Partida Rol por web

El día ha llegado. Siguiendo las indicaciones del grupo, te has puesto en contacto con Nielssen y este ha solicitado tu presencia en la central. Dos soldados alemanes han ido a buscarte a Rjukan y te han escoltado hasta allí. Has podido apreciar la fuerte seguridad que rodea todo. El puente, único punto de entrada por carretera, tiene unn puesto de guardia a su entrada y otro del lado de la central. Este, además, tiene una ametralladora de posición, por lo que cualquiera que lo atraviese sin permiso se vería bajo una lluvia directa e inevitable de balas.

Ya en el recinto ha de atravesarse otro control en la valla de acceso sur y por fin dirigirse a los edificios. Está anocheciendo cuando llegas allí. Te conducen de inmediato al edificio G, la fábrica de agua pesada. En la recepción de la misma hay otro soldado de guardia que denuevo hace un control. Este es quien te acompaña arriba, a la planta 5. Allí, te lleva hasta el despacho del Jefe de Sección y llama a la puerta.

-Adelante.- suena al otro lado.

Pasáis a la sala y allí se encuentra Nielssen, sentado tras del escritorio revisando papeles. Con aire inocente te saluda y simula moverse con dificultad por las quemaduras. Despide al soldado, quien avisa de que cuando Hilda esté lista la puede acompañar a otro despacho donde han instalado una cama para que pase la noche por si Nielssen la necesita luego.

Una vez solos, el tono y rostro del ingeniero jefe se vuelven oscuros. -Tenemos un problema. Esta tarde he descubierto algo inesperado que me temo puede complicar la acción, si bien no paralizarla. Desde la llegada a Vemork del nuevo oficial nazi, de la SS, los alemanes empezaron a hacer remodelaciones en los sótanos del edificio. No, no en los que aparecen en el mapa. Debajo de estos hay otro nivel que está sin mapear porque es poco más que un hueco en los cimientos donde pensaba hacerse en el futuro un garaje. Yo supuse que eso es lo que los alemanes estaban haciendo allí, un garaje para sus vehículos. Sin embargo, hoy han llegado nuevos operarios bajo las órdenes del Coronel Sievers y se han puesto a instalar en la sala de almacenamiento del agua pesada nuevas tuberías que han empezado a desviar un porcentaje de la producción de esta a los subterráneos. Mucho me temo que han montado allí un segundo almacén de agua pesada en previsión de un sabotaje. De hecho, los cimientos son tan seguros que incluso derrumbando el edificio el agua pesada de ahí abajo quedaría a salvo y lista para sus fines militares. Va a ser necesario colocar dos cargas explosivas: una arriba y otra abajo y darles el mismo tiempo de explosión. Creo que puedo ayudar a sus compañeros a repartir la dinamita que tengan para provocar el mayor daño.-

Nerviosa y preocupada por la extrema seguridad nazi en la central, llego por fin al despacho de Nielssen. Lo que me cuenta es terrible, habria que alarmar a mi padres y demas compañeros de la operación...

- Pero... madre de dios, esto que me cuenta es grave! digo alarmada pero sin levantar demasiado la voz... debemos comunicarnos con el operativo, con mi padre cuantos antes, pues el plan esta trazado y no tardaran demasiado en actuar. Señor, como sugiere que lo hagamos? Hay alguna forma de poner contactar con el exterior si alertar a los alemanes?

... pregunto nerviosa, sin dejar de andar por la sala. Mi cara de agobio era evidente, pero debia sobreponerme a la "mala nueva", ser frio y rehacer el plan como fuera...

- Dudo que tenga telefono, no? Tampoco telefrafo... Quizas... si quizas pudieramos hacer algun tipo de señal a través de la ventana... seria demasiado evidente... No... no es la solucion... pero como? Como es logico yo sola no pudo deambular por la central sin mas... Creo que debe acompañarme, a la sala de almacenamiento... como ingeniero jefe podra, no? O que sugiere?

