiva tenía mucho que hablar tanto con Khazdor como con Tolgur, pero ya lo haría en privado.

Mientras Tolgur desciende la colina, Gimli observa a todos los presentes.

¡Descansen! ¡Quiero tres guardias en la parte alta y dos en retaguardia! - gruñe más que dice Gimli.

Khazdor, Tolgur, Zabralkan conmigo. - dice el enano antes de llevarlos a un lugar apartadp del camino para poder parlamentar en privado.

Estos jóvenes son indisciplinados y si deseamos recuperar Moria, necesitamos funcionar como una máquina de guerra bien aceitada, lo que hay en los salones de Moria es más peligroso que un puñado de trasgos y un orco sobre un pulgoso huargo.

Las legiones de orcos, trolls y trasgos que habitan Moria son incontables e incesantes y lo peor son demonios que allí moran. Explícales lo que me contaste anoche Zabralkan, cuéntales como la sombra de Durin es sólo la punta de la lanza y lo que le sigue es mucho peor. - dice Gimli mientras aferra firmemente su hacha.

De inmediato el viejo Istari empieza a salmodiar un conjuro con el cual pueden ver Moria, al menos la montaña y bajo ella una caverna, una caverna en cuyo centro se encuentra un portal del cual emergen toda clase de horrores.

Mis nobles señores enanos, existen dos formas de destruir este portal, la primera de ellas con magia y la segunda enterrándolo nuevamente en las entrañas de la montaña desde donde nunaca más debe ser perturbado, pero llegado el momento serán ustedes quienes decidirán que senda seguir. - dice el mago antes de volver a guardar silencio.

Ahora señores. ¿Está claro porque no podemos darnos el lujo de la falta de disciplina en nuestras filas? Si no metemos en vereda a esos mocosos, estaremos en muchos líos. - dice Gimli con expresión cansina.

--¡Por las mil barbas!Qué estoy de acuerdo, pero la "Maza del Rey" a hecho honor a su nombre. Tiene lo mismo en la sesera que en la cabeza tiene un martillo, cargó cuesta arriba, dejo desprotegido el flanco de la columna a merced de los arqueros trasgo¿Cuantos de tus hermanos rodaron colina abajo antes de subir la lona?Tu única orden fue cargar y ni siquiera indicaste hacia donde o en que formación, si todos lo hubieran hecho ladera arriba hubiéramos acabado en terreno desigual y rodeados.En definitiva, el muchacho es joven e impetuoso y creyó que todos serian grandes guerreros como él, pero si Durin los hubiera querido ha todos guerreros los había escogido así. Cada uno tiene un papel y ocupa su lugar, hay herreros y mercaderes que no pueden alcanzar tus proezas con el martillo pero tú no alcanzas ni las mias con la magia ni las de Gimli con el hacha y no por ello te subestimamos o te pedimos los mismo.

Todavía espero la orden de ballestas en ristre ante la inminente huida, así no hubiera tenido que mostrar parte de mis dones al enemigo.¿Qué hubiera pasado si no hubiera cubierto a Garamil?¿Sabes cuanto nos habría retrasado un enano cojo?Somos la piedra, avance lento pero inexorable nada de carreras por el monte cuesta arriba muchachito, que yo ya tengo mis años.--miro a Gimli con gesto serio-- De esto podemos aún podemos sacar una ventaja.--luego miro al mago--¿Has hecho lo que te pedí?¿Estas seguro de que tu hermano no nos espía? La ventaja que tenemos es que ahora nos subestimará, pero como bien ha dicho Gimli nada de futuros errores. El chico a demostrado ser buen guerrero pero un mal líder, el líder se preocupa antes por los demás que por si mismos. no es un posición que envidie pero no me queda otra,no le pongas más al cargo. A ti te escogió el rey para liderarnos y yo soy el segundo al mando, cuando nos dividamos tu ocúpate de un grupo y yo del otro pero no me vuelvas a pasar a nadie por encima en la escala de mando, así no volverá a haber malentendidos.--se tomaba que la opinión sobre Gimli que tenía el viejo no era de lo mejor, respetaba la palabra del rey pero no iba a permitir que ninguno de esos jovenzuelos se le subiera a las barbas o le llevara a la muerte por sus brabatadas. Tolgur había emprendido un viaje elegido por Durin y con una claro objetivo, no permitiría tonterías ni errores.

