Partida Rol por web

Harold se encontraba absorto por el discurso del Wizard, con una sonrisa de oreja a oreja, hasta que todo el alboroto lo sacó de sus fantasías-extermina-no-arios. Miró para todos lados, enojado por no entender la situación y comenzó a caminar, tambaleándose por el peso de su barriga, hasta el epicentro de la conmoción.

- ¡Puta mierda!- Gritó al ver la escena. - Esto lo hizo un negro.- levantó levemente su capucha y escupió una gran flema al pronunciar esa última palabra, le daba asco siquiera referirse a ellos. Sacó su petaca y le dió un largo trago. - ¡EL NEGRO TRAIDOR ESTÁ ENTRE NOSOTROS!- Gritó a todo pulmón y volvió a escupir a un lado. - Tenemos el deber de vengar a nuestro hermano, votando al traidor entre todos.- Una vez más tomó de su petaca y se quedó insultando entre dientes a los traidores.

—Harold, sé que estás nervioso y tus intenciones son buenas pero... no te has enterado. Lo primero que tenemos que hacer es buscar a alguien  que nos represente una vez que el Wizard ha muerto. Yo por mi parte apoyo como candidato a Duke Cornhauler, luego ya tendremos  tiempo de buscar a los cerdos comunistas adoradores de razas inferiores  que se han infiltrado entre nosotros. —

Cletus, en vista de la pifia de campaña electoral en la que ahora se sentía tan perdido como un pulpo ario en un garage judío, tomó de su corralillo a la más provocativa de sus gallinas y se la llevó tras un árbol para decirle un par de cosas finas mientras los mayores discutían sobre sus cosas nazis. Ya habría tiempo para patear, despellejar, aviolentar y quemar cosas cuando alguien se encasquetase el capirote colorao.

A ve' hermanos míos, esto está más klaro que el agua, yo ya sé quiene' están de nuestro la'o. El señor White tiene que ser de los nuestros, un apelli'o que dice "Blanco" no puede ser de un sucio negro. Los que no tie'n apelli'o deben ser bueno' también, porque han forniciao tanto entre sus familiares que hace ya tiempo que no usan apelli'o ¡mantienen la sangre blanca y pura dentro el círculo familiá'! Los que se llaman Duke por algún lao, aparte d'apuestos y de tene' una hermana to potentorra, tie'n un nombre del sú'.

Po' rencilla' histórica' familiare' yo me cargaría al Dalla', pero no por que sea un sucio negro ni na', si no po' zanja' el tema de mis abuelo' con los suyo, aunque por otra parte, tiene el nombre de nuestro segundo Dio' en la tierra, Dala'Reviu, un verdadero hombre blanco y hetero.

Pero el que má' m'hace sospechá' es el tal Arturito Citripio Smith, tie' el mismo nombre que los robó's esos del Sta' Wars y to's sabemos que en Sta' Wars salen negros en un consejo y peor aún, mujere' siendo princesas de no se qué, en vez de está limpiando la cocina y dando' a lu' a más hombre blanco'.

-¿Star Wars? ¿Esa es la del oso peludo ese que grita tanto o la del tío con las orejas de punta? -preguntó Jim Bob, queriendo que sus compañeros le sacasen de la duda.

Nunca se había aclarado cuál de las dos era Wars o Trek, pero sólo sabía que había un huevo de películas de esas y lo peor es que cada vez hacían más. Él era más de buen cine, películas hechas con ocho cojones como las que hacía Michael Bay y su ídolo Uwe Boll.

-Mirad, yo no sé cuál de las dos sería, pero hace ya unos cuantos años me decían mis compañeros del aserradero "Jim Bob, mírate el nuevo tráiler de la Star suputamadrecomosellame, que está tremendo. Pelos como escarpias" -Mientras hablaba, el hombretón miraba a sus compañeros, desde detrás de su capuchón blanco-. Total, que me voy a mi casa, me siento delante del ordenador a verlo, con mi birrita y mis ganchitos y empieza el tráiler. Sale un desierto así de esos llenos de dunas y me digo "Ostias, Jim, que esto va a ser bueno. Van a bajar los marcianos a cargarse a los moros-mierda esos del ISIS". ¡Pero no! -El tono del paleto comenzó a ganar en intensidad-. ¡Pasan los segundos y veo aparecer a un negro feísimo, vestido con un uniforme blanco como de soldado del futuro! ¡Y el negro mirando a la cámara, el tío guarro sudando como un cerdo, jadeando mientras le veía hasta los pelos de la nariz! ¡Con una de esas narices gordas que suelen tener los negros! Y me dije "No, Jim, no puedes seguir viendo esta mierda. No puedes tragarte esta propaganda de que todos somos iguales que nos quiere colar el mono de la Casa Blanca". Cerré el Youtube, apagué el ordenador y me puse a ver los Renegados del Diablo. ¡Eso sí que es una película de puta madre! Sale algún negro, sí, pero en papeles secundarios, como tendría que ser siempre.

Tras esa anécdota, Le Blanc cruzó los brazos sobre el pecho, en actitud de seguridad, como si hubiera contado un relato que pasaría de padres a hijos por los siglos de los siglos.

-A día de hoy, no he visto esa puta película, pero supongo que tuvo que pegársela bien en taquilla -sentenció, con orgullo-. No es racismo. Es realismo. Yo me identifico con un hombre blanco, hetero, atractivo y rubio, pero no puedo llegar a identificarme con un negro. ¡Es como si me pidieran que me identificase con un filipino, o con un moro, ¡o peor: con una mujer!

