Partida Rol por web

El golpe del puñetazo de Feraligart, sumado a la gran velocidad que había obtenido fue devastador para Pidgeot. Pero aún así, él no se rindió y continuó moviéndose a gran velocidad con la esperanza de que un futuro golpe no le hiciera ningún daño. Pidgeot hacía copias de sí mismo, pero el pokémon de Toshio era capaz de distinguir a su verdadero objetivo, y no estaba dispuesto a errar en el golpe.

¡Estás hecho polvo, Rubí! ¡Haz el favor de posarte en la rama de ese árbol y descansa un poco, tómate un respiro!

- Vamos Mordiscos, ya casi lo tienes. Afina tu puntería y golpea al verdadero Pidgeot otra vez con Puño Hielo! - Estaba complicado acertar ahora que había echo un segundo Doble Equipo. Las copias estaban por todas partes y hasta a Toshio le costaba diferenciar al verdadero.

Una vez más Feraligart se movió con precisión y alcanzó al pokémon de Tamara. Rubí cayó al suelo gravemente herido, pues la muchacha confiaba en que podría recuperarse antes de recibir el siguiente impacto. ¡Has tenido suerte! Dijo devolviendo a su pokémon a la pokéball. Pero no te irá tan bien con mi segundo pokémon. ¡Adelante Frío, a escena!

¡Vence donde no venció Rubí, sé más rápido que él! Ordenó a Frío con muy poco éxito. Y una vez le tengas, golpea con todas tus fuerzas y clávale tu pico.

Había costado averiguar cuál era el bueno, pero el Feraligatr de Toshio había logrado derribar a ese Pidgeot antes de que pudiera recuperar salud. Mordiscos estaba bien plantado en el campo de batalla, con un incremento de velocidad que lo hacía bastante peligroso. Toshio lo sabía muy bien y lo iba a aprovechar al máximo. - Mordiscos, tenemos a otro volador delante de nosotros. Utiliza otra vez Puño Hielo, acaba con él.

Tamara se llevó las manos a la cabeza cuando vio a su pokémon caer de nuevo ante el impacto del Feraligart de Toshio. Frío, tal y como indicaba su mote, se quedó completamente congelado y antes de que pudiera hacer nada había caído gravemente debilitado. La ornitóloga se marchó del campo de batalla sin despedirse de su rival, recogiendo a su pokémon y dirigiéndose hacia el centro pokémon más cercano, pues en su rostro se le podía ver una mezcla de preocupación y tristeza. El golpe del Feraligart había sido devastador.

A Toshio no le dio tiempo ni de despedirse de la chica, pues salió corriendo como alma que lleva el diablo. - Regresa Mordiscos, has echo un buen trabajo.

Contento tras haber obtenido otra victoria, Toshio se adentró nuevamente en la hierba alta en busca de un nuevo compañero que añadir a su equipo. Buscando entre la hierba encontró a un montón de bichos pero él buscaba un pokémon muy específico. Y no tardó en encontrar a un Galvantula.

Nombre: Galvantula Apodo: Aru Naturaleza:
Tipo: Bicho/Eléctrico	Género:

Una vez pasado el bosque, Toshio llegó al centro Pokémon más cercano donde pudo curar a su recién adquirido compañero. Cuando ya estaba del todo recuperado, salió y de pronto alguien montado en una bicicleta se encontró con él. Llevaba en su hombro un Pikachu que no tardó en bajarse. El muchacho frenó en seco en busca de su Pikachu y cuando vio a Toshio sonrió. ¡Qué guay, Pikachu! ¿Has visto? ¡Llévabamos mucho tiempo sin encontrarnos a ningún entrenador por aquí! ¿Te apetece combatir? Le preguntó a su pokémon que contestó rápidamente. 

¡Hola, mi nombre es Ash, soy de Pueblo Paleta! ¡Y estoy entrenado para ser un maestro pokémon! Y éste es mi inseparable amigo Pikachu! ¿Te apetece un combate? Yo tengo mi equipo completo, ¿qué te parece si usamos a tres de nuestros pokémon, con un posible cambio durante el combate?

Un joven de Pueblo Paleta y su Pikachu se presentan ante Toshio. El chico que responde al nombre de Ash es un entrenador que desafía a Toshio a un combate.

