Partida Rol por web

- Tercera premisa, señorita Overhearth. ¿El señor Nicholas Castle está intentando crear una distracción o sólo quiere matarnos a todos?

Burt se había parapetado tras una pequeña cobertura, y había sacado su pistola. Sin embargo, no quería disparar. Quería guardar la poca munición que le quedaba en ños Bigdaddycools.

Observo toda la situación sin terminar de comprender nada. Está claro que hay muchas cosas que me he perdido mientras no he estado. Pero la cosa de ponerse a disparar entre ellos... simplemente me parece no solo una soberana estupidez sino un desperdicio innecesario.

Que desde Cierto punto de vista puedo entender a 06. Nicholas Castle, pero aún así no tiene sentido. Sin embargo ya he comprobado que es mejor no meterse en peleas, así que dejaré que solucionen sus disputas.

Me parece curioso como la mayoría parece ignorar el hecho de que había una edad mínima para participar en este viajecito al exterior que hicimos. - intervino Ed, un poco cansado de que se refirieran a una mujer muy bien conservada y con ropas infantiles. - Pero más curioso me parece que cerca del fin de la votación, aparezca de la nada un enemigo público. - admitió.

Está empezando a volverse un patrón, pero bueno ¿qué pensáis hacer con el joven de gatillo fácil? - preguntó con curiosidad. Quizá pasara como el otro día y tanto Beth como Olivia enterraran el hacha de guerra en beneficio de la seguridad pública. Siendo este público en concreto Jordan Spencer, el mayor perjudicado hasta el momento. Fuera lo que fuera, Ed no iba a llevar la voz cantante sobre a quien debían votar o no, su único interés en esta votación era evitar la ejecución de Beth, quien desde la noche anterior, era considerada como parte de su escuadrón.

Miró uno de los relojes, no quedaba mucho tiempo para que debieran entregar el sacrificio y que cayera la noche. - Independientemente del resultado de la votación, pido a los presentes que centremos nuestros esfuerzos en abatir al Big Daddy antes de que ataque por primera vez. Va a hacerlo tres veces a lo largo de la noche, no queremos tener tres potenciales víctimas y todos queréis todo lo que suelte la bestia al morir ¿verdad?

- A mí me dan igual sus cosas, señor Chasey. En cambio usted ha querido retenerlas todas la noche anterior, entre otras cosas, negándome las balas de pistola que necesito para acabar con el próximo monstruo. En lo que sí que estoy de acuerdo con usted es en que se repite un patrón: parece que se llega a una conclusión y aparece un loco pegando tiros. Y yo me pregunto, ¿a quién beneficia?

Carente de ningún tipo de expresión, Ed le entregó las dos balas a Burt Reginald Mallory. - Las cogí para evitar que ningún enmascarado se las quedase y las escondiese, pero en tus manos, manos que ya han sido usadas para atacar a una de esas bestias, sé que tendrán un buen uso. - admitió.

Ya había atacado a un Big Daddy anteriormente, por lo que aquél hombre, para Ed, era parte de su escuadrón y por ello compartían un objetivo común.

Observo con horror como Nicholas Castle descarga su escopeta casi sin apuntar e intento en vano evadir el tiro, es apenas un segundo, un fogonazo y luego mucho dolor.

Acto seguido me alejo del lugar lo más rápido que puedo para meterme en un escondrijo dónde pasar la noche, pues este evento había hecho demasiada mella en mi psiquis, en especial porque desde que había iniciado este viaje, nunca había apuntado mi arma contra nadie, ni mucho menos usado el plásmido que tome de la expendedora.

Y es que yo no soy un combatiente, sólo soy un humilde mecánico de Detroit que vino a Rapture a construir un futuro mejor.

.      Espere por favor señor Jordan!   Usted está bien?    Por favor permítame ayudarle a revisar su herida!      Por favor alguien prestarme un botiquín médico para atender su herida! -.    Dice la doctora Ishley mientras que se aproxima para revisar la herida del hombre para  tratar de detener la hemorragia,limpiar la herida dependiendo de la ubicación y gravedad de la misma.

Jordán, no me contesto o me atacó, aun que llegaría entender porque estaria molesto, por haberle disparado, así que me le acercó. 

Uy... Lo siento señor Jordán, mi plan no era dispararle. Me le acercó, así que sacó algo de mi bolsillo, que cura cualquier mal el america... Dinero de Raptune, el cual se lo doy sin nada a cambio. 

