Partida Rol por web

Mac ha estado taciturno un rato, escuchando a todo el mundo, asintiendo silenciosamente a las palabras de la Dra. Hart sobre encontrar algo contundente. Coge una de las hojas que reparte Emily y escribe, en una de las mesas unas pocas palabras. Terminado, en un trozo de papel escribe el nombre de quien le parece o ha parecido más sospechoso en las últimas horas. Lo coloca junto a los demás votos y comienza a hablar a la dra. Hart.

 - Dra. Hart, sobre lo que comentaba antes, disponemos de algún lanzallamas en el almacén, en cuanto a armas...debería haber un par de pistolas y escopetas....Recomendaría ir en su búsqueda antes de averiguar cual de nosotros será el sacrificado.

-Creo que lo de las armas puede ser un pro, pero también un contra. ¿Quién asigna las armas? ¿No será mas fácil para los aliens matarnos con armas? Y aunque los aliens necesiten nuestros cuerpos para vivir y prefieran atacarnos para comernos que dispararnos, si se sienten amenazados por nosotros, no creo que dudaran en matarnos con las armas y salir de aquí para alimentarse de todo el mundo.

Por otro lado, con las armas tendremos mas fácil defendernos de esos bastardos, pero con los contras que ya he dicho. ¿Quién está a favor de lo de las armas?

Gerard miró horrorizado a Russell cuando hizo la propuesta de las armas, estaba claro que si le daban un arma a un alienígena estaban condenados. Al menos con el método que tenían ahora sacrificarían solo a uno, con armas se garantizaba la destrucción masiva mutua, algo muy norteamericano...

Tocaría rezar para que no encontraran las dichosas armas, porque si no estaba garantizado que acabarían en malas manos.

Se encargó de contar los votos, sudaba fríamente mientras se daba cuenta que ella misma estaba dentro de las nominadas, incluso en algún punto, sintió que ella sería la que moriría. Tragó saliva con fuerza, hasta que llegó a la última papeleta. Para entonces la doctora Hart estaba tan blanca como la nieve que rodeaba la base.

-E-Está claro- dijo con un hilo de voz. -Hemos d-decidido que A-Alexa Woods es la que más probabilidades t-tiene de ser uno de los Aliens- sus guantes estaban por dentro haciendo sudar sus manos.

-S-Señor R-Russell, s-siendo u-usted el encargado de seguridad- no tenía el valor para decirlo, miró a todos a la cara. Era duro tener que sacrificar a alguien del equipo, pero era por un bien mayor. -Por favor... e..e...- y no pudo terminar la frase.

- Mierda, sabía que como encargado de seguridad esto me iba a tocar a mi....- Miro a Lex - Bueno, usted misma ha dicho que prefiere morir congelada o por un tiro en la cabeza que caer a manos de uno de esas criaturas.....- Se acercó a la dra. Hart - Doctora, iré al almacén, cogeré una pistola y 3 balas únicamente, por el momento, como dice el dr. Carber, mejor no tener armas entre nosotros, eso podría provocar incidentes. ¿Le parece bien que me lleve al dr. Carber, a Emily y a al dr. Fleischman? el resto quédense aqui vigilando a Lex....

Emily de pie y muy tensa espera la respuesta de la doctora, Hart lo acaba diciendo y Emily se cae de golpe encima de la silla muy pálida y temblando...

...sigo viva.... sigo viva... pero hasta cuando? nunca he deseado tanto vivir como ahora, quiero vivir y aprovechar todo el tiempo perdido...

Levanta la mirada y observa que todos los del grupo están igual o peor que ella, rígidos y mirando hacia el suelo.

-Votar no a sido lo peor...ahora.... que hacemos? si al final se hace, no quiero que sufra...

que manera es menos dolorosa?

Emily mira hacía el suelo y ve el botiquín que había dejado al principio...

Alomejor hay un calmante o algo similar que le haga no sentir tanto....el dolor....

Emily comienza a llorar (aunque no sabe si es por tristeza o por seguir viva)

-¿Co....como, por qué siempre me toca a mi? No me gusta hacerlo, aunque supongo que debemos hacerlo, es la única opción.

¿Tan diferente era votar para sacrificar que el acto de sacrificar? Mi mente me decía que no, que de todas formas la habíamos matado con votos o con balas, pero a mi corazón no le agradaba tener que ser o ayudar al "ejecutor"

-Supongo que tenemos que hacerlo, aunque quizás sea la propia Lex la que tenga una sugerencia de como quiera morir. No me gustaría pegarle un tiro a nadie, la verdad.

