Partida Rol por web

Héroes de Vieja Escuela

0. Noticias Inesperadas

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15/06/2008, 17:49

Tomas conciencia de ti misma, de tu cuerpo y de lo que te rodea. Como cada mañana desde hace casi seis semanas, te encuentras en tu pequeño pero acogedor cuarto. Desde que abandonaste la vida forestal junto a tu comunidad y te interesaste por las costumbres humanas, has aprendido a disfrutar de una buena cama, aunque tu descanso no precise de tales comodidades.

A veces sientes curiosidad por lo que se siente al dormir y soñar. Como elfa, has sido privada de esas atenciones. Sin embargo, has sabido suplir esa carencia abrazando un sueño para el que no necesitas dormir: proteger a quienes te rodean y lo merecen, evitar que sufran daño por parte de algún indeseable.

Te asomas a la pequeña ventana. El sol comienza a recoger el suave manto negro de la noche y extiende los primeros colores del amanecer, como si se tratase de un ensayo, de una prueba de tonos hasta alcanzar el azul radiante de una mañana estival. De un momento a otro, tus anfitriones despertarán y comenzará la jornada.

Miras seis semanas hacia atrás. Recuerdas el día que alcanzaste el Campamento del Límite, situado al borde noroeste del Bosque de Lerna. Es un lugar de paso, frecuentado por toda clase de viajeros, con toda clase de destinos y de intenciones. Pensaste que no había un lugar mejor al que dirigirte si buscabas información de una leyenda de la talla de la Orden del Inicio del Camino. Sin embargo, aunque muchos han sido quienes han oído hablar de ella, nadie ha sabido darte más detalles. El propietario de la posada, Lirzo Valanel, te habló de un anciano bardo que solía pasar por allí al inicio del otoño, tras su retiro estival en el corazón del Bosque de Lerna.

Tiene más de cien años y no los acusa, es algo inaudito. Si él no sabe algo sobre esa dichosa orden, puedes darlo por imposible —recuerdas que te dijo, sacudiendo la cabeza con suavidad.

Caíste en gracia entre los propietarios de los establecimientos del lugar. Era como si nunca hubiesen visto a alguien de espíritu tan puro e intenciones tan nobles. Te ofrecieron encargarte de algunas tareas a cambio de cobijo y alimentos, además de un sueldo con el que financiarte el viaje cuando decidieses partir.

Aún quedan nueve días para el fin de la estación, y empiezas a estar ansiosa. ¿Y si el anciano bardo ha muerto? ¿Y si este año ha modificado su costumbre y toma otro camino? ¿Y si no sabe nada acerca de la Orden? Has llegado a creer firmemente en aquel legendario lugar. Tu esperanza, antes firme, se debilita ante las dudas. ¿Qué harás si no sacas nada en claro, aparte de un honrado trabajo temporal como chica-para-todo? Quizá puedas unirte a alguno de los grupos de aventureros que pasan por el campamento, llenando el aire de historias fantásticas, apasionantes viajes y cuantiosas hazañas.

Oyes ruido de cacharros en la habitación contigua. Se trata, en realidad, de la cocina. Tu acogedor cuarto es una alacena habilitada como tal por los atentos señores Valanel. Te asomas a la puerta, esperando ver las amplias sonrisas de buenos días de tus anfitriones. Sin embargo, la cocina está en calma. Conserva el aceptable nivel de limpieza que te has propuesto y que te esfuerzas por mantener. Los ruidos provenían de una olla que se ha volcado aparentemente sola sobre la mesa.

Te encoges de hombros y vas a recogerla. Cuando tus dedos están sobre ella, algo la golpea desde el interior.

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15/06/2008, 18:30

Poco se sabe de ti, Sivil Vae, salvo que nunca tuviste lugar en una comunidad matriarcal como la drow. Nunca te interesó especialmente aquel juego de intrigas que se cuece en la Infraoscuridad, y desde luego te interesaba más tu propio crecimiento como individuo, explorar tus propias habilidades y poner a prueba tus capacidades, que destinarlas a adorar a una diosa.