Y a mí me encanta su doble moral Ed Chasey. Dije mientras le señalaba. Juzga a todos, pero no se le puede juzgar a usted. El cual su propósito es poner en peligro a otros, atacando a los robots. Le recuerdo que los robots, no hacen nada, a no ser que se les ataque.

Por lo que dice, hago el gesto de comillas con las manos, esta ciudad está mal y hay que arreglarla. Pero su método, disparar y hacer que otros disparen también; para que robar al robot.

Ladeó la cabeza. - ¿Quién ha dicho que no se me pueda juzgar? Yo mismo he admitido en varias ocasiones que no soy buena persona, por eso estoy aquí. - contestó ante la primera mentira de Olivia. - Y el Big Daddy de anoche estaba enfurecido por los actos de Cohen e iba a atacar a gente al azar, por lo que de no ser por los Vatijäger, se habría cobrado alguna víctima mortal. - replicó ante la segunda mentira de Olivia.

Un suspiro de pesadez salió de Ed, sin ni si quiera dirigirle la mirada. - ¿Cuándo te vas a cansar de mentir? Tu falsa apariencia puede que engañe a algunos, pero tu palabrería es endeble y lo suficientemente pesada como para que esta sea mi última defensa ante tus engaños. - apoyó su cabeza en su diestra. - Todos los presentes tienen ojos, todos han visto como el primer Big Daddy bloqueó las tiendas y solo atacó al escuadrón Vatijägger, todos han visto como el segundo Big Daddy estaba furioso por los actos de un lunático, dispuesto a arrasar con cualquiera al azar de los presentes. - volvió a aprovechar para dirigir su mirada al profundo océano, lugar donde le gustaba perderse.

Mi forma de actuar será en cierta medida dictatoriales, unilaterales e injustas, pero todos se han beneficiado de mis actos. - fue entonces cuando dirigió por primera vez la mirada a Olivia. - Y tú... ¿Qué has hecho aparte de mentir?

De entre todas las cosas que podían usar para dañarse entre ellos la democracia era la peor manera, pues ella misma saldría peor parada si no se utilizaba correctamente. La democracia servía si todos los votantes eran válidos, todos los votos eran útiles e igual de sagrados si aquellos que votaban eran todos igual de útiles para la sociedad, Rapture era una meritocracia a fin de cuentas. El juez se quedó callado mientras se sucedían acusaciones y se vertían argumentos.

- En cuanto la radio implantada en mi cerebro dé señal y contacte con Atlas haré mis tres preguntas. no se preocupe señor 01. Spencer Rollingheart, serán todos informados al mismo tiempo y sin distinciones, no pediré nada a cambio, ni tampoco intentaré obtener nada de ello.

- Por cierto, el tónico que compré anteriormente llamado "Scrounger" me permite que cuando se investiga un cuerpo y se entra en una disputa con alguien, tendré una oportunidad extra más de obtener el botín, sacado directamente de las opciones de "Nadie recibe nada".

- Es decir, si en algún momento alguien disputa un objeto con otro alguien y yo entro en la disputa que sepan que es para que sea más difícil que el objeto no se pierda, después de conseguir de esta forma un objeto lo subastaré entre los que lo quieran, después de eso repartiré entre todos y a partes iguales el dinero.

Estaba demasiado ocupado creando como para escuchar a los demás hablar. El caos era mas que obvio entre todos nosotros y tras ver a un hombre-árbol, la inspiración fue tal, que busque el sitio mas fresco para sacar mis bártulos y ponerme a pintar. Si cada día al menos dos personas caían en lo que era la maratón mas rara de Rapture, no tenia tiempo que perder y mucho que plasmar, antes de que mi final lo marcara algún loco con arma u otro con ideas igualmente locas y entonces llego el disparo, uno que me obligo a saltar y casi arruinar la careta de ramas del protagonista de mi obra, en un bosque lleno de caras de macabra sonrisa, no negare que alguna fuera una vaga inspiración de quien creía que era un traidor, pero eso no era importante. Lo importante era, ¿A quien iban dirigidas esas balas? -¿Acaso disparan a los que no participan? ¡Pero no tengo tiempo!-Asustado mire alrededor y seguí el rastro de sangre hacia los pies de Jordan, antes de que este se ocultara como hiciera la noche anterior, un método útil para evitar la muerte, si no eras el traidor.

