Partida Rol por web

- ¿Qué? - al igual que mi amiga sentí como mis mejillas  tomaban un intenso color rojo. Los extranjeros eran muy abiertos con esos temas y a veces lo olvidaba. Sacudí mi cabeza para tratar de alejar las  sensaciones vergonzosas- Cristian, ya sabes que en corea  esos temas no se hablan... bueno y luego por eso estamos como estamos...

Abrí mi soda de fresa y le ofrecí un poco a Hikari a ver si nos apagabamos un poco. De lo contrario iluminariamos la escuela con nuestras mejillas.

- igual lo de que no debí decir eso era por otra cosa - les hice señas para que se acercaran, no quería que un profesor me escuchara o esparcir rumores. Contarle a ellos era diferente, tenían mi total confianza- el otro día mientras estaba en el baño, escuché a unas chicas decir que la esposa del profesor falleció y que su hijo está muy enfermo o algo así, por eso no ha venido a la escuela. Así normal que no duerma.

Sentí mucha pena por el profesor, la verdad es que si los rumores eran ciertos entonces  podía entender que su mente estuviera perdida.

La cafeteria estaba como solia ser habitual a esas horas, llena de alumnos que iban de un lado para otro, la mayoria de ellos preparandose para hacer cola para coger comida. Por fortuna aun la cola no era demasiado grande ya que era temprano

Por los pasillos habia varios alumnos que iban de un lado a otro, se notaba que era la hora libre para todos. El aula en esos momentos tenia a algunos alumnos que estaban mirando los instrumentos, parecia que iban a ponerse a ensayar ya que estaban colocando algunos instrumentos en su sitio.

Cuando la chica esta a punto de entrar puede ver como su compañera de clase Hee Soo pasa corriendo por detras suyo, la chica parecia estar sudando bastante y parecia estar agobiada

Los chicos iban subiendo a la azotea con tranquilidad para comer fuera, sin embargo, cuando llegaron comprobaron como la puerta estaba completamente cerrada.

Sin embargo, un ruido les llamo la atencion, al mirar abajo pudieron ver a su compañera Kim Hyeon-ju que hacia unos dias que daba señales de vida, sin embargo, la chica tenia muy mal aspecto e incluso iba tambaleandose

La chica empieza a tambalearse e incluso cae al suelo, parece que esta en bastante mal estado

Varios alumnos se marchan de la clase, Soo Hee es la que mas llama la atencion al marcharse ya que sale corriendo con sus cosas, la chica parecia realmente apurada y tenia mala cara.

Corro al ver a la chica en ese estado para sujetarle y ayudarle a ir a la enfermería. Le llevo a la enfermería y avisad a la profesora Park, es la única profesora decente de este colegio. Ella si se preocupará por la compañera.

El tono de broma y distención que teníamos se acabó, ahora debemos ayudar a Kim Hyeon-ju y me se bien su nombre porque desapareció. Venga preciosa que te llevo a la enfermería, ¿Qué hijo de puta te ha hecho eso?, hablo y pregunto a la chica sin dejar que duerma mientras mientras le llevo a la enfermería.

-Les dije que estaría cerrada... supongo que podríamos... ¿Escucharon eso?- Al mirar abajo y ver a  Hien-Ju me paralicé por completo. Se veía como si le hubieran dado una paliza, sangraba y se tambaleaba lo que me llevó a  un lugar muy oscuro de mi pasado. Los colores que se me habían subido al rostro ahora parecían haberse tomado vacaciones. Retrocedí y por poco caigo hacia atrás.

Las palabras de Cristian solo eran un zumbido que se mezclaba con las imágenes de mi hermano haciéndome el gesto de que guardara silencio desplomándose luego con su pecho cubierto de sangre.

-¿Qué?- Al salir de mi trance , que aún mantenía mi cuerpo temblando,  descubri que Cristian ya no estaba. Miré alrededor buscando a Hikari para preguntarle que había pasado...

Que alguien estuviera sudando y nerviosa era una novedad y lo que todo el mundo en su situación lo que haría sería ver que pasaba, pero por otro lado, la comida había estado enfriándose desde aquella misma mañana y quería tener un poco de paz y tranquilidad antes del horario de tarde.

Pasando de largo de Hyo-ri Yie, esta se adentró al Salón de Música en busca de un buen lugar para comer, quizás encima del xilófono o de algún tambor que hubiera por ahí.

