Partida Rol por web

Suglú os conduce a los cuatro(digo cinco xD) por un pasillo tan laberíntico que cuando llegáis a la puerta del arsenal (que juega hoy contra el BarÇa en L.d.C) estáis mareados como si hubierais montado en un tío vivo. Abre la puerta y veis un montón de cachivaches raros y exóticos sin ningún tipo de utilidad y allí, tirados en una esquina, un cuadrado que parece un marshmallow gigante al lado de unas cajas llenas de atontadores*.

Suglú se acerca y os da varios atontadores, dos por cabeza y coge una cuchara heladera y empieza a sacar bolas de SE4(sí, el marshmallow es el SE4). Saca 10 bolas y las va colocando encima de un bol para ensalada.

Coge tres bolas y se pone a hacer malabarismos con ellas un rato:

 - ¿A que mola? No explotan sin atontador.

Sigue haciendo malabarismos y os va pasando dos bolas a cada uno y os da un mapa con la localización de vuestro objetivo.

Me quedo mirando la masa gelatinosa que nos lanza Suglú.

¿Y la mecha? Yo sin mecha no me aclaro, que conste.

Ya verás como me pringa los bolsillos.

Meto los atontadores y la masa viscosa esa en mis bolsillos, cambiando varias veces de emplazamiento las cosas para que encagen mejor.

¿Alguien quiere un clip? Es que después del reordenado ya no me cabe...

Este tío es tonto...

Hace como que mira a los marshmallow, mientras de reojo observa a Suglú hacer malabarismos con aquella masa. Coge los atontadores mientras los observa, esperando encontrar algún error o algo que ponga en riesgo su seguridad. Empieza a probarlo sobre cosas, colocando aquel atontador (descargado, por supuesto) sobre los brazos de sus compas.

Pero yo más

¡Qué bien, como en el circo! -grito mientras comienzo a interpretar una divertida música circense con mi acordeón, para que prosigan los malabares

Bolitas de helado!! de que sabor seran?, pienso mientras me arrimo una a la boca, y le paso la lengua por encima...

Puajjjj, esto sabe a calcetin sudado...., exclamo, mientras escupo al suelo. Saco un pañuelo de mi bolsillo y me limpio la lengua con fuerza, tratando de eliminar aquel sabor de mi boca, ya no me sabria la mermelada igual de bien despues de esto....

Sigue probando los atontadores, en sí mismo y en sus compañeros.

- Y... ¿con esto venceremos a los galletos? - pregunta sin mucho convencimiento ahora que ha caído en la cuenta. Después, se sienta en el suelo y comienza a hacer un boceto del atontador.

Todo debe quedar ilustrado y completo, ¡sí señor!

Doradín cogió sus partes y comenzó a toquitearlas, tras un rato jugando a darle forma de champiñón se cansó del juego y se la metió en los bolsillos. Como juguete puede ser entretenido, sin duda.

Una vez repartidas las bolas de heladodigooo las cantidades adecuadas de SE4, Suglú os conduce por más pasillos hasta la entrada de la casa/castillo del Príncipe. Ya en la puerta, adopta una pose seria, molona y peliculera, se sube el cuello de una gabardina que cogió en el perchero(pese a que estamos a 35º a la sombra) y con un sombrero de ala al más puro estilo gangsteril, agacha la cabeza y comienza a hablaros, muy serio.

 - Señores, ahora pongámonos serios..... Tienen que ir a la base de la corporación galleta y volarla en mil pedazos, y tienen que hacerlo esta noche. Con lo que sabemos de ustedes y con lo que les hemos dado, podrán cumplir su misión sin problemas.

Suglú sacó un cigarro y se lo encendió al más puro estilo Janfri Bogabanti mientras miraba a un lado y a otro sospechosamente.

- Oye, ¿no tienes calor? - pregunta antes de que diga "pongámonos serios". Es entonces cuando se calla y finge no haber dicho nada, mirando al cielo como el que no quiere la cosa. Escucha todo el monólogo, asintiendo. - Vale, entonces, ¿voy a por mi moto? ¡No quiero esperar a tener mi mermelada!

Mira, aquí el amigo del gorro negro ha tenido una buena idea. Porque sí muy guay todo, pero hoy no estoy por la labor de andar mucho, tu me entiendes... y tampoco quisiera que el cigarro te sentara mal...

Todo esto se lo voy diciendo moviendo la cabeza de un lado a otro, para que en su mirar sospechoso sólo vea mi narizón.

Oye, pues no estaría mal eso de los vehículos. ¿Alguien quiere venir conmigo?. Ten el barco amarrado en la otra punta de la ciudad. Seguro que con él, llegamos en un pis-pas.

Lo que sea, cualquier cosa que haga que nos cansemos menos..., mira, me conformo con un burro o un pony, si no tienes otra cosa. Añado a las sugerencias de mis compañeros.

Debido al efecto que produce Sofa al estar de pie, apenas escucha sus palabras. Se dedica a correr para encontrar al fin su moto y partir para la misión. Casi deja un rastro de babas, pensando en la deliciosa mermelada

Cuanto antes lleguemos, ¡más para todos! ... O para mí... ¡ñamñam!

Mientras Revent On va a por su moto, Doradín salta y aplasta a una seta con cara de mala baba que había delante de su furgoneta, que más que una furgoneta, parecía una rana......

Suglú, viendo que pasabais olimpicamente de él, se introdujo discretamente, o eso pensaba él, pues daba más el cante que un pulpo en una convención de nécoras, otra vez en su guarida.

Doradín y Revent On aparcaron enfrente del resto del 'equipo' y esperaron a ver quién iría con quién.

Lo siento chicos, hoy las tuberías tienen copyright y no puedo usarlas, de momento mi cacharra con palanca de controlar el tiempo nos servirá. Mientras dice lo de la palanca saca una cachimba para 20 con restos calcinados de setas de aspecto sospechoso.

Sin que nadie se percate de mi presencia, me encamino lentamente hacia la moto de aquel tipo, y me monto en ella, una vez encima, todos me miran con cara de asombro, pensando como y cuando habia aparecido encima de la moto...

Observa sorprendido como uno de los fanpiros se sube a su moto y se encoge de hombros.

- Uno más cabe, ¿alguien se atreve? - saca la lengua al reírse, imaginandose la escena

Después, se detienen al reírse cuando piensa sobre lo que ha dicho Doradín, y mira lo que señala

- ¿Esa cosa controla el tiempo? ¡¿Me la dejas?!

Claro, solo hay que enchufarse un tubo a la boca y aplicar una llama en este recipiente donde están las setas. Acercó la cachimba y un soplete para que Revent la probara.

Con una sonrisa de oreja a oreja, Revent se anima a probar.

Tras una calada, el mundo se vuelve extraño, y con varios colores hasta entonces desconocidos

- Oooooye... no está nada mal, ¿eh? - mira hacia todo con una mirada soñadora - ¿Alguien quiere merrrrmelada?

Mejor esperamos a haber acabado para la mermelada, ¿no?

Dicho esto me acerco a la parte trasera de la furgoneta de Doradín.

Espero que no te importe...

Cojo la manilla y empiezo a estirar y a retorcerme.

Maldita hija del gran mono...

Por fin se abre la puerta, pero la manilla ha quedado como una obra impresionista.