Partida Rol por web

 creo que aqui encontraras a alguien muy interesante, es nueva en la ciudad y... 

es lo priemro que escucha una al abrir la puerta y la otra al oir como se abre tras ella. Una acompañada por un hombre la otra disfrutando del ganado. Una en pie y la otra sentada en el sofa junto a un hombre al que le bebe la sangre mientras le masturba.

El hombre de la puerta arquea una ceja Las perversiones que algunos pueden llegar a tener luego dicen de mi clan, pero otros me ganan

Deje al humano a un lado como si nada inconsciente y me incorpore lamiendo la sangre de mis labios - La sangre sabe mejor en los ajes de las emociones, ya sea miedo, amor, excitacion... es cuando mas bombea... - Comente acercandome a los que entraron en la sala - Asi que no te tomer esto como una perversion, no me parecia correcto hacerlo gritar de miedo aqui... - Sonrei de medio lado esperando que me dejaran salir.

En cierto modo, me sorprendo al ver la escena que me brinda la puerta abierta. No me escandalizo, después de todo no es algo poco habitual manipular la comida de diferentes formas para encontrar en ella el sabor adecuado. Unos seleccionan sus presas, otros las llevan a estados concretos para disfrutar más de ellas. Yo misma encuentro mucho más apetecible la sangre de los jóvenes que la de los adultos, y el tiempo me ha demostrado que la simple excitación caldea su sangre hasta darle un sabor mucho más jugoso. Sin embargo, creía que este tipo de cosas se hacían con una mayor... intimidad. Hacerlo de forma tan explícita en el reservado de un bar tiene... poca clase.

En cualquier caso, esta vampiresa parece mostrar poco interés en lo que yo pueda pensar. Ni tan siquiera pretende quedarse aquí, ni mucho menos presentarse ni esperar a que el doctor me presente. Bueno, habrá tiempo de conocerla otra noche si necesito hacerlo, no tengo por qué conocer a toda la ciudad en una sola noche.

Doy un paso a un costado y me aparto de la puerta, dejándola vía libre con una tenue sonrisa. Aparto la mirada de ella casi inmediatamente, observando el resto de la estancia sin disimulo. ¿No se iba? Entonces no tengo interés en ella, de momento...

Le sonrei a la chica antes de disponerme a salir, no veia necesario ir presentandome a cada vastago que me cruzara, ya se encargaria mi sire de eso hasta llegar al borde del aburrimiento...

Toda vuestra la sala - Comente pues pense que el lugar era algo mas intimo que eso.

 Vaya, vaya, mis dos chicas se conocen replico desde las sombras del pasillo saliendo y mirandolas aunque la mirada al Doctor es mucho mas dura. 

Alysa, esta es Alice, es nueva en la ciudad como tu, es de mi clan y podeis hacer buenas migas. Tu sire ha dicho que por el momento te quedes en Madrid que tiene que irse de viaje y estas a mi cargo.

Camino hacia ellas Pero como no puedo ponerme a cuidarte como una niñera te vamos a enseñar a valerte por ti misma. Olvida lo que te ha enseñado y simplemente comienza de 0...

Nos vamos a cazar, creo que podriamso hacer algo mas interesante con ese grupo de leopolditas tres damas como nosotras

Me giro simulando un escaso interés al oir la voz de Elena a mi espalda, surgiendo de las sombras del pasillo. Les encanta, a estos lasombra, mostrar su afinidad por las sombras. Tanto como a mis hermanos lejanos mostrar sus inclinaciones por la alteración de los cuerpos propios y ajenos. Ni una ni otra me parecen aficiones lo bastante estimulantes, y mucho menos andar por ahí haciendo exhibición gratuita e innecesaria de ellas. Yo jamás me dedicaría a hacer uso de mi poder espiritual innecesariamente, por pura jactancia. Su uso debe responder a un fin, no ser un fin en si mismo.

Sin embargo, lo que dice sí me interesa. Alice, una vampiresa nueva en la ciudad, como yo. Con un Sire lo bastante influyente como para solicitar favores a Elena, y que muy oportunamente se encuentra fuera de la ciudad. Ella misma podría llegar a ser influyente pues, como es bien sabido, un Lasombra es siempre un Lasombra. Solo necesitan la oportunidad y los medios adecuados, y cuando no los tienen se dedican a obtenerlos. Nunca está de más estar cerca de ellos, como tampoco lo está no perderles de vista ni darles la espalda.

Podría hacer ambas cosas.

• Encantada de conocerte, Alice -Sonrío mientras le tiendo la mano- Seguro que nos llevaremos bien. Después de todo, parece que tenemos mucho en común...

Mi rostro cambio por completo tras las palabras de Elena, me quede quieta, helada mirandola como si por dentro estuviera ardiendo ¿Que se ha ido? ¿Que me ha dejado aqui? ¿Con ella? El nunca me ha dejado... Aprete los dientes notando como mis colmillos crecian poco a poco como si fuera una neonata que no pudiera controlarse, como las sombras del lugar se arremolinaban a mi alrrededor...