Gerard apuntó los votos, ya que era de las pocas pistas que podían llevarles a los aliens, aunque es probable que ni siquiera eso les fuera de ayuda. El destino de Alexa era triste y loable, se iba a sacrificar por el grupo... Aunque Gerard no podía quitarse de la cabeza que era bastante probable que hubieran condenado a un inocente y que los invasores estuvieran jugando con ellos sin remedio. Al menos Woods no vería su cuerpo corrompido por un ente de otro mundo... Gerard temía las horas que estaban por venir.

"Laisser quelque chose entre les mains du destin"

Uff, esas cosas son dificiles, pero puesto que le han votado espero que sea algo rapido.

Miro la hoja en blanco que me dio la Doctora Brennan, hago una bola con ella y me la guardo en un bolsillo, he sobrevivido a todo tipo de situaciones ahí fuera, no he venido aquí a morir, y por ahora tengo esperanzas.

Joel siguió la votación sentado en el suelo, con la vista perdida en algún lugar incocreto de la sala. Cada nombre que Amelia decia era como una punzada. Más y más dolorosa, hasta que al final, el último voto decidió la sentencia de Alexa.

Cambió la mirada a la pared, mientras se decidía cómo "debíamos matar" a la compañera. Prestó atención ante las posibilidades. Creía que lo peor era la "sentencia popular", pero estaba muy equivocado... lo peor era la "ejecución popular". Hasta que oyó las sensatas palabras de Mathew e intervino.

- ¡¡Por supuesto que deberíamos dejarle a ella que elija su muerte!! ¡¡¿No nos vale con sentenciarla?!! - Joel miró a todos con seriedad. Marcadas lágrimas le bajaban por sendas mejillas, lo que sin duda revelaba su estado de ánimo.

Nunca antes había tenido que tomar una decisión tan drástica. Luego pensó en lo del arma de fuego y, tomando nuevas fuerzas continuó.- ... Y eso de pegar un tiro... ¿Acaso estamos tratando con animales? ¡¡por el amor de Dios, que somos SERES HUMANOS!! ¡¡Un poquito de dignidad y respeto a la hora de morir!!

Joel se acercó a Alexa y se plantó delante de ella. Temblorosamente le cogió las manos y, haciendo un acto de fuerza suprema, levantó la cara y le miró a los ojos. Una oleda de tristeza y rabia contenida estallaron y mientras lloraba desconsolado, de su boca solo salió, en un hilo de voz - ... lo siento.

Al momento, recuperó la compostura y una vez más calmado, le preguntó.- ¿Puedo hacer algo por tí? ¿quieres que te ayude en este momento en algo? Hay muchas formas de morir sin dolor... soy Doctor, te puedo ayudar.- La mirada de Joel era de sinceridad absoluta, algo que seguramente Joel en su situación agradecería.

Amelia Hart estaba callada. -Esta bien señor Rusell, mientras Woods decidirá como... como...- no se atrevía a decirlo. Miró a todos, consternados o aparentemente lo estaban. Habían tomado la decisión correcta. -Señor Russell, vaya con el grupo que mencionó entonces- dijo secamente.

-Señores, entenderán que debemos guardar también las cartas de cada uno, y no se me ocurre mejor lugar que la caja de contención se tres cerraduras del ala oeste, así, podemos repartir las tres llaves de acceso entre tres de nosotros, y la única forma de retirar las voluntades finales, sería con las tres llaves, no aseguramos que los alien no las eliminen, y que si por alguna razón...- traga saliva -perecemos todos, cuando... cuando alguien quiera investigar que pasó... e... encontrará ese testimonio- dijo mientras miraba la actuación de Fleischman.

-Dr. Fleischman... aún no sabemos si Woods... es humana...- dijo agriamente.

Una vez hecho el recuento los resultados eran inquietantes. Cuanta gente que voto por la Dr. Hart! Y que pocos por aquellos que aun estaban "perdidos"... por su parte no sabia si tranquilizarse por haber votado lo que pensaban otros, o sentirse culpable justamente por eso. Pero no habia podido evitar que "Lex" le pareciera enormemente sopechosa.

Una vez contados los votos quedaba lo peor, cumplir la condena.

- Esto!!! Una pistola! Estoy casi seguro que en la enfermeria podemos encontrar cloroformo suficiente para que "duerma placidamente".... me parece, no se, algo mas... bueno... algo menos... es mas....

