Partida Rol por web

Efectivamente - dice Burdock mientras mira a Rincewind - yo soy Burdock Muldoon y imagino que tu seras Rincerwind.

Mirando detras de el ve a su servant - Este es el Berserker, tiene pinta de ser poderoso, pero se ve que pierde la razón rapidamente. Espero que no nos de ningún problema.

Con un tono de desprecio - Ahora que la señora Gume a terminado de cotillear de nosotros con su servant - mira hacia ella - podemos plantear la votación teniendo en cuenta la aportación ofrecida por Lancer.

Aumentando el volumen de voz. Bien queridos aliados, ¿a donde queréis ir en primer lugar?

Haciendo honor a su apetito Rincewind no necesitó pensarlo dos veces. 

Lo primordial es conseguir suministros.

Hizo una pausa con la esperanza de que la idea fraguara en el resto, y añadió.

Es vital para cualquier guerrero mantener las fuerzas, quién sabe lo que nos depara el futuro. Lo que está claro es que como no tenga comida suficiente me pongo de muy mal humor... 

Erzo todavía está tenso como Falete en un dietista, en vista del primer enfrentamiento de Saber con la señora Gume.
Tendré que hablar con ella cuando estemos a solas, no va a dejar pasar el que no le haya avisado de la alianza. Por otro lado, quien es este tío, ¿solo piensa en comer? En fin, esta gente plebeya. No obstante, coincido que necesitamos suministros para recuperar fuerzas.

La señora Gume ha ido a donde tenia que ir, y bien hecho está. Punto. En cuanto a donde vamos, yo voto por el lago. De noche no vamos a conseguir suministros, no en este lugar. Aquí hay algo para alimentarse ¿creíais que no había pensado en ello? Mirad las bolsas que están ahí anda.

Saber ¿Qué probabilidades ves de una posible emboscada en el lago pongamos dentro de una hora?

Saber levanta una ceja.

Pues hombre, dentro de una hora aún no es de noche, y hay que salir por las noches - Este es tonto - Respecto a las emboscadas en el lago, es bastante llano, es muy difícil que nos embosquen sin que nos demos cuenta.

Tras unos minutos oyendo nada más que tonterías, la señora Gume se lleva la mano a la cara y se frota los ojos, apoyando su codo en la mesa junto a ella.

Madre mía, ¿para qué se mete este chico? Va a salir escaldado. Un joven de su edad con un linaje tan noble necesita caerle bien a la gente para sobrevivir.

De repente, la señora Gume advierte, con mucho sobresalto, que la manga de su kimono lila está deslizándose lentamente hacia abajo producto de la gravedad. El dibujo mágico de sus sellos de comando, ligeramente ondulado contra la pálida piel de sus huesudas manos, empieza a sobresalir del atuendo. En un movimiento brusco que no puede disimular, se baja de nuevo la manga, que no solo le cubre las manos, sino que además la tela se extiende unos centímetros más, como los kimonos de antaño.

Casi cometo el primer error, no puede volver a pasar, piensa con tensión.

Mientras Burdock y Rincewind expresan sus puntos de vista, se levanta de un brinco y va directa a la cocina, buscando unas tijeras para cortar parte del largo y ancho obi de su vestimenta. Con la tela, se envuelve la mano y hace un nudo firme, asegurando el secreto de sus sellos.

Después de la escena y visiblemente más calmada, vuelve a su silla, sin perder el hilo de la conversación ni un momento.

Erzo y su amiguita tienen razón: será difícil que nos embosquen en un sitio como el lago. Sin embargo -hace una pausa dramática antes de continuar, mirando las caras de los presentes para asegurarse de que están prestando atención a sus palabras-, en un sitio tan expuesto somos un blanco fácil. Cualquier tirador que se precie abatiría a su objetivo al primer disparo en un sitio como ese.

Toma aire profundamente, ordenando de nuevo las palabras en su mente, como siempre hace cuando no sabe cómo se va a tomar su interlocutor lo que tiene que decir.

