Partida Rol por web

Cuando llegas a clase, la profesora McGonagall aún no ha llegado. Te sientas junto a tu amigas Shirley, que te saluda.

-Buenos dias, Shirley. Digo mientras me siento en mi silla y saco mis libros y apuntes que desparramo por encima de la mesa. -Como te fue ayer con Carrow? Había salido tan inflingida de la clase que ni siquiera se fijo en sus compañeros.

-Pues..aparte de la maldición...no fue mal. Ni me miró siquiera, lo que agradezco. ¿Y tú? Te vi muy mal...-

La gente va llegando poco a poco.

-La verdad es que me afectó más de lo que me hubiera imaginado, por algo es una de las tres maldiciones imperdonables... Por suerte ya estoy algo mejor, no me gustaría repetirlo. Apoya sus últimas palabras con una media sonrisa.

Miro alrededor viendo como la aula se va llenando. -Por suerte hoy nos toca con la buena de McGonagall. Dice Eli animada.

La profesora llega y os pone un pequeño examen para ver lo que recordáis.

-Transformad estos escarabajos en botones.-

Eli saca su varita y le da unos pequeños toquecitos en la cabeza al escarabajo. Éste hace un amago de salir volando, pero con un ágil movimiento de muñeca, la joven lo transforma en un botón multicolor.

-Vaya, creo que mezclé los dos hechizos. Dice frotándose el pelo y mirando que tal lo hace Shirley.

Ves la cara de concentración total de Shirley, incluso se muerde la lengua.

Con una gran floritura golpea al escarabajo haciendo que este comience a girar y a echar mucho humo.

McGonagall chasquea la lengua reprobadora.

Apoyo mi mano sobre la espalda de mi compañera mostrandole mi apoyo, acompañada de una sonrisa para que se sienta más a cómoda.

Cuando McGonagal se aleja a arreglar el desaguisado que ha creado otro de los alumnos, escuchas una conversación en la pareja más cercana.

"¿Te has enterado de lo de ese hombre de la enfermería?¿dicen que casi se muere después de hablar con su hermana..."

Agudizo mis orejas y acerco mi cabeza disimuladamente a la pareja, intentando escuchar mejor la conversación.

"Si, estaban hablando junto al lago, muy tranquilos, y de pronto parecía que le daba algo, de verdad, lo llevaron a la enfermería unos de sexto que pasaban por allí cerca."

Sin poder aguantar más, Eli interviene en la conversación si levantar mucho la voz.

-Perdonad, pero esto cuando a pasado? Pregunta amablemente. "Están hablando de ayer o de esta mañana?"

-Esta mañana, antes del desayuno, bajo a correr por los terrenos antes de desayunar siempre que puedo.-

En ese momento la profesora McGonagall se aclara la garganta.

-Espero que el que estén hablando, jovencitos, signifique que dominan ámpliamente los secretos más profundos de la transformación ¿Me equivoco?-

La cara de Eli se sonroja ligeramente.

-Disculpe profesora, a sido culpa mía. Vuelve a su sitio y sigue practicando hechizos de transformación.

-Lapifors! Con un toquecito de varita, el botón colorido se transforma en un conejo blanco.

El rostro de Eli muestra orgullo y alegría. "Siempre me ha gustado la clase de transformaciones."

el resto de la clase pasa sin demasiados contratiempos, salvo alguno de Shirley. Suena la campana de cambio de clase.

Al salir de clase, Eli se dirige hacia las chicas que estaban hablando de Percival.

-Perdonad, que grupo de sexto lo ha ayudado?(Al menos de que casa eran?) Pregunta con prisas, si se entretiene demasiado va a llegar tarde a la próxima clase...

Te miran algo extrañados.

-Pues..no se quienes eran, pero eran de Ravenclaw. Un chico y una chica.-

Shirley te mira y te pregunta:

-¿Y eso que más da?-

-Muchas gracias. Rápidamente, se pone en camino hacia la siguiente clase.

Por el camino, le explica a Shirley de que va el tema.
-El hombre del que hablaban, me lo encontré ayer en los jardines. Había sufrido el ataque de unos dementores. Giro a la derecha en el siguiente pasillo y bajo las escaleras. -Al parecer buscaba a su hermana para sacarla de aquí, dice que hay un laberinto que lleva a fuera de Hogwarts.

-¿Un laberinto? Nunca había escuchado nada así....¿Dónde está?- parece curiosa por el tema.

Notas que unos chicos de Slytherin os miran curiosas.

Me alejo de los Slyth y sus oídos arrastrando a Shirley detrás mío.
-Shhh, no se puede enterar nadie (Digo refiriéndome a los Slyth), pero aun no se donde está. Te lo comenté para ver si tu sabías algo... Eli estaba tranquila, incluso algo divertida. Para ella eso parecía más bien un juego.