--Ahora a lo importante. Sabían que veníamos y nos estaban esperando.¡Pero por todos los demonios del palio!¿Cómo?Los terrenos preparados y las obras de ingeniería no florecen en mitad del camino así sin más.¿Quien les ha puesto al corriente?--y miro con desdén al mago. De cada vez estaba más convencido de que traerlo había sido un grave error.

La batalla había finalizado y parecía que dos de los orcos escaparían, sin embargo, el poderoso Tolgur empezó a desplazarse hacía los orcos a una velocidad infraenana, "Pero qu...e dem..onios" enmudecí ante tal azaña que acabó con la vida de los trasgos. Éste enano tiene mucho poder, nos vendrá de perlas tenerlo entre nuestras filas...

Ante las palabras de Khazdor de la formaciones, tenía gran parte de razón, pero la emoción del momento me hizó escalar la montaña para quitar a los arqueros la posibilidad de matar a alguno de mis compañeros, no actué impertuoso, solamente escogí la opción que creía que podría mantenerlos a salvo de las flechas enemigas. Aún así callé.

Gimli ordenó una vigilancia y me ofrecí como voluntario a ella, "Yo iré a la parte alta mi señor" dije agachando un poco la cabeza en señal de respeto y partí colina arriba.

Una vez allí, me acerqué a los cadáveres y le quité la jabalina anteriormente lanzada de la espalda trasga y empecé a rebuscar entre sus pertenencias.

Una vez acabado me dirigí firme a la colina, saqué la pipa y seleccioné las hojas en peor estado y las fumé relajadamente mientras observaba el campo y la lejanía.

Solté una carcajada irónica al escuchar las palabras que Tolgur pronunció frente a mí en aquel círculo cerrado.

-Desconozco porqué el Rey te concedió tal jerarquía -respondí-, pero seguramente fue por tus conocimientos arcanos y tu avanzada edad. Pero si yo no te digo como hacer tu magia y tus runas, no me digas como se gana una batalla. Podrás tener una barba blanca, pero no tienes derecho a llamarme muchacho. He luchado lo suficiente, ganándome el respeto de mi pueblo y de mi Rey, como para que tú vengas a decirme cómo debe o no debe empuñarse mi hacha.

Hice una pausa, en la que me tomé el cinturón y señalé al líder de la expedición.

-Si Gimli, cree que soy apto para liderar, lideraré. Yo sí respeto la cadena de mando. -sentencié, para luego escuchar las palabras de Zabralkan.

Mis nobles señores enanos, existen dos formas de destruir este portal, la primera de ellas con magia y la segunda enterrándolo nuevamente en las entrañas de la montaña desde donde nunaca más debe ser perturbado, pero llegado el momento serán ustedes quienes decidirán que senda seguir. - dice el mago antes de volver a guardar silencio.

-Hmm. Me temo que de magia no conozco... -miré a Tolgur- En este tema sí eres el experto. -miré a Gimli- Que hablen los que saben de magia, a ver que recomiendan. Si consideran mejor usar sus poderes para cerrar la puerta, bien; y si prefieren que la conminemos a la oscuridad, también. 

- Me encargo de la retaguardia.

Stilgur todavia refunfuñando se coloco en la parte de atras, atento a nuevas amenazas.

--Muchacho o cabeza de maza, como tu prefieras. Tienes la misma misión que yo en este viaje que Durin nos ha encomendado pero si la única manera que sabe tu tozuda mollera de entender las cosas es con un par de dientes menos en tu rísita de niña boba¡Sea pues!--le dijo desafiante, mientras se arremangaba.-- El rey no te tiene que rendir cuentas, ni a ti, ni a mi ni a nadie. Las cosas son como son y punto, si no quieres reconocer tus errores en el campo de batalla me parece bien pero no voy a dejar que me arrastres a mi, ni a nadie en tú búsqueda de gloria personal.--le inquirió con dedo acusador--Te diré cuanto me plazca lo que debas oír, te guste o no, al igual que se lo he dicho a muchos más sabios que tú.Dices que has luchado lo suficiente para ganarte un respeto, pues conmigo empiezas de cero por tú actitud por tus palabras.¿Quieres mi respeto?¡Ganatelo!¡Yo no voy a enseñarte a empuñar nada bobalicón!¡No he venido aquí para ser la niñera de nadie!.