Continúo caminando hasta la fila, normalmente saltaría hasta el primer puesto sin inmutarse, pero ya que la fila era poca hoy no intentaría saltársela como de costumbre.

Una vez era su turno solicitaría lo de siempre y se retiraría camino al patio, al jugar donde normalmente estaría Park Woo Risas, para pasar el rato.

La puerta se encontraba cerrada, como comprobaron al llegar por las escaleras. Entonces, desde allí notaron a una de las alumnas (esa que había estado faltando) en un estado deteriorado de salud. Se la veía muy mal y Cristian salió en su ayuda. Kim empalideció y casi se cae para atrás pero Hikari la sostuvo a último momento. Cuando ella volvió en sí, le informó:

-Es  Kim Hyeon-ju, la alumna que no estaba asistiendo a clases. Tenemos que avisarle a la profesora Park Sun-hwa… vamos.

Hikari tenía miedo, nunca había visto a una persona tan en mal estado como a esa chica. Su reacción más tranquila fue solamente porque sabía que si se desmayaban ambas, iba a servir de poco tanto para Cristian como para la alumna. Así que intentó mantener a su mente racional, que era bastante sólida, al frente de la situación.

-Vamos, vamos!

Tomó de la mano a su amiga y empezaron a correr.

 Si no hubiera tenido a Hikari a mi lado creo que me hubiera perdido fácilmente en mis propios recuerdos, afortunadamente ella mantuvo la calma. Me sentía patetica por no ser de ayuda en un momento así, todo lo que podía hacer era aferrarme a la mano de mi compañera, si me concentraba en eso quizás podía evitar entrar en pánico.

- Kim Hyeon-ju...- el nombre daba vueltas en mi cabeza mientras corría junto a mi amiga para encontrar a la profesora. No dejaba de pensar en quien podría haberle hecho algo como eso.- La profesora debe estar en la sala de profesores.

Tenía tantas preocupaciones en la cabeza, estaría nuestra compañera enferma? o la habrían atacado los bullys de la escuela. Que tal si alguien se había metido al establecimiento y ahora estaba lastimando estudiantes. Empecé a mirar para todos lados  sintiendo que nos observaban. 

- ¿Qué es lo que le habrá pasado? crees que hay un loco en la escuela que la ataco?- mis palabras claramente no servían para calmar a nadie.

Se colocó en la cola y se cruzó de brazos, por suerte no debería esperar mucho para coger su desayuno. Park solía venir temprano para que la cola no fuese demasiado larga. Pudo ver, unos chicos más adelante, a uno de sus compañeros de clase: Kenzo Harima, tenía entendido que era japonés, o al menos eso decía su nombre y algunos rasgos de su apariencia. Pero poco importaba, estaba encerrado en el mismo centro con, en teoría, el mismo objetivo que todos los demás chicos. La relación entre ambos era prácticamente nula, a pesar de pertenecer a la 2-5.

Cuando fue su turno cogió varias cosas y las depositó en su bandeja. Mientras lo hacía volteaba la vista buscando disimuladamente a Soo-jin. En realidad se moría de ganas por verla, pero nunca lo aceptaría. Ni aunque le pusieran una pistola en la cabeza lo afirmaría, pero tampoco lo desmentiría. Terminó de rellenar la bandeja y caminó entre las mesas, entre las ocupadas y las libres. Sabía donde quería sentarse; en la 2-5 había un grupo que nunca molestaba a nadie, eran unos chicos corrientes que intentaban sacar buenas notas y ser de provecho en Hyosan. Oh Joon-yeong, Lee Cheong-san, Nam On-jo, Dae-su... no es que tuvieran una relación muy estrecha, apenas habían cruzado algunas palabras, pero aquellos chicos le brindaban la promesa de poder comerse tranquilamente su desayuno, sin sorpresas desagradables. Y el trato era prácticamente igual en el sentido contrario. Las mesas eran lo suficientemente grandes para que todos cupiesen. 

Rapidamente el chico coge a su compañera y empieza a correr con ella. Algunos chicos que les ven por el pasillo no parece que les hagan mucho caso, pero tras bajar un piso Cristian se encuentra con Lee Cheong-san y Nam On-jo que estaban hablando, al verle pasar rapidamente los chicos se alarman

¿Scalise que ha pasado? ¿Donde la has encontrado?

La chica parecia genuinamente preocupada y comienza a correr junto con Cristian, la chica mira a Hyeon-ju mientras iba preguntandole a ella tambien

¿Como estas? ¿Quien te ha hecho esto? ¿ Que ha pasado?

