Partida Rol por web

Grupo del primer camión

Los pulmones se le estaba llenando de agua a Roy. Este miró a su alrededor y vio a Xiong inconsiente, pegado contra el techo de la cabina inhundada.

El caravanero cogió al chino por la cintura y salió por la ventanilla rota hacia la superfice.

Estaban en un rio con aguas marrones, contanimadas, en un paisaje destruido, solo arena y trozos de madera clavados en la tierra que antaño fueron árboles, ahora no eran nada..solo basura.

Roy nadó hacia la orilla con dificultad. Arrastró luego el cuerpo del chino y se dejó caer en el suelo agotado.

Un poco mas allá, Alice había salido de la parte de atrás sin problema junto con Mia, sin embargo, no podían volver atrás para sacar a los otros dos, afortunadamente, vieron salir a Roy pocos segundos después.

Ambas se acercaron a ellos, en el momento justo en el que Xiong abrió los ojos y empezó a toser.

Todos empezaron a sentirse mal. Sabían por que. Era el agua, estaba contaminada de radiación y habían quedado expuestos mucho tiempo a ella. Se podía curar con un buen chute de rad x pero ¿donde encontrar uno? es más ¿donde diablos estaban?

No sabía que había pasado, todo había pasado muy rápido y no sabe como llegaron a donde estaban. Estaba ida, pero cuando empezó a ver que el agua comenzaba a entrar en el camión reaccionó rápido y salió de alli junto a la otra mujer que estaba con ella.

Nadó y no pudo evitar tragar agua, de los nervios y que tenía que mantener el ritmo, al nadar tragó algo de agua. Cuando consiguió llegar a la orilla comenzó a toser con fuerza, como si así fuera a echar toda ese agua que no debía haber tragado.

- Cooofff.. coofff..- se puso una mano en la boca y tragó saliva para recomponerse - es..estás bien?? - preguntó a la chica.

Se sentó en el suelo echándose el pelo hacia atrás y vió que los otros dos hombres salían del agua.  Se acercaron a donde estaban.

- Estais bien?? Estais heridos?? - preguntó a ambos, el choque había sido fuerte, habían caido desde una buena altura.

- Creo.. creo que tenemos un problema..- dijo al empezar a sentirse mal, miró hacia el agua y cayó en la cuenta.. era agua contaminada.

Por fin la guerra habia terminado, China habia aplastado a Estados Unidos. Ahora el gran imperio chino albergaba todo el norte de America, incluida la extinta Canadá.
A las puertas del capitolio el recien nombrado gran emperador de China otorgaba las medallas a los heroes de guerra. Miles de personas aplaudian y vitoreaban a sus campeones.
Tras un par de medallas le llego el turno a Xiong, por su habil resistencia en territorio hostil y haber hecho posible el asalto terrestre definitivo.
El emperador le iba a colgar la medalla pero algo le detuvo, se quedó mirando al frente. Poco a poco todo el mundo miró en la misma direccion. Cuando Xiong se giró vio una enorme ola que avanzaba hasta su posicion. En menos de un segundo engulló a todos los presentes incluyendo al casi condecorado heroe imperial.

Cuando abrio sus rasgados ojos Xiong solo veia el cielo. Rapidamente se intentó incorporar pero comenzó a brotar agua de sus pulmones y la tos apenas le dejó apoyarse sobre el codo. Tras expulsar una buena cantidad de liquido notó en su boca ese sabor amargo tan familiar, era el gusto metalico caracteristico del agua contaminada.

Estamos jodidos.

Examinó su cuerpo y no vio heridas mas allá de alguna que otra contusion y una pequeña brecha en la frente. Nada grave comparado con lo que tenia en su estomago y seguramente ya en su sangre.

- No estoy herido. Pero me temo que todos estamos condenados.

Se intentó incorporar pero estaba bastante mareado. Se quedó sentado en el suelo, observando la zona donde habian terminado. Recordando la huida para intentanr situarse mentalmente.

El camión se va hundiendo poco a poco en el agua de ese caudaloso rio de aguas turbias y contaminadas de substancias radiactivas. Cuando ve que el camión se va llenando de agua, coge aire y sale de allí junto con la otra chica que está en el camión, pero no puede evitar que entre en su organismo algo de agua contaminada...

Al salir a la superficie nada rápidamente hacia la orilla del río y se sienta allí... la otra chica le pregunta si está bien, pero... ¿Cómo va a estar bien? Ha tragado ese agua y encima la han condenado a ser una fugitiva por culpa de sus propias ambiciones... le han destrozado la vida y encima la han condenado a morir en un sitio como ese, contaminada... Ahora ya nadie pagará por ella ni la querrá como esclava...

¿Quién se creen que son para decidir por los demás?

-Cómo voy a estar bien? Por vuestra pataleta, hemos caído en ese río contaminado, vamos a morir por radiación y me habéis arruinado la vida... si, estoy perfectamente.

- Y ahora qué??? ¿Cúanto tiempo tenemos??? Dónde vamos a encontrar el antidoto??? - preguntaba cada vez más nerviosa.

