Partida Rol por web

La elfa y algunos compañeros se hallaban heridos. No tenía competencia en la sanación, al menos no poseía magia curativa. Me acerqué a donde la joven se encontraba tirada sobre el suelo, y Danko sostenía su cabeza, e intenté de todas formas el auxiliarla.

No me sentía muy capaz de hacerlo, pero debería tratar... no quedaba otra.

Me dí cuenta que mi habilidad era bien escasa, y meneé la cabeza con tristeza.

-No tengo la capacidad para detener su sangrado, alguien debe hacerlo, o perecerá...

La elfa que estaba tendida en el suelo herida, despuerto tras los cuidados de Umriel, se encontraba demasiado débil para combatir, pero por lo menos el peligro había pasado.

Futhark en cambio, seguía tumbado en el suelo, incosnciente.

Ahora que tenéis tiempo observais mejor la habitación, en ella se encuentran los cuatro hobgoblins a los que habéis matado, dos braseros se deslizan escupiendo fuego.

Hay tres salidas en esa habitación, una al norte, otra al este y una última al oeste. Aunque las del este y oeste estan detras de los braseros que escupen fuego

Me acerco a uno de los hobgoblins y lo reviso con cuidado. No que yo fuese a usar un arma de estos seres pero quizás había algo curativo, o monedas, o alguna cosa que nos ayudase como grupo.

-¿Han podido sanar a mi colega?

Pregunto, en relación con la elfa que se ponía más debil cada minuto. Me hacía sentir mal el no poseer ningún hechizo de curación, por eso también era importante revisar los cadáveres.

Nunca se sabe que podemos encontrar en el sitio menos esperado, así me ha enseñado mi dios que todo lo sabe.

Danko suspiro aliviado al ver que la elfa herida habia pasado por lo peor, ahora solo hacia falta esperar.

Se levantò y la dejo al cuidado de la sabias manos de Umriel. Se dirigo hasta donde el otro guerrero herido y tratò de sanar sus heridas, mas con ganas que con pericia en este tipo de labores.

Registras los cuerpos de los hobgoblins, en los hobgoblins soldados encuentras dos armaduras de escamas, dos mangual y dos escudos pesados. En los hobgoblins francotiradores encuentras dos armaduras de cuero, dos espadas cortas, dos ballestas de mano y 30 virotes

El hechicero se acercó hasta el tendido Futhark, pues parecía que los compañeros no tenían suerte tratando de curarlo. Para Balakhar la curación no era uno de sus fuertes, pero trató de ayudar con lo poco que sabia.

tu pj no puede usarla, puede cogerla pero no es competente con ella, solo es competente con las armaduras de tela

Revisé a los hobgoblins y mostré a mis compañeros lo que había conseguido.

-Señores, aquí hay dos armaduras de escamas, dos de cuero, dos manguales, dos espadas cortas, dos escudos pesados. También tenemos dos ballestas de mano y 30 virotes. Si no os ofendéis tomaría una de las ballestas, 15 virotes y una armadura de cuero para venderla más adelante.

Pero si necesitáis algo de ésto, sólo decidme.

El resto se lo dejo al grupo.

Dije y esperé la respuesta de mis compañeros de viaje.

A pesar del esfuerzo de Balakhar y el suyo propio, no habian conseguido que Fhutark recobrara el conocimiento. En eso aparecio Amly trayendo cosas consigo como si se tratara de una subasta.

Danko negò con la cabeza, no era tiempo de pensar en ballestas y espadas cuando uno de sus compañeros se debatia entre la vida y la muerte.

Umriel observaba que aun quedaba uno de ellos por restablecerse, se acerco al Druida y observando y contemplando sus terribles heridas trato de que Corelion, le guiara en lo necesario para poder ayudar a su compañero caido a recuperarse. Aun asi, escucho por lo bajo a Amly, y la rapiña que habia realizado sobre nuestros enemigos. A pesar de todo sus manos se deslizaron por las heridas, sabiendo donde aplicar torniquetes, donde hacer presion y otros cuidados para ayudar a Futhark a recuperarse.

La elfa abrio los ojos. Llevaba poco despierta, escuchando las conversaciones de sus salvadores.

Cita:

-Estas perdonado.-susurro, aunque no sabia quien se lo habia dicho antes.

-Gracias... a todos. No se que hubiera hecho sin vuestra ayuda. Nunca os lo podre agradecer lo suficiente. Ahora tengo una deuda con vosotros.-dice mirandoles despues de haberse levantado. Ellos habian peleado para salvarla, y la habian curado sus heridas. Nunca podria devolverles el favor. Luego vio que uno de los hombres estaba tendido en el suelo, y se acerco hacia el.

-Intentare hacer todo lo posible para que vuelva.-dijo aplicando sus dotes medicinales. Pero estaba muy debil para fijarse bien en lo que hacia, y parecia que no haria mucho.

Umriel nuevamente como hizo con la elfa, restablecio al druida, que uso sus energías para restablecerse casi por completo.

Una vez todos estuvieron conscientes y listo para seguir, vieron que habían perdido mucho tiempo y que cada segundo contaba en aquel lugar

El guerrero se alegro de que al fin todos estubieran en condiciones de seguir en viaje. Se acerco a Amly y cortesmente le pidio uno de los escudos pesados para cambiarlo por su escudo ligero.

Se acercó a la nueva compañera y se presento con una leve inclinación:

-"Saludos bella dama, mi nombre es Danko, y seria un placer acompañarla a lugares mas seguros; pero le ruego que antes me deje cumplir una promesa"- dijo mientras miraba hacia el interior de las catacumbas.

Con su escudo nuevo frente a él se dispuso a ir al frente del grupo para adentrase en las catacumbas...

Le entregué a Danko el escudo. Ví cómo se adentraba en las catacumbas y lo seguí, mientras dejaba el resto del equipo para que lo cogiese quien necesitara. Solamente tomé una de las ballestas, 15 virotes y una armadura de cuero. Aún restaban dos armaduras de escamas, una de cuero, dos manguales, dos espadas cortas y un escudo pesado. Además de una ballesta de mano y 15 virotes. Me alegré de ver a la elfa sana y le sonreí, como saludo, para adentrarme en el sitio hacia el que Danko se dirigía. 

 Adonai siguio a Danko y se metio con detras de el, siempre atento a lo que podia pasar. Esperando no hacer mucho ruido, se fue callado y con su arco a la vista.

Umriel observa los objetos de los Hobgoblins y evaluando los materiales decide no coger nada y seguir a sus compañeros al interior con el sigilo nato de su raza y su entrenamiento.

Seguís a Danko hacia la puerta de enfrente, al abrir la puerta, unas escaleras descienden. Bajais intentando no hacer mucho ruido, hasta que llegais a una habitación.

Esta habitación, repleta con todo de tipo de basura arquitectónica, tiene un mojado, olor a humedad. Entre las ruinas hay todo tipo de hongos, mayoritariamente con sombreros de color marrón o gris. La habitación tiene una salida al este

Al llegar a la nueva habitación, Danko detiene la marcha. Mira detenidamente el lugar...

-"Creo que hay una salida mas adelante, pero no me fio de esos hongos"- Dijo a los demas -"¿Alguien sabe que son?"-.

-Me llamo Mialee.-se presento la elfa, pidiendo a la otra elfa una de las armaduras de cuero que habia encontrado. Despues de ponersela encima, siguio a los demas. Les imito, caminando sigilosamente tras ellos. Al llegar a la habitacion, Danko, el unico que se habia presentado, pregunta sobre los hongos. Mialee se agacha e intenta ver que clase de hongos son, sin llegar a tocarlos, por si acaso.