Desde el inicio de tu búsqueda personal, has sentido la poderosa llamada de la nigromancia. El hecho de poder influir no sólo en la vida, sino en la muerte, te apasionó desde el primer momento. Aquello fue, en parte, lo que condujo al altercado con aquellos que consideraban que cualquier poder sobrenatural que no estuviese regulado por la Gran Diosa Araña era una grave herejía.

Sabes que buena parte de la magia se basa en el continuo estudio de gruesos volúmenes y ajados pergaminos, y te has propuesto recorrer el mundo en pos de conocimientos que te ayuden a crecer en la magia. Tu sed es irrefrenable, y hay mucho ahí fuera que aprender. Lo malo es que el temor y la desconfianza del mundo exterior por los de tu especie te ha cerrado algunas puertas.

Son muchas las menciones que has oído y leído acerca de la Orden del Inicio del Camino. Todo apunta a que se trataba de una especie de escuela esencial, de una fuente de conocimiento para principiantes, lejos de prejuicios y discriminaciones, que es precisamente lo que estabas buscando. Sin embargo, no hay ningún indicio de ella, oral o escrito. Ninguna pista que te empuje en una u otra dirección.

Te encuentras contemplando un interesante tratado sobre momificación que rescataste de una confiscación de libros heréticos por parte de un alto clérigo de Pelor, cuando algo cae de entre sus páginas. Se trata de un sobre verde, del tamaño de dos naipes juntos. El lacre de cera muestra un sello similar a las pestañas de un ojo cerrado.

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15/06/2008, 18:55
Meiar Siannodel

Meiar sale de su habitación dispuesta a comenzar un nuevo día de faena, la inquietud comienza a apoderarse de ella por la incertidumbre pero no permite que eso la altere más que unos momentos; ha hecho un trato con los encantadores habitantes de este lugar y no piensa romperlo. Así pues, se dirige a la cocina con su habitual sonrisa en el rostro pero para su sorpresa se encuentra vacía...

Extraño... a estas horas suelen estar preparando el desayuno ya... se habrán dormido jiji dice para sí mientras se dirige a recoger una olla caída. Cuando la tiene entre sus manos algo la golpea desde dentro, como intentando salir
Si es un ratón, mejor que lo lleve al campo antes de que lo vea la cocinera o querrá que lo mate.... pobrecito piensa mientras levanta un poco la tapa para ver si está en lo cierto pero sin permitir que el animalito se escape y corretee por la cocina

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15/06/2008, 18:50

Cuando uno se acostumbra a reír a carcajadas sin razón, es demasiado tarde para dejarlo. Sin embargo, opinas, hay quien tiene manías diez veces más molestas, como morderse las uñas o silbar mientras trabaja. La molestia que pueda ocasionar a los demás tu júbilo es problema de ellos y su maldita obsesión por ser infelices y grises.

Observas a Quycus, quien te devuelve una mirada cargada de significado. Sientes unas ganas irrefrenables de atrapar un insecto, uno bien gordo, y deleitarte masticándolo, así que apartas la vista con la esperanza de que el vínculo empático se haga más difuso y deje de transmitirte las apetencias culinarias de tu familiar. Aún te preguntas por qué has sido castigado con un familiar tan ridículo como aquel. Sin embargo, confías en que conforme aumente tu grandeza, Quycus se convierta en algo más digno. Quizás una serpiente o uno de esos que parecen dragones pero no lo son...

Sin embargo, con su mirada entornada y su aspecto de alcalde gordo, aburrido y aquejado por una enfermedad cutánea, Quycus no es sino otra prueba del largo camino que te queda por llegar hasta el trono de hierro y hueso sobre el que gobernarás el mundo y todas las criaturas que lo habitan.