Tras buscar las palabras adecuadas sontinua.

- Es menos violento.... y seguramente menos doloroso... como quedarse dormido.

Joel escucha las palabras de Amelia y mirandola sin emoción alguna le dice.- Que lleve o no un alien dentro no quiere decir que no sea o haya sido HUMANA. Y eso no me quita la losa que ahora llevo, de ser uno de los que haya ajusticiado a uno de nosotros, señora mía.

Volviéndose a Beakman, tras escuchar su arenga, asiente con la cabeza y le apoya.- Cierto. Yo estoy con usted. Iré con el señor Rusell y los demás, pero intentaré encontrar algo que no sea tan violento para... para dejar de existir. Al estilo de cocktel de pastillas, cloroformo, jeringuillas de morfina,... o lo que encuentre y se me ocurra. aunque sigo pensando que cada uno debe ser el que decida el "cómo".... yo sólo le indicaría la forma menos dolorosa.- Dicho esto Joel agacha la cabeza y mira desconsolado el suelo. La losa está haciendo su trabajo.

Pasado un instante, se hiergue de nuevo y le comenta a Rusell, Beakman y los demás.- ¿nos vamos?... no soporto estar más en esta sala... necesito moverme.- Joel coge una linterna y se encamina hacia el almacén en el que antes han estado. Posiblemente encuentre más cosas medicinas y fármacos como los que encontró Emily.

-Vale, pero démonos prisa, pronto tendremos que estar todos juntos por si atacan.

Emily reacciona al escuchar su nombre.

-Vayamos... -dijo con la voz apagada.

Se levanta de la silla y coge una de las linternas que había en el saco agarrandola con fuerza, entonces se dirige a la señorita Lex, aunque no puede mirarle ni a los ojos...

-Lo siento mucho... ojala hubiera otra forma de hacer las cosas... no nos odie por ello... si necesita algo, pidamelo.-dice con los ojos llorosos mientras intenta disimularlo

En silencio escucho lo que hablan los demas y miro de un lado a otor las diferentes reacciones de cada uno asi como la decision que hemos tomado

Vaya...asi que sucede lo mismo que en las demas bases, el sacrificio ha empezado hasta que todos nos matemos sin cuartel

Y los sigo a cada uno caminando lentamente pensando en la reaccion de alexa cuando llegue el momento fatidico

No había escrito ni una nota. Mi padre había muerto hace mucho, y endurecí tanto mi persona que nunca tuve pareja, y fue aun mas difícil hacer amigos luego de lo sucedido años atrás. En cierta forma me sentía aliviada por poder al fin descansar, y no tener que pasar dias sospechando de los demás.

Me quede cabizbaja, mirando a los demás, mientras parecían mostrarse apesadumbrados por la decisión. Al final sonreí.

No se preocupen, y no se sientan culpables. Era lo que debía hacerse. Creo que algún tipo de inyeccion, o una buena cantidad de pastillas son una "buena" forma de morir. De todos modos estén atentos, con un arma a mano, en caso de que en realidad sea uno de esos monstruos, y no lo sepa. Y creo que después de... hacerlo, deberian poner mi cuerpo afuera, o en alguna cámara frigorífica de la nave, aunque en estos momentos no hay luz. Solo les pido una cosa: SOBREVIVAN.

Dicho eso, permanezco en silencio, y los sigo a donde me guíen, esperando calmadamente el final.  

Las palabras de Lex son muy emotivas, tanto que hicieron que Mathew se girara y apartase la vista.

Es un acto atroz, pero es justificado, ¿no? Debemos hacerlo para que sobrevivamos los demás. Hasta ella misma lo ha aceptado, ¿sera relmente un alien? ¿Sigue con el teatro hasta el final?

Mathew no estaba muy seguro de ello, ¿se habría equivocada al juzgarla? ¿sería tan fácil deshacerse de aquellas criaturas?

Jerry, ante la entereza de "Lex", sintió un profundo escalofrío y bajó la mirada. Después acompañó al resto del grupo intentando evitar las miradas del resto de sus compañeros. Una profunda desolación que nacía en su cabeza recorrió su columna vertebral y se atenazó en su estómago como un enorme peso que le aplastaba contra el suelo y le impedía hablar.

¿Cómo saldremos de esta situación tan atroz? Fue lo último que pudo pensar con claridad antes de que la sombra que enturbiaba su cabeza desbaratara sus pensamientos por completo.