... miles de idea abordan mi cabeza de forma atropellada, pero ninguna con el sufuciente sentido común para rehacer un plan consistente...

-Tiene razón, Hilda, no es posible comunicar ya. Además, el plan no cambiaría mucho. Nuestra mejor opción es ayudarles a bajar al segundo sótano. Para eso conviene, sí, que estemos en el primer almacén. El acceso al segundo almacén en los cimientos, está vigilado desde ayer. Pero hay una forma. Existe un falso techo entre el sótano y los cimientos para reparaciones de electricidad y tuberías en general. A través suyo pueden bajar al almacén secundario, sea lo que sea que hay allí. Sólo necesitamos una excusa para que me acompañes. Y mejor que sea una excusa médica...-

Escucho con detenimiento al ingeniero, cuando acaba...

-  De acuerdo, creo que lo que podemos hacer es... me acerco a él y le susurro mi idea... bajar ambos a inspeccionar el almacen por alguna cuestion tecnica que requiera su presencia, y yo como acompañante para cuidar de usted por si vuelve a tener una recaida... que tenemos que hacer? llamar a los guardias? para poder bajar me refiero... Cree usted que me dejaran ir con usted?

-Sí, no debería haber ningún problema. En principio, no tengo necesidad de llamar a los guardias, pero lo haremos igual, por si acaso. Vamos.-

Dicho y hecho, Nielssen descuelga el teléfono y se pone en contacto con el operador interno, quien le pasa con el soldado de guardia a la entrada del edificio. Tras algunas palabras en alemán de las que entresacas que está avisando de que va a bajar y algo sobre una enfermera, cuelga y te sonríe. -Creo que todo va bien. Bajemos.-

E inicia el paso hacia el pasillo y de ahí a las escaleras. -¿Sabes si tus compañeros llegarán por el este o por el oeste? Sería mejor que lo hiciesen por el este, la entrada vigilada al garaje está en el ala oeste del edificio y ahí, como te he comentado, hay más guardia...-

El tono de la pregunta me desconcierta ligeramente...

Veo enemigos donde no los hay, me digo a mi misma, ¿querrá sacarme información? ¿habra vendido su alma a la SS? No... imposible, es un viejo enfermo, no tiene nada que perder, y sí mucho que ganar su pais... No tiene sentido que me cuenta lo del almacen secundario....

Decido contarle el plan establecido, el punto de acceso, la posicion de francotiradores donde se ubicaria mi padre, el apoyo de los amigos ingleses...

- Entonces... que debemos hacer teniendo en cuenta el plan? Le esperamos sin mas en el almacen? No deberiamos persuadir a la guardia que haya en esa sala? No se, señor, algo falla en todo esto... le digo en voz baja mientras bajamos las escaleras hacia las plantas inferiores y de ahi al almacen...

-Primero veamos siquiera si hay guardia allí...-

El científico y tú bajáis por las escaleras hasta la sala de la caldera, uno de los posibles puntos de entrada del equipo. Desde allí pasáis al cuarto de los fusibles y este da paso al cuarto de almacenaje del agua pesada. Una sala cuadrada con dos hileras de tubos o cisternas alargadas de metal con una mirilla redonda para observar el ritmo de caída gota a gota de la producción de agua pesada.

Allí os encontráis a un único técnico que parece estar anotando precisamente las cifras de precipitado en un cuaderno. Nielssen se le acerca.

-Olaffsen, déjelo por hoy. Vaya a descansar. Las molestias no me dejan dormir y es una tontería que ninguno descanse. No, no se preocupe. La señorita Olsen se queda conmigo y si necesito ser relevado le llamarán.-

Al técnico parce extrañarle el trato, pero obedece sin rechistar y con alegría. -Informe al soldado de guardia del cambio al salir- termina diciéndole Nielssen.

