Partida Rol por web

¿No te hablé del vacío? - dice en un tono ligeramente inocente - bueno, por el momento no te preocupes. Termina el desafío del Aire y luego pasaremos a dominar el Vacío.

Aprieta el hombro donde tiene la mano puesta y la mira a los ojos desde detras de sus lentes oscuras - El Vacío es y no es un elemento, uno que engloba los otros cuatro y al tiempo lo es todo y nada.
Para dominarlo necesitarás mi guía y comprender bien los otros cuatro.
- suelta a Circe - Una vez lo domines, al menos en su grado más básico, podremos empezar con el verdadero entrenamiento mágico.

Se pone junto a Circe - Si no estás ocupada podemos dar un paseo, y puedes preguntarme cualquier cosa que quieras. Es buena idea reforzar los lazos entre un maestro y su discípulo. - dice en un tono suave, casi dulce.

Algo sorprendida por la propuesta del hombre máquina, mi estado de ánimo mejora. Una distracción... después de una semana meditando estoy harta de mí misma y cualquier compañía es bienvenida. Además, puede ser útil para terminar con el Tomo del Aire.

"Enternecedor... Me vendrá bien pasear."

- Oui... Bien sûr... d'accord.

Bien, entoncés...- salis afuera de la biblioteca y paseáis un rato - Quizá deberiamos hablar un poco de algo... mmm - pensativo duda un momento antes de dicidirse - cuéntame algo de tu vida.

Mientras salimos de la biblioteca me detengo muy extrañada y miro a Castellano, diciendo demasiado alto en tono incrédulo.

- Quoi???

¿Tan frío y ajeno a todo parezco? - pregunta en un tono inocente y se rasca la cabeza - las personas deben dejar su pasado bien atado antes de seguir adelante. Y para los magos es aun más importante, un pasado desafortunado con el que no te encuentres en paz puede convertirlo en un brujo o un nigromante o algo peor.
- intenta persuadirla aclarando la situación.

A mí aun me persiguen fantasmas... y no es una sensación agradable.

Me aclaro la garganta.

- Ajem... excusez-moi, professeur.

Pienso un minuto lo que voy a decir antes de hablar.

- Creo que las charlas sobre banalidades son tan desagradables para ti como para mí... Así que... imagino que la pregunta es importante.

Me encojo de hombros antes de continuar.

- Responderé, pero después me toca preguntar a mí - le miro con cierta picardía -. Tengo dieciséis años y el douteux honneur de haber estado en casi todos los centros de menores de Amberes. Aunque también poseo el innegable mérito de haberme fugado de todos ellos - un cierto orgullo se asoma a mi mirada -. J'ai eté ma propre amie ces temps mais... je... he sabido encontrarme con gente de la que aprender a... manejarme en distintas situaciones. No recuerdo desde cuándo uso la magie - endurezco la mirada -. Ha sido siempre un poderoso recurso... y me ha permitido mantener alejados a muchos. No estoy orgullosa de todo lo que he hecho, pero no me lamento.

Guardo silencio esperando alguna reacción.

Lamento que pasaras por ello - comenta visiblemente turbado - Aunque de toda experiencia se saca provecho, hay algunas que es mejor no tenerlas nunca. - suena comprensivo.

Pregunta lo que quieras... - lo esperaba.

Me encojo de hombros, como si la pregunta no me importara demasiado y fuera casual. Sin embargo, la lanzo cargada de sentido.

- ¿Quién eres?

Azorado, responde - Puedes preguntarme lo que quieras... pero tendrás que ser más específica. - la mira esperando a que repita la pregunta de una forma más concisa.

- La pregunta dejaba un alto margen de respuesta, pero... ¿qué tipo de mago eres y por qué confía en ti Mendoza? A veces me ha dado la impresión de conoces este colegio mucho mejor que él....

Don Mendoza y yo somos viejos amigos, en el pasado nos salvamos la vida mutuamente unas cuantas veces - mira arriba al cielo - No le conoces lo suficiente para que tu afirmación sea correcta... aunque conozco bastante bien todo este sitio, él es el auténtico artífice, tan sólo él conoce todos los entresijos y recovecos acerca de este lugar y del proyecto Arca.