Por su parte Cheong-san se acerca y ayuda a Cristian a cargar a la chica para que puedan ir mas rapido mientras comenta

Rapido, vamos a la enfermeria, seguro que la enfermera puede ayudarla y llamar a una ambulancia

Los chicos seguia corriendo cuando Hyeon-ju que parecia medio ida y como si su consciencia fuera y viniera dice

El... el profesor de ciencias.... me... secuestro.... me ha... atado.... pero... me he escapado

La chica parece en ese momento perder la consciencia, los chicos pueden ver como empieza a salirle sangre de la nariz, y parece estar jadeando, como si le costase respirar e incluso a veces suena como si olfatease algo, mientras justo en ese instante llegan a la enfermeria, alli la enfermera estaba mirando algunas cosas en el ordenador, pero al verles se alarma y dice

¿Que ha pasado? Rapido, rapido, ponedla en la cama

Las chicas no tardan demasiado en encontrarse con la profesora puesto que parecia que habia salido en direccion a su clase, la verlas alteradas con una sonrisa amable dice:

Hola chicas, ¿que os pasa? pareceis preocupadas por algo

Parecia que los chicos que estaban con los instrumentos iban a decirle algo cuando se escucha una sirena de una ambulancia en el exterior, los chicos se acercan a mirar por la ventana lo que esta sucediendo.

Aparentemente estan llevandose a alguien en ambulancia

Soo-jin entra en el comedor y tras llenar su bandeja como era de esperar con no demasiadas cosas parece animarse y caminar con paso rapido hacia donde esta Park Jun, la chica sin pedir permiso se sienta junto a este y dice:

Hey, que cara mas larga que me traes ahora... uff que hambre tengo

La chica se deja caer hacia atras un poco y dice:

Menudo tio raro es el profesor de ciencias... ahora no se si tenemos que poner lo que nos ha dicho o lo del libro en el examen... espero que no pregunten nada de eso

Al mismo tiempo Kenzo se dirigia hacia el patio, al llegar a la puerta se tropieza con alguien que le mira una chica de tercero menuda que le habla

¡¡Hey!! Ten cuidado y mira por donde vas... 

La chica parecia estar de bastante mal humor

Mientras bebía zumo, Kim Soo-jin se sienta a su lado repentinamente. La impresión hace que se atragante levemente, tosiendo hasta que el zumo ha dejado atrás la garganta y ya no resulta una molestia. Gira un poco la cabeza y le mira de reojo, seguía tan guapa como siempre, con esa sonrisita que tanto le gustaba a Park. 

—De nuevo mis padres... es como una guerra que nunca acaba—. Respondió a la mención de Soo-jin sobre su cara alargada y mustia. Por supuesto era mentira, todo se debía al hecho de que cada día que pasaba estaba más perdido en su propia vida—. Pues aliméntate bien, supongo que pronto tendrás algún torneo o campeonato de artes marciales. 

—Por muy raro que sea, sigue siendo un profesor como otro cualquiera. Le gustará más ver que has puesto lo que él dijo, que lo que pone en el libro. Así demuestras que le pones atención a lo que dice—. Dejó de mirarla y enfocó su vista en la comida, mientras jugaba con ella dándole vueltas con el tenedor—. Pero si... hoy está más raro que de costumbre.  

Hikari tomó un gran sorbo de aire antes de responder: 

-Es es  Kim Hyeon-ju... la alumna que estuvo faltando a clases, señorita. La vimos desde las escaleras que van a la terraza. El alumno Cristian Scalise fue a ayudarla porque parecía muy... estar muy mal. Estaba como ida, y caminaba como si se hallase herida. 

Intentó decirlo lo mejor que pudo, dejando también que Kim agregase algo de resultar necesario. Su corazón latía aceleradamente pese a su mirada serena. Se dio cuenta de que estaba transpirando, se pasó una mano por la frente, para secarse, no quería perder la compostura. 

Por parte de Hyo-ri Yie, esta muchacha parecía estar tranquila y a lo suyo, si alguien era llevado en ambulancia, claramente esto no tenía nada que ver con su almuerzo, por lo que no le prestó demasiada importancia, sino que simplemente se limitó a seguir con plena atención en su comida.

Probablemente ya se enteraría de a qué alumno le había bajado el azúcar o le había dado un ataque de asma. Esas cosas se solían saber.