Partida Rol por web

La sala común de Ravenclaw se encuentra en una de las torres del castillo, es amplia y circular, para llegar a la sala se debe subir por una escalera en caracol muy angosta. La sala cuenta con grandes ventanas arqueadas muy decoradas, y las paredes están decoradas con tapices color azul y bronce. El techo abovedado está pintado como el cielo estrellado, esta decoración se repite de igual forma en la alfombra del suelo color azul marino. Mesas, sillas y libreros se encuentran acomodados en la sala, y una escultura en mármol de Rowena Ravenclaw esta colocada junto a la puerta que conduce a los dormitorios. Es necesario dar la respuesta correcta para que la puerta se abra. De lo contrario, habría que esperar a que llegue otro alumno de Ravenclaw que pueda resolver el acertijo propuesto.

Estreno escena jaja la podemos usar para establecer bien las relaciones entre nuestros PJs.

Lo primero es hacer acto de presencia todos los miembros de la casa jaja

Dad señales de vida :)

Salgo de la habitación de los chicos, y bajo desperezándome hasta la sala común. Me siento en uno de los sillones orejones, y con algo de sueño espero a que el resto baje.

A Valeria es común verla por la sala andando con la mirada gacha hundida en algún libro. No es raro tropezarse con ella al entrar o salir de los dormitorios ya que no presta demasiada atención, y murmuraría una disculpa distraída antes de seguir con su lento y tranaquilo anadear hasta alguna mesa o sofá en el que seguir leyendo sus historias.

Hoy está sentada en el alfeizar de una de las ventanas mientras lee Squaffleshobs! Las aventuras de Janee McLeigh y los magos diminutos.

Era el segundo año en Howarts y volvía a estar con mis compañeros de casa, esa mañana cuando salí de la habitación algunos de mis compañeros ya estaban abajo.

Aun no se han despertado Austin ni Marcus, van a llegar tarde al desayuno.

Buenas soy el nuevo :p

Bajo bostezando por las escaleras del dormitorio, me había vuelto a quedar despierto ojeando libros que había cogido de la sala común el día anterior. Apenas me fije en mi aspecto pero con la túnica puesta al reves debía ser bastane gracioso.

Sin ser consciente de mis acciones devuelvo el libro a la estanteria, al primer hueco que veo. Bostezo abiertamente mientras me giro hacía mis compañeros.

-Buenos días, ¿estamos todos? ¿podemos ir a desayunar antes de que me vuelva a quedar dormido?- digo frotandome los ojos intentado ver cuantos estabamos en la sala.

_{- ¿Sabes que los efferdingers van a cenar DESPUÉS de dormirse? Comen dormiditos... -} Responde Valeria aún leyendo su historia mientras se pone en pie y echa a andar. Seguramente vaya al comedor solo a hacer acto de presencia o a mordisquear algunos panecillos como mucho y beber un zumo, nunca ha sido muy comilona y menos aún por la mañana.

Los más observadores podrán apreciar como lleva puestos dos calcetines completamente distintos y que tiene un par de manchas en la túnica. La chica es un desastre de por sí, aún más cuando tiene sueño.

Me desperezo estirando los brazos cuando poco todos van llegando al salón común. Valeria ya estaba en el dintel de la ventana leyendo... Kerrie, Marcus y Jamie iban apareciendo.

Decían de desayunar a lo cuál asentí. Me levanté y rasqué la nariz con el dorso de la mano quitando los últimos trazos de sueño. Ibamos a salir para desayunar y reconducí a Valeria que enfranscada en sus libros a punto estuvo de chocar con uno de los sillones. Sonreí y le dije.- Creo que deberías de volver a por un calcetín más... 

Luego miro al resto y digo.- Estoy deseando probar esos bollos de leche con jalea norteña otra vez... creo que es temporada, y espero que de nuevo traigan a Hogwarts..