Vuelve a mirar a Circe - Hasta hace unos años mi especialidad eran las ilusiones. Actualmente... no sabría bien en qué categoría meterme, supongo que por defecto, sigo en la misma. - su tono de voz suena más afable de lo normal.

Cuando conozcas las distintas esferas, escuelas y tipos de conjuros, tú tambien podrás especializarte o darte la magia en general.

Acojo su respuesta con prudencia, intentando medir las dosis de sinceridad de sus palabras.

- ¿Has tenido más alumnos?

Duda un momento antes de responder - No exactamente, en el pasado nunca tuve ni tiempo ni ganas para dedicarme a la enseñanza... pero si tuve alumnos, en pago de favores o a cambio de favores... con otros maestros de la magia o estudiantes avanzados. - se le nota que se toma su tiempo para responder.

La verdad es que... - se calla y cierra el puño, el guante gime - a mi mujer siempre se le dio mejor tratar con los jovenes... siempre decía que se entrenaba para cuando tuvieramos hijos. - lo último lo dice casi en un hilillo de voz, como si fuera doloroso.

¿Qué hay de tu familia? ¿sabes algo de ella o nunca te has interesado en ello? - parece que cambia de tema, pero su tono demuestra franco interes

"¿Casado? No le imagino... instalado en la vida familiar..."

Su pregunta me saca de mis cavilaciones.

- Ma famille? Ahm... supongo que han ocupado mis pensamientos tanto como yo en los suyos. He tenido tiempo para meditarlo. Si me abandonaron porque eran débiles, entonces fue una suerte para mí porque me hubieran malcriado. Si me abandonaron porque yo era un estorbo... bien, entonces me legaron una lección muy valiosa sobre la vida.

Guardo un momento de silencio. Se nota que hago un esfuerzo por compartir esto, probablemente más porque me parece poco importante y no me gusta perder el tiempo que porque sea muy personal. Aunque también es notorio que le he dedicado mucho tiempo a construir un muro de indiferencia en torno al asunto.

- Quand j'étais une petite fille... simplemente no me daba cuenta de que no tenía padres. Supongo que no se añora lo que no se conoce. A medida que fui creciendo, fui comprendiendo. Ahora tengo la edad suficiente como para poder prescindir de mis padres.

De nuevo unos instantes de silencio. De repente una sonrisa acude a mis labios.

- Et si je vivais avec mes parents il est probable que je ne leur fisse pas de cas, pourtant... porquoi des parents?

A pesar de toda su seriedad, Castellano podía ser una persona my amable a su manera.
Galatea dedicó a una sonrisa como un rayo de sol en el cielo nublado.

-Ojalá tengas razón, Oscar. Te agradezco la confianza.

Con un ´´ultimo apretón cariñoso en el brazo, sale de la sala.

Circe, existen mil y una razones para abandonar a un niño a su suerte... pero, creeme, todas son decisiones difíciles y dolorosas. Ningún padre lo abandonaría por ser débil, estar enfermo o tener alguna malformación física. - espera un momento, escuchando la ultima pregunta de la joven. - Siempre se dan otras condiciones que lo obligan. Y casi siempre se hace pensando en que será bueno para el niño. - parece como si lo dijera por propia experiencia.

Oh,... - se queda un segundo callado - Es probable, pero por otro lado tambien podrías haber aprendido muchas cosas de ellos... y quizás sí les harías caso... eso puede que nunca lo sepas.

Me encojo de hombros.

- Possible. Pero no importa demasiado a estas alturas, non?

Nunca se sabe qué nos depara el destino... - dice con franqueza - y tú aun deberías atesorar un poco de fé, eres joven y tienes la posibilidad de alcanzar cualquier sueño.

- Ya...

"Qué discurso tan... poético. Para lograr los sueños hace falta ambición, no juventud... Aunque hace tan sólo unos meses mis sueños eran muy distintos..."

Me siento incómoda, pero no sé exactamente por qué. De repente tengo ganas de cambiar de conversación.

- ¿Qué hay de mi amuleto? ¿Qué significan los símbolos?

Resopla - Ya lo descifré casi por completo, entre las cosas que puedo decirte es que fue un regalo de tus padres, su trabajo tiene una firma muy característica que no tardé en descubrir e identificar.

Menea la cabeza inquieto - Puedo decirte con certeza absoluta quienes fueron tus padres...