Partida Rol por web

Tras la pequeña charla telefónica en la cuál Claire parece haberse mostrado bastante receptiva a pesar del "incidente" con tu madre en Nueva York, ves en la pequeña pantalla varias llamadas perdidas de tu mujer.
Decides encaminarte de nuevo hasta el hospital, por lo menos has estirado los músculos y el gélido aire invernal te ha despejado un poco la cabeza aunque no las ideas. Sylar vivo y dispuesto a encontrar de nuevo a tu hija... Una noticia difícil de digerir, sobretodo cuando apenas te has recuperado de tus heridas y Peter anda desaparecido...

Llegas hasta el gran edificio sin problema alguno y de hecho nadie repara en ti puesto que tienes todo el aspecto de un visitante más.

Entro al hospital, pero esta vez por mis propios medios. Me dirijo hacia mi habitacion donde estuve tirado los ultimos dias, no tengo mucho tiempo para explicaciones pero Heidi no merece que la deje en la incertidumbre. Tomo el ascensor y marco el piso correcto, el ascensor se eleva y pasan unos momentos hasta que se vuelven a abrir las puertas y entro al pasillo que desemboca en mi habitacion.

Cuando llegas hasta tu habitación ves a Heidi sentada en la mullida butaca frente a la camilla, moviendo las piernas nerviosamente mientras sujeta el móvil entre sus manos.
-Nathan, ¡menudo susto!- exclama aliviada mientras se levanta y se te acerca dándote un corto abrazo para después mirarte ceñuda y algo severa.
-No vuelvas a hacer eso, ¿de acuerdo? Si querías marcharte podías haber avisado o dejar una nota por lo menos...- te coloca bien las solapas de la chaqueta distraidamente antes de continuar.
-¿Dónde has estado...?- pregunta intentando aparentar indiferencia.

La miro a los ojos y me tomo un minuto mientras su dulce mirada me enternece por un momento. Luego, con mi mejor cara de sinceridad le digo,

-Lo siento.

Acto seguido le doy un dulce beso en la mejilla y le susurro al oido.

-Muchas cosas han pasado, y nunca podria perdonarme si algo te pasara. Es mejor que vallas un tiempo a casa de tu madre, hasta que todo esto se tranquilice.

Luego vuelvo a mirarla directamente a los ojos, para que entienda que estoy hablando en serio.

-No te preocupes todo estara bien y seremos una familia nuevamente, pero por ahora necesito que confies en mi.

Cuando termino de hablar camino pasando por su lado y buscando a mi madre, mientras la busco saco el celular de mi abrigo y hago una llamada.

-¿Estás seguro de que es lo que quieres...? Está bien, te dejaremos un tiempo para que descanses y reflexiones sobre todo esto, pero por favor pasa a visitar a tus hijos pronto, tienen muchas ganas de verte- te besa con dulzura en la mejilla y cuando ya está junto a la puerta se gira nuevamente.

-Que Peter haya desaparecido no es culpa tuya... Necesitará tiempo al igual que tú, seguro que acaba volviendo- te sonríe algo entristecida, intentando darte un poco de ánimos antes de salir de la habitación, en la cuál parece no encontrarse tu madre, por lo cual sales afuera poco después de tu esposa y la buscas por los pasillos.

La encuentras al cabo de poco cerca de los ascensores, probablemente acaba de llegar, pero todavía no te ha visto...

Luego de charlar con Heidi y pedir el auto noto que mi madre se encuentra al pie de los ascensores. Me acerco hacia ella tranquila pero decididamente, cuando ella nota mi presencia la encaro directamente y le digo a los ojos

-Voy a buscar Claire, Sylar esta vivo y ella no esta segura. Esta todo arreglado un auto me espera en la puerta del hospital, salimos en 15'.

Espero la respuesta de mi madre, se que dira que es una locura y que tengo otras cosas de que ocuparme pero no me importa. De ahora en mas yo elijo mis prioridades.

Tu madre se gira hacia ti con expresión incluso amable, pero esta cambia totalmente en cuanto empiezas a hablar, tornándose repentinamente severa.
-¿Qué sandeces estás diciendo? Ése hombre ya interrumpido demasiado tu carrera política, además, ¿no estaba muerto? -niega con la cabeza con un hondo suspiro.
-Ahora eres el senador, no puedes echar todos los esfuerzos por la borda. Lo importante es eso, y encontrar a tu hermano...- asiente con convencimiento y te devuelve la mirada fijamente, esperando que "entres en razón".

Por un momento tuve la esperanza de que con lo sucedido, la actitud de mi madre hubiese cambiado. No pude estar mas lejos de la realidad. Conteniendo la furia en mi mirada, me dirijo a mi madre por ultima vez antes de darme la vuelta y marcharme hacia la entrada del hospital.

-Madre, ya no soy un titere al que pueden mover como mas les guste. Es hora que empiece a hacer algo con mi vida, algo que valga la pena. Y lo primero que hare sera cuidar de Claire, y terminar de una vez por todas con Sylar. Estoy de acuerdo que tenemos que encontrar a Peter, y en cuanto tenga a Clarie junto a mi iremos a buscarlo, el es el unico que puede detener a Sylar.

Luego del pequeño discurso y antes de seguir mi camino hacia la salida del hospital agrego.

-Ahora si me disculpas y no tienes ninguna otra ciudad que hacer explotar, me voy a buscar a mi hija

Con esa frase final resonando en la cabeza de mi madre, me alejo de su vista, de su poder y de su manipulacion. Sigo mi camino hacia la puerta y al coche que me espera del otro lado.

