Partida Rol por web

-Claro doctora, tenga- el guardabosques saco su libreta de multas y un boligrafo, le echo un par de veces el aliento a la punta hasta que logro que escribiera, en la multa, le anoto su numero de movil -no se asuste, es solo mi telefono- le dice sonriente -no se preocupe no es molestia, llameme en cuanto tenga un hueco, asi conretamos  y le invito a un cafe, para que podamos hablar tranquilamente- luego le guiña un ojo y le susurra -y sin oidos no invitados- dijo refiriendose a la "gente" que aun quedaba dentro del eliseo.

La verdad es que a Héctor le sorprendio el cambio de actitud de la joven chica, cuando empezo la reunion parecia incluso asustada y ahora incluso parecia capaz de organizarlo todo ella, seria interesante tener unas palabras con la señorita Derav.

Besé la mano de Laila en señal de saludo para luego escucharla.

Salude con una inclinación de cabeza al guardabosque y a todo aquel que se retiraba, aceptando el gesto de la joven para salir.

-"Vine en taxi, así que acepto su invitación, me es interesante el saber que necesita..."-

Después de tomar la "multa" que le tiende el guardabosques y reírse de la situación inocentemente cuando el muchacho pelirrojo le besa la mano Laila se dirige a lo largo de la calle mientras indica con la mano que Aidan la siga:

-Señor Hector así lo haré aunque lo que le valla a decir no sea ningún secreto que deba guardar de demasiada gente aquí-

Seguidamente indicó hacia un punto un poco más apartado donde había aparcada una limusina mientras decía

-Por favor caballero, ese es mi vehículo-

El choffer abre la puerta y se baja para hacer lo propio en la puerta de atrás ofreciendo el paso a Laila y a su acompañante

-Bueno, ya se que esto resulta posiblemente ostentoso pero de alguna manera hay que mantener las apariencias-

La muchacha entra primero y la puerta sigue abierta esperando el choffer a que Aidan entre para cerrarla.

Al ver la limusina levante las cejas y sonreí, la verdad es que para mantener las apariencias era mucha opulencia, yo ni tenía auto a pesar de mi fortuna.

Entré en el vehículo y asentí al chofer:

-"La verdad es que si una fachada de niña rica es una tapadera, la verdad debe de ser muchísimo más cruda o fuerte para las masas, cierto?"- pregunte sonriendo mientras me acomodaba el tapado.

El choffer se mete en el asiento del conductor y arranca la limusina

-Bien, por una reacción que has tenido... supongo que eres un garou. Bueno, la verdad es que no se si comenzar explicando lo que soy yo o explicando por que quiero ayuda-

Laila ahora estaba más seria que antes, aunque no parecía para nada triste ni enfadada, simplemente apática

-Mi familia ha sido casi exterminada por las acciones de un vampiro bastante antiguo, ahora buscamos por así decirlo destruir al vampiro... por venganza y por seguridad para nosotros-

La chica observaba la cara de su interlocutor para ver su reacción

- Bien, imagino que tienen cosas que decirme antes de irse, y señor Gionne, la ayuda que pueda brindar es mas que bienvenida, sin importar lo que los demás digan, prefiero estar armada con una buena pistola sin importar su origen - sonríe afablemente -

Mira a Naxael, el joven comisario del pueblo quien quería hablar de negocios.

- ¿En serio señor Enrick, no esta bromeando? - se notaba el fastidio en sus palabras - por favor, escoja un mejor momento para hablar de dinero que yo no me siento cómoda con el tema en cuestión en verdad...disculpe la grosería, pero si no se percató, el destino de Erebo estuvo siendo tema de debate en esta sala y con todo el respeto, usted como comisario debería estar tan o mas preocupado que yo sobre ese menester -

Se notaba su furia, ni siquiera ante las palabras del garou se comporto de esa manera, pero al parecer, le molesto bastante las intenciones del sheriff.