Pero, ¿qué esperáis encontrar en el lago, más que lodo y algún que otro trasnochado? Las explosiones de la zona residencial, en cambio, son muy sospechosas. Los medios no conocen ni pueden divulgar que está librándose una batalla mágica, pero tiene toda la pinta de que hay movimiento. Sugiero empezar por ahí.

Una de las muchas cosas que había aprendido durante su paso por la universidad era que, como Sun Tzu predicaba, hay que utilizar las debilidades del enemigo en su contra. Y sus enemigos, si estan ocupados luchando por las noches, desconocen de su existencia. Y el desconocimiento es una de las mayores debilidades.

¿Es aún tan pronto? Mare mare, que desfase horario llevo, tanto viajar de aquí para allí en representación de la comarca... así no hay quien viva. Erzo detecta el gesto de la señora Gume, y considera innecesario ocultar las marcas en esa habitación, al menos de momento. Nadie sería tan tonto de haber gastado ya algún punto, a no ser... Entorna los ojos al darse cuenta de que una vez más su inocencia le ha jugado una mala pasada. Lleva las marcas totalmente al descubierto. Menos mal que tiene los brazos cruzados y las manos están mas menos cubiertas. Que no se me olvide coger luego los guantes y ponérmelos ya para siempre.

Coincido en que la zona residencial es la que mas pistas puede dar, pero no obstante es también donde más posibilidades tenemos de encontrarnos con otro de los magos que participan. Sin un mínimo de coordinación entre nosotros, creo que es más probable que nos estorbemos. ¿No deberíamos primero adecuarnos un poco los unos a los otros para que eso no ocurra? Sin comprometer el estilo especial de cada uno claro. Dice Erzo sabiendo que en el fondo siguen siendo rivales y no pueden desvelarse todas sus técnicas. De esta forma, intenta calmar las posibles quejas que pueda haber del resto de los presentes.

¿Y a donde pretendes ir muchacho? - Pregunta berserker - Si lo que quieres es un sitio donde adecuar nuestras técnicas, nada mejor que pulirlas en una gran batalla asaltando un castillo, así además tendríamos una base de operaciones digna. O el templo, ya que a vosotros los magos os gustan esas cosas de magia.

Saber, tu dices haber comandado ejércitos. Sabrás de lo que hablo.

Saber niega con la cabeza mientras se acerca a mirar el mapa.

No creo que dispongamos de la fuerza necesaria para atacar una fortificación, se podría ir a recoger información claro, pero no lo llevaría tan lejos como para un ataque.

La señora Gume asiente tanto interna como externamente: le gusta cómo Berserker está tratando de atajar la situación. En eso se parecen mucho.

El negrito quiere salir a repartir leña y acabar con esto cuanto antes. Me pregunto qué deseo para su tribu querrá pedir con el Grial. Por su forma de hablar, parece un guerrero curtido. Además, respeta a Saber.

Con estos bonitos pensamientos, mira a Rincewind, el master de Berserker, que no parece muy por la labor y prioriza cosas mundanas como el rugir de sus tripas a participar en la guerra, e intenta imaginar cómo habrá sido su ritual de invocación y qué tipo de relación tendrán entre ellos.

Peculiar, sin duda. Podría aliarme con ellos... bueno, con su servant.

La señora se aclara la garganta y se dirige a Berserker:

Oye Jefe Zulú, me gustas, ¿cuál es tu nombre?, pregunta, un tanto molesta porque nadie quiera decir cómo se llama. Por la pinta que tiene, está claro que es un guerrero zulú, espero que no se ofenda por ser de otra tribu. Inspira hondo y prosigue. Qué más da, no hemos venido aquí a hacer amigos. Hay sabiduría en tus palabras, pero creo que infravaloras a los magos.

La señora Gume se levanta, se pavonea por la habitación con la superioridad de una sexagenaria que ha vivido más que la mayoría y finalmente se acerca a Saber, que se encuentra junto a Lancer, mirando el mapa.

