Partida Rol por web

No, no va a ninguna habitación, se va para abajo...

El tiempo pasa y llega la hora de irse a dormir. Unos estáis haciendo ceremonias del te, otros manteniendo conversaciones secretas y otros, bueno, mejor no saberlo...

El caso es que es una hora bastante avanzada y mañana comienza el último día del torneo, día que no sabéis que os deparará debido al hermetismo que mantienen los anfitriones.

Si Tetsuo-San quiere seguir a mi compañero, no le detendré. El honor de la familia Isawá es intachablé, así que me retiro a mis aposentos y descanso, pues lo necesitaré

Si puedo, invoco Kami para que miren un poquito.

Una vez que Togashi e Isawa Rokumaru entran a sus respectivas habitaciones, Soshi aprovecha y sale del cuarto de Mirumoto. No había podido terminar su investigación ahí, pero lo que sea que estuviese haciendo Isawa Mori podía ser mucho más importante ya que estaba pasando en esos mismos momentos, con lo que empezó a seguir al Isawa por los pasillos con más sigilo del que podría Togashi.

Tras un tiempo prudencial sales de la habitación del Mirumoto para seguir a Isawa Mori. Así que, tras él, totalmente inadvertida, le sigues en un largo paseo por el jardín para, al final, volver a la planta del castillo donde están vuestras habitaciones.

Pero, cuando el Isawa debía girar a la derecha, lo hace a la izquierda y al legar a una de las puertas susurra algo, la puerta se abre, el shugenja entra y se vuelve a cerrar. Es la habitación de Ashaina Chiyoko...

Vaya... Pensó Soshi mientras se acercaba despacio a la habitación de Asahina para no llamar la atención y se arrimaba a la puerta de papel para poder oír lo que sucedía dentro mientras se preguntaba qué tipo de visita sería esto. ¿Podrían Asahina e Isawa ser más que amigos? ¿O el motivo por el cual se juntaban era más secretista todavía? En cualquier caso, la Escorpión sabía que encontraría algo interesante con esta visita a medianoche.

Pegas tu oído a la puerta y escuchas unos susurros, unas risitas y un golpe sordo, como cuando un fardo cae al suelo. Tras eso, silencio....

Cita:

Gasp...

Entonces abro la puerta, llevando solo el mawashi como única prenda y con la bolsa de papiros en una mano, y uno de ellos preparado para ser usado en la otra.

Si veo algo, alguien, gritaré mucho como para atraer a tooooda la guardia.

Soshi se queda varios momentos esperando que pase algo, pero no se oye nada desde dentro de la habitación. Despacio y pidiéndole a las fortunas y a los kami que nadie la vea, empieza a abrir con mucho cuidado la puerta de madera y papel para poder ver al otro lado y ver qué es lo que pasó con los dos shugenjas.

Al abrir ligeramente la puerta no ves a nadie. Eso sí, los paneles de madera que cierran las ventanas están abiertos de par en par. Al asomarte por la ventana vislumbras algo increíble. Asahina Chiyoko se aleja volando, sí, volando, del castillo en dirección norte hacia unas montañas cercanas cubiertas de pinos. Desde tu posición ves la silueta de la shugenja recortada por la luna y notas que lleva algo voluminoso colgando de uno de sus hombros. Es fácil adivinar que ese bulto es Isawa Mori...

Soshi abre sus ojos como platos al ver esa puesta en escena de magia que la Asahina estaba llevando a cabo. ¿Había logrado volar con un favor de los kami? ¿O se trataba de alguna ayakashi o youkai que se había hecho pasar por un samurái y estaba secuestrando a Isawa?

Como sea, tenía que hacer algo. Por todo lo que Soshi sabía, ella podía ser la responsable de lo que le pasó a Mirumoto, o quizá estaba sin relación pero no podía no hacer nada mientras a otro samurái se lo llevaban así frente a sus ojos.

Madoka hizo el camino hacia el otro pasillo casi corriendo, no queriendo despertar a nadie pero ahora sin importarle si alguien la veía de casualidad, hasta llegar a la habitación de Isawa Rokumaru. Si a alguien le iba a importar que se llevaran a un miembro de su clan era a él.

—Isawa-san, despierta. — Empezó a tocar la puerta.

—Isawa-san, despierta. — Empezó a tocar la puerta Soshi Madoka...

Es la plegaria conocida como "Invocar a los vientos" que le permite volar, despacio, pero volar a fin de cuentas...

Oyes a alguien llamando a la puerta de Isawa Rokumaru. Parece Soshi Madoka...