Partida Rol por web

Recuperándose rápidamente de la caída, cogió la cuerda de su mochila y le dijo a sus compañeros: ¡Ahí va! Agarradla, rápido. Esto les habrá hecho dar la alarma... y se la tiró a sus compañeros.

 -Emmmm...- Miro la cuerda con una risa un poco tonta. -Casi mejor ni lo intento yo, Kium tira tú de ella, yo no quiero terminar abajo.- 

Elizabeth sentada en la yerba se los kedaba mirando mientras ayudaban a uno de los que formaban el grupo, supongo que tarde o temprano lo iban a sacar de alli.

Me preocupaba más el echo de que si aquellas criaturas se habían enterado del ruido e iban a salir de su hogar, miraba cualquier mpovimiento de alarma.

Kium aferró la cuerda y comenzó a tirar de ella como alma que se la lleva el diablo. Debía ser rápido, porque en caso de que aquellas astutas alimañas salieran de la guarida, la ayuda del elfo podía ser crucial para el devenir de los hechos. 

Observando aquella Ecena junto a la dama, me dispongo a jalar de la cuerda apoyando a ese guerrero -No Deveriamos todos Halar de la cuerda?-

Kium casi saca al elfo y entre este y Dol culminan los esfuerzos. El poco profundo pozo es una obra ingeniosa sin duda, pero no demasiado peligrosa.

Por ahora, parece que no han alertado a nadie de la casa.

Avanzo lentamente hacia la galeria (pisando doble para revisar la estabilidad del suelo) digo en vos muy baja - Avancemos de una vez que nunca se sabe, si alguien ya nos esta siguiendo-  observo a todos con una exprecion de Nerviosismo pintada en mi cara

Hago caso a lo que dice el hombre, estar parados ya es cuestión de estupidos, asi que le sigo mirando a mi alrededor no me gustaría ser una presa fácil, en mis manos no llevo arma alguna, asi que prefiero no ser atacada.

-Estad atentos- dijo tan solo en un murmurró casi silencioso, quizás era porque aquella frase iba mas diregida a mi que a ellos.

Finalmente logran llegar a la galeria cubierta, aparentemente sin ser detectados. Hay alli un par de viejos bancos. El suelo es de negras piedras encajadas.

Alli esta una pequeña puerta lateral da acceso a la casa principal.

El elfo envainó de nuevo la espada y cogío su arco, su arma preferida, para estar preparado ante cualquier peligro. No obstante siguió avanzando lentamente mirando con atención cualquier cosa que pudiera parecer una trampa aunque esa no era de sus mejores aptitudes...

Me quedó observando lo que hacen los demás, mientras sigilisoamente desenvaino mi preciosa espada a la que tanto tiempoha yacio durmindo en mi torso.

-Pequeña, hacia tiempo que no veia tu hoja ensagrentada- murmurré y seguidamente esboze una sonris.

No hallas nada. La galeria parece estar vieja pero bien.

Solo queda abrir la puerta...

Parece que no hay más trampas y, por ahora, no vienen a por nosotros. Abramos la puerta... le dijo a sus compañeros una vez fuera.

El foso donde caiste?? :P

nada, era de 5' de lado, una casilla nomas. Se puede saltar sin esfuerzo o rodear tranquilamente.. Pura mala leche no?

Al descubrir que el suelo de alrededor del foso parecía firme, se acercó hasta la puerta e intentó escuchar algo a través de ella. Y tras ello buscó alguna trampa más.

No parece haber trampas, pero escuchas chillidos y gruñidos dentro, como vocecitas agudas hablando, aunque no comprendes el idioma. Tambien hay sonidos de metal y maderos.

Kium, siguió los pasos del elfo a una distancia prudencial. Mantuvo a punto su arco, por si algún enemigo acechaba entre los recobecos de la galería cubierta. 

Notó como la tensión iba aumentando en sus curtidos y fibrados músculos, pero su mente, intentaba refrenar sus impulsos, pues l secreto de los grandes guerreros de su tierra, residía en la templanza de la mente.