Pegado a la pared, vuelves a repasar tu plan. Ese apestoso elfo oscuro no sólo te ha robado tu merecido protagonismo como centro de temor en el pueblo. Viste cómo se te adelantaba cuando los sacerdotes de Pelor descuidaron la pila de libros destinados a la hoguera por el único pecado de ser demasiado interesantes.

El tratado de Momificación de Ruh-abkann. Su estúpido propietario pensaba vendértelo por ocho miserables piezas de oro. Una enorme guía de cómo conseguir, paso a paso, poderosos guerreros no-muertos para formar un ejército invencible y de fidelidad inquebrantable. Pero los clérigos se lo llevaron, junto con otros muchos. Pensaban quemar esa maravilla...

El elfo oscuro se te adelantó. Puso sus sucias manos en tu pasaporte a la grandeza. Y ahora te lo imaginas pasando tus páginas, empapándose de los secretos que te pertenecen.

Pero él no sabe que eres un poderoso mago.

Con un sapo.

Eres un poderoso mago.

Mediocre. Humano.

ERES UN PODEROSO MAGO.

Está bien, como quieras.

Repasas los conjuros que has preparado para recuperar tu libro. ¿Cuál será el más apropiado...?

Notas de juego

Buen momento para que marques en tu ficha los conjuros preparados para el día.

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15/06/2008, 19:26

Ahogas un grito de sorpresa cuando, de debajo de la olla, algo plano, verde, del tamaño de dos naipes juntos te salta a la cara. Tienes los reflejos suficientes para interceptarlo.

Se trata de un sobre sin destinatario ni remitente. El lacre de cera muestra una imagen parecida a las pestañas de un ojo cerrado. Bajo la olla no hay nada más, ni rastro de lo que pudo golpearla desde dentro.

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15/06/2008, 20:04
Meiar Siannodel
Sólo para el director

Qué extraño...qué hace este sobre debajo de una olla?? y para quién será?... no creo que para mí, ya que nadie del pueblo sabe que estoy aquí y quién más querría escribirme??... mejor ir a buscar a Lirzo a ver si él reconoce el sello...

Tras examinar concienzudamente la olla para intentar esclarecer lo que produjo el ruido y dejarla en sus sitio al no encontrar nada, guarda el sobre en uno de los bolsillos y se marcha de la cocina en busca de Lirzo.

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15/06/2008, 22:10

Como anticipándose a tu decisión, la puerta abatible se abre, dando paso a un hombre grandón y con cara de recién levantado. Sabes que tendrá esa cara hasta después de haber desayunado, pues siempre suele decir que, hasta entonces, no es persona. Al verte, te dedica la misma sonrisa de cada mañana durante estas últimas semanas.

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15/06/2008, 22:13
Lirzo Valanel

Buenos días, pequeña —suele llamarte así, y siempre te halaga, dado que es la forma cariñosa en que se dirige a sus propias hijas, Esmeralda y Cristal—. ¿Has dormido bien? Hoy te espera una dura jornada soportando al gruñón Aldorpin —la sola mención del huraño propietario de la barbería, sastrería y tienda de objetos de vidrio te impone respeto.

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16/06/2008, 00:21
Sivil Vae
Sólo para el director

Umm, ¿que sera esto?. Lo examino por delante y por detras buscando alguna inscripcion. Mi primera reaccion es de total desconfianza. En mi tierra natal, el sobre podria contener cualquier tipo de trampa, desde una nube de esporas venenosas hasta la activacion de una runa que causaria o una explosion de llamas magicas o la invocacion de un monstruo.
Me resisto ha realizar un hechizo que me mostraria si hay algo magico en el sobre.
Saco de la parte interior de la manga de mi tunica una daga cuya forma recuerda a una araña con las dos patas delanteras estiradas creando la afilada hoja.
Con un golpe seco abro un lateral del sobre y echo un vistazo al interior.

