Partida Rol por web

Entrais en la posada. Os acercais a recepción, y una mujer sale a recibiros.

¡Hola cansados viajeros! Sean bienvenidos. ¿Desean pasar el dia aqui?-os decia amablemente.

Armstrong le saluda con buena cara

Sí porfavor, partiremos mañana.

¡Muy bien! Son... seis, ¿no?-al ver a la teniente en brazos de Alphonse, su cara cambió por completo.

¡Por la Diosa! ¿Que le ha ocurrido? ¡Tiene muy mal aspecto!-decia mirandola.

Bueno... esto...-decia sin saber que decir.

- Venimos de lejos y estamos cansados, nos gustaría comer algo y descansar esta noche. Creo que las preguntas podrán ser contestadas después. -, le digo a la posadera mientras miro a Al para que siga de largo sin detenerse y ponga cómodo al teniente.

Lo entiendo.-decia la posadera sentandose en el sillón.

Os dirigís a vuestra habitación y os acomodais en ella.

Alphonse deja a la teniente sobre una de las camas.

Uff... cuanto tarda en despertar...-decia mirnadola. Estaba pálida y blanca como la nieve.

Roy entro de largo siempre al lado de Al, una vez deposita a Riza en un sitio comodo, Roy empieza a buscar un paño para despues mojarlo un poco en agua y pasarselo por la frente

Riza...maldita sea...prometiste protegerme y asi como estas no vas a poder hacerlo...

Roy le pasaba el paño humedo por su frente colocandole el pelo cariñosamente para que no tapara sus ojos ahora cerrados

-Buscar a la tabernera y que venga aqui, tenemos que cambiarla de ropa, ponerla algo mas comoda que la ropa que lleva, seria bueno tambien darle un baño, quiza con el agua caliente su cuerpo empiece a reaccionar...comentar a la tabernera que se le dara un buen pago por los servicios dados...nosotros no podemos hacer eso

Enseguida! Armstrong se va a buscar a la tabernera

-Hola, muy buenas, verá, tenemos a una amiga nuestra en mal estado...sería perfecto que le cambiaseis la ropa y le dierais un baño para que reaccionara.

No se preocupe, le recompesaremos si hace tal tarea.

Armstrong espera la contestación de la tabernera mirandola a los ojos.

Ehm... ¡Si, enseguida!-decia yendo hacia la habitación.

¿Que le ocurre?

-Cayo desmayada y sigue sin reaccionar, no sabemos que la pasa, la cara de Roy iba empeorando por momentos, segun pasaba el tiempo y Riza seguia sin reaccionar Roy seguia acumulando culpabilidad por todo aquello, si estuviera alli Corniche, ella era experta en curacion...quiza pudiera ahcer algo pero ahora se ha escapado y encima se ha convertido en algo muy extraño...madlita sea

Entro con mis compañeros, meditabundo, y no participo apensa en las conversaciones, al llegar a la habitacion me quedo al lado de Riza observandola con tristeza, estoy en una lucha de la cual no tengo mucho interes, aun asi el ver a mis amigos heridos me hace replantearme la razon por la que estoy aqui.

Ed... ¿Vas a seguir buscando la piedra filosofal?... Digo observandolo, a sabiendas de que mi deseo de obtenerla se ha visto mermado desde que estoy viviendo aventuras a su lado.

- Pero, pero, pero... -, le digo al Principe un poco descolocado. - No es el momento para pensar en eso, Ling... vamos a ver si podemos curar a la herida, después si lo deseas, charlamos de los planes. -

Me acerco a la herida lentamente, esperando ver una mejoría pronto.

Sonrio con melancolia mientras observo por un segundo a Al, y, volviendo mis ojos a Ed replico, Teniendo en cuenta que acabo de ver con que fragilidad se ha destruido el sello de aquellos hermanos empieza a parecerme prioritaria la seguridad de tu hermano, un suspiro brota y voy a sentarme junto al marco de la puerta.

Aun cuando estemos luchando contra toda clase de criaturas no considero prudente abandonar una manera de volvernos mas poderosos... o mas estables. Digo mientras observo hacia afuera.

Ling, junto a mi nunca estais seguros.-le decia preocupado-La posesión de la armadura es inestable. En cualquier momento, yo podria estallar, y aún así mi hermano sigue juntandose a mi, sin preocuparse de lo que pueda pasar...-decia algo cabizbajo, deseando no ser tan peligroso como es.

Me acerco a mi hermano y lo golpeteo un par de veces con mi dedo índice en la armadura.

- ¿Qué dices hermanito? Yo nunca me separaré de ti, no te preocupes por eso. -

Todos seguiremos a tu lado, repongo con seriedad mientras lo observo a los ojos, no me malinterpretes, no es estar a tu lado lo que me preocupa, es tu propia seguridad, no quiero que te pase nada, ni a ti ni a ninguno de los que esta aqui, me acerco y coloco mi brazo en su hombro, Asi que si encontraramos la manera de cambiar tu estado podriamos luchar un poco mas tranquilos, ¿No lo crees asi?

Le sonrio antes de ir hacia la ventana, Por cierto, ¿Tienen idea de que pudo haberle pasado a Corniche?... ¿Por que actuo asi?

Bueno, al haber estad con los homunculos... puede ser cualquier cosa...-decia pensativo.