Partida Rol por web

La decisión de que pasillo tomar no le costó demasiado tiempo a Timmy, sobre todo al pensar que aún quedaba un matón armado que habían dejado a sus espaldas. Asique agarró a las chicas y tomó el pasillo de la derecha.

- Vamos, no os separéis, tendremos más oportunidades si permanecemos juntos. Tenemos que encontrar una forma de salir o de contactar con alguien. Miraré mi PDA, a ver si tengo cobertura.

Timmy se detuvo un instante y sacó su teléfono para comprogar si podía realizar llamadas. Al buscarlo dentro de su mochila recordó que llevaba una linterna y una navaja multiusos, que también sacó, metiendo la navaja en el bolsillo para tenerla a mano y encendiendo la linterna para ver mejor en la oscuridad de aquellos pasillos.

Timmy encendió la linterna y gracias a ella pudistéis ver donde os encontrábais, el pasillo era muy angosto. De hecho resultaba agobiante ya que sólo podíais recorrerlo en fila de a uno. De forma instintiva os distéis la mano mientras recorríais el pequeño pasillo, era bastente corto, de unos 5 o6 metros de longitud, y al fondo sólo podíais ver a través de la zona iluminada por la linterna una especie de camilla de acero. Nada más, aparte de los sonidos qeu vosotros mismos provocáis no se escucha nada, lo que os induce a adentraros en la habitación.

Todo sigue en total oscuridad y tenéis que concentraros mucho en la pequeña iluminación de la linterna. Efectivamente, lo primero que encontráis es una camilla de acero,repleta de material quirúrgico. Por lo que véis parece qeu estáis en una especie de quirófano,allí hay todo lo que siempre habéis pensado qeu debe haber en una sala de operaciones. Un pequeño fregadero con pisador, bandejas y estanterías con todo tipo de instrumental, sábanas cubriendo una mesa fija de acero que hay en centro de la estancia y la susodicha camilla.

Simon comienza a correr en dirección a sus compañeros, recorre sin dudar los pasillos y estancias en los que ya habían estado, no hay cambios. Incluso el tipo gordo permanece inmovilizado donde lo dejásteis. Continúas hacia delante por el lugar en el que viste desaparecer a tus compañeros... Tal y como imaginabas, y siguiendo el patrón de lo que habíais vista hasta ahora frente a tí hay un pasillo, la única diferencia que encuentras con todos los que ya has visto aquí, es que no desemboca directamente en otra sala,sino que se alarga de forma descendente y girando hacia la izquierda, lo cual imposibilita que veas donde o en qué desemboca.

Cuando ya has recorrido unos metros ves a tu derecha un camibo en la luz, te fijas con atención y te das cuenta de que es un estrecho pasillo muy oscuro, parece que no es muy largo, y al final de este te parece ver algo de luz, que se mueve de forma errante.

Timmy se lanza hacia esa luz, siguiendola, intentando ir silencioso hasta que vea si son ellos.

Simon avanza por el estrecho pasillo, no es muy largo, unos 6 metros. Pero es muy estrecho y la luz es pésima, asique Simon sabe que no popdrá ver nada hasta que no esté en el extremo del pasillo. La luz sigue moviéndose de arriba a abajo y solo se escuchan unas pisadas, cuando se llega al final del pasillo por el contraluz de la linterne distingue las figuras de los chicos, ahí están, Timmy y las chicas. Parece que están registrando la habitación en la que se encuentran, que a simple vista, y solo con la luz de su linterna te parece un quirófano.

Soy Simon, no os asusteis! -Entrando en la sala-. No he encontrado a Catrina. Este sitio parece un laberinto que cambia solo.

En tu búsqueda crees reconocer algunos instrumentos de obstetricia, según las películas, esa clase de cosas se usan para ayudar en los partos.

Y tras una camilla, hay un pequeño arcón frigorífico. Estás abstraído en tu búsqueda cuando oyes la voz de Simon al fondo de la estancia.

- ¡Ahhhh, joder, Simon, casi me muero del susto! De momento nosotros tampoco hemos encontrado nada... solo que esto se está volviendo más y más macabro... - Timmy señaló la camilla - Mira ahí, todos esos instrumentos son para ayudar en los partos. Y ahí detrás está ese arcón frigorífico que me da pánico abrir.

