Partida Rol por web

Un brillo naranja y violeta surge de las manos de Alphonse y rodea a Lobe. Después de la aparición inexplicable de unos numeritos verdes, la chica se levanta de su letargo. Mira a Al a los ojos y con expresión seria comenta -Owch. Eso dolió. 

Se levanta del suelo y con un saltito estira los músculos. -¡Gracias! -responde recobrando su usual entusiasmo. -¿Ya pasó todo?

"Si, Lobe. Todo se ha terminado" por una vez voy con cuidado de no romperla -más- "Aqui están. Ya tenemos todos los cristales. Y tan sólo nos falta una cosa, la cuerda"

"¿Estás preparada? Creo que se donde conseguir una"

Esta vez, sin ganas de liarla, voy a cargar con esta pequeñaja -lo delicada que nos ha salido- y a tratar de pescar un chocobo con una de las verduras que he comprado antes de salir

"Si es que me lo veia venir..."

Y si no hay chocobos, pues robo un coche o algo

En su recien obtenido auto-chocobo, Alphonse y Lobe se ponen nuevamente en camino. Mientras se alejan de la zona montañosa-boscosa de Trabia, la chica descansa casi en silencio. Sus excesivas energías parecen haber disminuido después de tanto ejercicio; como los perros. 

-¿Dónde dices que pueda haber cuerda?-pregunta finalmente la chica. 

"Se me ocurren dos formas"
"Una, es comprarla. Y no vamos a hacer eso. Sería sacrificar dinero y eso no nos lo regalan"

"La otra es ir al sitio más oscuro, cruento y peligroso que existe ¡La habitación de Quistis!"

"¿Te ves capaz de que nos infiltremos ahi, y encontremos las cuerdas entre tanto cacharro raro y peligroso?

El hombre maneja con presteza hasta llegar a un pequeño puerto desde donde toman una nave que cruza el mar. Afortunadamente, del otro lado, los administrativos de Trabia habían preparado otro vehículo terrestre para ellos. Apenas dejan atrás el puerto, Emmet emite un gruñido. -Por supuesto...-dice resignado. 

Frente al vehículo, un grupo de monstruos se presenta con intenciones hostiles. No podía ser de otra manera...

Dos mesmerize se acercan galopando a velocidad...

No creo que pueda espantar a las criaturas con un simple disparo al aire, así que...

- Emmet, no te muevas de aquí, yo me encargo.

Salto del transporte y recorro una distancia prudencial delante del coche.

Preparo el fusil, apunto... y disparo.

El disparo de Rogan da en uno de los monstruos, quien llega hasta el SeeD y lo empuja con poca fuerza. El otro, por el contrario, llega a golpearlo con el cuerno. El SeeD levanta el brazo como reflejo y evita un golpe peor, pero duele. 

-¿Estás bien? -pregunta Emmet desde dentro del vehículo. 

El mayor golpe me hace recordar que aún estoy débil del viaje anterior. Debería acabar con esto cuanto antes y buscar la manera de descansar después.

- ¡Quédate ahí Emmet! ¡No te muevas!

- ¡Sacred! !Déjame ponerte a prueba! ¡Demuestra lo que vales!

Intento concentrarme y permito que Sacred tome paulatinamente el control de mi cuerpo. A medida que lo hace, voy dejando de sentir poco a poco mis extremidades... luego mi tronco... y finalmente mi mente se funde en mi interior...

Mientras siente la fuerza de Sacred apersonarse en su interior, uno de los mesmerize se apresura a golpearlo con el cuerpo. El otro, más precavido, decide intentar protegerse del ataque. Después de unos segundos más de carga, Rogan siente y ve cómo una entidad fantasmagórica de Sacred salta por los aires y golpea el suelo con fuerza. El suelo se astilla en varias rocas salidas, golpeando así a los monstruos. El monstruo más cercano desaparece casi inmediatamente destruido. El otro, recibe el golpe sin caer, pero notablemente dañado. Mientras Rogan recupera fuerzas, el monstruo corre hacia él para golpearlo, pero el terreno escarpado le impide tomar carrera, por lo que su golpe llega con potencia disminuido. 

Emmet lanza un silbido de sorpresa desde el interior del auto.

Vuelvo lentamente a tomar el control de mi cuerpo. Aunque más debilitado. No obstante, uno de los monstruos ha caído y el otro no aguantará mucho más.

- ¡Muy bien Sacred! ¡No esperaba menos de ti!

Con determinación, apunto con el fusil al monstruo que queda en pie y le disparo, con la esperanza de terminar con él.

-Gracias.-responde la voz grave de Sacred en la cabeza del SeeD. 

Los certeros disparos de Rogan terminan con la vida del mesmerize restante, quien cae estrepitosamente y se desvanece en el aire. 

