Partida Rol por web

Asiento

-Bueno, no pienso quedarme en esta ciudad, aquí sólo perdería el tiempo. Quizás allí haya algo interesante. ¿Y decis que vamos a ir en ferry? Pues sí, en ese caso tendremos que prepararnos para el viaje, comprar provisiones y eso Y chuches también

Con nuevos ánimos ante la idea de visitar una nueva ciudad, me relajo y decido pasar el resto del día aprendiendo cosas de los hermanos. La verdad, nunca he viajado en tren y...quizás sea una sensación mía, pero creo que no me voy a llevar muy bien con el barco...

Os dirigis al puerto de la ciudad que por suerte esta cerca de la costa, y comprais unos billetes para el ferry que iba hasta Barfonheim, pero no salia hoy, salia mañana. Despues vais a comprar las provisiones para los dias de viaje y "chuches" para ti tambien. Ya con todo comprado y listo vais a la posada, despues de dejar la caravana y a choky en el establo de la posada.

Vais a la Taberna de la posada a descansar un poco y tomar algo mientras esperais el ferry que saldria el dia siguiente, ya que hoy no salia ninguno. Ya habiais cogido una habitacion para los 3 (ya que era mas economica que no separadas) y los hermanos no tenian ningun reparo en compartir la habitacion contigo.

Bueno Mystra cuentanos algo de tu vida... - Dice mientras comienz a beber la jarra de cerveza que se habia pedido.

Ya que sienten curiosidad les contaré algo de mi pueblo, aunque me da algo de vergüenza, lo tengo que reconocer.

- Vale, pero luego me contáis también algo vosotros. Como podéis ver, soy una viera, y por lo tanto nací en Golmore, una selva tan frondosa que no se puede ver el sol, todo son sombras. En el poblado donde nací, las viera cuidamos con mucho mimo a las plantas y los árboles, son casi sagrados, se podría decir. Pero yo desde pequeña sentí un apego a la magia, y la primera que aprendí a utilizar es el fuego. Como las viera no somos muy dadas a la magia, estudié y practiqué a solas en un claro del bosque, pero una mañana se descontroló una bola de fuego, que empezó a quemar los árboles de mi alrededor. Las viera apagaron el fuego, pero desde entonces no podía practicar magia. Y yo quería enseñarme, mejorar, así que para no molestar a las viera, y no tener que vivir encerrada allí, tomé la decisión de marcharme de Golmore en cuanto pude, y viajar por todo el mundo visitando ciudades donde aprender magia. Y aquí me tenéis.

Entrecierro los ojos intentando recordar la experiencia que supuso el visitar por primera vez una ciudad humana.

- Recuerdo que me impresionó la acumulación de tanta gente, los humanos vais tan deprisa, parece que no podáis ir con tranquilidad. Bueno, pues entre tanta gente, vi un puesto de comida, o al menos eso pensé. Le compré algo al vendedor, y resultaron ser chucherías. Desde ese momento me he aficionado a comerlas, he de admitirlo. ¡Creo que es lo mejor que habéis descubierto los humanos! En fin, espero no haberos aburrido con mi historia. En realidad llevo desde que era una cría dando vueltas y aprendiendo magia. Ahora que se podría decir que ya soy adulta, aún sigo dando vueltas, pero con algo más de conocimientos.

Bueno supongo que por lo que has dicho antes querras saber algo mas de nosotros - Dice mirandote esperando tu aprovacion - Bueno como ya sabes somos hermanos y bueno... nuestros padres... murieron en un atraco... teniamos una tienda en Midgar y bueno, despues de aquello, nos fuimos de alli, demasiados malos recuerdos... y bueno desde entonces haciendonos valer por nosotros mismos... y bueno por ahora no ha ido bastante bien . Dice sonriendo a Eliza.

Asiento a Lukas, interesada por su historia.

- Que triste, las viera es que directamente solo somos mujeres, por lo que los lazos fraternales...son diferentes. ¿Y has aprendido a tocar tan bien, y Eliza a hacer esos trucos por vuestra propia cuenta? Es fascinante, os habrá tenido que costar mucho. - le digo, impresionada. Yo al menos tenía bibliotecas y documentos para saber por donde empezar

Bueno hay que hacer cosas para ganarse la vida... y bueno esta fue la que nos ayudo a salir adelante, y con practica todo se aprende - Dice bebiendo de nuevo - Aunque creo que nacimos para esto... no se es una sensacion de que lo que hacemos, es lo que nos tocaba, llamalo destino - Dice mirando a su hermana con ternura.

Asiento con la cabeza, totalmente de acuerdo con el bardo.

-Sí, entonces también fue el destino lo que me hizo abandonar a todas mis amigas y familiares, y recorrer el mundo aprendiendo cosas nuevas. A pesar de eso, creo que cada cual puede elegir su propio camino, nada está determinado.

