Partida Rol por web

-¿Eso deja al resto conmigo no es verdad viejo amigo?- Dice una estridente voz tras de vosotros.

El hombre que estaba bailando con Pandora se acerca mientras la mujer se toma un vaso de agua. Os sonrie con unos enormes dientes blancos.

-Encantados todos de conocerme me figuro, soy Jano y me encargaré de distraeros y entreteneros mientras mi socio y amigo Johan habla con vuestros ehhhh representantes.

-Pues vamonos. 

El titan aparta un enorme tapiz y deja ver la piedra desnuda que atraviesa sin más. Vosotros dos le seguís no muy convencidos y dais a parar a un laaaaaaargo pasillo de iedra desnuda iluminado por fluorescentes. A lo lejos se oyen golpes y el crepitar del fuego. Prometeo os señala el final que está iluminado por un inmenso haz de luz de una hoguera suponeis.

-Me figuro que no necesitais indicaciones ¿no pareja?- Se gira hacia Jaqueline-. Felicidades por cierto- dice tras señalar su estómago con una enigmática sonrisa.

Me quedo mirando al tipo.

-Tienes mal color, ¿te pasa algo?

-¿Yo? !Que va! Tu si que tienes mal color chico... todo palido y sonrosado... un poco de fucsia te sentaría bien.-Dice con una gran sonrisa.- ¿Lo probamos?¿Quieres verte fucsia?

-Bueno chicos, sabed que gracias a vuestro amiguito estaremos una temporada viajando juntitos. ¿No es maravilloso?-Da un par de palmaditas ilusionado

Jackie aprieta los puños. Jackie, se supone que es una alegría... aunque sea una especie de parásito.

-Gracias.-consigue decir después de respirar hondo.

Mira a Eneas y le dedica una media sonrisa y asiente, con decisión.

-Vamos.

Comienza a andar con paso firme y decidido hacia donde les ha indicado el titán. Todo esto le parecía extremadamente raro.

Sigo a Jackie sin saber muy bien que era lo que pasaba ¿Qué hacía Johan ahí? Mientras camino miro a Jackie y me pregunto si hicimos bien tomando esa decisión, su reacción no me había pasado desapercibida y la verdad es que... ¿de verdad sería feliz así?

Te has lucido Eneas... eres gilipollas.

Al llegar al final del pasillo se os cae la mandibula. Hay una inmensa sala de proporciones monstrousas llena de mesas con planos, bocetos piezas y herramientas de todo tipo, clase y utilidades. Veis mecedoras de abuelo con ametralladoras, columpios de acero con asientos eyectables, un gran surtidor de una fuente que echa mercurio... y debajo del chasis de un mascheratti rojo veis dos piernas que salen de un pantalon pirata corto. En una se aprecia una enorme cicatriz con forma de media luna. Oís un ruido.

- en tu puta madre y en todos los idiomas... ¡maldito eje de transmisión suelta ya esa pieza! ¡Carajo!

Alcander no sabía con quién estaba más enfadado en ese momento, con Prometeo y su actitud, con Jackie y Eneas por irse a por Johan impidiendo que fuera él, o consigo mismo por callarse lo de Damian a pesar hacerlo por la presencia de Holden, aunque empezaba a pensar que tal vez eso solo fuera una excusa hacia sí mismo.
En cualquier caso estaba de un humor de perros

- Callate, no soporto todas estas tonterías

acto seguido comienza a andar de un lado para otro esperando con impaciencia la vuelta de Eneas y Jackie.

Tras recomponerse ante esa imagen, sacude la cabeza un par de veces y se acerca al par de piernas.

-¿Johan?-pregunta mientras se pone de cuclillas.-¿Qué haces aquí?

Se queda ahí, esperando a que salga.

Se oye un fortísimo golpe seguido de mas tacos, y luego de debajo del coche emerge Johan con un inmenso chichón en medio de la frente y una camiseta gris bien manchada de aceite.

-¿Como que que hago yo aqui? Mas bien que haceis vosotros aqui. ¿No deberíais estar camino a un rancho pareja?- El semidios se levanta con un quejido, cojea hasta una mesa y deja la pieza de aspecto muy extraño sobre un diagrama. Johan la mira con el entrecejo fruncido y luego asiente.- Una menos.

-En fín supongo que el idiota del portero no os lo dijo ¿no?

-¿Echas de menos a tu hermanito Alcander? Muy tierno, pero gracias a él vuestra mision aun puede cumplirse, lo que me recuerda...-El extraño dios saca un cubo de color plateado con una nota pegada con celo- Que mi socio me dio esto para tí. Ten mucho cuidado es algo realmente espeluznante.

El dios rie divertido.

Prácticamente le arranco de las manos el cubo plateado y apartándome de ese tipo leo la nota.

-¡Ala! - Exclamo entusiasmado -¡Un cubo! ¿Que hay dentro? ¿Regalos?

- Creo que no Holden - digo arrugando la nota y guardandomela en el bolsillo - Es un pedazo del primer fuego del mundo

esto lo digo más para Lukas que para Holden, no creo que le interesara un fuego a menos que fuera de color verde, o tuviera frío.

En que demonios estará pensando el barbas

Muestro un gesto confundido y pestañeo.
-¿Te refieres al fuego que fue robado a los dioses por Prometeo para entegarselo a la humanidad? ¿El fuego de ls fragua de Hefesto y del carro de Helios? ¿El motivl por el que Prometeo fue condenado a que un águila le comiese diariamente? ¿El fuego que poblaba la barba del hombre de ayer?

Aturdido* todavía por el hecho de que Damian haya muerto, miro a Alcander y a la nota y el cubo que tiene.

-El fuego de Hefesto... - susurro, miro al hijo de éste y pregunto - ¿sabes por qué tu padre te daría algo así?

Miro sorprendido al hombre de cara verde, pero después de ver a Alcander en su aspecto lechuguil me puedo esperar de todo.

E de reconocer que ayer se me fué la mano, pero al ver como la mayoría se arrancaba se me fué el santo al cielo. Te pido perdón Lukas.

tu tranquilo ya les tendré controlados, que voy a sacar el látigo.