Qué me decís, ¿deberíamos acaso atacar el templo? Podemos vigilar desde el exterior, es cierto que sería un buen sitio para establecer una base. Suspira de nuevo. Solo quiero terminar con esto cuanto antes, me da igual dónde, pero pongámonos en marcha. Que lo diga yo, que soy la más vieja...

¿Jefe? Soy un poderoso rey de Persia y mi nombre es - Justo cuando iba a mencionar su nombre se queda callado y mira a su master - Jaja, casi caigo en esa. Pero no puedo revelar mi nombre aún ¿no? En fin, valoro más los músculos que la magia, son más confiables.

Es muy arriesgado - Responde Lancer - Es un sitio tan bueno como cualquier otro - Responde a su vez Saber. - Qué, no me mires así Lancer, por lo que sabemos (o sea, nada) cualquier sitio peude ser tan bueno como otro. Además la vieja tiene prisa, igual se le está acabando su tiempo - Comenta Saber con una sonrisa maliciosa

Tras horas de debate, los 4 masters acaban poniéndose de acuerdo y deciden ir a la zona comercial.

Berserker parecía algo decepcionado por la decisión, a la par de que Lancer la aprueba. Rider seguía meditabunda mirando por la ventana todo este tiempo.

Al caer la noche, los 4 masters salen del refugio seguidos de sus servants, sólo que estos últimos entran en su plano espiritual para no ser visibles a simple vista.

Tras salir del refugio, puede que les entre el impulso de mirar hacia atrás, de permanecer escondidos y dejar que pase todo. Pero no, a partir de esta noche ya no hay vuelta atrás, para estos masters, la guerra acaba de comenzar.

Tras una larga noche, os adentráis a descansar en vuestro apartamento. Algunos de los masters dedican un tiempo antes de descansar para compartir el maná sobrado de la batalla con sus servants, en un intento de conseguir que superen la limitación del ritual fallido.

A la mañana siguiente, os despertais con energías renovadas

A la mañana siguiente ponéis las noticias.

Al parecer, en lo que parece una guerra de bandas, han aparecido 6 ciudanos muertos en la zona comercial, algunos asesinados de forma grotesca.
También se han encontrado cadáveres en descomposición en la zona comercial y residencial. Por el estado en que se encuentran, no se han podido identificar. Se les hará más pruebas.
Un pescador ha desaparecido a la noche cuando iba a pescar en el lago. La policía sospecha que se ha podido fugar con una amante a otra ciudad.

Tras organizaros una buena comida, discutís de cuales serán vuestros planes en la siguiente noche.

Unas horas antes, justo antes de acostarse, Erzo se sienta en la cama de forma relajada y habla con Saber.

Estás aquí, ¿verdad? Espero que con el maná robado y el que te he podido transferir, hayamos podido enmendar aunque sea un poco el problema de la invocación. 

En otro orden de cosas, con que sabías lo de la norma de que si no hay suficientes participantes se fuerza a otro mago a participar ¿eh? le dice Erzo con un tono de jocosa burla, mientras tuerce una media sonrisa. 

Dime ¿qué opinas de la chica? ¿Nos estará tomando el pelo y nos atacará a la menor oportunidad? O será sincera. La verdad es que no se que pensar, tan pronto me parece alguien cabal como una sádica maniaca.

Me gustaría poder añadir aliados a esto considerando que esta guerra del grial es tan inusual. No sabemos si todos somos las víctimas de un plan donde todos salimos perdiendo.

Bueno, parece que no hemos levantado sospechas a la noche. Al menos entre los humanos. El incidente del lago puede ser tanto casual como otro provocado. En cualquier caso ¿seguimos el plan y vamos a ver la mansion de Tokasha? 

Aunque hay otras zonas, es un buen punto de partida. Incluso tal vez podríamos avisar a Mizuki. Tanto si es una potencial aliada como un problema, mejor tenerla cerca supongo.