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16/06/2008, 00:15
Mitius
Sólo para el director

jejejeJEJEJEJAJAJAMUHAHAHAHAHA. Estúpido drow, como OSA poner SUS pestilentes manos en MI TOMO. NADIE, NADIE se atreve a quitarme a MI, MITIUS, un objeto que practicamente me pertenecia, es más, como si lo hubiese comprado, de hecho... ESE ELFO ES UN LADRÓN, el tomo me pertenecía desde el momento en que lo ví. No importa, tengo un plan, necesitaré un embudo, un poco de vino y una botella grand... no, espera, eso no tiene nada que ver, en que estaba pensando, quizás en la incipiente caida de pelo de Quycus... no, no era eso... A sí, MI TOMO, es MIO por derecho propio, así el drow aprenderá que con MIS cosas con se juega. Bueno, en realidad no aprenderá, se por experiencia que los muertos no aprenden.

Tras estos pensamientos, busco en mi bolsa los componentes adecuados, y lanzo unos de mis conjuros favoritos, el causar un miedo atroz a mis enemigos.

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16/06/2008, 00:32

Tan pronto como el papel del sobre se rasga, con un susurro parecido al del roce de la seda, una nube de polvo amarillo brota del interior, extendiéndose por la habitación e interrumpiendo a Mitius, quien no puede evitar tragarse una buena ración debido que tenía la boca abierta de par en par.

El polvo se arremolina, cambia varias veces de color y, tras una serie de estampidos sordos, se convierte en una pequeña figura humanoide, de unos sesenta centímetros de altura. Su complexión es menuda y desproporcionada, un cuerpo flaco, cubierto por un jubón sin mangas, unas calzas y un cinto, todo ello en distintos tonos de verde. El ser está rematado con unas manos y pies bastante grandes, y coronada por una cabeza que parece colocada con un equilibrio maestro sobre su delgado cuello. Se revuelve el pelo, se rasca una de sus enormes y puntiagudas orejas y os observa, contrariado.

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16/06/2008, 00:51
Crakell Dúrdagan

Eh... saludos. Soy Crakell Dúrdagan, heraldo de... hum...

Juguetea con la correa de su diminuto zurrón. Mira el sobre roto, aún en las manos de Sivil, y después se fija en su cara. Después mira a Mitius, que se ha quedado de pie, con la boca abierta y las manos hacia delante, con los dedos encrespados. Después vuelve a mirar a Sivil y se aclara la garganta.

Disculpad mi indiscreción, pero... ¿Sois un drow?

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16/06/2008, 00:59
Mitius
Sólo para el director

Notas de juego

Master, ponme en situación que estoy algo perdido. ¿donde me me encuentro? ¿estoy solo?

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16/06/2008, 01:10

¿Qué diablos pasa aquí? Sólo recuerdas que querías enseñar a ese engendro de la naturaleza quién mandaba en los alrededores y, por supuesto, recuperar el libro que, en esa justicia que impera en tu cabeza, te pertenecía.

Estabas pegado al muro del almacén hasta el que lo seguiste, tratando de decidirte por uno de tus conjuros, y de pronto te viste dentro del almacén, con los materiales en la mano y el conjuro en la punta de la lengua. Gracias a la luz que tu propia entrada produjo, lo viste agazapado de espaldas a ti, con las manos ocupadas...

Notas de juego

Entonces, pasó lo que, por un error, ha salido antes. Es decir, los posts inmediatamente anteriores a este. El que no quedó grabado describía lo mismo que este, cómo te lanzabas al ataque con el conjuro, dispuesto a acojonar a ese odioso elfo oscuro. Lo siento, ya no sé si es culpa de mi conexión o qué.

En resumen, que después de entrar, una nube de polvo amarillento llena la habitación, haciéndote tragar buena parte de él y cegándote momentáneamente. Ahora estáis tú, el drow (Sivil Vae) y la criatura que he descrito y que ha hablado.