Tu madre se muestra enfadada y severa sin duda, pero es demasiado orgullosa para ir detrás de ti a insistir, así que deja que te marches del hospital, mirando cómo te alejas cómo si ya estuviera pensando en algo...
La pierdes de vista al subir al ascensor y cuando sales del edificio del hospital un coche lujoso y brillante de color negro ya está esperando ahí.
El chófer sale de la parte delantera y te abre una puerta de la parte trasera con una pequeña inclinación de cabeza respetuosa, por lo cuál algunos de los pacientes y visitantes te miran con curiosidad esperando reconocerte, y al parecer algunos de ellos lo hacen.

Me subo al coche rapidamente, tratando de evitar las miradas, y le digo al chofer que vamos al aeropuerto mientras hago las llamadas para reservar el vuelo y el auto que me espere en el otro aeropuerto.

Llegáis al aeropuerto sin excesivos problemas a parte de algún que otro atasco newyorquino típico de la ciudad.
Una vez allí tienes que esperar con impaciencia a que salga tu vuelo, pero al menos tienes tu billete de primera clase asegurado sin problemas y cuando subes al avión el viaje resulta confortable. Lo sería mejor si no te encontrases preocupado, sin duda.
Reservas los dos billetes para la vuelta y demás...

Sales del aeropuerto con los billetes de vuelta en el bolsillo de la chaqueta, al salir te recoge un coche plateado que te lleva hasta la dirección que le especificas.
Os cruzáis por el camino con una ambulancia que conduce a toda velocidad en dirección opuesta a la tuya con la sirena activada y al bajar del automóvil distingues a Claire todavía de pie frente a la puerta de su casa, con su perro entre los brazos y pisando un enorme charco de sangre de la cuál tiene ensuciada parte de la ropa.
Parece bastante conmocionada...

Al bajar del auto veo una escena que me deja helado. Claire se encuentra parada sobre un charco de sangre, tomando a su perro en brazos y con las ropas manchadas. Parece conmocionada, pero por suerte esta ilesa.

Sin esperar un momento salgo corriendo hasta donde se encuentra Claire, la tomo en mis brazos y la apreto hacia mi, mientras le digo.

-Claire, estas a salvo. No te preocupes todo estara bien.

Luego de susurrarle esas palabras, primero para tranquilizarla y luego para tranquilizarme, la voy llevando al auto. A medida que nos vamos moviendo levnato la cabeza y miro hacia los costados, para ver si alguien esta mirando. Si es asi, me apuro un poco mas.

Tenemos que irnos de aqui antes de que llegue la prensa o la policia.

-Vamos Claire, te llevare a un lugar seguro.

Continuo susurrandole al oido mientras la hago entrar en la parte de atras del auto junto a mi.

uno de los sanitarios me responde, algo seco, que van a llevar a mi padre al único hospital que hay en batton rouge. no saben que no somos de aquí, que acabamos de llegar, que todo esto no tendría que haber sucedido... suben a mi padre a la ambulancia y pronto la sirena es un sonido lejano, como si aquello no fuera conmigo. transcurre un rato en el que no soy consciente de nada, ni siquiera del tiempo que pasa, ajeno a todo. bigotitos se revuelve nervioso en mis brazos pero no le suelto, tener su pequeño cuerpo entre mis brazos me hace sentir menos perdida. en frente de casa se detiene un coche, nathan se apea de él, descompuesto observa la escena, aunque tarda menos que yo en reaccionar, llevándome con el, hacia su coche. sé que debería hacer algo, o decir algo, pero apenas puedo coordinar mi cabeza con mi cuerpo. a donde vamos? tenermos que ir al hospital..., tengo que avisar a mamá. digo sentada en el coche.

Una vez dentro del coche, le digo al chofer que arranque y nos lleve al aeropuerto. Luego me vuelvo hacia Claire. Con la mano derecha le quito el pelo de la cara y la acaricio suavemente para ayudar a tranquilizarla.

-Claire, escuchame. Respira profundo ya estas a salvo y ahora iremos a un lugar donde nadie podra lastimarte. Ahora necesito que te tranquilices y me cuentes que es lo que acaba de pasar, quien estaba en esa ambulancia?

Parece que llegue justo a tiempo.

El chófer asiente obedientemente y el lujoso coche plateado se dirige hacia las afueras de la pequeña y apacible ciudad, aunque no lo parece tanto después de lo que acaba de ocurrir...
Al cabo de pocos minutos, mientras habláis, un letrero señala que os encontráis a tan solo 5 minutos del aeropuerto que al parecer es donde os dirigís.

apenas se escucha el sonido del motor del coche, en mi cabeza oigo el disparo, la sirena, mi respiración..., noto la mano de nathan sobre mi cara y niego con la cabeza mientras me habla. estaba en mi habitación esperándote, llamaron al timbre y luego oí el disparo. me quedo un momento en silencio y miro a nathan. era un disparo, pero a mi padre le cortaron el cuello..., digo más para mi misma que para el. no me fijé en quien estaba en la ambulancia, a parte de mi padre, pero el disparó, tuvo que hacerlo...

Mientras el auto arranca y Claire empieza a contarme su historia, escucho con atencion y miro por la ventana si alguien hace particular incapie en su auto o en ellos. Seria muy malo para su carrera y para sus planes acaparar demasiada atencion publica en ese momento. Luego del pequeño paneo general de los alrededores (desde dentro del auto) dedico mi completa atencion al relato de Claire.

Cuando noto que ella no puede terminar su frase por el efecto del shock, la vuelvo a tomar entre mis brazos y apoyo su cabeza sobre mi pecho.

-Tranquila, todo estara bien. Este no es un lugar seguro para ti. Iremos a Nueva York, donde puedo protegerte y donde podremos prepararnos para combatir a Sylar.

Acaricio su pelo lentamente tratando de contenerla y hacerla sentir a salvo nuevamente.

Pobre niña, a tan corta edad las cosas que le han tocado vivir...