Partida Rol por web

Susana se quedó quieta en el recibir con las piernas juntas y una mano agarrando el asa de su mochila, oteando la casa por encima para fijarse en cada detalle, ya fuera de la colocación, decoración o colores que tenían.

- Es bonita.- Demasiado grande para su gusto, prefiriendo la intimidad de una casa cómoda y habitable para ella y su futuro marido, pero le gustaba. Caminó hacia el salón detrás de todos al contemplar cada esquina, aunque al pasar al lado de Pablo no pudo evitar echarle un leve vistazo, una mirada fija que se clavaba directo a los ojos. No sonrió, no dijo nada, sólo le observó unos segundos antes de entrar en el amplio salón, como si omitiera su fugaz encuentro.

Se acercó a la mesa para retirar una de las sillas y dejar su mochila en ella, quitándose ese peso de la maleta para seguir viendo la casa a gusto.

Con las manos unidas a la espalda siguió a sus amigos a la cocina, abriendo un armario cualquiera para buscar dónde se escondían los vasos limpios. Cogió uno y lo llenó de agua, bebiéndola lentamente mientras Mario terminaba de explicar el tema del alcohol, algo que el resto rápidamente criticó y sacó una leve sonrisa. Después de terminar de beber, abrió el grifo para enjuagar de forma rápida el vaso y dejarlo sobre un trapo en la encima boca abajo, una rápida limpieza.

- Por la noche podríamos hacer algo más divertido.- Rompió su silencio mientras apoyaba la espalda en la encimera y se cruzaba de brazos.- Y no me refiero a emborracharnos como críos.- No terminó su frase, dejándola al vuelo para que, quien quisiera, cogiera la idea, dejando un punto de misterio en su intervención.- Primero terminemos de ver la casa. Me gustaría ver dónde voy a dormir.

Según avanzabamos para dentro de la casa, seguí con la mirada lo grande e inmensa que era, hasta que acabé sin darme cuenta fijandome en que Susana me miraba. No sé como una cosa me llevó a la otra, pero al final cual caballero, hice un gesto para dejarla pasar primero a dentro.

Con la maleta arrastras y dejandola donde todos me dirigí entonces a la cocina a ver el panorama - Bueno, opino como Julia, igual no nos llega con solo eso. Ya sabemos nuestros limites - dije sin mirar especificamente a nadie, aunque mirara a Ricardo en ese momento - De todas formas... podemos ir mañana si eso. - Propuse como idea hasta que justo después habló Susana por detrás.

Tenía razón y yo especialmente no quería emborracharme para evitar el hacer tonterías innecesarias, pero había dejado como la frase sin acabar así que por eso me aproveché para terminarla - Bueno... Yo... me he traido algún juego de mesa... y las cartas por si os apetecía algún jueguecillo - dije rascandome la nuca - Pero tiene razón Susana, repartamonos las habitaciones.

La casa comenzó un poco a desepcionarme, no era lo que me habían prometido, y eso me hacía sentir un estúpido de primera, no quería desepcionar a los demás. 

-Bueno, es cómo Susana dice... Veamos las habitaciones-

Esto va de mal en peor, me sentía horrible, una habitación matrimonial, y dos habitaciones con una sola cama. 

La presión de mi arteria en la sien estaba aumentado, se me notaba moy molesto, y el cuarto de trastos, lleno de elementos viejos. No podía manifestar mi rabia ante ellos, tenía todo pero no es lo que había querido.

Esbozando una sonrisa forzada, me dispuse a salir a fuera. 

-Mis disculpas gente, pero tengo que llamar a alguien-

Traté de disimular el marcado enojo que sentía, jamás me había sentido así, creo que hasta el mismo Ricardo se asustar a de mi. 

Cogí mi móvil y salí de la casa. 

Mira a Susana y le dice - Eso es verdad pero sabes que a algunos les hace falta eso para soltarse un poco y divertirse. Por otro lado yo voto porque Listillo duerma en el sofá cama, fue su error al fin y al cabo. Si no se hubiera jactado que esta casa era la mejor casa del continente podríamos haber traído bolsas de dormir o algo parecido.