Deje que el oleo se asentara y camine tímidamente hasta el grueso del grupo, no quería ser el siguiente a ser llamado por atención.
-Si me permiten mi opinion. Creo que se debe antes de votar saber dos cosas: La primera porque la señora Beth pidió dos días mas para continuar convida cuando fue disparada por la "aparente" niña, algo que ahora se rehúsa a contestar, con lo que le gusta el chismorreo y ahora no desea soltar prenda, eso es raro.

-Y la razón de porque alguien enfrentaría a dos personas y se convertiría así en el centro de atención. Igual es que sabia que entre uno de ellas dos exista una traidora y sin tener otro talento que no sea el provocar caos, ¿Lo intento exteriorizar hiriendo a ambas? -Me manché el mentón con el pincel pensativo. -Creo que dijo algo de que si no era una era la otra, pero con sus palabras que en su momento no llegue a entender... ¿Igual me precipite a juzgarlo la primera vez?

Del gatillo fácil no sabia nada, pero su teoría era tan valida, como su palabra y sin conocer sus intenciones, simplemente me encogí de hombros.
-Si tuviera que pensar en leales a Rapture, serian: La chica negra, el hombre que se esconde cada noche para no ser disparado y... el tipo de la gabardina o la niña leal a Rapture, puede que no les guste sus métodos, yo desde luego los desapruebo, pero no me da desconfianza, al menos de momento, no menos que otros. -Llegaron a mi mente entonces las palabras del apostador, sobre algo de música y como otra la escuchaba la noche anterior, ¿Eso significaba que tenia un cómplice? Pero cómplice de que.

Como de costumbre, muchas opiniones y muchas cosas pasaban en el último momento.

John negó darme mi arma. Entiendo. Perfectamente comprensible... No pude evitar igualmente poner cara de amargura, por mucho sentido que tuviera ahora me arrepentía enormemente de haberlo entregado todo. Pero mi expresión cambió de inmediato cuando Mbaba me entregó su porra. La miré sorprendida con cara de estar viendo un animal extranjero. Oh...eh... Gracias. No me lo esperaba. Pero Aberash Mbaba era la única persona 100% fiable tras su resurrección. Independientemente de su tono de piel, era una inocente asegurada. Muchas...gracias. Más valía ser agradecida cuando tocaba.

Por cierto Señorita Mbaba, junto a vuestros cuerpos encontramos una especie de artículo de un diario que hablaba de un grupo de traidores que vivían vinculados en su ofensa, hasta la muerte, como si sus vidas dependieran la una con la otra. No estaba segura de si era literamente eso lo que decía, pero eso fue lo que entendí. Ya me corregirían si me estaba equivocando. Creo que deberías saberlo, pues el artículo estaba bajo vuestros cuerpos. 

Seguían planteándose dudas varias, desde el faro, lo de las dos noches de Beth. Burt comentó que le pareció mal que no usara el botiquín antes y por eso me votó. Asentí con la cabeza, aunque seria. Yo sigo convencida de que era mejor esperarse a usar ese botiquín. Para casos de vida o muerte, por ejemplo. Pero entiendo que ese fuera su punto de vista.

Y como no, Leonore Overheart intentaba seguir teniendo la razón cuando no la tenía. Leonore Overheart ya has vuelto a mentir dos veces. Ni te extraje nada, ni te robé nada, ni me aproveché de mi capacidad física. Perdiste en un reparto. Sigue sin ser un motivo válido para mandar a otro a la muerte. Eres una oportunista, y te sumaste al carro cuando me empezaron a votar, y estás intentando hacerte la tonta votándome otra vez. Además nadie dijo nunca que las reglas fuesen como las planteas en tu punto 1 y 2. No te saques de la manga que teníamos que dejar que "el primero que la coje se la queda". Si te sientes humillada, trágate el orgullo. Yo no te voté, y me llamaste vieja y gorda. Le lancé una mirada fulminante que podía entederse perfectamente. La mirada decía "niñata estúpida".

Ya sea por eso, o porque a pesar de todo lo que sucede sigues insistiendo en votarme a mí, para mi eso te apunta como traidora. Nadie que te haya disparado ninguna bola roja contra mí así que no tiene mucha lógica tu pataleta, y sí que dijo algo el Dr.Marcus de que una de las dos erais culpables si le pasaba algo o no. Y creo que realmente Dr.Markus era inocente e intentaba demostrar algo.