- Encantado de conoceros, Ash y Pikachu. Mi nombre es Toshio y soy de Pueblo Primavera. Recientemente he empezado con esto de ser entrenador, mi equipo no está completo, pero si que tengo a tres pokémon. Así que acepto vuestro reto. - Seguidamente Toshio seleccionó al pokémon con el que iniciaría el combate. Su recién adquirido Galvantula.

Ash sacó la pokébex para ver qué pokémon tenía delante. ¡Guau, un Garvántula! ¡Cómo mola! Dijo guardándose el aparato. Es de tipo bicho y eléctrico, Pikachu. Tu electricidad no va a ser de mucha ayuda contra él. 

Probemos con otra cosa entonces, ¡cola férrea!

- Aru, es hora de entorpecer un poco el campo rival. Usa tu Red Viscosa. - Galvantula era rápido, pero el resto de mi equipo eran algo más lentos, así que si podía asegurarme el frenar a los pokémon enemigos que saliesen al campo de batalla, mejor que mejor.

Pikachu se sorprendió al ver como el pokémon de tipo bicho era más rápido que él. No estaba acostumbrado a toparse con rivales más rápidos que él, y cuando vio que el campo de batalla se había convertido en un terreno pegajoso se sintió bastante incómodo. A pesar de sentirse cada vez más lento, Pikachu fue capaz de golpear con su férrea cola al recién pokémon adquirido de Toshio. 

Garvántula fue capaz de resistir el golpe sin mucha preocupación, así que seguía en pie, y Toshio ya estaba preparando su siguiente movimiento con el que sorprender a su rival.

¡No dejes que el campo de batalla sea un impedimento para ti, amigo mío! ¡Empieza a moverte a gran velocidad, usa toda tu agilidad e impide que el terreno sea un problema para ti! ¡Adelante!

Estábamos empatados, al menos en cuanto a tipos. Si bien el pikachu de Ash había asestado el primer golpe, no parecía tener nada potente contra mi. Por mi parte, Aru contaba con un segundo tipo, el bicho, que algo más de daño podría hacer con él. - Aru, vamos con un Zumbido bien fuerte!

Una vez más Garvántula se movió con más agilidad que Pikachu y logró lanzar una vibración sónica sobre el pokémon de Ash. Las grandes orejas de Pikachu no ayudaron a evitar el terrible daño que le produjo y sus piernas temblaron cayendo gravemente herido al suelo.

Por suerte para el entrenador, el pokémon eléctrico se puso en pie dispuesto a continuar el combate, y éste empezó a moverse a gran velocidad al rededor de la red viscosa que había por todo el campo de batalla. Estaba preparándose para el siguiente paso.

Pikachu, es absurdo que sigas sufriendo de esta forma. Creo que es hora de que regreses. Tras aquellas palabras Pikachu era consciente de que estaba gravemente herido y de que necesitaba un descanso, así que rápidamente volvió sobre el hombro de su entrenador y Ash sacó una pokéball para dejar libre a un enorme y majestuoso Charizard.

¡Enséñale lo que es bueno, amigo mío! ¡Seguro que contigo no podrá!

El Pikachu de Ash comenzó a moverse rápidamente por todo el campo de batalla. En cuestión de segundos parecía un auténtico rayo y Aru no era capaz de seguir sus movimientos. Sin duda el movimiento Agilidad había logrado darle una gran ventaja, pero se estaba quedando sin energías. - Aru, repite el movimiento Zumbido. - Ahora se movería primero, pero un solo ataque más y Pikachu caería derribado...

Ash supo reconocer cuando estaba en inferioridad y antes de que otro terrible zumbido de Garvántula terminase por debilitar a su compañero, prefirió sacar a otro de sus compañeros y sacó a un majestuoso Charizard. El pokémon de fuego volador recibió el impacto del zumbido de su rival con muy poco dolor en su cuerpo. Además, la red viscosa que había extendida por el campo de batalla no surtió ningún efecto sobre él. 

- Charizard, ten mucho cuidado, su velocidad y sus ataques eléctricos pueden suponer un terrible problema para ti. Pero confío en ti. Creo que vas a ser capaz de sobreponerte a esta situación y que vas a derrotarle. No podemos dejar que te venza tan fácilmente como a Pikachu. Dijo al tiempo que le hacía una caricia a su pequeño pokémon eléctrico.