- Señor Sanchez, ¿pudo toparse con la manada del Sabbat que usted estaba buscando? - dijo tras calmarse un poco a Machete -

- Y señor Alan, lo noto callado...¿a que se debe? - sonrió amable -

Pues si esa es su respuesta, señorita Vondick, haré unas llamadas. Si todo va bien, al alba habrá equipo para todos.

Acto seguido Lee hace una reverencia a la alcaldesa y se dirige al resto de los presentes. Caballeros..hasta mañana.

Sin tener nada más que decir, sale de la escena.

Alam se dirige a Alana.

Si, he estado un poco callado debido a la gran cantidad de información que se ha hablado y a la diversidad de gente aquí presente. Y he preferido estar más callado, que a veces soy más desconfiado.

Pues el asunto que venia a comentarle era acerca de un ataque que recibí en mi local hoy hace muy poco.

El atacante llevaba la cara pintada de blanco, algo del estilo del joker, y a pesar de que fue atacado por las armas de mis empleados, y por mi mismo, Alan se nota algo enfadado al recordar al ser,  parecia que nada le podía hacer daño, ni se inmutó el hijo de puta. Y luego como si nada, pudo haber despertado a mi bestia interior, que por suerte pude controlar, y después, desapareció.

El tema es, si usted, debido a su gran conocimiento, podría indicarme a qué me enfrenté, y sobre todo, cómo poder matar a esa cosa si vuelvo a encontrarmelo de nuevo.

-Lamentablemente no pude encontrarlos, El señor Lee es testigo de que al menos hay indicios de que algo pasaba en mi ausencia cuando estaba ausente en mi casa, es decir que la cosa venía de lejos y no solo se limita a lo que pasó aquella trágica noche... -Seguiré buscando respuestas de aquello. Haciendo un geste reverencial mientras miro a Alana. Le estoy muy agradecido a usted y al señor Lee por todo   

En aquella sala que servía de Eliseo, solo unos pocos de la reunión se habían quedado para conversar con la príncipe, pero la estática de los monitores de las cámaras irrumpió en aquel preciso instante, para que luego de unos segundos, las puertas metálicas del elevador dieran paso de nuevo a otro invitado.

Y aunque entre los presentes había muertos que caminaban, aun ellos que ya habían sido abrazados por la fría sonrisa de Caronte, ellos sintieron en sus nucas un frio molesto, inquietante, que los altero notoriamente.

El Rötschreck quería aflorar en sus corazones no palpitantes, para hacerles sentir el verdadero miedo que aquella figura denotaba en sus pálidos contornos.

Él estaba muerto y vivo y existente en otros planos, él estaba ya ahí, dispuesto a mandar por aquellos que se habían siquiera dignado en afrontarlo.

Alana temblaba, se notaba en sus ojos inertes y cristalizados, Mike estaba confundido y Ronna quien con pasos casi espectrales, se dirigió lentamente hacia la chimenea para tomar un trozo de leña puntiagudo, ardiente y dañino, el cual introdujo en la cuenca de su ojo derecho, solo para caer desplomada con un chillido de dolor que rápidamente fue ahogado por la muerte.

Mike, el enorme hombre de terribles músculos se quedó paralizado sin saber qué hacer, simplemente se mantuvo ahí frente al cadáver de la asistente personal del príncipe.

- Por fin nos conocemos querida príncipe – su voz era insoportable, y su rostro estaba bañado con las muecas más atemorizantes que jamás nadie se había dignado a ver en un hombre, ser, ente o lo que sea que fuera eso –

Alana tenía miedo, no hablo, se sujetó fuertemente de aquella silla para solo quedarse en un estado semejante a una catatonia.

- No se preocupen señores, pronto sabrán que está pasando, pronto caerán todos en la locura y no se molesten por las armas o por lo que ustedes crean que podrá dañarme, lo siento mucho en verdad por ustedes, pero esto acabara pronto, demasiado pronto…por cierto, llámenme por mi único nombre: La Verdad – sonriente se fundió con los muros de aquel lugar, para desaparecer ante los presentes -.