Cuando bajo a la sala común veo al grupo de segundo año reunido. No puedo evitar soltar una risilla cuando veo los estragos que hace el sueño en mis compañeros.

-Buenos días -saludo a todos. En ese momento me suenan las tripas. Todos tenemos nuestros defectos pienso para mí- Íbamos a ir a desayunar, ¿no? Creo que tengo hambre.

Había anochecido y la enfermera nos llevo a nuestra torre, allí deberíamos estar más seguros pero yo no estaba de acuerdo con esa idea, ¿y si alguno de mis compañeros era uno de los mortífagos?

¿Podéis creer lo que esta pasando?, estamos condenados, cuatro de nosotros están a las ordenes de Voldemort y nos petrificaran sin dudarlo. Creo que la idea de James, tiene algo de sentido, nosotros deberíamos ser precavidos entre los de nuestra casa y no juntarnos mucho con los otros de momento. 

Mire a todos, los conocía del año pasado, y nunca podría pensar que alguno de ellos podría ser un asesino, aunque sabía que la petrificación era reversible, ¿Alguna idea de lo que podríamos decir o hacer para demostrar nuestra inocencia?

Al llegar a la torre, los compañero empezamos a hablar sobre lo que vendría. El primero fue Kerry... yo pensaba, sobre como poder ayudar y dije.- Lo primero descubrir que no haya nadie entre Ravenclaw que nos puede dañar, pienso que permanecer todos juntos en esta sala, sería algo beneficioso, ya que ninguno nos podremos mover sin alertar a otro....

Todos separados, pero que podamos ver al resto, para no sufrir peligro y tener tiempo de reacción. Que mañana tengamos algo de sueño por no dormir, pienso que es un pago pequeño a cambio de sobrevivir, ¿no creéis?..

Apenas reacciono ante todo lo que ha pasado en las últimas horas, no se como hacerlo... 

Durante el Comedor pude pasar desapercibido inmerso en mis pensamientos, barajando como salir de esta con vida. En la torre vuelvo a ser conscietne de lo que me rodea y escucho las ideas de mis compañeros.

-¿Planeas que no durmamos hasta que sepamos quienes son los infiltrados? No se cuanto aguantaremos hasta caer rendidos pero no creo que sea mucho. Debería haber otra forma de eliminar sospechosos.- digo mientras pienso en una forma alternativa de probar nuestra inocencia.

Valeria se sentó en el alfeizar de una de las ventanas, su lugar favorito en la sala, y quedó apoyada en el crital mirando las estrellas que iban asomando al cielo.

Tenía un libro entre las manos como de costumbre, pero esta vez no leía. Estaba demasiado preocupada como para ello. Los dedos tamborileaban sobre la tapa frontal del tomo, Mil historias de aurores y un cuento de elfos domésticos. No era momento para cuentos ni historias, tenían una demasiado grande entre manos.

_{- No se me ocurre ninguna manera de demostrar quien es inocente... Y si la supiera, decirlo aquí seguramente significaría... -} la chica tembló un poco _{- un viaje sin retorno al reino de piedra... ¿no crees, Alisha? -} murmura citando uno de sus libros favoritos, Alisha en el país de las normalidades. Valeria se rascó la barbilla pensativa tratando de dilucidar alguna estrategia eficaz que pudiera contar delante de algún posible mortífago, si lo hubiera.

Muy bien, para no quedarnos sin dormir haremos guardias en parejas, y si la casualidad une a dos mortifagos sabremos en quien no podemos confiar. La idea de Adrien era buena, por lo menos aunque no descansáramos tranquilos siempre podríamos asegurarnos de que el asesino estaría controlado de estar en nuestra casa.

Yo me ofrezco a hacer la primera guardia, ¿Quien me acompaña?. 

Alzo la mano y digo.- Supongo que si mía era la idea... mio sera el primer suplicio...- Me apoyé en una de las paredes junto a una silla y dije apoyando los codos en las rodillas y mirando a todos.- No perderé vista de nada...