-¡Whoa! -festeja Emmet desde el vehículo. -¡Gran batalla! Ven, vuelve al auto antes de que vengan más. 

Una vez que están nuevamente en camino, Emmet comenta -Me tranquiliza tener un SeeD de tu calibre cuidándome la espalda en el camino. Eso ha estado muy bien. 

A cada vez menos distancia, puede verse el jardín de Trabia cada vez más grande. Desde fuera, se ve similar a Galbadia, pero a la vez no. En la fachada exterior de Galbadia, los colores primarios son el rojo y el oro. En Trabia, el amarillo y el verde. Ya pronto llegarían a destino. 

Me recuesto en el coche lo más cómodo que puedo en el camino que resta hasta el Jardín, con la intención de descansar, pero es en vano. Aunque la grandeza del Jardín de Trabia me sorprende, no puedo dejar de pensar en Kyros y Vincent. Sé que debería descansar, pero mi cabeza no está tranquila. En cuanto deje a Emmet en su destino, me pondré manos a la obra...

- Bueno, Emmet, ya falta poco. Al final ha sido un viaje tranquilo, excepto por el encuentro anterior. Espero que tu trabajo aquí pase sin incidentes, también. ¿Cuánto tiempo vas a estar, más o menos?

-En rigor de verdad no podría saberlo. No siquiera tengo bien en claro qué precisan que haga. De cualquier manera, no creo que esté aquí mucho tiempo. 

 Desde las puertas del jardín, Emmet se baja del vehículo y estrecha la mano de Rogan. 

En la entrada del jardín, un hombre recibe a Emmet cortesmente. Emmet discute algo con él en voz baja mirando de reojo a Rogan. 

-Eres Rogan ¿verdad?-dice el hombre -Vincent mencionó que seguramente pasarías pronto por aquí. Ellos han ido a investigarla villa de los Shumi. Queda al oeste de aqui. No te vas a confundir, ya que no hay nada más aquí. 

-Seguramente quieras seguir viaje lo antes posible. Sé que tienes prisa. Lleva el vehículo contigo. Si alguien pregunta, diré que te envié a buscar unas cosas y ya. 

con un guiño cómplice, Emmet se da media vuelta y emprende camino a Trabia. 

- Muchas gracias señores. Si no les importa, saldré ya mismo. Cuanto antes salga, antes volveré.

Sin más, me monto en el vehículo, me despido de los demás, y me dirijo hacia el oeste.

No esperaba tantas facilidades, pero se agradece. Eso sí, más vale que cuide bien el vehículo, al fin y al cabo, es responsabilidad de Emmet...

Aflojo un poco el acelerador. No conozco la zona, así que mejor andarse con precaución por el camino.

- Blizzard, Sacred. ¿Habéis estado por aquí antes? ¿Qué conocéis de estas tierras?

Un poco de charla hará el viaje más corto.

-No recuerdo mucho de este lugar.-admite Blizard algo decepcionado. Sacred, sin embargo, parece llevarle ventaja. -No conozco este lugar, pero sí puedo hablarte del terreno. El lugar hacia donde vamos, la villa de los Shumi, es una gran construcción subterránea. Sin embargo, los shumi son bastante respetuosos con los minerales, por  lo que la estructura está delicadamente hecha. No como ustedes, los humanos...Sin ofender, tú estás bien, Rog. 

La distancia de viaje era bastante menor a lo que Rogan había esperado. Más pronto que tarde, llega a una pequeña región rocosa que enmarca un domo metálico. Una puerta mecánica da acceso al interior del domo. 

Apenas unos 30 metros de distancia separan al grupo de la entrada de la villa de lps Shumi cuando escuchan un ruido metálico cerca. Desde detrás de la ladera de una montaña cercana, se acerca hacia ellos con gran velocidad una gran araña mecánica. 

Cuando está a una menos distancia, pueden ver el rostro enojado del Asistente en el interior. Al parecer estaba preparado para ese tipo de situación. 

-¡Whoa! ¡No me gustan las arañas! -declara Urth mientras desenfunda su lanza. 

- ¿Qué demonios es eso?

Pregunto mientras preparo el fusil y adopto posición de batalla. Mientras tanto, no puedo evitar sacar conclusiones precipitadas.

- ¿Nos estaban esperando? Eso significa que van un paso por delante de nosotros. Esto es muy malo.

- Cabrón rencoroso - remuga Kyros entre dientes -. Ahora vas a ver.

Sin perder un segundo, Kyros desenfunda su espada y se lanza contra la araña mecánica, dispuesto a descargar un espadazo con toda la fuerza de la que es capaz.

Veo a Kyros abalanzarse sobre la máquina totalmente decidido. Está claro que tendremos que acabar con ella. Apunto a la parte superior del artefacto y disparo.