Allí os quedáis los dos solos. Las otras salidas de esta sala son hacia abajo por unas escaleras, la que da a la sala de combustible de las calderas y las puertas dobles que dan a la sala de almacén donde precisamente te ha dicho Nielssen que está el acceso al proyecto secreto. Precisamente unas cadenas con candado cruzan los pomos de estas y un cartel anuncia:

"Götterdämmerung-Projekt. Nicht hereingehen."

Cuando nos quedamos solos en la sala, y en voz baja, le pregunto al ingeniero... 

- Creo que algo sospecha el tecnico... debemos tener cuidado... tras una breve pausa... Bien, creo que tan solo tenemos que esperar a que venga, no? Pero podriamos ir abriendo esas puertas.... Hay alguna forma de acceder a ese almacen que no sea forzando esas cadenas? hariamos demasiado ruido, y no veo nada con que ayudarnos... o no tendra usted las llaves....

En ese momento recuerda lo que precisamente le habia comentado el ingeniero apenas unos instantes antes...

-  Donde se encuentra ese falso techo? Debemos facilitar el camino a nuestros compatriotas y amigos ingles, para que en cuento vengan puedan acceder rapidamente al almacen secundario...

-Habría que abrir sólo la de la sala del combustible, que es otra posible entrada. En cuanto al acceso al falso techo, es allí.-

Te señala un espacio bajo varios de los depósitos de precipitado de agua pesada. En efecto, ves la trampilla, bastante amplia para dar paso a una persona a la vez.

-Como ves,es un problema. Habría que poner las cargas aquí, luego bajar a ponerlas en la otra planta, volver y hacerlas estallar. Y todo esto porque no sabemos si hay salida allí abajo y porque si hacemos estallar esto primero, luego no se podría salir por esa misma trampilla. Eso también significa que mientras bajan a poner las otras cargas, alguien se tendrá que quedar aquí arriba vigilando. Yo mismo podría hacerlo. Así, si llegasen soldados podría entretenerlos o incluso simular haber sido amenazado por la resistencia. O incluso, en el peor de los casos, huir hacia abajo o incluso hacer volar esto conmigo dentro si hace falta. Etoy dispuesto a todo. Sé lo que podrían hacer los nazis con el agua pesada.-

Intentando mantener la compostura le digo...

- No se agobie de momento, de eso ya tendremos tiempo. No permitiré que le pase nada, digo segura, firme, por una vez en mi vida, decidida, tomando el control de la situación... Debemos ir abriendo las puertas que acceden a la sala de combustible, es muy probable que entre por ahi, y si les espera una cara bonita, digo sonriendo, será mucho mejor que un recibimiento nazi, no opina igual? jejeje, sonrie de nuevo para eliminar presion, y poder contagiar en la medida de lo posible a Nielssen.

Me acerco a la puerta que accede a la sala de combustible, pero si quitar ojo a la trampilla, pensando en las palabras del ingeniero y en como lograriamos hacer volar ambos pisos. Todo tenia que salir bien, no se nos podia olvidar nada, para que la misión fuera exitosa....

- Vendrán varios compañeros, por lo que mientras unos acceden al almacen secreto y ponen la cargas, otros las iran poniendo aqui. De cualquier forma, si algo sale mal y comienzan a llegar guardias, siempre podemos montar algun numerito con sus dolencias... Se fiaran de mis encantos... le guiño el ojo, sin dejar de sonreir...

Intento abrir la puerta de la sala de combustible...

La puerta da acceso a una sala rectangular cruzada de tuberías que van a lo largo de la pared y hacia arriba y hacia abajo. También hay en la pared norte un enorme depósito de combustible que dará servicio a la caldera para caldear el agua de la calefacción. La temperatura en esta sala es un poco más tibia, pero el olor es también más desagradable.

Una suave pero desagradable ola de calor choca con mi rostro al abrir la puerta. Un olor fuerta a combustible gobierna esa sala en la cual hay un inmenso deposito. No accedo a la estancia, me doy la vuelta y me acerco de nuevo al ingeniero...