Conocía los peligros de tomar agua contaminada y que era lo que debía tomar para poder curarse, pero desconocía totalmente si aguantarían minutos.. horas.. o días y eso la angustiaba mucho.

- Eso ahora no importa - le dijo a Alice - Como no espabilemos, moriremos aquí mismo, ¿y no es eso lo que quieres, verdad?

-Y por culpa de quien estamos en esta situación!? Por culpa de quien estoy así!?

Se pone en pie, enfadada... tiene ganas de vomitar o lo que sea que su cuerpo quiera, pero intenta controlarse... intenta controlar esa parte de sus emociones y deseos...

-Que no te importe a ti no significa que no me importe a mi! Como voy a vivir ahora!? Como una andrajosa como vosotros!? La libertad a costa de un sitio seguro donde dormir!? Estáis locos...

- Ahora mismo te importa más que harás en un futuro.. que no sabes si llegarás.. que el estar envenenada??? Si no quieres curarte metete de nuevo en el agua, no durarás mucho..

Le ofrece las manos a Xiong para que se ponga en pie.

- Te creias que ibas a conseguir una buena vida ahora? Si te ha ido bien antes has tenido suerte.. porque desde que fuimos apresados, solo nos esperaba dolor y sufrimiento. Nadie te va a tratar bien, solo se aprovecharán de ti. Ahora no estamos bien, pero al menos somos libres de hacer lo que queramos.. seguir vivos o dejarnos morir.

-Siempre he sido esclava y me gustaba esa vida... no siempre lo que tu deseas lo desean los demás... y a mi no me apresaron, simplemente cambió mi amo...

Podría tratar de buscar otro amo, pero con el aspecto que tiene ahora y con la contaminación corriéndole por las venas, seguramente ningún hombre o mujer la querría como esclava... 

Mira mal a todos los que están allí y piensa en los otros que han montado el motín ese... decidieron ellos solos sin pensar que querían los demás, al menos lo que quería ella.

Ayudado por Mia, Xiong se puso en pie. Estaba escuchando indiferente el discurso de Alicen en defensa de la esclavitud.

¿Si  no te apresaron, que hacias en una celda como todos los demas?

El oriental comenzó a mirar en todas direcciones, no habia mucho tiempo para discusiones, tan solo necesitaban encontrar algo que les curase la radiacion y despues podrian intentar solucionar todo lo demas.

- Si seguimos el rio posiblemente nos topemos con una carretera que lo atraviese o con algun antiguo asentamiento proximo a la orilla. Propongo ir hacia allá - dijo señalando en una de las direcciones del rio (el Este?) - porque cuanto mas nos aproximemos a la capital mas facil será encontrar algun lugar habitado o util.

Caminó unos pasos en la direccion indicada, como adelantandose para examinar el horizonte. De repente se quitó la empapada camisa que llevaba y acto seguido hizo lo mismo con los pantalones.
En un momento Xiong estaba en mitad del yermo, en calzoncillos y botas, intentando secar su ropa mojada con agua contaminada.

Xiong lideró el grupo de perdidos hacia el Este, siguiendo el debastado rio. Os sentíais mal, incluso os costaba caminar. La peor que estaba era Alice, incluso en una ocasión tuvo que parar para vomitar sangre, eso os invitó a ir mas rápido.

Pese a vuestras ganas, todo seguía igual. Todo era río y desierto. Xiong localiza un objeto no muy lejos, una especie de camioneta vieja y destrozada. No tenía motor ni puerta y las esperanzas del grupo de encontrar Rad x se fueron al traste al comprobar que ni en la guantera ni en la parte de atrás  había nada mas que polvo.

El estado de Alice era preocupante, y el de Roy iba en camino. La chica rubia y el chino eran a los que menos se les notaba pero por dentro se sentían muriendo.

Pasasteis un tiempo allí y ya íbais a seguir de nuevo la marcha cuando una silueta lejana empezó a dibujarse en el orizonte, poco a poco se fue haciendo más grande hasta tener una forma humana.

Iba armado ¿sería amigo o enemigo?

Miraba preocupada a la chica y al otro hombre que iban con ellos, parecía que eran los que estaban peor. Y encima, todo se estaba complicando, la situación empeoraba por momentos.

Vieron que alguien se iba acercando a ellos.

- Ehhh.. alguien se acerca..

Avisó al resto de sus compañeros y buscó algo con lo que poder defenderse. No tenían armas y ese que se acercaba era un enemigo.. con algo tendrían que defenderse.

Lo primero que vió y que le pareció útil fue una piedra, alli había montones. Coge la piedra y se esconde tras el coche manteniendose expectante hacia la figura que se acercaba.

Xiong, ya vestido y con su ropa seca, se habia percatado de la lejana silueta. Tambien era consciente del arma que portaba, aunque eso poco importaba ahora que estaban practicamente condenados por la radiacion.

Se levantó decidido, aunque antes de salir al encuentro del extraño se giró al grupo.