Ahora el señor Spencer dijo que era como Ed. Que no formaba parte de ninguna de las partes. Puse los ojos en blanco. Al menos el señor Ed. lo ha demostrado salvando a las niñas con algo que sólo él puede hacer delante de todos nosotros. Dudo mucho que ahora resulte que usted tampoco está de parte de nadie, señor Spencer.

Intentar escuchar a todos y opinar sobre todo lo que se decía era agotador. Esperaba escuchar más a aquellos en los que compartía un punto de vista, a parte de Mbaba. Pero cuando empezó otro tiroteo estúpido sin ton ni son entonces suspiré frustrada. Y encima contra Burt, uno que parecía decir cosas bastante lógicas. Menos mal que falló.

No tenía nada claro, excepto con los que creía sospechosos. Pero no entendí a que venían los últimos acontecimientos. ¿Sería un patrón como decía Ed., o alguien aprovechándose de la situación? El DrMarkus al menos dijo que lo hacía por una razón.

Estaba perdiendo el ritmo de lo que sucedía de forma acelerada, así que me esperé hasta ver si sucedía algo más antes de dar mi voto final.

- También llego a la conclusión de que las dos personas que están a mi lado probablemente sean inocentes, es decir, 15. Nina Stuart y 17. Irene Morgan. Si había que desatar el caos y más gente podía verse afectada por el efecto del plásmido Enfurecer, dudo mucho que los traidores se arriesgasen a perder efectivos ante alguien descontrolado que podía herir a diestra o siniestra.

- Me temo que no termino de entenderla, Lenore. ¿Le importaría desarrollar esta interesante teoría?

Pensé que podría quedarme sentada en un rincón hasta que el resto votasen... Pero no, el tal Nicholas Castle empuñó su arma contra mí. Me invadió el pánico, ¡como si no hubiese recibido suficientes balazos ya! Me quedé muda del espanto.

Pero me libré del disparo. Se lo llevó el bueno de Jordan Spencer. Solté un grito ahogado. ¡No! 

Estuve tentada de cambiar mi voto... pero Olivia me miraba con odio. Y yo a ella. Si no sale elegida, volverá a por mí... Espera, ¿había dicho eso en voz alta?

Había hablado. Y varios habían querido fisgonear en mi vida preguntando por mi comentario de las dos noches. Llevo esperando semanas, ¡meses! Y años luchando por ello ... por fin sabré si me ascienden de corista a cantante principal. Una sonrisa amplia se dibujó en mis labios. Sería un sueño cumplido.

Me acerco sigilosamente al vaquero Spencer, el cual estaba en su lió, mientras yo estaba en el mió, baja voz, le hablo. 

¿A quien apoya Burt y  Klymene? ¿Antes que disparara? 

Abro los ojos como platos. Si no me explico, me votan porque no lo hago. Pero si me explico, porque lo hago. ¡Váyanse a la mierda! ¿Acaso no tienen una vida en Rapture? No doy crédito. ¿Por qué han reaccionado así Jarno, Klymene y Nicholas? El último, para no ser el más votado.

Pero lo voy a ser yo... Lo voy a ser yo...

Con las pocas fuerzas que me quedan, tomo mi arma y disparo sobre Nicholas Castle. Si vive, que sufra como lo estoy haciendo yo.

Beth Whistle sacó su lanzador químico para atacar a Nicholas Castle...

....pero de algún modo ella se quemó a sí misma con el Napalm...

Viendo que al parecer había que escoger a alguien nuevamente, aquella mayoría de ciudadanos de Rapture decidieron tomar cartas en el asunto; por lo que este grupo conformado por Klymene Morgenstern, Nicholas Castle, Jarno Kantelinen, Spencer Rollingheart y Olivia Colman; saltaron a desarmar y a maniatar a la joven Beth Whistle.

Llevando a aquella joven indefensa hacia las puertas de Arcadia, aquella maravilla bajo el mar, estos se percataron que las puertas seguían estando cerradas a cal y canto, sin la opción de poder entregar a esta mujer a los Saturninos, por lo que, de forma individual cada uno trató de llamar la atención, sin demasiado éxito hasta que...

-¡Jackpot!. -Exclamó un tipo enmascarado entre ellos mientras agarraba por los hombros a Beth Whistle y con una explosión de aquella nube rojiza, ambos desaparecieron- ¡Nos vemos pringados!.