No hay más ciego que el aquel que no quiere ver y en el nombre de Durin te juro que como vuelvas a faltarme o a decirme en que soy experto y en que no, te meteré un bofetón con la mano plana tan fuerte que la cabeza te dará vueltas tres día seguidos. Ahora vuelve a la formación antes de que te envié de un puntapié y piensa en si el curso de acción que tomaste fue el correcto o no¡Ya hablaremos tu y yo, cuando a mi me de la gana!--remugó y refunfuñó  paara si por lo bajo tratando de calmarse.--Abrase visto estos humos, donde vamos a ir a parar, ya nacen sabiéndolo todo. Desde luego, cadenas de mando a mi, bah  paparruchas e infulas de mocosos malcriados. Si es que, menuda juventud. Y tu no te rías "amigo de los elfos", la culpa en parte es tuya por malcriarlos.--se encaró con Gimli entre molesto y divertido por poder echarle en cara algo.

No tenía sentido discutir sobre lo ocurrido en este pequeño combate, tenían que ser los mandos y no nosotros los que arreglaran sus diferencias si queríamos llevar a buen puerto esta gran expedición.

- Voy con Stilgur.

-¡¿Pero quién demonios te has creído, vejestorio?! -solté, irritado, ante la andanada de improperios que me soltó Tolgur- ¡Pocos se han atrevido a hablarme con semejante arrogancia y ninguno ha vuelto a ser el mismo luego de que les he enseñado su lugar! ¡A tí habría que criarte de nuevo, a ver si aprendes algo de coherencia! -bufé, encolerizado, tanto que mi voz comenzaba a volverse progresivamente más aguda- ¡¿Quieres gresca?! -pregunté, soltando hacha y escudo con violencia y arremangándome la camisa a la par- ¡Entuerto desfalleciente! ¡Seguro que ya ni controlas tus esfínteres y andas soltando tus deposiciones como los caballos! -mis ojos rebuscaban hacia arriba en mi cabeza insultos más creativos y dignos de un duelo de esgrima retórica- ¡La vil pestilencia que sueltan tus posaderas son armas más letales que el hacha de Durin! ¡Eres un vetusto cara de orco talla-runas!

Si Gimli, Zabralkan o cualquier otro no me detenía, me lanzaría sobre Tolgur con toda fiereza.

Con mucha calma, Gimli deja de lado su hacha y cierra firmemente los puños.

No empieces con eso de amigo de los elfos o esto va a acabar muy mal. - gruñé más que dice Gimli.

Ahora escúchenme bien los dos o se calman o les voy a dar tal golpiza que la van a sentir hasta vuestros nietos.

Si puse a Khazdor a cargo de la columna es porque creí que con su experiencia en combate, él estaría listo para hacer frente a cualquier enemigo; ahora veo que me equivoqué.

Nosotros somos hijos de Durin, no abraza árboles, somos rocas que resisten firmes al pie de la montaña, no cargamos cuesta arriba haciendo piruetas o brincos, eso es cosa de elfos y montaraces.

Durin nos dotó de brazos y piernas fuertes, capaces de aplastar cráneos como uvas, recuérdalo bien Khazdor.

Ahora sí, a lo que nos ocupa, creo que lo mejor es cerrar el portal con magia, para que nada vuelva a atravesarlo, pero para ello debemos prepararnos adecuadamente. Confío ciegamente en ti para ello Tolgur

Bufé ante la decepción de Gimli, pero no quedaba más que seguir adelante.

-Creo que mi comandancia no fue tan mala después de todo, ¿no? -indiqué, irritado, mientras volvía a tomar mis armas y mis nervios se clamaban- Al fin y al cabo no ha quedado ninguno con vida, y gracias a mi órden de cargar cuesta arriba tanto el huargo, como el líder orco, como la mayoría de los trasgos, cayeron bajo nuestras hachas. Gimli, si no me sigues considerando capaz, a pesar de mi total desacuerdo, obedeceré tu mandato y me retiraré nuevamente a las líneas.

Le dediqué una última estóica mirada a cada uno de los tres, me giré en redondo y partí a unirme con el resto de la tropa.

Regresé junto con el resto de la tropa, con los puños bien apretados y con una cara que gradualmente iba perdiendo sus intensos colores.

-¡Al parecer no soy un buen líder! -solté, desahogando la furia que no le pude dedicar al rostro de Tolgur- ¡Ese orco y los trasgos no dirían lo mismo, de eso estoy seguro!

En ese momento ví que otros compañeros se estaban agrupando en al retaguardia. Stilgur e Imrak ya estaban ahí.

-Les acompaño -dije al aproximarme-, poco quiero saber de los jefes y sus tozudas seseras.