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16/06/2008, 01:25

Te das cuenta de que hay alguien más en el almacén abandonado en el que sueles esconderte para leer tranquilo. Ha debido de entrar justo cuando abrías el sobre. Lo reconoces como ese chiflado que se pasea por el pueblo pavoneándose, envuelto en una capa y encapuchado en pleno verano, hablando consigo mismo y riendo a carcajadas.

Ahora permanece ahí, de pie, con la boca abierta y las manos hacia delante, con los dedos encrespados. A saber qué se proponía.

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16/06/2008, 01:35
Mitius
Sólo para el director

Notas de juego

OK, ya me aclaro. (mierda, no he podido acabar con el drow, maldito duendecillo fumao)

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16/06/2008, 01:38
Mitius
Sólo para el director

Miro al duendecillo fumao que acaba de aparecer frente a mi y al apestoso y sucio ladrón drow. Mierda, por culpa de este engendro no he podido aplicar la justicia que este necio merece. Bien, será mi proximo objetivo. NO, mejor acabaré con él ahora mismo. SI, ESO MISMO HARÉ. NO, ESPERA, TENGO UNA BRILLANTE IDEA, quizás sea mejor dejarle hablar, quizás distraiga al drow mientras preparó el sortilegio que acabará con la vida de este hedoroso elfo. Bien, si quiero hacer meregue lo mejor será que coja huevos frescos, la clara es lo primero en estropearse, no puedo olvidar la canela, lo mejor siempre es espolvorear por encima un poco, le dará el toque que necesito...

Notas de juego

Se supone que he perdido el sortilegio no? mierda, mi perfecto plan al garete.

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16/06/2008, 03:03

Notas de juego

Los materiales que habías preparado quedaron utilizados, aunque no llegases a pronunciar el conjuro. Por lo tanto, sí, lo has perdido.

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16/06/2008, 11:19
Meiar Siannodel
Sólo para el director

Muy bien, gracias, le contesta risuenya mientras pone un poco de leche a calentar para el desayuno. Una vez ha puesto en marcha el desayuno se gira y saca el sobre del bolsillo He encontrado esto debajo de una olla que se habìa caido, no pone destinatario... reconoces el sello? dice mientras se lo tiende. La verdad que fue un tanto raro como lo encontrè... escuchè un ruido y al entrar en la cocina vi que habìa una olla en el suelo, cuando la fui a recoger escuchè un ruido como de algo que intentaba salir de la olla y pensè: serà un ratòn... por lo que querìa comprobarlo para que la cocinera no me mandase matarlo porque pobrecito el ratòn, con lo majos y monos que son con esos bigotitos y esos ojitos... y comienza a irse por las ramas hablando de lo lindos que son los ratones

Cuando Lirzo, ya acostumbrado a sus desvarios, hace que vuelva a lo que le estaba contanto originalmente ella prosigue pues eso que fui a mirar a ver si era un ratòn pero solo habia el sobre que saliò volando hacia mi...

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16/06/2008, 12:09
Lirzo Valanel

Qué interesante —dice el posadero, mirando el sobre con el ceño fruncido. Después, sin tocarlo, se fija en el pequeño sello entornando los ojos— No me suena de nada, la verdad. No se parece a ningún emblema de la región. —Te sonríe con complicidad—. Bien, a todos los efectos eres un miembro del campamento, y nuestra filosofía en estos casos es... "quien lo encuentra, se lo queda". ¿Por qué no lo abres y sales de dudas? Iré a despertar a ese gandul de Wim. Parece mentira que sea hijo mío...

Sale de la cocina, sacudiendo la cabeza y murmurando las acostumbradas protestas sobre la haraganería de su hijo menor, y te quedas nuevamente sola con el sobre misterioso. El posadero no ha querido tocarlo, ni quiera estar cerca cuando lo abras. En el tiempo que has vivido allí, una cosa que el posadero te ha dejado clara es que teme a la magia y prefiere tenerla cuanto más lejos, mejor. Por la historia de cómo ha llegado el sobre a tus manos, ni él ni tú dudáis que hay magia de por medio.