- Si es amigo y nos encondemos nos considerará enemigos. Si es enemigo disparará hagamos lo que hagamos. Si no teneis una idea mejor iré a comprobarlo, al menos tendreis tiempo de huir y alguien se salvará. Aunque nos acabará matando la radiacion. Soy el menos debil, si alguien tiene que luchar al menos tengo alguna oportunidad.

El chino, acostumbrado a trabajar solo, se quedó esperando la aprobacion de los demas. No quitaba ojo de la silueta intentando buscar una forma de actuar o algo que rebelase las intenciones del viajero.

En el yermo una bala es mas cara que una vida. Si es un viajero solitario no tendrá necesidad de atacar, tan solo para defenderse.

Dolor... debilidad... sufrimiento... eso es lo que lleva sintiendo desde que salió de ese río contaminado que seguramente la ha condenado a morir de una forma cruel... quizá una bala sería más rápida y menos dolorosa y acabaría con ese sufrimiento de un plumazo...

Sus piernas flojean cada vez más con cada paso que da... la deshidratación es cada vez más evidente debido a los vómitos de sangre que se ve obligada a expulsar de su estómago en arcadas cada vez más continuadas... dentro de poco ya no podría ni levantarse... seguramente perderá la consciencia y acabará allí, en ese suelo arenoso... olvidada para siempre... 

Desde que cayó al río Roy parecía estar en otro mundo. No habló ni protestó, simplemente se puso en pié al recuperar la consciencia y caminó junto al resto de fugitivos. Su mirada iba completamente perdida en el infinito, como si se hubiese quedado ciego. Y su rostro reflejaba una profunda tristeza.

Es el fin... estoy sentenciado. Y ella también.

La fuga iba bien... hasta que caimos al vertido radiactivo. No hay casi agua en El Yermo... y tuvimos que toparnos con el único río... y hundirnos bien hasta el fondo.

Ahora ya sólo queda esperar... esperar a la muerte. Es el fin.... para mí. Y para ella. Ya nadie volverá a buscarla, a cuidarla. Caerá en el olvido, en el dolor... en las garras de esta tierra de gente enferma...

Es el fin... ya no se puede hacer nada. Estoy sentenciado. Y ella también.

Una lágrima iba a aflorar al rostro de Roy, cuando una única figura apareció sobre la colina. De primeras pensó que sería uno de los esclavistas, pero esos perros nunca llegan solos a la carroña. Por un momento se alegró, pero luego se retractó al recordar que los negreros no son lo peor que te puedes encontrar en el Yermo. Mierda...

Roy rompió su silencio al oir las palabras del asiático. Apoyó su mano en el hombro de Yeong y, cuando éste le miró, Roy negó con la cabeza.

- Si tú estás menos afectado que el resto por la radiación será mejor que te quedes cuidando de ellas. - Con un gesto de la cabeza, Roy apuntó a los dos jóvenes. - Mejor habló yo con él... tengo menos que perder y, aunque parezca que no, soy una persona de negocios.

Xiong comprendió el punto de vista de Roy, al fin y al cabo la diplomacia no entraba en los planes del oriental.

- De acuerdo. Desde aqui poco podremos hacer, asi que si es enemigo nuestro fin llegará antes.

Tras sus palabras el chino apoyó los brazos cruzados sobre la camioneta para observar el inminente encuentro entre Roy y el extraño.

Al menos si quiere acabar con nosotros tendrá que venir hasta aqui, este monton de chatarra será una buena cobertura. Si agota sus balas con las mujeres tendré una oportunidad a corta distancia.

Se incorporó al escuchar las palabras de Xiong, aunque ella prefería mantenerse escondida y si no la veían mejor.. pero eso podría resultar más peligroso que si se enfrentaran cara a cara.

Dejó caer la piedra al suelo y se acercó a Xiong, miró a Alice y susurró al hombre.

- Has visto que cada vez la chica está peor..? Como siga así vamos a tener que llevarla a cuestas.. o algo peor - eso último lo dijo mirándole a los ojos, dándole a entender que es lo que deberían hacer si llegara el caso.

Xiong miró de soslayo a Alice. Acostumbrada a una buena vida su cuerpo apenas toleraba la radiacion.

- No dejaré que me retrase ni dudaré en abandonarla. Mi decision entre su vida y la mia esta tomada.

Y lo mismo ocurre con el resto, maldita escoria yanqui.

El chino continuó su tarea de escrutar al extraño mientras Roy se disponia a hacer gala de sus dotes diplomaticas.

Roy se alejó del grupo ante el visto bueno de Xiong*, dispuesto a llevar a aquel extraño a su terreno. Caminaba decidido, con la cabeza en alto. Pero su mirada seguía perdida en el infinito, en la pena.

Bueno Roy,... ahora llegas a un momento difícil... si ese hombre no te vuela el pecho antes de que estés a su altura, le tienes ganado... Sólo dale a la lengua y sal vivo.

Recuerda el orden de prioridad: ningún muerto, obtener ayuda y volver con ella.