¿Qué es más terrorífico, lo que ocurre a su alrededor o lo quepasa en la mente de Simon que le lleva a coger varios de los bisturís y guardárselos con cuidado en algunos bolsillos, aliviado de tener más armas? El cerebro primitivo intenta hacerse con el control, la supervivencia y la autodefensa es ahora una nueva prioridad.

-Apartaros voy a abrirlo, quizá sea una nueva tortura para nuestra mente, quizá algo que nos ayude a salir de aquí.

Tras dejarles unos segundos para que se aparten lo abrirá con los nudillos blancos en torno al arma de fuego, los dientes apretados, los músculos del cuello tensos y la cabeza zumbándole como en una mala resaca.

Al abrir el pequeño arcón lo que vió no fue nada agradable, aún a pesar de aquello, jamás podría olvidar lo que encontró. Semicongelados y apilados, llenaban el pequeño frigorífico un montón de animales no natos, fetos en diferentes fases de desarrollo, algunos muy próximos a la madurez incluso aún envueltos en lo que parecían los restos de las bolsas.

La poca luz que despedía la linterna, y el hecho de que el tembloroso pulso de Timmy no pudiese mantenerla firme hacían que el descubrimiento fuese aún más espeluznante. Todos os encontrábais consternados, de hecho una de las chicas estuvo a punto de vomitar, la tensión y el horror os tenían abrumados cuando otra luz apareció por el estrecho pasillo que os había llevado hasta allí. -Señor, me dirijo al quirófano. Estamos peinando la zona. La voz y el ruido del walkie-talkie por el que hablaba os pilló totalmente desprevenidos.

Simon se agazapa detrás del arcón congelador haciendo señas a los demás. Inspirara hondo relajándose mientras quita el seguro del arma. No ha disparado en su vida un arma de fuego de verdad pero no hace falta ser un genio para saber apretar un gatillo, habrá que jugárselo a la suerte.

Cuando esten todos a cubierto apagara la linterna para girarse por el oído o por la luz que lleve el maldito matón.

Timmy se giró, y de lo nervios, olvidó apagar la linterna, que sin duda dio un fogonazo en la dirección del pasillo. Torpemente la apagó, pero se temía que el daño ya estaba hecho...

Todo parecía perdido, Timmy había perdido el sentido.Permanecía de pie sin saber muy bien hacia donde apuntar con la linterna o hacia donde moverse.

Simón había reaccionado muy rápido y se había escondido tras el congelador. Las chicas parecieron dudosas durante unas décimas de segundo, pero al final se escondieron bajo una camilla, al ver que Timmy no se movía una de las dos extendió la mano para indicarle que se escondiera con ellas, pero Timmy, que se había quedado paralizado, tal vez por el matón o por la impresión de lo que habíais visto en el interior del arcón tan sólo unos instantes antes se sobresaltó y salió corriendo en la dirección opuesta al pasillo por el que se aproximaba el matón, desapareciendo por una puerta pequeña con un ojo de buey.

Mierda... Piensa al ver la reacción de su amigo. Pero ahora debe ceñirse al plan. Mientras Timmy sale corriendo, amartilla el arma y espera al momento de ver pasar a alguno de sus perseguidores para jugársela.
 

Con el ruido que arma Timmy al salir corriendo vuestro perseguidor acelera el paso y al entrar en el quirófano no se para a buscar nada, sino que se dirije directamente hacia la única salida de la estancia, la puerta que aún se estaba cerrando y por la que Timmy había salido hacía tan sólo un par de segundos.

Hora de dispararle... y que salga el sol por donde quiera.
 

: OOOOOOO El sol ha salido por antequera

Timmy sale corriendo despavorido, en su cabeza toda una amalgama de pensamientos se agolpan impidiéndole pensar con claridad, en su frenética carrera no consigue distinguir con claridad la clase de estancias que está recorriendo. Lo único qeu tiene claro esque parece como si por arte de magia  todas las luces del museo estuviesen estropeadas, a excepción de un par de ellas que aún titilan, y de la linterna de Timmy que va dando tumbos sin sentido no hay mimgún tipo de iluminación. Al final de la segunda estancia, ¿ o era la tercera?, no lo tienes nada claro, algo te hace caer al suelo.

Parece el tremendo golpe te centra en el acto, apuntas con la linterna hacia lo que te ha hecho caer y reconoces la ropa de Chris, te acercas para verlo mejor y te sorpendes al ver que solo está su pñalido y frío torso, de la cintura para abajo no hay nada.