Al escuchar a la otra chica gire al mirada hacia ella - Si... supongo... lo siento, estoy un poco turbada ahora mismo - Le digo intentando disculparme de alguna manera por no ser ams cordial, pero realmente eso era todo lo cordial que podia ser ahora mismo, pues tenai ganas de arrancar la cabeza a todo el mundo presente, sin razon...

- ¿Donde ha ido? ¿Y porque me ha dejado a tu cargo?, no soy ninguna cria, si me deja sola puedo cuidarme por mi misma - Espete esta vez dejando claro que mi enfado iba en aumento, relajandome para normalizar mi estado, por dificl que fuera.

Puedo ver la lucha interna en los ojos de esa vampiresa. Quiere mantener el control, quiere hacer honor a la frialdad de que hace gala su clan y que le hace famoso entre los amos de la noche, y líder por derecho de la Espada de Caín. En cambio, la marcha de su Sire, en condiciones tan poco apropiadas, sin avisarla y dejándola al cargo de otra persona, hace que esté al borde del descontrol.

Algunos necesitan destrozar cosas, cuando están en este estado. Yo nunca he sentido tales apetencias, pero aquel que me creó... No su camino no es el camino. Los Tzimisce hemos sido el alma del Sabbat desde su creación por muy buenas razones. Y una de ellas es qe sabemos complementarnos con los señores de las tinieblas Lasombra.

• Vamos, Alice... -Me acerco a la vampiresa por su costado, rodeando su brazo con mis delicadas manos en un abrazo cómplice- Yo tampoco necesito clases de supervivencia. He logrado cruzar toda Europa en solitario y siempre he escapado de los problemas. No somos crías, aunque podamos parecerlo, solo vamos a dar una vuelta por la ciudad. Una fiesta de chicas, ¿vale?

Sonrío a la vampiresa, entornando los ojos como una chiquilla risueña mientras aprieto cariñosamente su brazo. Solía funcionarme con... ella. Pero ella ya no está, y no todo el mundo es como mi amor perdido.

 Asiento y camino hacia donde...no hay algo que me esta ocultando esa zorra, me da a mi que la guapita de cara no quiere que me entere de algo. MIro hacia los reservados, si tiene que estar ahi.

ATravieso la pista y camino hacia alli con paso firme hasta llegar a una puerta donde la escucho hablar, muy interesante.

Lo siento buscaba a Marcel  sonrio mientras las miro a todas parandome descaradametne mientras las desnudo de arriba a abajo

 Suspiro no tengo bastante cn una que ahora tres

Monseñor le ha mandando a una mision que solo puede hacer el, volvera en unos dias. Asi que comportate como la mujer que eres y no como la cria que aparentas.

Cria cuervos y te sacaran los ojos Te ha dejado a mi cargo por que soy la unica que te mantendra a salvo en esta puta ciudad de lobos, m comprendes, no te puede cuidar siempre y dudo que sepas hacerlo

Joder, las cosas se están poniendo fuera de control. Creía que tenía a la Lasombra, que podría tranquilizarla, ganármela para la causa, pero la aparición de esta otra desconocida... no tengo claro como puede influir. Y la brusquedad de Elena no ayuda en absoluto. Más bien todo lo contrario ¿Donde está la sutileza Lasombra de la que siempre oí hablar?

• Alice, cariño, no te lo tomes a mal -Trato de quitarle hierro candente al asunto, aún a sabiendas de que es una tarea utópica- Que tu chico se haya marchado unas noches no significa que tengas que estar sola. Eso es muy... aburrido ¿no crees? Seguro que alguien de tu clase sabe apreciar las bondades del grupo -Adulación. Desconozco si tiene clase o no, pero es una Lasombra, pertenece al Clan que se autoproclama líder de la Secta, y las bondades del grupo es lo que llevó a nuestros líderes a disponer la estructura de manadas entre nuestras filas. Ella debería apreciarlo aunque fuera solamente por orgullo- Y no hagas caso a Elena, es un poco cascarrabias -Hago un gesto a Elena, sacándole la lengua mientras le guiño un ojo y luego sonriendo- y deslenguada también -Espero que no se tome a mal mis palabras y comprenda lo que trato de hacer- Y podría hacer algo con su vestuario, creo que me comprendes, pero no es mala gente.

Vuelvo a apretar su brazo, con delicadeza, tratando de llamar aún más su atención y acercarme más a ella. Me pregunto si tendrá ya una manada...

 Por el rabillo del ojo te parece ver algo y Elena lo ha visto tambien por que las sombras se estan moviendo con rapidez a su alrededor cubriendo el pasillo.

Te parece ver una luz al fondo como si fuera fuego....Esta oliendo a quemado, estan quemandolo