Machete mira con preocupación a Alana y la dice -Señora ¿Quién es aquél ser que a estado aquí ? -y ¿Por qué dice que todo se acabará?

Lee no sabía cómo reaccionar ante lo que ha visto y oído. Se había quedado totalmente frío, sin embargo puso todo su empeño en recobrar la compostura.

¡Señorita Vondick! ¿¿Se encuentra bien?? -va a su encuentro, mirándola de cerca a ver si podía hacer algo- Responda por favor...

La príncipe estaba ahí, atónita, temerosa, en completo estado de shock, no hablaba, no movía los ojos, estaba literalmente muerta ante los presentes.

Lee se le acerca y le trata de hablar, pero al no ver respuesta alguna, le propina una cachetada que la hace reaccionar.

- Ya no hay más nada que hacer señores…el dios ya ha sido liberado, él ya está aquí en el pueblo, solo nos queda aguardar a la Parca y morir de una buena vez -

Sus palabras no eran alentadoras, Mike por su parte toma una escopeta que tenía escondida atrás del gran sillón de Alana, luego toma otra más y la lanza a quien quiera sostenerla.

Carga el arma y se prepara con el rostro tenso, rostro que paso a ser una mueca de temor ante la imagen que se veía en el monitor que daba hacia la recepción, donde se notaba perfectamente a la mujer que antes los había recibido, quien con una navaja de afeitar se abre el estómago, solo para poder usar sus propias vísceras como soga para atársela al cuello y suicidarse de esa horrible manera, cada paso hecho sin un ápice de dolor ni mueca de pudor, siendo solo una sonrisa vacía la presente en ese rostro sin alma.

-Machete coge el arma al vuelo y hace un gesto pidiendo munición -No se como lo veis vosotros pero tiene que haber alguna manera de parar a esa cosa,  me niego a pensar que es invulnerable por mucho dios que sea, no se como lo veis vosotros pero no tengo intención de morir puesto que tengo asuntos pendientes ¿Que opináis vosotros?

Alan aún estaba un poco conmocionado, y calmando a su bestia interior.

!qué cojones era eso!, ! me caguen la puta!.

Miro a Machete Yo estoy de acuerdo contigo, tiene que haber algo que pueda hacerle daño, aunque posiblemente nuestras armas tradicionales no hagan mucho.

luego dirijo la mirada hacia Alana, ¿Sabría usted alguna forma de hacerle daño o retirar la invocación?, si fuesemos al lugar del origen y destrozaramos todo, ¿conseguiriamos algo?.

Algo hay que hacer antes de que esa cosa acabe con todos

-Con los brazos cruzados y reflexivo -No me jodas que ahora viene el fin del mundo -Tiene que haber algún sitio donde encontrar información bibliotecas, expertos en temas de ese tipo... -Tienes razón no creo que armas normales pudiéramos hacerle algo -¿Alguna sugerencia?

Alana parecía no responder de nuevo, Mike por su parte carga su escopeta y se la lanza a Alan, luego le pasa la caja de municiones a Machete y se dispone a salir de ese lugar.

Alana lo mira y solo dice:

- Él me ha mostrado el futuro queridos, este mundo caerá en el más completo de los desastres, no hay nada que hacer…a no ser que hablen con él, que él quiera cambiar el destino del mundo, pero lo dudo…lo dudo mucho –

Se levanta y camina hacia una jarra de cristal donde había una sopera cantidad de vitae, la bebe desde la jarra y se queda ahí, mirando al fuego, haciendo caso omiso que el cuerpo de Rona estaba a tan solo unos pocos centímetros de sus pies.

Está muy afectada... será mejor dejarla a solas...

Mira a sus compañeros, pertrechándose para entrar en combate. No se...yo tengo algunos conocimientos de ocultismo... -Lee se queda pensativo unos instantes- No obstante, no puedo asegurar que sean suficientes...

Dicho esto, Lee se incorpora mientras sigue pensando en algo que nos pudiese ayudar.