- Si lograramos derramar todo el combustible e hicieramos que llegara hasta aqui, la explosión sería aun mayor... podria ser una manera de asegurar aun mas la efectividad de la mision... le comento en voz baja a Nielssen...

Sin dejar de mirar a todos los lados, me a los depositos de precipitados, bajos los cuales se ubica la trampilla. Me agacho, y observo alrededor. Me cuelo por debajo para intentar abrir la trampilla intentando hacer el minimo ruido posible...

Nielssen abre mucho los ojos al escuchar tu propuesta. -Pero entonces, habría riesgo de derrumbe y aquí hay inocentes trabajando, incluso a estas horas. Nuestro objetivo son los depósitos de agua pesada y si hay que derramar sangre inocente por destruirlos... bueno querría estar seguro de que es del todo necesario.-

Mientras él vigila, abres la trampilla que da al falso techo y allí ves, en efecto, un corredor de hormigón, un túnel por el que, una vez descendieses al interior, tendrías que avanzar agachada y si fueses con alguien más, en fila de a uno. Asomándote y haciéndote servir de la poca luz que entra, observas que el corredor avanza un poco para luego dividirse en dos ramales, a izquierda y derecha.

Saco la cabeza del agujero y le digo a Nielsse...

- Parece que no es tan facil... hay una bifurcación de caminos... entraré e investigaré para que cuando vengan vayan director por el camino correcto...

... digo cada vez mas emocionada, perdiendo poco a poco los nervios y sustituyendolos por las ganas de aventuras...

Dicho esto, me meto en el conducto y a través de la trampilla y comienzo a deslizarme agachada. Cuando llego a la bifurcación observo ambos caminos por si veo alguna luz o algo que me permita decidirme...

"Hilda, por el amor de dios, vaya con cuidado y vuelva pronto..." escuchas a tu espalda al ingeniero.

Sigues por el corredor hasta llegar a la bifurcación. El camino de la izquierda continúa un trecho hasta girar de nuevo, esta vez a la derecha. De este te llega un rumor, un zumbido eléctrico potente. El corredor de la derecha continúa para dividirse en dos caminos que giran ambos a la izquierda. De esta zona te llega con claridad el sonido de una corriente de agua. Ninguno de los dos está iluminado. Tuberías sucias y cables gruesos corren por las paredes sin que sepas identificar su contenido, origen o destino.

 Sin responder al ingeniero, imbuida por el afán aventurero, y sin considerar en ningun momento el motivo de mi escapada por las tuberias, continuo avanzando, girando en primer lugar hacia la derecha, hacia el rumor del agua. Al momento me encuentro con un nuevo dilema, dos caminos paralelos parten y rompen la tuberia en la que estoy, cual tomar?

Observo el primero, avanzo y observo el segundo....

Hilda saca su cuaderno de notas y comienza a garabatear en él para dibujar el recorrido de cara a una posible nueva intrusión. Asomándose a ambos corredores encuentra que ambos parecen finalizar en el mismo corredor que gira hacia el oeste. Sin embargo, los dos corredores no son iguales. Uno de ellos tiene en el suelo una trampilla circular que se abre girando una manivela, como las trampillas de los submarinos.

Aquí el ruido del agua es mucho más fuerte, casi atronador y corre claramente bajo los pies de la joven enfermera.

Saco una libreta y comienzo a trazar los distintos recorridos. Toda indicación y ayuda seria buena para mis compañeros cuando llegaran a nuestra posición, y todos estos conductos formaban una pequeño laberinto, no me gustaria quedar aqui, lugar que seria detonado en cuestion de minutos...

Apunto las caracteristicas de cada conducto, y decido por fin probar suerte con el angosto corredor de la trampilla. Me deslizo por él hasta que logro agarrar el pomo de la trampilla, lo giro y levanto la compuerta lentamente evitando cualquier ruido, para despues asomarme timidamente...