El viejo enano no parecía contento del todo con las palabras de Gimli, pero si con la marcha de Khazdor.--¡Bah! Menuda mula barbilampiña, le has salvado de una buena tunda, los mimas demasiado. Míralos y mírate a ti Gimli hijo de Gloin, tú al menos has viajado y has visto mundo pero deberías saber que no puedes dar la espalda a lo que tu pueblo dice de ti, tan solo te queda afrontarlo.--con voz más relajada y respetuosa se dirigió al jefe de la expedición--Mucho te queda por aprender de tu pueblo y sus costumbres, has ido lejos pero no has mirado cerca poco has tenido que ver con las casa de las gemas y a ti si que al ser un enano respetado puedo hablarte con franqueza y no endulzarte las palabras como a esos mocosos. La moral debe permanecer alta, no toleraré que nadie me falte al respeto ni siquiera tú, por eso mismo creo que no nos benefician las peleas internas y también estoy seguro de que no serias rival para la magia de la piedra.--no había reproche ni resquemor en sus palabras, sino una rotunda aseveración. Miró de reojo al mago--¿Has hecho lo que te pedí?¿Estas seguro que ahora nadie nos espía?¿Ni siquiera tu maldito hermano?Como ya he dicho antes las obras de ingeniería no crecen sin más, sabían que veníamos y estoy seguro de que saben lo que ha pasado a pesar de que no hemos dejado supervivientes, un simple crebain es suficiente para informar de todo lo que aquí ha sucedido. Por eso he provocado al muchacho de más y por eso no he usado mi magia verdadera, sino solo la pequeña fracción que puedo canalizar a través de la pureza de las gemas. Ahora el enemigo sabe que somos una panda de desorganizados con algo de magia menor y la ayuda del azul. Ese fue mi plan desde el principio, mostrar lo que no es para que nos subestimen--dijo Tolgur mientras reflexionaba y se mesaba la barba.

--Ahora bien, cuanto más nos acerquemos a su hermano--refiriéndose al mago--mucho más difícil me será esconder mi verdadero poder, la sombra es insidiosa y no es fácil engañarla. El portal en si es una ventaja y una desventaja, por un lado mantenerlo abierto hace que su hermano vea su poder enormente debilitado y centre muchos de sus esfuerzos en protegerlo, eso nos dejará avanzar con relativa facilidad. Por contra como se entregó a la sombra sospecho que será mucho más poderoso que Zabralkan, llegado el momento espero que no flaquees mago, pues sospecho que tu y yo sabemos lo que significaría cerrar ese portal y sus consecuencias ¿verdad?¿estas dispuesto no solo a sacrificar a tu hermano si a ti mismo por mi pueblo?Por lo poco que he visto y la edad de ese portal creado por el innombrable, solo un Istari podría ser capaz de una gesta así.¿O a caso me equivoco en mis apreciaciones?--dejó tiempo a Gimli para digerir la información y esperó respuesta de Zabralkan. Al parecer Tolgur era mucho más sagaz de lo que parecía.--Obviamente todo esto debe permanecer solo entre nosotros tres, no quiero poner nerviosos al resto y a partir de ahora trátales con mano dura, que espabilen y aprendan a luchar juntos.Sino bien sabe Durin que estaremos perdidos.--había una genuina preocupación en sus palabras pero ellos eran los escogidos de Durin. Si ellos no eran capaces de retomar Moria, nadie lo sería.

Mi señor Tolgur, a dónde viajo, la bruma me sigue y nadie es capaz de vernos a traves de ella, incluso aunque Misaianes poseyera un Palantir, él  no podría atravesar la bruma. - responde el mago

A considerado que los orcos sean simples salteadores de camino listos para atacar a cualquiera que pase por el lugar sin más, después de todo, el puente del paso de las montañas es el único de la zona y el lugar es preciso para una emboscada.

Además mi hernano suele valerse más de hombre y elfos oscuros que de orcos, pues los considera criaturas inferiores y descerebradas. Y en cuánto a su pregunta sobre el portal, estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario para sellarlo para siempre.

Tienes razón en algo Tolgur, he pasado demasiado tiempo fuera, es hora de que empiece a reconectarme con mis origenes y que estos mocosos aprendan el verdadero significado de la palabra disciplina, así que a partir de mañana, yo personalmente supervisaré las actividades del grupo y me aseguraré que todos hagan su parte, lo quieran o no.

Ahora te recomiendo que uses el restoi del día para descansar, pues os espera un largo viaje. - dice Gimli en tono calmo.