Lukas se rie a carcajada limpia - Hombre no me referia a eso, claro que cada uno construiomos nuestro destino, mira, si nuestros caminos no se hubieran cruzado ahora todo el universo seria completamente distinto - Dice con soltura - A lo que me referia es que hay cosas que parece que esten ligadas... que ocurren porque tienen que pasar... No se si me entiendes...

- Sí, te entiendo. Cada persona tiene ciertas cosas que hacer, por ejemplo, tu hermana tenía un don para la magia, y tarde o temprano tenía que darse cuenta. Es como si estuviera destinada  a serlo, pero podría haber elegido no hacerlo.

Desde luego, noto una gran diferencia entre los dos hermanos. Con Lukas se puede hablar en un tono más..serio. Aunque para animarte seguro que elegía a Eliza

Ya bueno, creo que se esta haciendo tarde - Dice mirando por la ventana por donde veis como comienza a hacerse de noche - Quizas sea mejor ir a nuestras habitaciones y descansar, el ferry sale a primera hora de la mañana - Dice terminandose su jarra de cerveza.

-Sí, vamos a descansar, ¡que mañana nos espera el ferry! - digo ilusionada, aunque no sé si la experiencia en barco me va a gustar. Intento ser optimista, y pensar que no pasa nada.

Bueno, si el barco se hunde siempre podría volver a nado. Total, mis pertenencias las llevo atadas en la bolsa.

Me acabo la cerveza, y me despido de la camarera. Entro en el cuarto, y observo las camas.

- ¡Me pido esta! - es la que parece más grande, y está al lado de la ventana, me gusta que me dé el reflejo de la luna mientras duermo.

Ves como Eliza sale detras tuya intentando quitarte la cama pero te haces con ella la primera - Jooo - Dice mientras se va a la que esta en medio de la sala, dejando para Lukas la mas cercana a la puerta de entrada, que entra tranquilamente dejando la bolsa que llevaba encima de una mesita que teniais y quitandose las botas que comenzaban a hacerle daño - Bueno intentare despertarme al alba y que no nos perdamos el ferry, mensomal que tengo el sueño ligero y suelo despertarme temprano - Dice mientras se tumba tal cual encima de la cama sin deshacerla ni nada - Esto si es comodidad

-No te enfades, Eliza, la siguiente vez te dejo elegir a ti, aunque...si me dejas la de la ventana te lo agradezco. Además, así, si entra algún insecto a medianoche me picará a mí, no a tí. De acuerdo, entonces nos levantas tú.

Venga chicas a dormir - Os dice algo serio - Que sino mañana no habra quien os despierte... - Y veis como se empieza a meter en la cama para descansar. Eliza algo decepcionada tambien coje la cama con ganas y se mete, y se queda dormida en poco tiempo.

Me meto también en la cama, y observo la Luna. Esta noche se ve tan perfectamente...

Pronto caigo rendida...

Lukas os despierta a las 2 bastante temprano, y dejandoos con ganas de seguir disfrutando de aquel comodo colchon. Una vez dejais la posada, os vais hacia el puerto que quedaba a las afueras de la ciudad pero muy cerca y cogeis el ferry, que tardaria 4 dias en llegar a Barfonheim. Os acomodais en vuestro camarote, que solo tenia 1 cama grande de matrimonio y un pequeño sofa. Despues vais a la cubierta, muy amplia, donde desde la barandilla se podia ver a lo lejos ya la costa que estabais dejando atras con gente despidiendose de familiares que deberian estar en el ferry.

Bueno, al menos de momento el barco no parece ser malo, ya veremos cuando empiece a navegar...

Visitamos el camarote, y al ver que solo hay una cama, definitivamente voy a dormir en el sofá. Aunque...como a Eliza le dé grima dormir con su hermano me veo durmiendo en el suelo. En fin, no sería la primera vez que lo hago. Salimos afuera, y mi pequeña nariz puede oler con toda intensidad el olor del agua salada. Es un olor muy extraño y curioso...

Antes de poder percatarme, el barco empieza a moverse, y me agarro a la barandilla muy fuerte con las manos, tanto que los nudillos se ponen blancos. Al cabo de un momento vuelvo a respirar, más tranquila

-No parece que sea tan malo como me imaginaba...se puede estar tranquilamente - susurro, al tiempo que suspiro para quitarme el susto de encima.

Las horas pasaban y la brisa marina te acaricia la cara cuando se te acerca Eliza - ¿Te habías montado en ferry antes? ¿A que e muy bonito? - Te dice señalando el horizonte, con el continente como relieve, tan pequeño que se veía ahora, y tan inmenso que era hace un par de horas.

-Pues no, nunca había navegado antes, esta es la primera vez que lo hago. Espero no marearme ni nada parecido, he oído que a mucha gente le pasa. Aunque de momento no siento nada raro, supongo que no parece que me vaya a marear, eso es buena señal, ¿no? Sí es bonito, el olor del agua salada es muy extraño para mí, no lo había olido nunca, no está mal.

Me giro hacia Eliza, ahora interesada por saber los conocimientos que tiene sobre el tema

-Y tú, habías montado antes, ¿no? ¿Es muy común el utilizar ferrys para viajar?