—Billy Bob, sabes que tu cabra es una guarrilla y está para que la disfrutemos todos. No es momento de ponerse egoista celoso, lo entiendes ¿verdad? todo lo que cada uno de nosotros tiene se comparte con el Klan—

Mi cabra no es ninguna guarrilla!-dije con tono serio y los puños cerrados- Lo que pasa es que tiene un tic en el ojo y los hombres y parte del ganado se creen otra cosa y como ella es tan buena pues no se queja, pero la cabra es mia y no la presto que me se las cosas y luego me la decuelven con olgura abajo y no es lo mismo, un respeto por favor!

Pe-pe-pe-pero... ¡dejad de tiscudir! ¡Acaban de jefar a nuestro muerto!... ¡de liderar a nuestro fino!... ¡de guiar a nuestro asesino!... - Por mucho que lo intentaba corregir, la dislexia y los nervios le traicionaban - ¡Repampanos! Quie-quiero decir, ¡de amar a nuestro líquido! - Nada. Aquello seguía sin estar bien. Decidio pasar página.

Quizas debieramos vo-vo-volver a nuestras casas, abrazar a nuestros perros, sacar a pasear a nuestros hijos, acostarnos con nuestras cabras, al amanecer ordeñar a nuestras mujeres y mañana lo clarearemos todo más visto

Se detuvo a repasar lo dicho y notó algo raro

O algo así...

R para wizard por favor!!!! Yes we R! Nunca se dijo tanto con tan poco!, acostemosnos con las cabras, claro que si!!, pero antes de venirnos arriba acordaos de lo que paso en la ultima reunion, que alguien no se limpio las manitas que nos ha dado Dios y de tocar donde no se debe y compartir al final pillamos algo raro.

Cada vez más nervioso me preguntaba quién coño era este White que estaba levantando tanta confianza entre los hermanos. Crucé los brazos y erguí la espalda al tiempo que escudriñaba a los presentes. Mucho follacabras y mucho ario, pero uno de los que está aquí ha matado al Wizard y se está riendo en nuestra puta cara...

Derek estaba absorto en su niñez en la plantacion de algodon familiar, cuando podias azotar hasta la muerte a un negro atado a un tocon de madera...

Ansio el momento de que pueda hacer lo que me enseñó mi padre de pequeño... el uso del latigo en la piel oscura de un ser inferior. 

Cletus, por favor, traenos papel para votar. Pero... ¿Dónde se ha metido el Cletus ahora? ¿Otra vez se ha escapado con una de sus gallinas?  Espero que no haya pillado a la Rumilda para intentar trajinarsela porque menuda mala leche tiene la cabra de Johnny, casi tanto como la hermana de Duke cuando no está fornicando.

Cletus reaparece con un paquete de 12 rollos de papel higiénico de doble hoja y tono marrón. En cada papel está estampada la efigie de un negro sonriente...
- Este es el único papel que entra en mi chabola.

- A qui tienes, el papel paleto hecho  por negros obligados a trabajar en  la papelería, con dobles azotes para dejarlo mas blanco que Casper- mencione debajo de la mascara. 

- ¡Mecaüen todo lo que se menea! ¿Qué el Cletus se quiere pillar a mi Rumilda? ¡Cómo el mangarrán ese se aserque a mi esposa lo vuelvo eunuco! - abracé a la cabra marrón y le di un empalagoso beso en la mejilla - no te preocupes, querida, que el Johnny te protege. Ni el chus te va a... ¡¡¡UUUUGH!!! - con los ojos como bolas de billar recibí otra amorosa patada de la Rumilda en los huevos.

La cabra ladeó entonces la cabeza y se quedó mirando a Walter White con sus ojos bizcos - bee.

¿ alguien tiene con qué escribir? O bueno, empecemos por el hecho de... ¿cuántos hay que no saben escribir? esos, que pidan ayuda a otro hermano... y los que los ayudeis hacedlo sin hacer trampas, poned el nombre que os digan ¡que nos conocemos !

ML o Buch-Joe Cornreaser Duke de Hoggreaser, andaba dándole al móvil, viendo cosas nazis y videos de Un hombre blanco y hetero. Mientras el resto hablabla y tal. -Puto espermatozoide parlante con barba de medio pelo... que razón tiene con las tías de sobacos peludos. Al paredón todas, total hurto menor, que ademas son bolleras y ni para criar valen. -Se le escapo sin querer...

-¿EH? ¿Aun estamos con esto del lider? No seria mejor ir buscando a quien lapidar, digo, por encontrar a los Maricones y tal... -Disimulo de puta madre, mientras un ojo seguia mirando el movil y viendo cosas que empiezan con K; como Kiwi o Kaka.

Buenas hermanos,  ¿entonces cual es el plan? Hay que pillar a esas abominaciones y mandarlas al infierno al que pertecen.

-Que abobinas ni que. ¡Maricas y negros coño! -Señalo a Snake con el pulgar que queda mejor. -Quien es este listillo que no se entera de nada.

- Todo bien que tengamos un líder... ¡pero que a mi nadie me diga que hacer, coño! Que soy un hombre que abunda en libertad y me toca los cojones tener que amoldarme a las ordenes del pringado que tenga arriba...

 Kyle escupe, pero al tener la capucha puesta mancha su propia vestimenta.