       - Creo que ante todo Mario tiene la última palabra, sin embargo creo que Susana y yo podríamos compartir la cama matrimonial, y ustedes chicos repartir se las camas individuales y el sofa cama, pero si no estan de acuerdo creo poder adaptarme de otra manera.   ¿Que opinan al respecto? -     Julia propuso al resto de amigos mientras que miraba de nuevo todo el lugar para tratar de pensar una nueva idea

Al ver a Mario así de enojado no pude evitar mostrar una cara de preocupación por él. Había puesto todo su empeño en esta salida y ahora estaba así, seguramente por lo mismo de siempre, por los demás. Me crucé de brazos pensando un momento cuando este salió del lugar. - Está claro que es un marrón lo de las habitaciones, pero tampoco es para tanto, solo es un fin de semana. Podemos pasarnoslo bien todos juntos y sin montar ningún jaleo por culpa de errores tan simples... Lo malo sería Ric, espero que entre Julia y yo podamos frenarle un poco - Mientras pensaba y ya casi como un tic personal, estaba de nuevo jugueteando con el colgante.

-Ey Ric, vamos, eso no es justo. Nos ha traido hasta aquí y ha hecho todo por nosotros, se ha torcido un par de cosas sí, pero podemos solucionarlo sin problemas - dije después de que hablaran tanto Ric como Julia, entonces miré a esta última - Por mi parte no hay problema en tu plan Julia, si Susana está de acuerdo claro - Vamos hombre... - Y yo dormiré en el sofa cama, no me importa. Así no hay problema por quien se queda las camas individuales o el sofa. ¿Os parece bien a todos? - De ser así, solo faltaba la confirmación de Mario.

- Claro, podemos compartir habitación.- Sonrió mirando a su amiga con una leve sonrisa.- Puede ser nuestra noches de chicas.- Caminó hacia el sofá más cercano y se sentó, viendo una tontería seguir con la conversación de pie.- Podéis echarlos a cara o cruz si no queréis dormir en el sofá cama, o ir rotando.

Ya me encontraba fuera, aún que podía escuchar lo que los otros decian, pero pasé de todos ellos, a había cruzado el umbral de la puerta, cogí el móvil, busqué el número de mi papá en la lista de contactos, tengo buena señal, así que no me preocupé por que se corte en mitad de la charla.

El sonido de espera siempre me ponía incómodo, pero guardé silencio, conservando mi calma,hasta que escuche el sonido de respuesta. 

Llamada

-Hola papá, se que no es un buen momento, pero podría preguntarte, ¿tu viniste a ver la casa cómo habíamos acordado? Por que esto no es lo que vimos cuando lo buscamos en esa web de alquileres-

Me alejé un poco para evitar que me escuchen. 

Tu padre respondió la llamada, como era de esperar.

Te comentó de manera muy apresurada que él no ha visto la casa, ya que la alquilaban unos amigos de un compañero suyo de trabajo con lo cual confío en ellos.

Parecía algo molesto por tu llamada, parecía que no entendía tu malestar (comprensible desde luego) y que debías afrontar la situación tal y como venía porque "la vida es así".

La relación con tu padre siempre ha sido buena, o bueno, neutral porque no es que sea el padre más cariñoso del mundo pero desea que te conviertas en un hombre de provecho.

En poco tiempo la llamada finalizó con un "no puedo hacer nada, disfrutad que sois jóvenes y podéis"

¿Quién lo diría?, Pablo defendiendo a Listillo. Al tiempo que piensa esto Ric se encara con pablo y le suelta.

-Esto no tiene que ver con si fue un error pequeño o grande Pablo, esto tiene que ver con que estuvo alardeando de que esta era la mejor casa del universo, de no haber dicho nada habría traído un colchón inflable como hice con las botellas. Tras esto amplia la mirada hacia los demás y agrega -Mi punto es que si no sabes como es el lugar, no alardees.

Luego se queda pensando un rato y de modo más diplomático dice - Aún con todo, si de verdad te molesta que Listillo ocupe el sofá cama, podemos turnarnos... -Esto puede llegar a tener su lado bueno jeje.

Y sin más se dirige al baño.

Sus palabras solo me frustrar on más que nunca, maldigo mi suerte por tenerle cómo padre, no solo no me brindó una respuesta, si no que no le importa nuestra situación.

Ahora se qué contigo no puedo contar, más allá del dinero, hubiera preferido tu presencia... No te preocupes, seré un adulto de provecho, pero lejos de ti, te lo aseguro. 

Pensé eso después de cortar la comunicación con papá, valla perdida de tiempo que resultó ser, al final entre de vuelta a la casa con aires de resignación y mal estar. 

-Bueno, en vistas de que esto va a ser así, que las chicas duerman en la habitación matrimonial, yo dormiré aquí en el living, y vosotros 2 elijan la habitación que quieran, se los debo-

Sonreí con amargura ante esta penosa situación.